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Miércoles 16 de abril de 2025
Hoy es nuestro último día en Suzhou, esta noche dormiremos en Shanghai, en un hotel cerca de Disneyland.
Suzhou es conocida por sus jardines tradicionales, y todavía no hemos visitado ninguno.
Hay demasiados para poder visitarlos todos, pero el que según internet parece imprescindible es el Jardín del Administrador Humilde.
Como es tan famoso, para evitar las multitudes, vamos bien prontito, a las 9 de la mañana. Ya está a reventar.
Abren a las 7:30, tendríamos que haber madrugado más.
La entrada cuesta 90 yuanes, es decir, casi 11€. La extensión es de más de 5 hectáreas y tiene más de veinte pabellones o salones.
El mapa de la entrada sugiere una ruta definida pero luego es una maraña de caminos, visitantes y móviles en modo cámara.
Los árboles están de un verde vibrante, sus hojas crean juegos de luces y sombras en el reflejo del lago. Los bonsáis de ciruelos chinos, azaleas y cerezos están en floración.
Cada pabellón o salón muestra el mobiliario, distribución y decoración tradicional.
Estamos aproximadamente una hora.
Muy cerca se encuentra la Beisi Pagoda, de madera y ladrillo, con nueve pisos de alto, que destaca a través de los edificios modernos de la ciudad. Se puede explorar libremente, aunque no se puede subir.
La siguiente visita del día será el Lingering Garden, otro de los llamados “imprescindibles” de Suzhou.
Pero primero, paramos a comer en un sencillo sitio de noodles justo al lado. Una ración generosa y rica por dos euritos de nada.
La entrada al Jardin Liuyuan, o Lingering, cuesta 55 yuanes, unos 6,60€, es más pequeño (menos de la mitad de tamaño que el anterior) pero probablemente más bonito.
Por suerte aquí hay menos gente.
Además, sus interiores son más lujosos e intrincados.
Y en su jardín combina la vegetación cuidada al máximo detalle con formaciones de rocas de extrañas formas. Su recorrido es más laberíntico y divertido para explorar.
Aquí estamos alrededor de una hora.
Nos sobra un poco de tiempo antes de ir a tomar el tren, así que de camino al hotel paramos a visitar la Villa Huanxiu, o Mountain Villa of Embracing Beauty.
Otra residencia privada clásica con jardín. Esta es de dimensiones mucho más modestas, y por tanto, tanto el precio de la entrada como la cantidad de visitantes es drásticamente inferior a los anteriores jardines.
Ahora ya vamos al hotel a recoger el equipaje, nos dirigimos a la estación de tren, en media hora estaremos en la estación Shanghai Hongqiao y luego nos quedará más de una hora de trayecto para llegar al hotel de esta noche, el Hotel Novotel Clover.
Las tres noches han costado 260€ la habitación doble, sin desayuno.
Hemos elegido este hotel por su cercanía al parque Disneyland, que visitaremos los próximos días.
Está muy bien comunicado con el parque, a tan solo una parada de metro, además de ofrecer un servicio de shuttle gratuito entre el hotel y el parque.Nos hemos aprovisionado de cena y snacks para los próximos días en un Lawson cercano, estos supermercados de conveniencia que descubrimos en Japón.
Otras fotos del día:
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