El Valle del Loira se extiende por una franja enorme de terreno desde el centro geográfico de Francia hasta el Atlántico. Visitarlo todo se me antoja una tarea titánica y además al final sería bastante monótono...Así que me reservo la parte oriental y la zona de Nantes para otro viaje y en este sólo voy a visitar, digamos, el tercio central del Valle.
Establezco la base de operaciones en la minúscula aldea de Chavagnes, enclavada en medio de preciosos viñedos. Recomiendo a cualquier viajero que se disponga a venir por aquí que se aloje en un pueblo más grande, como por ejemplo Saumur, ya que aquí hay muy pocos comercios y cierran muy pronto. En los sitios más grandes y turísticos hay más oferta de hostelería y supermercados para el viajero. En esto no acerté mucho....pero en cada viaje se aprende algo nuevo...
El B&B escogido fue L'ancienne Boulangerie (www.ancienne-boulangerie.fr), una antigua pastelería reformada en Hotel. El sitio es estupendo, las habitaciones enormes, nuevas y con mucha luz. El desayuno lo servían en una terraza interior muy bonita. La mujer que lo regentaba encantadora y me ayudó en todo lo que pudo. El B&B me encantó pero vuelvo a insistir en que si volviera me alojaría en un pueblo con más servicios.
Las fotos del Hotel.
El lugar donde se servía el desayuno.
Pero vamos con los Chateau...
CHATEAU DE MONTGEOFFROY
Este es el primer castillo que visité. Me sorprendió gratamente la quietud y tranquilidad que se respiraba aquí. Después me daría cuenta que no todos eran así....En medio de la campiña estábamos sólo nosotros y una familia británica visitándolo.
Se trata de un castillo pequeño pero en un lugar idílico que invita a dar un largo paseo.
Está situado en el pequeño pueblo de Mazé, un pequeño y encantador pueblecito.
Detalles del castillo con su foso y su capilla.
CHATEAU DE SAUMUR Y SU VILLA MEDIEVAL
La siguiente visita fue a la ciudad de Saumur, una pequeña población de 28000 habitantes en la orilla del río Loira. Cuenta con un castillo enorme y muy bonito en lo alto de su colina, llamado cómo no, Castillo de Saumur.
Edificado desde el Siglo XI, el castillo de Saumur fue fortaleza, residencia de descanso, palacio de los gobernadores de la villa, cárcel y depósito de armas y municiones. Este castillo que domina la ciudad y el río Loira fue comprado al Estado en 1906 por la propia Villa de Saumur, que después de haberlo restaurado, instaló en su interior el museo municipal.
La entrada al interior del Castillo era bastante cara, unos 10 Euros.
Es muy curioso lo que voy encontrando. Yo no sé si es en toda Francia o es sólo en esta zona que hasta en el pueblo o aldea más diminuto hay un pequeño monumento a los soldados muertos en las tres devastadoras guerras en las que ha participado Francia a lo largo de su historia más reciente: Primera Guerra mundial, Guerra de Indochina y Segunda Guerra mundial.
Aparecen los nombres, apellidos y fechas en las que murieron los soldados, clasificados por las diferentes guerras e incluso en las batallas que componían cada guerra.
En este caso las diferentes batallas de la Primera Guerra mundial: Ypres, Reims y Somme
CASAS TROGLODITAS DE TURQUANT
Cerca de Saumur hay un lugar sin castillos pero no por ello menos interesante. Se trata de la localidad de Turquant en la que algunas personas habitan en viviendas construidas dentro de la montaña, es decir, en modernas y confortables cuevas.
Por supuesto me recuerda mucho a Guadix, aunque con bastante más vegetación claro...que aquí llueve mucho...
CHATEAU DE MONTSOREAU
El castillo de Montsoreau, situado en la localidad homónima de Montsoreau, se caracteriza por una arquitectura típica de finales de la Edad Media cuando las fortalezas medievales se transformaron en viviendas secundarias de estilo renacentista.
La fachada norte, con su camino de ronda y sus imponentes torres tiene un aspecto austero y militar mientras que la fachada sur tiene una estética más alegre, más representativa del principio del Renacimiento. Este castillo de piedra de toba, que inspiró al escritor Alejandro Dumas en su novela « La Dama de Monsoreau », propone, hoy en día, un recorrido-espectáculo llamado « Los imaginarios del Loira » que presenta, a lo largo de 18 salas, la historia del río, los transportes y el comercio por él, la leyenda de la Dama de Montsoreau y la vida en las orillas del Loira con sus molinos y sus casas trogloditas.
En 1804 el castillo fue comprado por diecinueve propietarios. Convertida en vivienda y almacenes, el castillo poco a poco se convirtió en una ruina a principios del Siglo XX.
El castillo de Montsoreau está situado en la orilla del río Loira.
CHATEAU D'USSÉ
El Castillo de Ussé es una antigua residencia real ubicada en la comuna de Rigny-Ussé. Es uno de los castillos emblemáticos del Valle del Loira, además de uno de los más grandes y espectaculares. Es un auténtico palacio de princesas sacado de un cuento.
Hacia el 1004 el primer propietario de este mágico castillo fue el temible vikingo Guldin I de Saumur, conocido también como el diablo de Saumur. Hasta el Siglo XVII cambiará varias veces de propietario y finalmente será restaurado y quedará en su imagen actual.
Actualmente el castillo es una residencia privada que pertenece a los descendientes del Conde de Blacas , pero a pesar de esto es visitable previo pago de unos pocos euros.
La anécdota más importante de este castillo es que Perrault se inspiró en él para ambientar su cuento de "La bella durmiente". En una de las torres de puede observar el homenaje que se hace al citado cuento, puesto que toda ella está decorada con figuras de la historia de la bella durmiente.
Y ya que estamos por aquí visitamos la bella localidad que da nombre al castillo: Rygni-Ussé.
CHATEAU DE BRISSAC
El castillo de Brissac está situado en la localidad de Brissac-Quincé a unos 15 kilómetros de Angers.
Este castillo se caracteriza por los enormes y bien cuidados jardines que lo rodean, así como por albergar una pequeña bodega en su interior en la que se pueden degustar vinos de la zona. Además es también conocido por ser el sitio donde se lleva a cabo todos los años el Festival del Valle del Loira. Además, posee un programa de visitas guiadas y una variedad de actividades para disfrutar en sus extensos parques.
Cuando llegamos, estaba ya cerrado (Cierran a las 6 de la tarde). Así que no pudimos hacer la visita guiada con degustación de vinos. Por contra, nos colamos entre los setos que lo rodean para, por lo menos, poder echarle unas fotos y disfrutar de su maravilloso entorno.
Y con la ilegal visita exterior a este último castillo de Brissac ponemos punto y final a nuestros días por tierras del Loira, dejándonos buena parte de la zona y varios castillos para una próxima escapada y habiendo disfrutado de esta parte del Loira quizá menos conocida y visitada.
Y siempre esperando que os haya gustado y deseando que os haya sido útil para vuestra futura visita a la región francesa de los Países del Loira. Hasta la próxima escapadita...