Hoy nos tocaba descubrir Kaunas, la segunda ciudad más grande de Lituania, situada a unos 100 km de Vilnius. Para el trayecto, utilizamos los autobuses de la compañía Kautra, con un coste de 45€ ida y vuelta para los cuatro.
Salimos a las 9:30 desde la estación de autobuses de Vilnius, ubicada a 500 metros de nuestro apartamento, y tras 1 hora y 30 minutos de viaje, llegamos a Kaunas, listos para explorar.
Recorriendo Kaunas.
Nuestra primera parada fue la Iglesia de San Miguel Arcángel, situada en la plaza principal de la ciudad. Esta iglesia, construida entre 1891 y 1895, es un claro ejemplo de la arquitectura neobizantina de la época. Originalmente destinada a la comunidad católica, en tiempos soviéticos se utilizó como iglesia ortodoxa, pero después de la independencia de Lituania volvió a ser un templo católico. Es un importante lugar de culto y simboliza el renacer religioso de la ciudad tras el periodo soviético.

Desde allí, continuamos hasta la Iglesia del Cristo de la Resurrección, una de las más grandes y modernas de Lituania. Esta iglesia fue construida en el siglo XX durante el periodo de independencia entre 1929 y 1932, y destaca por su austero estilo arquitectónico y su impresionante mirador panorámico. Subir a su torre te permite disfrutar de unas vistas espectaculares de Kaunas y sus alrededores. Es también uno de los símbolos de la ciudad y un punto clave en la cultura religiosa y urbana de la región.

Bajamos hacia el centro de la ciudad recorriendo el Bulevar de la Libertad (Laisvės alėja), que es una de las calles peatonales más largas de Europa, extendiéndose por más de 1,6 km. Esta arteria es famosa por sus edificios art déco y su ambiente vibrante, con numerosas tiendas, cafés y restaurantes que ofrecen una excelente mezcla de lo moderno y lo histórico. El bulevar es el centro social de la ciudad y se considera uno de los lugares más emblemáticos de Kaunas, donde locales y turistas disfrutan de paseos, compras y actividades al aire libre.

Aprovechamos para hacer una pausa y comer en uno de los muchos restaurantes de la zona.
Tarde de Historia y Vistas
Con energías renovadas, nos dirigimos a la Catedral de San Pedro y San Pablo, uno de los templos católicos más importantes de Kaunas. La iglesia, de estilo gótico tardío, fue construida en el siglo XV y es conocida por su atmósfera tranquila y su impresionante interior, que contiene varios altares y detalles artísticos que reflejan la historia de la ciudad. Es un lugar de culto significativo y representa el patrimonio religioso de Kaunas a lo largo de los siglos.


A pocos metros de la catedral se encuentra el Castillo de Kaunas, una fortaleza medieval construida en el siglo XIV y uno de los principales monumentos históricos de la ciudad. Aunque actualmente se encuentra parcialmente restaurado, el castillo ha sido testigo de la historia militar y política de la región. En el área circundante se encuentra una gran zona verde que incluye espacios recreativos y deportivos, lo que lo convierte en un lugar ideal para pasear y relajarse mientras disfrutamos del entorno.

En la Plaza del Ayuntamiento se agrupan varios edificios históricos que cuentan la historia de Kaunas y Lituania.
Es el corazón de Kaunas, un lugar lleno de historia, donde se celebran numerosos eventos y festivales a lo largo del año.

Iglesia de San Francisco Javier, construida en el siglo XVII, es un templo barroco muy pintoresco.

Casa de Perkūnas, un edificio gótico renacentista que originalmente fue la casa de comercio de los mercaderes de Kaunas, y actualmente alberga un museo.

Iglesia de Vytautas el Grande, dedicada al gran duque de Lituania, Vytautas el Grande, quien desempeñó un papel clave en la expansión del Gran Ducado de Lituania.

Para cerrar nuestra visita a Kaunas, cruzamos el puente sobre el río Nemunas y subimos hasta el Observatorio de Aleksotas, que es uno de los mejores miradores de la ciudad. Desde allí, disfrutamos de unas vistas panorámicas que ofrecen una perspectiva única de Kaunas. Aunque nosotros subimos a pie, también se puede tomar el antiguo funicular para llegar hasta la cima.

Como todavía quedaban unas horas para nuestro autobús de regreso (salía a las 19:00), decidimos hacer una última parada en el centro comercial Akropolis, uno de los centros comerciales más grandes de Lituania. Para llegar más rápido, cogimos un Uber.
Después de un rato paseando y descansando, volvimos a la estación de autobuses para tomar nuestro bus de regreso a Vilnius.