De nuevo me voy de excursión, ésta vez pasamos por el desierto de Judea que está lleno de ramblas y cañones,es relativamente pequeño comparado con otros.Aquí no paramos,todo lo vimos desde el autocar,nos llevaron (para no variar) a una fábrica donde hacen todos los productos de cosmética del mar muerto,yo no compré nada,todo carísimo para mi bolsillo.






Ponemos rumbo al palacio de herodes en Massada,se encuentra en la cima del desierto de Judea.Aprovisionaros de agua porque hace un calor horroroso,tiene unas preciosas vistas hacia el mar muerto y Jordania.Para subir al palacio hay dos opciones,andando que debes de tardar más de media hora porque todo es cuesta arriba y cara al sol o bien en teleférico como hicimos nosotros,más cómodo y rápido.















Ya vamos bajando hacía el mar muerto para darnos un bañito,que ganitas después de tanta calor.Primero me bañé en una piscina con sal y de ahí a la playita a untarme con lodo y al agua patos a flotar....









Con penita pero con una gran satisfacción y relax de haber estado en uno de los mares más curiosos del mundo,nos vamos a las duchas para poner rumbo de nuevo a Tel Aviv y a descansar no sin antes ver de nuevo el atardecer que ésta vez me pilló en el autocar.

