El vuelo lo cogimos con la compañia Norwegian Air Shuttle, 10 días antes de la fecha de salida (22/11/16), por un precio de 129 euros ida/vuelta dos personas.
Era la primera vez que viajábamos con esta compañía, que sí es de bajo coste pero nada tiene que ver con otras, ofrecen wifi gratis durante el vuelo, tv online, espacio entre asientos, en general muy bien.
Salimos de Madrid con un poco de retraso pero el vuelo corto y cómodo.
Una vez en Marrakech, rellenamos la hoja de inmigración que te la dan durante el vuelo y con el pasaporte español sin visado en este caso pasamos el control de fronteras.
Ya pasado el control nos encontramos una casa de cambio con bastante gente esperando, nosotros sabemos que siempre ofrecen mejores cambios una vez recoges la maleta y sales a la terminal, por ese motivo seguimos hacia adelante y cambiamos ya fuera. Cambiamos 20 euros (1 euro = 10.5 dirhams) en el aeropuerto para coger taxi o el bus 19 que hay al salir fuera que te lleva a la plaza Jemaa el-Fna.
El bus cuesta 30 dirhams y la tarifa oficial de taxis 70 dirhams. Nosotros al salir nos encontramos con un taxista que nos ofreció llevarnos. El precio que nos dio era de 30 dirhams por persona, ya que nos encontramos con 3 chicas y decidimos compartir el taxi.
El taxista nos dejó en la plaza Jemaa el-Fna, y nos dirigimos al riad SMARA, que mi mujer había elegido después de leer muchos comentarios de booking :shock:. Anduvimos como unos 5 ó 10 minutos hasta el Riad (hotel), yo había sacado unas capturas de pantalla para saber llegar, pero aún así dudamos un poquito justamente al final, porque apenas hay calles nombradas, por lo que es difícil moverse sin conocer. Se acercarán muchos chicos si te ven dudar y querrán llevarte para que les des algo de dinero.
La primera sensación al llegar a la medina puede ser de inseguridad, por la gente que te aborda, las calles poco iluminadas, eso por llamarles calles

Llegamos al riad Smara, nos recibió Brahim, y los comentarios que leyó mi mujer estaban totalmente justificados, trato y lugar fantástico

Tras dejar el equipaje nos fuimos a la Plaza a cenar en el Chez Chegrouni, un restaurante con bonitas vistas y comida buena. Pedimos cous-cous de pollo y un tjine de pollo con agua por 140 dirhams. Veréis que no es ni caro ni barato para los precios de Marrakech. No fue la mejor del viaje pero estuvo bien y merecen la pena las vistas a la plaza desde la planta de arriba. Ese día por cierto, no tenía tanto bullicio como habitualmente, porque estaba lloviendo.
