Dia 23.- Desayuno a las 8h. Un poco antes cojo la cámara para ver si podía fotografiar a algún wallaby que habíamos visto el día anterior en el jardín, cuando salía el marido de Julie estaba en el jardín y le digo que voy a la caza de wallabys (enseñándole mi cámara), entonces decide guiarme por donde están, salimos a la parte de atrás, abre una verja y nos dirigimos al río, me enseña los rastros que van dejando con la cola y las huellas de sus patas, seguimos el rastro hacia el río, pero no vemos ninguno, me explica que suelen bajar a beber. Así que rodeamos un poco la finca hasta la próxima, allí vemos correr a unos cuantos pero tan rápidos que no me da tiempo ni de preparar la cámara, saltamos la verja de la finca vecina y allí, veo cuatro o cinco pero muertos, enganchados en la verja, porque en esta finca no parece que viva nadie habitualmente, volvemos a saltar la valla, esta vez por la parte delantera de la finca y volvemos para la casa sin mi objetivo cumplido, pero habiéndolo saboreado visualmente.
Los demás me están esperando para el gran desayuno, una vez más como del día anterior, pera esta vez Julie había preparado mango en almíbar que estaba buenísimo y ya nos lo había dicho en la tertulia nocturna.
Tras el copioso desayuno, mientras nosotros recogíamos y poníamos las maletas al coche, Julie llevo a Adrià a ver los donkeys (burros) y caballos, a su regreso llegó la hora del adiós y me supo muy mal porque Julie es una persona encantadora y nos acogió como si fuéramos de la familia. Ambas nos abrazamos y nos entristecimos un poquito, pese a no entendernos mucho con los idiomas, entre chapurreos inglés, francés, si habíamos conseguido conectar un poquito.
Dejamos atrás la casa y nos fuimos alejando con la sensación que los aussies son personas extraordinarias, acogedoras y amables.
De camino a Lake Benett en el P.N. Litchfield, paramos en las Edith Falls, desde el lookout no se aprecian muy bien, porque esta en un lateral y solo se ven una parte de la caída para verse mejor tendríamos que ir acercándonos con un bote por el lago.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Tras las fotos nos dirigimos de nuevo por la Stuart Highway dirección Darwin hasta el desvío con Batchelor, el camino fue ameno porque vimos desfilar una procesión de coches de servicios (ambulancias, policías, asistencias, etc.) antiguos y tuneados, unos llevaban un perro enorme sobre el techo, otros una señorita sentada (por supuesto de cartón piedra) otro unos enormes cuernos, y así hasta un centenar que fueron desfilando en casi más de 40 km, pero iban en sentido contrario al nuestro por lo que no pudimos hacerles fotos.
Al llegar a Batchelor nos desviamos para coger la carretera de Lake Benett, donde teníamos nuestro alojamiento en el L.B. Wilderness Resort, donde chekeamos y nos dieron dos bungalows, el nuestro con cama matrimonio y tres camas individuales, casi podríamos haber dormido los cinco en uno.
Como era temprano, las 13h. bajamos hasta el pueblo a comer y luego pensamos en adelantar tiempo y empezar con las vistas a las Falls y darnos un bañito en las que pudiéramos.
Lo primero que nos encontramos fue el Magnetic Termite Mounds, donde se encuentran espectaculares termiteros de hasta 6m,
*** Imagen borrada de Tinypic ***
pero la verdad que por el camino vimos termiteros muchísimo más bonito como los que denominan las catedrales por sus formas, los que se encontraban que eran como cementosos,
*** Imagen borrada de Tinypic ***
más recordaban a un campo santo que a un termitero,
*** Imagen borrada de Tinypic ***
más recordaban a un campo santo que a un termitero,
*** Imagen borrada de Tinypic ***
pero bueno ya que se pasa por allí.
Tras la decepción, nos dirigimos a las Florence Falls, estas ya eran más bonitas, a 180 m está el mirador y a 400 m a las pools donde puedes darte un bañito tras bajar los 135 escalones, lo malo que a la subida no hay bañito pero el camino hacia el campark puede hacerse subiendo la montaña 1km, nosotros optamos por las escaleras que llevábamos días que no ejercitábamos las piernas.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Como todavía era temprano decimos seguir con la ruta esta vez las Tolmer Falls, pero aquí solo te permite acceder al mirador donde se contempla un precioso salto de agua. La zona tiene varios caminos para hacer a pie, nosotros nos conformamos con admirarla.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Seguimos carretera hasta las siguientes, las Wangi Falls, también me parecieron espectaculares y se podan bañar pero te advertían de riesgo de cocodrilos y que no había peligro si no los molestabas.
Antonio y Adrià se bañaron yo no soy muy amante del agua fría
*** Imagen borrada de Tinypic ***
y Jordi y Montse optaron por hacer una pequeña ruta que subía a las cataratas así que yo me quedé haciendo fotos y admirando la catarata que con los tonos de la piedras y dándole el solo adquiría un contraste de colores impresionantes.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Tras esta visita le habíamos dado la vuelta al parque y ya iba oscureciendo así que decidimos ponernos en marcha par el hotel que estaba a unos 60 km de donde nos encontramos. Por el camino se cruzaron un grupo de wallabys así que aminoramos la velocidad para no llevarnos sorpresas. Llegamos al hotel y cenamos, luego prontito nos retiramos, mañana hemos decidido no madrugar, puesto que gran parte del parque ya lo hemos visto. Así que tras escribir estas páginas, voy a apagar la luz y a dormir que Adrià ya lleva un buen rato dormido a ver que nos depara el día de mañana.