Hoy nos despedíamos de Phi Phi rumbo a la última etapa de nuestro viaje donde nos relajamos 4 noches en un hotel espectacular en la zona de Khao Lak. Nuestro ferry salía a las 9 por lo que a las 8 teníamos que estas preparados para coger el Long Tail al puerto. A las 7 bajamos a desayunar y luego subimos de nuevo a la habitación a lavarnos los dientes y llamamos para que vinieran a recoger nuestras maletas.
De nuevo para subir al Long Tail tuvimos que meternos al agua, llevábamos las chanclas de las que se atan y cuando llegamos al puerto nos secamos bien y nos pusimos las zapatillas para ir mas cómodos (yo tenía los pies con bastantes heridas ya que las chanclas no me fueron nada bien... vi a mucha gente con las mismas que son las básicas de Decathlon pero a mi me hicieron unas ampollas horribles).
Al llegar al embarcadero nos acercamos a un "mostrador" que había para que nos dieran los billetes con la reserva de internet impresa, nos preguntaron si queríamos contratar transporte pero como ya lo teníamos contratado nada. Como ya habréis leído para ir hacia Phi Phi contratamos el transporte a través de la página web de la reserva del ferry, para la vuelta sin embargo no encontré la forma de contratarlo hasta el hotel ya que no salía en el listado de destinos. Buscando en los distintos foros vi que recomendaban una empresa local de coches privados que se contrata a través de email: cheaperkhaolak1@gmail.com. La comunicación fue muy buena, lo contratamos con bastante antelación y unos días antes le escribí para confirmar que todo fuera ok.
Después de esperar un rato nos embarcamos al ferry, en este caso tuvimos que dejar las maletas tumbadas en la parte de afuera, van haciendo una montaña colocando unas encima de otras y les ponen un plástico encima para que no se mojen.... porque como no.... volvía a llover


Nos sentamos en una fila de asientos de 4 y no se sentó nadie mas así que fuimos bastante cómodos aunque este era más antiguo que el ferry de ida. En este viaje tampoco tuvimos ningún problema con el mareo.
Al llegar al Rassada Pier nos bajamos y esperamos a que empezaran a sacar las maletas... para ello se pone un chico en el borde del ferry y otro en el embarcadero y empiezan a tirárselas... a mi me entró el pánico ya que con lo que pesaba la maleta me imaginé al chico cayendo con ella al agua! se ve que mucha gente tuvo la misma sensación porque empezaron a entrar de nuevo todos en el ferry para rescatar su maleta... mi chico volvió también con toda la marea de gente y logro sacar nuestras maletas sanas y salvas.
Saliendo al parking enseguida vimos a un chico con un cartelito con nuestro nombre. El viaje hasta Khao Lak fue bastante largo, un tramo fue por una carretera con muchísimas curvas y con la forma de conducir al final me maree bastante, pero finalmente llegamos!!
El hotel que elegimos para poner el broche a este fantástico viaje fue el JW Marriott Khao Lak... solo al llegar a la entrada nos quedamos con la boca abierta, nunca habíamos estado en un hotel tan lujoso!! Tiene una decoración impresionante todos los detalles super cuidados. Al entrar al lobby enseguida te recibe alguien de recepción y te invita a sentarte mientras te traen una toalla fría y un zumo. Mientras te relajas te piden el pasaporte y lo van escaneando, nada de esperar de pie en el mostrador :):)
Nos explicaron todo el hotel, los restaurantes, servicios disponibles etc. Y sin mucho esperar nos llevaron a nuestra habitación... increíble! enorme y con un baño espectacular. Nos instalamos y rápidamente nos fuimos a dar una vuelta y a la playa.
Este hotel fue el gran capricho que nos dimos en el viaje, como cogimos la última semana de Noviembre que aún no es temporada super alta nos salió algo más barato y nos decidimos ya que un hotel de está categoría en Europa nos saldría fácilmente 4 veces más caro.

Los 4 días que pasamos en el hotel nos dedicamos a descansar y relajarnos por lo que no hay mucho que contar. Estuvimos pensando en aprovechar para ir a las Islas Smilian a probar el buceo pero al no haber buceado nunca teníamos que ir un día a hacer el bautismo en una piscina y luego ir a las islas otro día con lo que perdíamos dos días casi completos y finalmente nos decidimos por disfrutar plenamente del hotel.
A continuación os cuento todo sobre el hotel para que os decidáis a ir!
- Piscina: El hotel tiene una piscina de casi 4 km que es como un río que lo rodea todo, tiene habitaciones con acceso directo a la piscina pero se nos salía de presupuesto :P. Nos dimos largos paseos nadando por toda la piscina, esta toda rodeada de jardines y vimos una iguana! Tuvimos la suerte de que había muy poca gente en el hotel por lo que íbamos por la piscina prácticamente solos.
- Playa: Tanto la piscina como la playa tiene suficientes hamacas para no estar agobiado de tener que madrugar, en todo el hotel se respira mucha tranquilidad. Tienen tantos detalles que hasta te dan un bolso de playa! lo tienes en la habitación, nosotros al principio no sabía si se podía usar hasta que vimos que todo el mundo llevaba el mismo jaja (ejem catetooos). La playa es enorme! puedes pasear durante un par de horas hacia cada lado sin encontrar mucha gente, lo único raro es que al meternos al agua nos picaba bastante todo el cuerpo como si hubiera micromedusas (no se ni si eso existe pero era la sensación que daba jaja).
- Restaurantes: Al llegar nos entregaron varios folletos con servicios del hotel, y en uno de ellos ofertaban un paquete de cenas, como los restaurantes eran bastante caros al final lo compramos para las 4 noches. Podías elegir el restaurante que quisieras cada noche (antes mejor reservar) y tenías un menú con varias opciones de primero segundo y postre, las bebidas se pagan aparte, nosotros los probamos todos y realmente vale la pena. Hay 3 restaurantes para cenar:
Olive: Italiano, la noche de bufet es espectacular, carnes y pescados a la brasa, pasta casera, canapés, pizzas al momento, todo estaba muuuuy bueno, se notaba comida de calidad.
Sakura: Japonés, a nosotros no nos gusta el sushi pero tomamos unos noodles y un solomillo muy ricos, el restaurante es precioso rodeado de un estanque con flores de loto y ranas.
Ta Krai: Tailandés, aquí fuimos también a la noche de bufet y aunque estaba todo bueno nos decepcionó un poco la organización.
Los restaurantes solo abren por la noche, durante el día hay 3 o 4 bares donde tomar cocteles y tienen pizzas y hamburguesas para comer, nosotros al final solo desayunábamos y cenábamos (no penséis que pasábamos hambre... nos pegábamos tal panzada de desayunar que no teníamos hambre hasta la noche jaja)
- Desayuno: Esto lo llevábamos incluido... el mejor bufet de desayuno que he visto nunca! Había de todo, zumos de todas las frutas imaginables, huevos que podías pedir como quisieras y también había unos especiales como los benedict (solo los había visto en masterchef jaja), planchas donde te hacían tortitas o creps, mil tipos de panes, croassant, gofres... y todo de muchísima calidad y buenísimos. Además el restaurante tiene vistas al mar y una zona de solo adultos donde se está super tranquilo.
En definitiva es un hotel muy recomendable, no está cerca de nada por lo que es un sitio donde ir a relajarse y disfrutar de unos días de descanso.




En la siguiente etapa os contaré nuestro viaje de vuelta y las conclusiones del viaje.