El Beso de Klimt, el soberbio Kunsthistorisches Museum y el Prater ✏️ Diarios de Viajes de Europa Central

---

Martes 10 de diciembre, hoy tengo reservada la entrada al Palacio Belvedere, el del mercadillo navideño que vimos anteayer, quiero ver el icónico y archifamoso Beso de Gustav Klimt, un óleo con laminas de oro y estaño, obra maestra del Simbolismo; para eso tengo cogido a primera hora, las 9am, y allí estoy en otra gélida mañana vienesa, el primero en la cola del palacio:

Entro puntualmente a las 9am y, al ir sin mochila ni nada, voy directamente a la sala del primer piso donde está El Beso, del cual puedo disfrutar en completa soledad durante unos 5 minutos que tardan en llegar los siguientes, haciéndonos fotos entre nosotros:

El uso por Klimt de la hoja de oro se inspiró en un viaje que había hecho a Italia en 1903, cuando visitó Rávena y vio los mosaicos bizantinos de la iglesia de San Vital, estuve el año pasado y son impresionantes. Para Klimt la planitud de los mosaicos, su falta de perspectiva y profundidad sólo mejoraban el brillo del oro, y él comenzó a hacer un uso sin precedentes de la hoja de oro y plata en su propia obra.

Maravilloso, ya llega la marabunta, me voy a ver el resto del museo, con más obras de Klimt, como la también famosa Judith con la cabeza de Holofernes, a diferencia de otros cuadros clásicos con la misma temática, aquí la protagonista absoluta es ella, y su gesto de “éxtasis”, huyendo de sangrientos escenarios como han hecho muchos otros autores, Caravaggio, Artemisia Gentileschi etc, que no es que sean peores, sino diferentes:



Me encuentro de pronto con una de las 5 versiones de “Napoleón cruzando los Alpes”, de Jacques-Louis David, una grata sorpresa inesperada:
Podemos leer el nombre de otros ilustres "cruzadores de los Alpes" junto al de Bonaparte, como Aníbal o Carlo Magno, fue un cuadro de propaganda básicamente, ya que la realidad fue muy distinta, los cruzó llevado por un guía y a lomos de una mula

Salgo encantado, me llevo un buen recuerdo en forma de puzzle:

con tiempo para coger el tranvía que me acerque al Kunsthistorisches, el Museo de Historia de Viena, que le tengo muchas ganas y cuyo libro de museos del mundo tengo por aquí, del cual he ido apuntando cuadros que tengo que ver sí o sí:
Nada más llegar el Teseo luchando contra el Centauro, de Antonio Cánova me recibe en las escaleras, así como los frescos pintados por Klimt

Tengo sacada la entrada para las 10:30, para ver la exposición de “Rembrandt – Hoogstraten Color and Illusion”, que es fabulosa, magos de la perspectiva y del engaño:

Además hay cuadros de Rembrandt del Museo del Prado o de la Colección Leyden de New York, Judith, Minerva, Saskia que aquí puedo fotografiar (si bien un vigilante de mis años más o menos me dice que el de NY no se puede, cierto lo pone la cartela, pero que "él no puede evitar que la gente haga fotos cuando esta haciendo la ronda" , muy majo el tipo)

La Judith del Museo del Prado, momentos antes de emborrachar y decapitar al pardillo de Holofernes

Después continúo con el resto del museo, es impresionante, sobre todo uno que le tenía muchas ganas, El Arte de la Pintura, pintado por Johannes Vermeer en 1666, y que fue uno de los que no vinieron a la gran exposición del pintor en Amsterdam en 2023:


El combate entre don Carnal y doña Cuaresma, 1559,



La torre de Babel, 1563....espectacular es poco, que tranquilo y confiado se ve caminando a Nimrod sin saber que su orgullo será castigado y dará lugar a las escuelas de idiomas




Otros menos conocidos pero igualmente magníficos, como este Antonio Pereda y la "Alegoría de la Vanidad, 1634":






Es un tema recurrente en la historia de la pintura, tanto éste como Salomé con la cabeza del bautista, como podemos apreciar, de izq a dcha, Bernardino Luini, Cesare da Sesto y Andrea Solario, los tres con Salomé y la cabeza de San Juan el bautista:







El Martirio de los 10.000 cristianos, 1508, donde Durero se autorretrató con un cartel que dice: "Está obra fue realizada en el año 1508 por Alberto Durero, alemán"








Guercino y su Juan el Bautista, 1651, y Bronzino con la Sagrada Familia, 1540.

Parmigianino, con el estupendo "La conversión de San Pablo", 1527, y su "Autorretrato en un espejo convexo", 1520, una de las obras más representativas del Manierismo:

La pequeña sala con Andrea Mantegna y uno de sus 3 "San Sebastián", el que me faltaba por ver tras el del Louvre y el Ca' d'Oro veneciano:


El cuadro de los 3 filósofos, 1509, que algunos identifican como una alegoría de las tres edades del hombre, ya había tenido ocasión de admirarlo en Nueva York, en la exposición "Bellini y Giorgione en la Casa de Taddeo Contarini" de la Frick Madison, en Noviembre 2023 (por aquí anda el diario > Museos New York)

Joachin Patinir y sus maravillosos azules, con El bautismo de Cristo y el Martirio de Stª Catalina, ambos de 1515.


No me puedo ir sin bajar a la planta baja y acceder a la Kunstkammer, la zona donde está el magnífico Salero de Benvenuto Cellini, el mejor orfebre de su tiempo, hecho en 1543 para Francisco I de Francia con marfil, oro y esmalte y que representa a Neptuno, que protege la sal pues viene del mar, y a Ceres, diosa de la agricultura, las cosechas y la fecundidad, la Tierra, pues de allí se obtiene la pimienta.

Es otra de esas obras maestras que fue robada y estuvo años desaparecida, con intentos de cobrar rescate, pruebas de vida (el tridente de Neptuno) y al final un arañazo en el pecho de Ceres como mal menor:









El Hipopótamo azul, de cerámica tipo fayenza (cuarzo en polvo cubierto con revestimiento vítreo) .siempre me ha llamado la atención cuando lo he visto en redes sociales







Salgo y enfrente tengo en Palacio Imperial de Hofburg , con su correspondiente mercadillo navideño, como no

Voy caminando 10 minutos hasta la Karlsplatz para coger el metro y me vuelvo al apartamento, pasando delante de la Opera de Viena de nuevo:
Hay muchos coches clásicos para alquilar y hacer un tour por la ciudad.

El puzzle ha gustado , son las 13:30, comernos juntos, ellos han estado con la madre mirando tiendas de chinos y el mercadillo cerca del apartamento, a veces hay mejores precios por aquí, alejados de las zonas más turísticas.

A las 15:30 nos vamos de nuevo en la linea 1, Leopoldau, hasta la propia parada del Parque de atracciones, Praterstern, nuevamente lo complicado es acertar con la salida correcta del metro
El parque es enorme, tipo Eurodisney, su origen se remonta a 1766, el más antiguo del mundo, y es aquí donde se ubica su famosa noria gigante, de 60 metros de altura, protagonista de películas como El tercer hombre.

Va oscureciendo, el parque se llena de luces, vamos montando en diferentes atracciones, incluso las típicas canastas

Montañas rusas, casas del terror (algunas no son para niños y otras con animatronics de estos arcaicos que más que miedo dan risa )



Vemos llegar a Papá Noel en un gran camión rojo(Coca cola )

Recogemos parte del parte, es muy grande, con atracciones de agua, imagino que en verano este totalmente abierto:

Tengo sacadas entradas para subir a la icónica noria, la más antigua del mundo como dije antes, asi que nos vemos y hacemos una cola de diez minutos:
Tarda unos 15 minutos en dar la vuelta completa, disfrutamos de la experiencia pero tampoco es algo que no puedan dejar de hacer.


Paramos a tomar un chocolate, cafés y postres de chocolate y al salir aun montan en la atracción de los asientos giratorios:

El parque me ha sorprendido por lo grande es, hemos pasado una tarde muy chula con los peques (y nos hemos dejado 60€ por lo menos )

Sobre las 19:30 nos volvemos al piso, misma linea 1 pero sentido inverso, que ya hace frío; cenamos, recogemos todo, hacemos maleta y mochilas y prontito a la cama que mañana cogemos el tren a Praga

---