
Nuestro tren salía a las 5pm desde Rothenburg. Desgraciadamente ese día había una huelga de Lufthansa, por lo que al parecer toda la gente estaba viajando en tren y aquello era imposible.
Desde un inicio la cosa pintaba para ser un maratón de trenes hasta Füssen, pero agregando la cantidad de gente y los retrasos la cosa fue terrible.
Uno de los 5 trenes que debíamos tomar se retrasó una hora, por lo que perdimos el resto y como ya era un poco tarde, tuvimos que dar un vueltón loco porque permios el último tren que hacía una ruta más directa.

Desde un inicio la cosa pintaba para ser un maratón de trenes hasta Füssen, pero agregando la cantidad de gente y los retrasos la cosa fue terrible.
Uno de los 5 trenes que debíamos tomar se retrasó una hora, por lo que perdimos el resto y como ya era un poco tarde, tuvimos que dar un vueltón loco porque permios el último tren que hacía una ruta más directa.

Ni hablar… shit happens… jajaja el total fueron 5 trenes y 6.5 horas. Llegamos alrededor de las 11.30pm a Füssen. Como es un pueblo pequeño, la mayoría de los alojamientos no tienen una recepción 24 horas. Afortunadamente me di cuenta que esto podía pasar y atiborré de correos a los encargados del hotel para asegurarme de tener instrucciones claras (con fotos y todo) de cómo podría acceder a la habitación se llegábamos muy tarde.
Ellos dejaron la llave en unas cajitas de seguridad que tienen en la puerta, y me dieron la clave por correo.
Aunque al llegar estábamos un poco ansiosos por la logística con la llave, todo salió como esperado y en menos de 10 min de haber bajado del tren, ya estábamos en nuestra habitación.
Ellos dejaron la llave en unas cajitas de seguridad que tienen en la puerta, y me dieron la clave por correo.
Aunque al llegar estábamos un poco ansiosos por la logística con la llave, todo salió como esperado y en menos de 10 min de haber bajado del tren, ya estábamos en nuestra habitación.

Reconocimiento especial al City Apart-hotel Füssen. Habitaciones de muy buena calidad, cama comodísima, perfectamente limpias, mobiliario nuevo y moderno, a 2 minutos de la estación de tren en una calle peatonal iluminada, con un desayuno buffet excelente por solo 49€ habitación doble con baño!!! Podría decir que la mejor habitación del viaje, supero las expectativas.





A la mañana siguiente, después de un rico desayuno comenzamos el traslado hacia el castillo de Neuschwanstein.
Como el hotel está a 2 min caminando de la estación de tren fue muy sencillo.
A lado de la estación sale el camión hacia Neuschweinstein, normalmente tiene un costo, pero como habíamos comprado el bayern ticket previamente por internet, teníamos derecho a utilizar todo el transporte público en la región de Bavaria por un día (26€ por 2 personas). Vale mucho la pena ya que incluye todos los trenes regionales, el metro en Múnich y todos los camiones. Este día le sacamos mucho provecho.
Como el hotel está a 2 min caminando de la estación de tren fue muy sencillo.
A lado de la estación sale el camión hacia Neuschweinstein, normalmente tiene un costo, pero como habíamos comprado el bayern ticket previamente por internet, teníamos derecho a utilizar todo el transporte público en la región de Bavaria por un día (26€ por 2 personas). Vale mucho la pena ya que incluye todos los trenes regionales, el metro en Múnich y todos los camiones. Este día le sacamos mucho provecho.

El camión hace unos 10 miuntos hasta Hohenschwangau que es la entrada de turistas donde se compran las entradas a los 2 castillos y al museo.

Hay varias tiendas de recuerdos, algunos hoteles y restaurantes, por lo que es posible hospedarse aquí en lugar de Füssen para visitar los castillos, pero hay que aclarar que si se llega en tren, es mucho más cómodo Füssen.

Había bastante cola para comprar las entradas, pero una vez más, yo ya las traía compradas por internet (por 2€ más) y la fila para recogerlas estaba vacía (yeii).
La entrada al castillo tiene un horario específico que se debe respetar, si uno no se presenta en la entrada del castillo a la hora del tour (no se puede entrar sin tour) el boleto se pierde.
Para llegar al castillo de Neuschwanstein se debe subir una montaña.
La entrada al castillo tiene un horario específico que se debe respetar, si uno no se presenta en la entrada del castillo a la hora del tour (no se puede entrar sin tour) el boleto se pierde.
Para llegar al castillo de Neuschwanstein se debe subir una montaña.


Caminando es 1 hora a buen paso, pero hay otras formas. Una es en carro con caballos (más caro) y la otra en camión por 1€. Tomamos está opción por ser la más rápida y barata, y llegamos a la cima en unos 10 minutos. En la cima de la montaña está el puente Marienbrücke , y desde ahí se obtienen las mejores fotos del castillo. La vista es impactante!!!


De Marienbrücke a la entrada del castillo es una caminata de bajada de 10 min aproximadamente.
Una vez en la entrada hay que esperar que llamen al turno indicado en el boleto y entrar todos juntos en el tour. Te dan un audioguía en el idioma solicitado y empieza la visita, que dura como máximo 40 minutos.
Una vez en la entrada hay que esperar que llamen al turno indicado en el boleto y entrar todos juntos en el tour. Te dan un audioguía en el idioma solicitado y empieza la visita, que dura como máximo 40 minutos.




Me hubiera gustado mucho poder ir a nuestro aire y disfrutar un poco más en cada estancia, pero no está permitido quedarse atrás, hay que avanzar con el grupo ya que el castillo es muy concurrido y si no se harían unas bolas terribles.
El castillo en sí me pareció divino, totalmente excesivo pero eso es lo que uno espera ver en un castillo. Me encantó poder ver la habitación del rey, con esa cama tallada espectacular. Cada detalle de la decoración está cuidado al máximo, para cumplir con las excentricidades de Luis II de Baviera. El salón del trono y la habitación del rey fueron mis favoritas.
El castillo en sí me pareció divino, totalmente excesivo pero eso es lo que uno espera ver en un castillo. Me encantó poder ver la habitación del rey, con esa cama tallada espectacular. Cada detalle de la decoración está cuidado al máximo, para cumplir con las excentricidades de Luis II de Baviera. El salón del trono y la habitación del rey fueron mis favoritas.




Además tiene unas vistas inigualables!!!


Por mí me hubiera quedado mucho tiempo más, pero tuvimos que conformarnos con las fotos desde afuera.



Al terminar bajamos caminando para disfrutar del paseo, ya que no había prisa.



Llegando de nuevo a Hohenschwangau, de ahí tomamos el camión de regreso, de nuevo sin costo por el Bayern ticket, y de ahí tomamos el tren hacia nuestro destino final: Múnich.

