Mañana día 2 - El gran Canal ✏️ Diarios de Viajes de Italia

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Mañana del Día 2 ( 21 de agosto)


La etapa la realizamos en una mañana, son 8 km incluyendo la ida en barco , con lo que se quedara más o menos en 4 km pateando. En esta segunda etapa navegamos por el Gran Canal, visitamos la isla de San Giorgio Maggiore y el barrio de Dorsoduro.




La pondre como 2 etapas diferentes por que son algo largas y para diferenciar ambos recorridos.



Llegada a Venecia

Después de dormir como 2 lirones con lo cansados que estábamos nos levantamos con las pilas cargadas y dispuestos a comernos las calles venecianas.

Bajamos a desayunar, bastante bien para la categoría del hotel, y subimos a lavar los dientes. Como aún era temprano para entrar en el hotel de Venecia nos fuimos a dar una vuelta por Mestre.

La ciudad es parte del ayuntamiento de Venecia, y en ella viven dos tercios de su población. Es lo que aquí llamamos una ciudad dormitorio, que ha crecido de forma descontrolada y a donde se han visto relegados los venecianos de pura cepa, que no pueden permitirse pagar el nivel de vida que se lleva en la isla.

Había un pequeño centro comercial, y aconsejados por un post de un foro nos fuimos al supermercado para comprar víveres y un poco de pasta italiana a mejor precio que en Venecia. Compramos 4 cervezas pequeñas , una de 1 litro en botella de cristal, 6 botellines de agua y 1,5 kg de pasta variada por 8,40€.
Volvimos al hotel a por nuestros bártulos, pagamos las tasas de turismo que tienen en la ciudad, 2,4€ para el precio de este hotel, y fuimos en bus hasta la Plaza de Roma. Al llegar fuimos hacia el hotel, que esta a unos 200 metros, y ya pudimos dejar las maletas en la habitación, que estaba lista.

Casa Sant'Andrea

El hotel lo reservamos por internet, costando 123€ las 2 noches, un precio inmejorable tratándose de Venecia. Es un hotel ideal, puesto que además de estar en la entrada de la ciudad,esta muy cerca de la parada de Vaporetto y de uno de los pocos supermercados de la ciudad.


El hotel está situado en un viejo Monasterio del 1500, renovado en el 1700 y recientemente restaurado para crear un típico palacio veneciano. La morfología del edificio en el interior es la típica de un convento, grandes escaleras con espacios abiertos, habitaciones grandes con techos altísimos y hasta una sala de conferencias, puesto que el hotel está orientado hacia convenciones de empresas y reuniones familiares.
La habitación tiene aire acondicionado con una especie de radiador, que al no tener nevera nos servía para enfriar los zumos y las cervezas perfectamente.

Casa Sant'Andrea[/align]



El Gran Canal

Desde el hotel nos fuimos a la oficina de información turística situada en la plaza de Roma, que es donde normalmente se compran los abonos y billetes. Después de una pequeña cola y de hablar con ellos nos decidimos a comprar un abono para 2 días en el Vaporetto del Arte. La ventaja de este vaporetto es que va bastante vacío comparado con los normales, los asientos son de cuero, hay aire acondicionado, te dan un mapa y unos cascos para ir escuchando lo que puedes ver conforme avanza el barco, .. y todo por solo 10€ más que el abono para el vaporetto normal. La combinación mejor que nos ofrecieron fue comprar la Travel Card y la Rolling Travel Card, por 35 y 32€


Salimos de la oficina de turismo y cruzamos el Puente de la constitución, diseñado por Calatrava, una de las construcciones con más polémica de la ciudad (hasta ha sido demandado por el ayuntamiento debido a sus carencias estructurales y de seguridad). A continuación subimos al primer vaporetto del arte que llegó e iniciamos nuestra visita por el Gran Canal.

El Canal Grande, que los venecianos llaman el “Canalizzo”, es la calle principal de Venecia. Es de unos 4 Km. y divide la ciudad en dos: la parte este, que tiene tres “sestieres”, y la oeste, con otros tres “sestieres”. Tiene tres puentes: degli Scalzi, de Rialto y dell’Accademia.

Desde que Venecia se convirtió en una potencia, este canal ha sido la vía principal para el transporte de la ciudad: antiguamente estaba lleno de barcos que iban hasta Rialto. Hoy, en cambio, navegan “vaporettos”, góndolas y lanchas que van y vienen de una orilla a la otra para que los turistas puedan admirar los preciosos palacios de las dos riberas. Estos palacios fueron construidos en un periodo de unos quinientos años y algunos son espléndidos ejemplos de arquitectura veneciana que nadie puede perderse si visita esta ciudad.

Los edificios que hay que ver son tantos que sería necesario recorrer el canal más de una vez, por esto aconsejamos verlo al menos una vez de día y otra de noche.


Puente degli Scalzi

Nada más salir de la estación, se pasa por debajo del Puente degli Scalzi, construido en 1934 para sustituir el puente de hierro que habían levantado los austriacos en 1858. A pocos metros, se puede admirar la iglesia degli Scalzi y la de San Geremia, donde se conservan los restos de Santa Lucía, y cerca está el Palacio Labia, de 1750, con los frescos de la historia de Cleopatra, del artista Tiepolo.



Fondaco dei Turchi

Un poco mas adelante podemos ver el Fondaco dei Turchi (almacén de los turcos), o Museo de Historia Natural , situado justo en frente a la parada de S.Marcuola. El Fontego dei Turchi es un palacio de dos plantas con arcos de medio punto construido en la primera mitad del siglo XIII. Este edificio fue una casa normal hasta el siglo XVII, cuando la compraron los mercaderes turcos de la ciudad, que la tuvieron hasta 1838. Fue entonces cuando le hicieron una gran reforma que lo modificó completamente.



Palacio Belloni-Battagia

Al lado del “Fondaco”, hay un edificio almenado del siglo XV, los Depósitos del Megio, donde antiguamente era el granero común, y al lado el Palacio Belloni-Battagia, del siglo XVII , hecha por Longhena.



Ca' Vendramin Calergi

Ca' Vendramin Calergi, fue terminado a principios del siglo XVI y es el primer edificio que tiene ya el estilo de Leon Battista Alberti, que recuperaba el clasicismo. Por su dimensión enorme, ha hospedado a muchos personajes ilustres, como Richard Wagner que murió aquí en febrero de 1883. Actualmente es la sede de invierno del casino.



Iglesia de San Stae

Siguiendo por el canal, aparece la Iglesia de San Stae, con una elegante fachada barroca enriquecida con estatuas de mármol de 1709, y un poco más adelante, el solemne palacio Ca’ Pesaro, también de Longhena.



Ca´Pesaro

Ca´Pesaro es un palacio barroco de mármol construido a mediados del siglo XVII, tiene un lado de piedra, algo insólito en los edificios venecianos, que normalmente son de ladrillo para que los edificios puedan construirse uno al lado del otro, para aprovechar mejor el espacio. Hoy es la sede de un complejo museal de arte moderno y oriental.



Palacio Corner della Regina

Le sigue un gran edificio, el Palacio Corner della Regina, diseñado por Domenico Rossi en 1720 y que actualmente es la sede de los archivos de la Bienal. Este edificio se llama así por Caterina Corsaro, reina de Chipre que nació aquí en 1454.



Ca´ d´Oro

Ca´ d´Oro, con su fachada de mármol y fue construido entre 1420 y 1440, de estilo gótico. Debe su nombre a que antiguamente tenía la fachada dorada. En la actualidad es la sede de la Galería Franchetti, con una colección muy importante de pintura. Este es sin duda uno de los edificios mas bonitos de toda Venecia.



Palacio Sagredo

Un poco más adelante, está el Palacio Sagredo, que es el resultado de una mezcla de estilos típica del arte veneciano, con la fachada que presenta elementos tanto véneto-bizantinos como góticos.



Pesquería

A la derecha está el mercado de Rialto, que empieza con la neogótica “Pesquería”, de principios del siglo XX. También estan ñas Fábricas Nuevas de Rialto y las Fábricas Viejas de Rialto, del siglo XVI. El mercado es digamos la plaza de Abastos de la ciudad, funciona todos los días, aunque creo que solo por la mañana.



Puente de Rialto

Después se pasa bajo el famoso Puente de Rialto, que está en la zona más antigua y viva de Venecia, del que ya hablamos en el capítulo anterior.



Palacio Dolfin-Manin

Cerca del puente está el Palacio Dolfin-Manin, el primer palacio que el artista Sansovino construyó en Venecia en los años 1538-1540, pero sólo se conserva la fachada clásica, porque el último dux de Venecia, Ludovico Manin, reformó todo el interior, ya que vivió aquí hasta su muerte en 1797.




Palacio Loredan y el Palacio Farsetti

Después, se pueden admirar el Palacio Loredan y el Palacio Farsetti. Estos dos palacios, separados por una calle, datan de finales del siglo XII o principios del XIII y están cerquita del Puente de Rialto. Fueron unidos en 1868 a través de un paso elevado.

Ca'Loredán-Corner fue construido en el siglo XII-XIII como un almacén de Veneto-bizantino. En los siglos siguientes se expandió y fue muy modificado por la familia Cornaro Piscopia. Entre el siglo XVIII y el XIX fue el hogar de Loredan, los últimos propietarios nobles que dan nombre al palacio y pasó a la ciudad de Venecia en 1868, para convertirse en la sede de la municipalidad, junto con el Palazzo Farsetti.


Ca'Dándolo-Farsetti fue construido en el s. XII-XIII con solo dos plantas, por descendientes del dux Dandolo Enrico. Federico Contarini, lo compró en 1440 y aumento dos plantas hasta su altura actual. Las dos primeras plantas son de estilo véneto-bizantino y los posteriores son renacentistas. Alrededor de 1670 pasa a la familia Farsetti, que a principios de siglo XVIII adquirió un importante centro artístico, la "Academia Farsetti". A principios del XIX fue un hotel y en 1826 fue adquirida por la ciudad de Venecia y pasó a ser el ayuntamiento.


Palacio Grimani

Justo después, se encuentran el Hotel Leon Bianco y el Palacio Grimani, este último fue construido en estilo renacentista en 1556 por el procurador Girolamo Grimani, y actualmente es la sede de la Corte de Apelación de Venecia.



Palacio Balbi

Siguiendo el canal llegamos al Palacio Balbi. Al principio de la década de 1660 la familia Balbi elevó con éxito una petición al Senado, solicitando permiso para construir su propia calle, la Vía Balbi, en la cual erigieron sus palacios residenciales. Comisionaron el diseño de estos palacios al famoso arquitecto italiano Bartolomeo Bianco.



Palacio Grassi

El Palacio Grassi es un imponente edificio de mármol blanco diseñado por Giorgio Massari y construido entre 1748 y 1772. Actualmente el edificio se utiliza como sala de exposiciones para las artes visuales y pertenece al grupo Fiat. También contiene un teatro con una capacidad para 600 asientos al aire libre.



Ca´ Rezzonico

Ca´ Rezzonico, en el que destaca su escalinata, alberga el museo del Settecento Veneziano. El palacio fue construido por Baldassare Longhena en el siglo XVII y años después fue adquirido por la familia Rezzonico. En el año 1888 lo adquirió el poeta inglés Robert Browning, que murió en el palacio un año más tarde.



Puente de la Academia

Llegamos en este punto al Puente de la Academia (Ponte dell´Accademia), el último de los que atraviesan el Gran Canal. El puente original era de hierro y fue inaugurado el 20 de noviembre de 1854. Posteriormente se construyó un puente de madera a partir del proyecto del ingeniero Eugenio Miozzi (1889-1979). Fue inaugurado el 15 de enero de 1933. Intervenciones posteriores han agregado al puente original elementos de hierro. La longitud del puente es de 48 m.



Gallerie dell Accademia y Palazzo Cavalli-Franchetti


A la derecha del puente tenemos la Gallerie dell Accademia y a la izquierda el Palazzo Cavalli-Franchetti.


La Academia fue la escuela y monasterio de la Carità. Su nombre le viene de la Academia de Bellas Artes instalada aquí por Napoleón en 1807. Cuenta con pintura veneciana desde el siglo XIV.



Palacio Barberigo

Continuando por el canal, se pasa por enfrente del Palacio Barberigo, al lado de la plaza Campo San Vio, con magníficos mosaicos de la segunda mitad del siglo XIX.



Palacio Corner della Ca’ Granda

Palacio Corner della Ca’ Granda, una construcción de 1532, de Sansovino (c. 1486-1570), arquitecto y escultor italiano, considerado como el introductor del Renacimiento. En 1527 se estableció en Venecia. Este palacio está al final del recorrido, cerca de la dársena donde desemboca el canal.



Palacio Delfin Manin

Palacio Delfin Manin, construido por el mismo Sansovino para el noble Juan Delfín. En este gran palacio vivió el último de los Dogos de Venecia, Ludovico Manin.



Santa María della Salute

Llegando al tramo final del canal, destaca la enorme iglesia barroca de Santa Maria della Salute, proyecto de Longhena en 1630 para conmemorar el final de una peste. Al final de la orilla derecha del Canal Grande, se alza la Aduana “di Mare”, que tiene en lo alto una veleta que simboliza la fortuna.



Isla de San Giorgio Maggiore

La última parada del Gran Canal es la de San Marcos, pero el vaporetto sigue hasta la Isla de San Giorgio Maggiore , donde a continuación da la vuelta ( hablamos del Vaporetto del arte ) . Una vez llegamos a la Isla nos comentaron que al ser la última parada había que bajarse para que diera la vuelta, asi que nos dedidimos a visitar la Iglesia y su Torre.

Su imponente iglesia fue encargada a Palladio en 1565 y se terminó en 1610. El nuevo campanario se levantaría en 1791.


La fachada en forma de templo clásico, con una sola entrada, con cuatro columnas compuestas sobre altos plintos, con un entablamento por encima sosteniendo un tímpano clásico. La solución inventada por Palladio para esta fachada es fantasiosa y es una contribución original a la resolución de uno de los problemas más sentidos por los arquitectos renacentistas, esto es, encontrar el modo de dotar de un aspecto inspirado en el templo clásico a un edificio tripartito como la iglesia cristiana de tres naves.

Aquí están los últimos cuadros de Tintoretto: La última cena (1592-1594), Recogida del maná (1594) y La deposición (1592-94). Las dos primeras se encuentran en los muros del presbiterio, y la última en la capilla de los muertos.


Después de dar una vuelta por el interior de esta bonita basílica (visita gratuita), fuimos hacia las escaleras, puesto que en todos lados que leíamos decían que esta visita era muy recomendable. El cura de turno nos cobro 5€ por persona por subir en un ascensor que tarda un montón. Suele haber colas grandes, hay que tener algo de paciencia, pero las vistas desde lo alto del campanario son impresionantes. Se puede ver la isla e Venecia, las islas más cercanas y el resto de la laguna.




Al bajar estuvimos un rato sentados en las escaleras que dan al agua en frente a la basílica, mojando los pies para refrescarnos, mientras esperábamos el vaporetto para volver hacia Santa María della Salute.

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