' S HERTOGENBOSCH
Aparco en el aparcamiento mas cercano al centro, y en un breve paseo lo alcanzo.
Se llega al Markt, o plaza del mercado, muy grande, pero con poco atractivo más. Unas cuantas casas antiguas y ya. Por Himmamerstraat, la que parece calle principal de la población, tomando un desvío a la derecha enseguida se está en la Catedral ( Sint Janskathedraal ), gótico flamígero, enorme y esplendorosa, en el exterior

ya se observa una gran profusión de estatuas, muchas colocadas en los arbotantes. No pude localizar la famosa del ángel con el teléfono movil - producto de una restauración reciente - . Está muy restaurada, se aprecian muy bien las partes renovadas.
El interior supera el exterior.

Tiene 5 naves y 150 pilares decorados con estatuas, algo poco común por estas latitudes. Y sobre todo destacan las vidrieras

bellísimas, muy clásicas , luminosas y con escenas muy reconocibles.
También merece la pena fijarse en el falso órgano y el púlpito, de madera tallada.
Un extraordinario templo, de los mejores que he visto nunca. No tiene la sobriedad que caracteriza a los protestantes, ni tampoco la exhuberancia decorativa, a veces rayando en el exceso, de los mediterráneos. Muy elegante y señorial.
Volviendo a la Himmerstraat, no se tarda en llegar al Jheronimus Bosch Art Center ( 10 € ),

situado en una iglesia fuera de uso. Dedicado a El Bosco, no tiene ninguna obra original suya, pero sí reproducciones de las mismas a tamaño natural , con textos sobre ellas ( en español, hay que pedirlo ). En el exterior hay una simpática estatua alusiva a su mundo.

Y esto es lo que dá de sí la ciudad. Me pareció algo anodina, con escasos atractivos, aparte de la catedral.
De aquí me dirigí al aeropuerto de Eindhoven, está a unos 15 kms, para coger el vuelo de vuelta.