
Hay dos capillas, la de los Príncipes(iniciada por Cosme I en 1.604), la más grande y que está en restauración: la cúpula tiene frescos y altares laterales con mausoleos de grandes duques de la Toscana. Es un lugar muy bonito; incluso el pavimento es bonito y tiene los escudos de los seis Médici enterrados. También hay expositores de cristal con objetos de la familia y una sala con relicarios, báculos y mitra de Leon X; y la Sacristía Nueva, de cúpula más baja y con linterna, donde está el sepulcro de Lorenzo, duque de Urbino y sobrino de Leon X: su tumba tiene unas estatuas que representan el día y la noche; y el sepulcro de Giuliano, padre del anterior, duque de Nemours, hermano del papa Leon X e hijo de Lorenzo el Magnífico: en su tumba hay estatuas que representan la aurora y el crepúsculo. También están las tumbas de Lorenzo el Magnífico, muerto en 1492 y de su hermano Giuliano muerto en 1478. Antes estaban sepultados en la sacristía vieja y los trasladaron aquí en 1559. Vasari puso en esta tumba las figuras de “Madonna con el hijo” de Miguel Angel y las estatuas de los santos Cosme y Damián, santos protectores de la familia Médici. Miguel Angel no pudo acabar esta sacristía, puesto que se fue a Roma en 1534. Buscad los tenues dibujos de Miguel Angel cerca del altar porque sino los buscáis,nada ni nadie los señalan.

De allí y sobre las 9:30, vamos al Palacio Médici-Riccardi esquivando la gran cantidad de vendedores de las tiendas. Las entradas 7 € adulto, 4 € niños. El primer diseño de este palacio lo hizo Brunelleschi, pero Cosme, según Vasari, lo desestimó, pues no quería crear envidias. Después parece ser que se arrepintió. En aquel momento se dirigió a Michelozzo que se inspiró en el estilo del primero. Aquí vivieron los Médici durante más de un siglo. La entrada conduce a un magnífico “cortile” (primer patio con esculturas donde estaba el David de Donatello, ahora en el museo Bargello) que se prolonga en un jardín interior (segundo patio); es en este patio donde se celebró el banquete nupcial de Lorenzo el Magnífico en 1469 . Del patio subimos a la capilla pequeña para ver la “procesión de los Reyes Magos” con frescos de Benozo Gozzoli (1459-1460). Es muy bonita(ya no sé las veces que he utilizado esta palabra en este viaje).Se basa en las comitivas que acudían al concilio de 1439, organizado para acercar la iglesia de Oriente a la de Occidente y al que vino el patriarca de Constantinopla. En un rincón está el escudo de los Médici: 7 bolas rojas en un campo de oro. Los Reyes Magos representan las edades del hombre:la juventud, la madurez y la vejez. Muchos de los Médici están representados, pero son los que van caminando detrás de los reyes: Cosme-que viste de morado- y su hijo Piero, detrás Lorenzo y Giuliano, hijos de Piero el gotoso. Más atrás,en cuarta fila,el papa Pío II- Piccolomini-, con cara de enfadado, seguramente por haberlo puesto allí detrás. También están representados: Segismundo Malatesta, Juan VII: emperador de Constantinopla, el mismo pintor: Benozzo Gozzoli y su maestro el beato Angélico. Todo esto lo sabemos pues hay una sala en el claustro donde entras a una aula virtual sobre la pintura(atención); te pones de pie en un lugar determinado y con la mano señalas(como si usaras un puntero) los cuadrados del mural de donde quieres sacar información. No estaba en español, pero sí en italiano, inglés y francés. También vimos antes de salir al patio la galería, donde en su bóveda se ve un fresco de Luca Giordano, “el Apoteosis de los Médici "(1682-83).
Después vamos a visitar San Lorenzo: la iglesia, el museo y la biblioteca. Las entradas de la iglesia y el museo 3,5 € por adulto, los niños no pagan. La entrada en la biblioteca: 2,5 € por adulto, los niños tampoco pagan. Era la iglesia de los Médici.En 1.419 fue totalmente reconstruida por Brunelleschi .El exterior está desnudo, no se sabe el porqué; parece que Miguel Angel presentó bocetos para su finalización pero no se llegaron a culminar. La estatua que está fuera en un rincón de la plazoleta es de Baccio Bandinelli y representa al caudillo “Giovanni dalle Bande Nere (1540)” padre de Cosme I(no confundir con Cosme el Viejo); antes estaba dentro de la iglesia. El interior es de tres naves, divididas por columnas de estilo corintio. En sus techos aparece repetido el escudo de los Médici. En la pared lateral este y frente al púlpito, está representado el martirio de San Lorenzo (quemado en una parrilla) de Bronzino (1565-69). En la parte central, dos magníficos púlpitos de bronce hechos por Donatello al igual que las dos puertas de bronce cercanas al altar. A los pies del altar mayor, protegida por rejas metálicas, está la tumba de Cosme “el viejo”; sus padres: Giovanni di Bicci y Piccarda Bueri están sepultados en la Sacristía Vieja (tumba de Andrea Verrocchio); en la pared este, la tumba de Piero el Gotoso y Juan de Médici, hijos de Cosme. Bajando por el claustro al museo-cripta- está la tumba de Donatello.A la biblioteca, que se accede por el patio, se llega por una escalera diseñada por Miguel Angel y edificada por Ammannati en 1.559. El artesonado de la sala de lectura, los mismos pupitres y las listas de los manuscritos, son diseñados por el mismo Miguel Angel. Precioso.
De allí, sobre la una, nos vamos a Santa Maria Novella. En la plaza pentagonal, los obeliscos sobre tortugas de bronce, de Giambologna, son un recuerdo de las carreras de caballos, torneos y carreras de carros que se celebraban alrededor de la plaza. También está la loggia de San Paolo, donde bajo las arcadas se ponían los grandes dignatarios que presidían las celebraciones. En la Iglesia,destaca la fachada exterior de la iglesia del s. XV, donde en los extremos sobresalen dos instrumentos astronómicos: una esfera armilar y un cuadrante de mármol que daban indicaciones sobre el movimiento de la Tierra respecto al sol y señalaban con exactitud los equinoccios y solsticios(ojo;es muy curioso).Esta iglesia será la sede de la primera escuela pública de la ciudad. Destaca el púlpito de Brunelleschi, sobre la segunda columna y en medio de la nave, el crucifijo de Giotto. Era iglesia dominica al igual que Santa Croce (1572-74) por voluntad de Cosme I; y en el interior en la nave lateral izquierda, el fresco de “la Santísima Trinidad” de Massacio (1428) y obras de Ghirlandahio. Esta iglesia era la preferida por Miquel Angel. Su estilo es gótico con influencia oriental. Hay una capilla dedicada a Filippo Strozzi (banquero y patriarca de la familia) y rivales de los Médici con frescos de Filippo Lippi. En la capilla detrás del altar mayor, pintada por Ghirlandahio, está el sepulcro de Filippo Strozzi. En otra capilla está la familia Strozzi con frescos inspirados en la Divina Comedia. Parece ser que en esta capilla, Giovanni Boccaccio, sitúa a los siete jóvenes que deciden irse de Florencia huyendo de la peste en el primer capítulo del "Decameron”.


Instrumentos astronómicos en la fachada de Santa Maria Novella
En la capilla Gondi, la primera a la derecha del coro, hay un crucifijo que Brunelleschi hizo como respuesta al desafío lanzado por Donatello por haber criticado el suyo. La capilla del coro o capilla Tornabeconi, está decorada con frescos de Ghirlandahio que ilustran la vida de la Virgen y la vida de San Juan Bautista. Florencia y sus habitantes están representados con mucha precisión. Para entrar a la iglesia, hemos entrado por un claustro donde había tumbas de algunos nobles florentinos.
De allí, sobre la una, nos vamos a visitar la famosa farmacia Santa Maria Novella (se pueden hacer fotos). Fabrican sus productos a partir de fórmulas magistrales. Es cara,es muuuy cara. El techo tiene frescos y las estanterías son ojivales de madera. Al abrir la puerta de la calle ya notas un perfume absolutamente inenarrable. Es un lugar que se debe visitar. A las dos comimos en la plaza de Santa Maria Novella y nos vamos a la iglesia de Ognissanti (todos los santos) a buscar a Simonetta Vespucci. Son las tres y está cerrada por lo que debemos esperar hasta las cuatro que es cuando abren. La iglesia de Ognissanti antes formaba parte de un monasterio del s. XIII construido por monjes que se dedicaban a trabajar la lana. Una de las capillas se cedió a la familia Vespucci donde está representada toda la famíllia pintada por Ghirlandaio: un angelillo es Américo y el otro –izquierda- su hermano Marco.Vemos la tumba de Américo Vespucci( Américo era un agente de los Médici en España y fue en dos ocasiones a las Indias. Al aportar datos geográficos del continente le otorgaron el nombre del mismo

Después, vamos a visitar el cercano palacio Rucellai;la familia Rucellai se hizo rica al tener la exclusiva de un tinte que sólo se obtenía en Mallorca y se sacaba de un líquen rojo. La fachada es barroca (s. XVIII).
Pasamos por el puente alla carraia y justo enfrente, mi santa descubre una heladería del mismo nombre que el puente, barata y generosa en el helado;se tiene que visitar.Tiene que entrar en los circuitos de los visitantes de Florencia.A mí me toca una mezcla de crema fondente y nocciola que es chocolate negro y avellanas absolutamente espectacular, inolvidable

Tras entrar en la iglesia de la Trinità,paseamos por los callejones de Vía delle Terme donde hay un museo del calcio in costume y por Borgo Apostoli donde encontramos una jeringuilla abandonada como contrapunto a la belleza y la alegría que llevábamos acumuladas en el viaje. Accedemos a la Piazza della Signoria donde efectuamos el ritual familiar del baile del ornitorrinco(lo siento,eso sí que no lo explico) y nos vamos a cenar cruzando las calles de Condotta,Cerchi,Cimatori y Aligheri. En estos callejones transcurrió la niñez del gran Dante el cual conoció a Beatrice o Bice(su famosa musa) a los nueve años . A la temprana muerte de Beatrice,Dante le dedicó diversos versos,entre ellos los que rezan así:
Tanto gentile e tanto honesta pare
La donna mia quand’ella altrui saluta,
Ch’ogne lingua deven tremando muta,
E le occhi no la ardiscon di guardare.
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Tan gentil y honesta parece mi señora,
cuando a otros saluda,
Que toda lengua enmudece,
Y los ojos no osan mirarla.
Con estos versos en la memoria vamos hasta la Via Proconsolo donde buscamos y finalmente encontramos el recomendado Gusto Leo. Todo buenísimo;a la peque le toca unos spaghettis al ragú de carne mientras que la santa se pide una ribollita toscana,a Lludrigueta unos penne alla medicci y a mí unos spaghettis allo scoglio también recomendados y recomendables. De entrantes hemos pedido unos crostini variados(vale la pena el crostini a la toscana con foie de cacería).


spaghettis allo scoglio y ribollita toscana
Con la panza llena y descansados después de otro largo día , volvemos al hotel rodeando la querida catedral que ya nos es tan familiar.