Empieza a amanecer entrando en el puerto de Cagliari, son las 6:50






Es nuestra primera vez en esta ciudad y poco he mirado de la escala, sé, más o menos los puntos de interés y de que para llegar a la Catedral hay que subir arriba del todo

Cagliari fue la capital del Reino de Cerdeña desde 1324 hasta 1720, cuando fue sustituida por la ciudad de Turín. Conocida por su diversa arquitectura art nouveau, es el centro económico e industrial de Cerdeña, ya que tiene uno de los puertos más importantes del mar Mediterráneo y un aeropuerto internacional. Tiene una gran necrópolis de la época de Cartago, un anfiteatro de la época romana, una basílica bizantina, dos torres del tiempo de la República de Pisa y un sistema de fortificaciones de los tiempos en los que la ciudad era el centro del Imperio español de los Habsburgo en aguas mediterráneas. Su historia es larga, ya que está habitada desde el neolítico, pero eso es mejor que cada uno se informe, ya que sería muy extenso poner toda su historia, ni siquiera resumida

Son las 9:15 cuando iniciamos nuestra visita turística, pasando al lado del Ayuntamiento y cogiendo la Vía Largo Carlo Felice, con su estatua en la plaza




Posteriormente cogemos las Escaleras de Santa Clara (Scalette di Santa Chiara) y ya vemos las murallas de la fortaleza con su Torre del Elefante, cerrada








Vamos callejeando en subida hasta llegar frente a la Catedral, Cattedrale di Santa Maria Assunta e Santa Cecilia



Construida durante el siglo XIII en estilo románico pisano, fue elevada al rango de catedral en 1258. Cuando Cagliari fue capital del reino de Cerdeña, ahí prestaban juramento los representantes de los tres stamenti (brazos del parlamento sardo). Durante el siglo XVII, se decidió transformar el templo en un nuevo estilo, el barroco. La actual fachada neorrománica es de 1933, inspirada en la fachada de la catedral de Pisa. El interior de la iglesia, de planta de cruz latina, tiene tres naves con transepto y capillas laterales, tres encuentran en cada una de las naves laterales, y cuatro en el transepto. El pavimento, reconstruido en 1956 de acuerdo al diseño original del siglo XVII, es de taracea de mármol policromada. En la bóveda de la nave central hay frescos que representan La exaltación de la cruz, las historias de la difusión de la fé en Cerdeña y La piedad, de Filippo Figari (1885-1975).




A los lados del portal central hay dos púlpitos tallados en mármol, derivados de un único original de mediados del S. XII, el púlpito del Maestro Guglielmo. Durante la reconstrucción de la catedral en 1669 el púlpito de Guglielmo fue intervenido drásticamente y dividido en dos púlpitos. Estos fueron colocados desde entonces en su emplazamiento actual. Antes de ser mutilado, el púlpito estaba sostenido por siete columnas, cuatro de ellas colocadas sobre esculturas de leones, las cuales están ahora al pie del presbiterio.






El mausoleo de Martín el Joven, en honor de Martín II de Aragón (1374-1409), muerto durante la conquista de Cerdeña en 1409. El autor del mausoleo, inspirado en el barroco ligur-piamontés, fue Giulio Aprile, quien trabajó en él entre 1676 y 1680, si bien los restos de Martín fueron transportados ahí en 1689. En la parte inferior hay estatuas de guerreros y dos ángeles que sostienen un escudo; al centro el blasón del rey de Aragón y una inscripción con la fecha de su fallecimiento. Arriba, detrás de dos estatuas de leones, está la urna con los restos de Martín y la estatua del rey, así como otras estatuas que representan a la muerte, la justicia y la fé.

La cripta visitable es la del Santuario de los Mártires, excavado en roca debajo del presbiterio por orden del arzobispo Esquivel a inicios del siglo XVII e inaugurado en 1618. Debe su nombre a que contiene 179 nichos con presuntas reliquias de innumerables santos halladas en varios cementerios paleocristianos de Cagliari. El santuario consiste de tres capillas, llamadas de la Virgen de los Mártires, de San Lucifer y de San Saturnino, una mezcla de estilos barroco, renacentista y neoclásico, que están por completo revestidas de mármol y sirven también de sepulcro de algunos miembros de la Casa de Saboya, reinante en Cerdeña entre 1730 y 1861.









Después de descansar un rato sentada en un banco, comiendo un poco porque tenía la glucosa baja, salimos de la Catedral, fuimos a ver la iglesia que hay saliendo a la izquierda, es una pequeña capilla, la Chiesa della Speranza, desde 2011 se le concede el uso temporal a la Iglesia Ortodoxa del Patriarcado de Moscú. Fue la capilla noble de la noble familia Aymerich, marqueses de Laconi, o se sabe la fecha de su construcción, entre los S. XV y XVI.


Seguimos nuestro camino pasando por delante de la Catedral y del Palacio Regio, S.XVIII, vamos camino de la Torre de San Pancracio, disfrutando de las vistas de la zona




Vemos la Torre, en su parte posterior, tampoco se puede visitar, está cerrada



Traspasamos la puerta del Arsenale para llegar al Museo Arqueológico. En la zona al norte de la colina sobre la que se erige el barrio de Castello, se encuentra el llamado Baluarte de los Museos, la agrupación de museos de Cagliari: El Museo Arqueológico, recientemente enriquecido con los Gigantes de Mont'e Prama encontrados en las excavaciones arqueológicas de Cabras; la Pinacoteca Nacional que alberga pinturas de artistas sardos desde el siglo XVI al XX, obras de los siglos XV-XVIII de la escuela de Génova, de Nápoles y de Roma y mucho más; el Museo de ceras anatómicas Clemente Susini, que alberga una de las colecciones más interesantes de ceras anatómicas existentes en el mundo y el Museo municipal de arte Siamese (MAS) dedicado al coleccionista de Cagliari, Stefano Cardu.


Nosotros nos centraremos en el estupendo Museo Arqueológico







Es un Museo moderno, agradable, con unas piezas muy interesantes, aunque con las explicaciones en italiano e inglés




















Nos encantó el Museo, pero estaba muy cansada, así que salimos del Museo, dando de nuevo las gracias a la persona de que nos dio las entradas y salimos del recinto, ahora queremos llegar hasta el Anfiteatro Romano, salimos a la derecha, atravesando la Porta Cristina, en el puerto vemos la popa de nuestro barquito, el resto queda tapado por el NCL Scape



Seguimos nuestro camino por Via Buon Cammino, nunca mejor dicho







Aquí podemos ver cómo los greco-romanos construían sus teatros y anfiteatros en las laderas de una montaña, trabajando los peldaños de las gradas en la propia roca







Volvemos por donde hemos venido, pasando de nuevo delante de la Catedral, pero por la calle inferior, Vía Nicoló Canelles


Toda la calle recta y en bajada llegamos al Bastión de San Remy por su parte alta, el mirador





Es un lugar muy bonito, con vistas a la ciudad baja y el mar, aunque han puesto una cristalera para evitar caídas y los cristales están llenos de grafitis y rayados, lo que impide muchas veces una buena visión, sin no eres muy alta, como es el caso




Ya son las 13 horas y estoy bastante cansada, así que vamos ya hacia el bus que no lleve de vuelta al barco, no sin antes hacer alguna compra de recuerdos y algún dulce


Comimos algo en el bufet y me voy a descansar un rato, a las 16:15 la ciudad tiene un bonito tono anaranjado al atardecer y poco después nos despedimos de Cagliari



Hoy volvemos al teatro, veremos Intimate Broadway Cabaret, sobre canciones de musicales de Broadway, aunque la mayoría son poco conocidas para nosotros y sólo nos venimos arriba con Mamma Mia






Echamos de menos algo más elaborado, más tipo Broadway, con decorados y vestuario acorde, que es lo que yo me esperaba

Punto final para este precioso día, me ha encantado todo lo que vi y quedó mucho paseo por Cagliari


