Después de meses esperando llegó el día esperado, 21 de julio, día en que por fin llegaremos a la ciudad que tantas ganas teníamos de conocer, si, ella, única e inigualable, nuestra querida Amsterdam

El vuelo salía a las 20:00 de Sevilla. Como viene siendo habitual la maravillosa suerte que tenemos con los aviones, salimos con cerca de 45 minutos de retraso, pero como bien sabéis los viajeros esto está a la orden del día, y como sarna con gusto no pica, a tomárselo con la mejor filosofía posible, dicen que lo bueno siempre se hace esperar...

El vuelo transcurrió normal y en menos de lo esperado ya estábamos visualizando desde la ventanilla las luces de nuestra querida Amsterdam. Al llegar tuvimos una pequeña sorpresa... Como comenté anteriormente, teníamos contratado nuestra recogida en el aeropuerto debido a que llegábamos sobre las once y pico de la noche y no queríamos llegar demasiado tarde al hotel puesto que nuestra intención era descansar para empezar bien nuestro viaje. Digo bien, nuestra intención era esa, pero otra cosa muy distinta es lo que nos pasó.
La maleta que teníamos facturada llegó a la perfección y bastante rápido. Con los nervios que se tiene en el cuerpo al llegar a un destino desconocido y con una gran sonrisa en nuestras caras, salimos esperando a alguien donde tuviera nuestro nombre en un cartel. Salimos efectivamente, pero alli no habia nadie que nos esperase a nosotros. Esperamos un poco, salimos fuera por si nos estuvieran esperando alli, pero nada, no habia nadie






No pasa nada, ya estábamos en el coche y caminos a nuestro hotel. Ya con nuestro enfado casi esfumado, llegamos y la impresión es bastante buena. En frente del hotel convergen tres canales terminando en un puerto deportivo que tenía el hotel. El WYNDHAM APOLLO no está en el centro centro, eso lo sabíamos al hacer la reserva, pero no nos importó porque dando un precioso paseo te ponías en el centro como mucho en unos 20 minutos. Esta, para que quede más claro, a unos diez minutos andando de Museumplein. Vamos, para nosotros relación calidad/ubicación/precio perfecta. La habitación era bastante amplia, os pongo alguna foto para que os hagáis una idea

El cuarto de baño también genial
Y con servicio de cafetera y tetera gratuito
Después de ver como iba a ser nuestra casa durante la próxima semana nos decidimos a pegarnos una buena ducha y a dormir. Al día siguiente nos esperaban muchas emociones y experiencias
