Llegamos a este paisaje tan singular tras una larga noche en bus nocturno, esta vez no fue tan cómoda la experiencia y terminamos bastante cansados. El autobús nos deja en Göreme, el pueblo más popular de toda la región. Pero nuestro alojamiento se encuentra en Çavusin, a unos 4 km.
Tal y como bajamos del bus nos colocamos en la carretera en dirección a Çavusin dispuestos a hacer autostop y la segunda o tercera furgoneta que pasa nos lleva gratis. Esto nos sirvió para perder la vergüenza y el miedo a hacer dedo, algo que nos vino genial para los próximos días.
En total pasamos 4 días en la Capadocia recorriendo varios pueblos y algunos valles por los que hemos hecho pequeñas rutas de senderismo.
Çavusin
Los dos primeros días en la Capadocia nos alojamos en Seki Cave Çavusin, un hotelazo por 54€ la noche.
Quedarse en este pequeño pueblo a 4 km de Göreme tiene muchas ventajas. El principal punto a favor es que desde este pueblo se tienen una de las mejores vistas para disfrutar de los globos al amanecer.
Ya sea desde la terraza del hotel o sobre Rose Valley, a 5 minutos caminando, las vistas son increíbles. El pueblo cuenta con una peculiar fortaleza medio derruida desde la que también se divisan unas grandes vistas.
Es una buena base para realizar rutas por los diferentes valles de la Capadocia ya que muchos senderos se encuentran entre Göreme y Çavusin. Sin embargo para movernos hasta los demás pueblos es un poco más difícil desde Çavusin porque no está muy bien comunicado. Nosotros hicimos autostop desde la carretera principal y siempre nos pararon muy rápido, aunque se pueden tomar taxis. Un último consejo para el que venga hasta aquí es que vaya a cenar a Seyyah Han, el restaurante es precioso y nos dejó con la boca abierta.
Göreme
Sin duda, el pueblo más conocido de toda la Capadocia, en él existen multitud de bares, restaurantes, agencias de viajes y todo lo necesario para organizar unos días por la zona. Es un pueblo muy bonito y con mucho ambiente.
Caminando se llega a los valles más populares para realizar rutas de senderismo y a menos de 1km se encuentra el Open Air Museum de Göreme. Nosotros lo visitamos en nuestra primera tarde y visto todo lo que vimos después quizás no lo veo imprescindible. De las 9 Iglesias que se visitan sólo un par de ellas me resultaron realmente sorprendentes y hay tantos turistas que es complicado disfrutarlas.
En los diferentes valles que recorrimos encontramos algunas iglesias medio abandonadas quizás menos impresionantes pero en las que puedes sentarte y disfrutar en solitario de lo que tienes en frente.
Ortahisar
Llegamos hasta aquí haciendo autostop desde el viewpoint de Red Valley. Una joven pareja turca nos acercó hasta el cruce de la carretera que da acceso al pueblo. La chica iba súper contenta de llevarnos en el coche y se sorprendió un montón al vernos hablar algunas palabras en turco, se partía de risa. El poderoso castillo de Ortahisar sobresale como un rascacielos de roca.
Alrededor de él hay unas cuantas calles con casas de piedra que tienen mucho encanto.
Cerca de la entrada al castillo nos encontramos con un taller artesano que trabaja el ónix, una piedra parecida al mármol con diferentes tonos y caprichosas betas.
Derinkuyu
Es un pequeño pueblo rural un poco más alejado de los valles más conocidos de la zona en el que se encuentra una de las ciudades subterráneas más profundas de la Capadocia. La visita a mí me defraudó un poco, quizás esperaba otra cosa, no tomamos audio guía y creo que aquí se hace imprescindible porque no tenía ni idea de lo que estaba viendo.
El pueblo en sí no tiene mucho más que ofrecer, aunque nosotros nos lo montamos bastante bien. Nos compramos un par de cervezas por 6 liras en el supermercado y durum para llevar y preparamos un buen picnic en un merendero que vimos por el centro del pueblo. Creo que la ciudad subterránea de Kaymakli es más interesante por lo que nos comentaron algunas personas que habían visitado las dos.
Üchisar
Para mí el pueblo más bonito de todos los que vimos por los alrededores. Las calles cercanas al gran castillo tienen un encanto único. Sus chimeneas de hadas son la antesala de las dos grandes torres que forman la fortaleza de Üchisar.
Las vistas desde las azoteas de las casas son impresionantes, desde ella se ven todos los valles de la Capadocia.
Ver como se ilumina el castillo con los últimos rayos del sol debería ser obligatorio para todo el que pase por la zona.
Hay mucha oferta hotelera y de restaurantes, aunque si vas buscando hacer rutas de senderismo Göreme o Çavusin están mejor situados. Nosotros hicimos la ruta que baja por el Valle de las Palomas y terminamos en un mirador natural viendo atardecer sobre Üchisar.
Un restaurante que nos encantó fue Muhterif, impresionante y muy económico. Cenamos por unos 14€ los dos.
Uno de los grandes atractivos de la Capadocia es realizar un vuelo en globo, nosotros no lo hicimos porque el precio se nos iba de nuestro presupuesto, pero igualmente se puede disfrutar de este entorno de muchas otras formas. Uno de los días hicimos una ruta en quad muy divertida, dos horas nos costaron 150 liras, unos 25€.
Pero para mí una de las mejores formas de descubrir estos valles es caminando y perdiéndote por este laberinto de roca. A continuación os hablo un poco de los valles que hemos recogido.
Rose Valley. Un precioso valle que se convierte un auténtico laberinto de suaves formas en el que es complicado seguir una ruta fija ya que hay multitud de senderos.
Hay un camino muy cómodo que parte de Çavusin y va rodeando la parte más alta del valle desde el que se tienen buenas panorámicas.
Red Valley. Uno de los valles más populares de la Capadocia en el que se encuentran varias iglesias excavadas en las rocas. Ninguna es fácil de encontrar aunque este valle quizás sea el que está mejor señalizado.
Al final es cuestión de ir probando caminos o de contratar un buen guía para los que no estén muy acostumbrados a orientarse en la naturaleza.
Es un valle con muchas subidas y bajadas en el que se pueden encontrar pequeños tenderetes en los que comprar agua y reponer fuerzas.
El atardecer tampoco está nada mal.
Swords Valley. Fue el primero que recorrimos y nuestro primer atardecer en Capadocia, yo estaba hasta nervioso.
Es un valle un poco más abierto que los anteriores pero no por ello menos espectacular. Su sendero comienza desde el parking del Open Air Museum de Göreme y llega prácticamente hasta Çavusin.
Se pueden encontrar algunas casas excavadas en las rocas con ventanas y miradores espectaculares sobre el valle.
Love Valley. El valle del amor esconde unas formas un tanto eróticas, de ahí el nombre. Nosotros visitamos solamente uno de sus miradores sobre el valle durante la actividad en la que alquilamos el quad.
Pigeon Valley. El valle de las palomas es el valle a mayor altura de la región. Comienza en Üchisar y va bajando hasta Göreme.
Os recomiendo hacerlo en este sentido y así vas caminando cuesta abajo. Es un valle diferente, con muchas huertas y árboles frutales en su primera parte y con mucha más vegetación que el resto.
Existen muchos otros valles para recorrer, pero al final hay que elegir. Este ha sido nuestro recorrido por Turquía durante 12 días. Un país que nos ha sorprendido y del que me quedo con ganas de tener más tiempo para seguir descubriéndolo.
Güle güle!

Tal y como bajamos del bus nos colocamos en la carretera en dirección a Çavusin dispuestos a hacer autostop y la segunda o tercera furgoneta que pasa nos lleva gratis. Esto nos sirvió para perder la vergüenza y el miedo a hacer dedo, algo que nos vino genial para los próximos días.

En total pasamos 4 días en la Capadocia recorriendo varios pueblos y algunos valles por los que hemos hecho pequeñas rutas de senderismo.
Çavusin
Los dos primeros días en la Capadocia nos alojamos en Seki Cave Çavusin, un hotelazo por 54€ la noche.

Quedarse en este pequeño pueblo a 4 km de Göreme tiene muchas ventajas. El principal punto a favor es que desde este pueblo se tienen una de las mejores vistas para disfrutar de los globos al amanecer.


Ya sea desde la terraza del hotel o sobre Rose Valley, a 5 minutos caminando, las vistas son increíbles. El pueblo cuenta con una peculiar fortaleza medio derruida desde la que también se divisan unas grandes vistas.

Es una buena base para realizar rutas por los diferentes valles de la Capadocia ya que muchos senderos se encuentran entre Göreme y Çavusin. Sin embargo para movernos hasta los demás pueblos es un poco más difícil desde Çavusin porque no está muy bien comunicado. Nosotros hicimos autostop desde la carretera principal y siempre nos pararon muy rápido, aunque se pueden tomar taxis. Un último consejo para el que venga hasta aquí es que vaya a cenar a Seyyah Han, el restaurante es precioso y nos dejó con la boca abierta.
Göreme
Sin duda, el pueblo más conocido de toda la Capadocia, en él existen multitud de bares, restaurantes, agencias de viajes y todo lo necesario para organizar unos días por la zona. Es un pueblo muy bonito y con mucho ambiente.

Caminando se llega a los valles más populares para realizar rutas de senderismo y a menos de 1km se encuentra el Open Air Museum de Göreme. Nosotros lo visitamos en nuestra primera tarde y visto todo lo que vimos después quizás no lo veo imprescindible. De las 9 Iglesias que se visitan sólo un par de ellas me resultaron realmente sorprendentes y hay tantos turistas que es complicado disfrutarlas.

En los diferentes valles que recorrimos encontramos algunas iglesias medio abandonadas quizás menos impresionantes pero en las que puedes sentarte y disfrutar en solitario de lo que tienes en frente.
Ortahisar
Llegamos hasta aquí haciendo autostop desde el viewpoint de Red Valley. Una joven pareja turca nos acercó hasta el cruce de la carretera que da acceso al pueblo. La chica iba súper contenta de llevarnos en el coche y se sorprendió un montón al vernos hablar algunas palabras en turco, se partía de risa. El poderoso castillo de Ortahisar sobresale como un rascacielos de roca.

Alrededor de él hay unas cuantas calles con casas de piedra que tienen mucho encanto.

Cerca de la entrada al castillo nos encontramos con un taller artesano que trabaja el ónix, una piedra parecida al mármol con diferentes tonos y caprichosas betas.
Derinkuyu
Es un pequeño pueblo rural un poco más alejado de los valles más conocidos de la zona en el que se encuentra una de las ciudades subterráneas más profundas de la Capadocia. La visita a mí me defraudó un poco, quizás esperaba otra cosa, no tomamos audio guía y creo que aquí se hace imprescindible porque no tenía ni idea de lo que estaba viendo.

El pueblo en sí no tiene mucho más que ofrecer, aunque nosotros nos lo montamos bastante bien. Nos compramos un par de cervezas por 6 liras en el supermercado y durum para llevar y preparamos un buen picnic en un merendero que vimos por el centro del pueblo. Creo que la ciudad subterránea de Kaymakli es más interesante por lo que nos comentaron algunas personas que habían visitado las dos.
Üchisar
Para mí el pueblo más bonito de todos los que vimos por los alrededores. Las calles cercanas al gran castillo tienen un encanto único. Sus chimeneas de hadas son la antesala de las dos grandes torres que forman la fortaleza de Üchisar.

Las vistas desde las azoteas de las casas son impresionantes, desde ella se ven todos los valles de la Capadocia.

Ver como se ilumina el castillo con los últimos rayos del sol debería ser obligatorio para todo el que pase por la zona.

Hay mucha oferta hotelera y de restaurantes, aunque si vas buscando hacer rutas de senderismo Göreme o Çavusin están mejor situados. Nosotros hicimos la ruta que baja por el Valle de las Palomas y terminamos en un mirador natural viendo atardecer sobre Üchisar.

Un restaurante que nos encantó fue Muhterif, impresionante y muy económico. Cenamos por unos 14€ los dos.

Uno de los grandes atractivos de la Capadocia es realizar un vuelo en globo, nosotros no lo hicimos porque el precio se nos iba de nuestro presupuesto, pero igualmente se puede disfrutar de este entorno de muchas otras formas. Uno de los días hicimos una ruta en quad muy divertida, dos horas nos costaron 150 liras, unos 25€.

Pero para mí una de las mejores formas de descubrir estos valles es caminando y perdiéndote por este laberinto de roca. A continuación os hablo un poco de los valles que hemos recogido.

Rose Valley. Un precioso valle que se convierte un auténtico laberinto de suaves formas en el que es complicado seguir una ruta fija ya que hay multitud de senderos.

Hay un camino muy cómodo que parte de Çavusin y va rodeando la parte más alta del valle desde el que se tienen buenas panorámicas.
Red Valley. Uno de los valles más populares de la Capadocia en el que se encuentran varias iglesias excavadas en las rocas. Ninguna es fácil de encontrar aunque este valle quizás sea el que está mejor señalizado.

Al final es cuestión de ir probando caminos o de contratar un buen guía para los que no estén muy acostumbrados a orientarse en la naturaleza.

Es un valle con muchas subidas y bajadas en el que se pueden encontrar pequeños tenderetes en los que comprar agua y reponer fuerzas.

El atardecer tampoco está nada mal.
Swords Valley. Fue el primero que recorrimos y nuestro primer atardecer en Capadocia, yo estaba hasta nervioso.

Es un valle un poco más abierto que los anteriores pero no por ello menos espectacular. Su sendero comienza desde el parking del Open Air Museum de Göreme y llega prácticamente hasta Çavusin.

Se pueden encontrar algunas casas excavadas en las rocas con ventanas y miradores espectaculares sobre el valle.
Love Valley. El valle del amor esconde unas formas un tanto eróticas, de ahí el nombre. Nosotros visitamos solamente uno de sus miradores sobre el valle durante la actividad en la que alquilamos el quad.

Pigeon Valley. El valle de las palomas es el valle a mayor altura de la región. Comienza en Üchisar y va bajando hasta Göreme.


Os recomiendo hacerlo en este sentido y así vas caminando cuesta abajo. Es un valle diferente, con muchas huertas y árboles frutales en su primera parte y con mucha más vegetación que el resto.

Existen muchos otros valles para recorrer, pero al final hay que elegir. Este ha sido nuestro recorrido por Turquía durante 12 días. Un país que nos ha sorprendido y del que me quedo con ganas de tener más tiempo para seguir descubriéndolo.

Güle güle!