El viaje invernal de 2017 no podía ser otro que la ruta Praga – Viena – Budapest. Ya nos rondó la cabeza en año pasado y terminamos decidiéndonos por Nueva York así que este año estaba claro, aunque confieso que increíblemente (o no) nos sentimos muy tentados a repetir en La Gran Manzana. Como el año anterior, pensamos también en una ruta por Bélgica y Holanda, pero echando números, la ruta por el centro de Europa salía más económica y nos resultaba también más atractiva. Y cumplió.
Fue un viaje que ya tenía más o menos diseñado y aunque fui “monitoreando” los vuelos desde verano, no fue hasta un algo más de un par de semanas antes cuando finalmente pude hacer las reservas y a pesar de esta celeridad, me quedó un viaje muy apañado.

VUELOS
Viajamos a mediados de diciembre, justo la semana después del puente, de sábado a sábado. Desde que empecé a seguir los vuelos hasta que pude comprarlos, el precio subió entre 30-40€ en total; esa fue la multa que tuvimos que pagar por tan poca antelación y aún así nos salieron a un precio bastante decente teniendo en cuenta que desde Madrid no suelen ser unos de los destinos más económicos.
Probé todas las combinaciones posibles con Praga, Viena, Budapest e incluso Bratislava y lo más ecoómico resultó ser entrar por Praga y salir por Budapest:
- MADRID – PRAGA: 61,19 €/persona (con Ryanair y sin maleta facturada)
- BUDAPEST – MADRID: 74,40 €/ persona (Iberia, incluido 10% de descuento por ser socio de Iberia Joven y menor de 30)
Total vuelos: 135,19 €/persona
HOTELES
En estos casos no nos importa escoger alojamientos con baño compartido para ahorrar unos euros y lo cierto es que la diferencia se nota, sobre todo reservando con tan poca antelación. Procuramos siempre, eso sí, que se trate de un cuarto de baño normal y con pestillo, no de duchas comunes.
En Praga escogimos el Flora House dos noches por un total de 60€ (+5€ por llegada antes de las 15:00). Es un alojamiento nuevo, sencillo, cómodo, limpio y muy cuco, además de bien situados. Resultamos además ser los únicos hueéspedes así que teníamos el baño para nosotros solos.
En Viena era todo carísimo. Optamos por salir del centro y alojarnos en una zona animada u bien comunicada como son los alrededores de Westbahnhof, concretamente en el hotel Do Step Inn. Dos noches nos costaron 73,77€. La habitación era muy pequeña y sencilla y el baño,privado y en el pasillo. Teníamos metro, tren y un centro comercial justo al lado así que la elección resultó perfecta.
En Budapest nos alojamos en un hotel de características similares, el Walking Bed Budapest Downtown. De nuevo parecíamos estar solos en todo el piso, pero por la noche había un huésped que no nos gustó nada, nos quejamos y nos cambiaron al edificio contiguo. Tres noches fueron 47,50€.
Total hoteles: 93,14€/ persona
AUTOBUS
Sondeé la opción de tren y autobús para movernos entre las ciudades y para aquellas alturas, ambos habían subido bastante de precio así que la opción más económica fue el autobús… que por cierto son la mar de cómodos.
Praga – Viena: 15€/ persona
Viena – Budapest (con pequeña escala en Bratislava): 16,50€/ persona
Total autobuses: 31,50€/ persona
TOTAL PRESUPUESTO INICIAL: 259,83€/ persona
