Nos despertamos como ya es típico en nuestros viajes muy temprano, y nos acercamos con el coche, que está a 2 minutos del alojamiento a una boulangerie que ya había mirado yo por internet y que justo nos recomendó la chica del apartamento, abren muy prontito, asi que alla que vamos. Se puede aparcar genial, justo enfrente y que delicia al pasar, madre mia que mostrador, que delicatesen, no sabes ni donde mirar, ni que escoger, tiene todo una pinta, seria nuestro sitio diario para bajar a comprar el desayuno y subirlo al apartamento para desayunar en el. Además no es un sitio caro, o a mi no me lo parecio, y la calidad era suprema, todo lo que probamos y fue mucho, estaba todo buenísimo, sin desmerecer a lo de los mercadillos pero no es comparable con la calidad que puedes encontrar en una boulangerie. Aparte de los típicos croissants, las pain au chocolat, los eclair, y también probamos un dulce típico de esta zona en esta época navideña, los mannala, unos bollos con pepitas de chocolate o sin ellas, con forma de muñeco que estaban espectaculares, parece que los estoy saboreando ahora mismo, que recuerdos, lo que daría por comer ahora mismo cualquiera de estas riquísimas cosas que hacen por allí, porque es verdad que la repostería francesa es divina! www.boulangerie-rebert.fr/ ...eblenheim/. Esta es la boulangerie donde comprabamos el desayuno. Un espectáculo! Y al lado también hay una tienda enorme de quesos, para los mas ratoncitos!
Con nuestro desayuno, volvemos a casa para degustarlo y tras llenar y calentar la tripa para el frio que hace fuera, y como fue común en todos los días, lo primero del dia era mirar el tiempo para ir buscando huir de las lluvias, y el dia de hoy nos dice que parece que en Estrasburgo va a hacer bueno, asi que alla vamos.! Lo que si tenia claro que tenia que huir de las ciudades grandes en fin de semana, ya que se llenan a rabiar, de hecho, unos chicos que vimos mas tarde en colmar, nos dijeron que habían estado en sábado, y que no se podía literalmente ni andar. Como nuestra chica se agobia un poco con tanta gente, y previendo que habrá mucha, luego no fue tanta, la dejamos tan tranquila en su nueva casa, calentita y agusto. Aunque parece que lo típico de los gatos es que no les gusta salir de su casa y los cambios les estresan, a nuestra pequeña lucy, todo lo contrario, siempre que podemos viajamos con ella, y llegar a un sitio nuevo y descubrirle, meterse por todos los rincones, la vuelve loca, asi que sabemos que se queda tan tranquila en la casita. Desde donde estamos, tenemos casi una hora hasta Estrasburgo. Para aparcar lo mejor los p+r, parkings un poco mas afuera del centro, pero que está comunicado con tranvía, que además entra en el precio del parking. Todo el dia, 4.20€. Asi que genial, nos dirigimos al que ya conocemos de la otra vez, el p+r elsau. Estará como unos 5 kms del centro. Llegamos bastante temprano y aparcamos fenomenal, no hay apenas coche. El ticket del parking hay que llevárselo, para pagar se paga a la salida, pero como ese ticket es valido hasta para 7 personas para el tranvía de ida y vuelta al centro, hay que llevarle y validarle justo a la entrada del anden. La otra vez había dos líneas que te llevaban al centro, esta vez solo hay una, el tram b, la línea azul , hay que cogerla en dirección hoenheim gare para llegar al centro.


Seguimos andando para dirigirnos hacia un rincón de la ciudad, donde se encuentra la pastelería chez Christian, en la rue de l´outre, que aparte del escaparate de delicatesen que es espectacular, tiene una fachada adornada super bonita.

Y justo en la calle con la que hace esquina, al final nos encontramos con una de las plazas que mas nos gustaron, la plaza kleber con su abeto gigante de 30 metros, está adornado super bonito y es eeeeenorme….la plaza en si es muy bonita rodeada de edificios preciosos y toda la plaza la ocupa un mercadillo que empieza a abrir, a esta hora lo recorremos sin apenas gente, luego mas adelante volveremos cuando estén los puestos ya todos abiertos.




Desandamos nuestros pasos hasta la pastelería para por la otra calle llegar al pequeño mercado le carre d´or en la place du temple neuf, bajo su iglesia.


Y desde allí bajamos andando para acercarnos mas al centro por la famosa rue des orfebres, es una calle estrecha llena de tiendas y con unos adornos muy bonitos…







justo al final de esa calle nos cruza la rue des hallebardes de cucho cielo cuelgan lámparas de cristal de baccarat.

Y desde aquí desembocamos en la plaza de la catedral, es una catedral super bonita, a la que se puede entrar y subir a su tejado pero como nosotros lo hicimos ya en la otra ocasión, esta vez nos dedicamos a pasear por su mercadillo, lleno de puestos y de algarabía ya que ya está todo abierto. Un monton de puestos con artesanía, comida, regalos…puedes entretenerte horas si quieres mirando…y aquí empieza a acompañarnos por un momento la nieve que cae tímidamente ….los puestos rodean toda la catedral, y a sus espaldas el mercado aux poissons, con un tiovivo…




justo debajo esta el palace rohan, detrás del cual también hay otro mercadillo, el mercado de las delicias…donde puedes probar sus ricas pastas, como no, sus vinos y zumos calientes….otra cosa a lo mejor, pero de estos mercadillos con hambre no te vas, obviamente no deja de ser comida de mercadillo pero para matar el hambre está bastante bien..es lo que tiene esta zona de Alsacia, al contrario de otros sitios que he visitado en navidad, y sus mercadillos son mas que mercadillos navideños, son chiringitos donde comprar alguna cosa y sin comida ni nada, pero la Alsacia es el típico mercadillo lleno de comida, vino, regalos, productos típicos de la zona, muñecos y adornos navideños..vamos, precioso lo mires por donde lo mires. Desde la plaza de la catedral , hay una calle muy bonita, rue merciere, y con unas vistas a la espalda de la catedral escondida entre las calles muy bonita,


y al final la plaza Gutenberg, que también tiene algún puestecillo. Desde la misma rue merciere bajamos hacia la rue de maroquin, donde está una imagen muy fotografiada de Estrasburgo, la casa de los osos de peluche, la verdad que no conseguimos saber porque de tanta afición en esta zona de adornar los edificios con osos de peluche, pero están por todos lados. Además está calle tiene fachadas muy bonitas adornadas y acaba en una pequeña plazita muy bonita.





Al final del todo, se encuentra el pont du corbeau, donde a su entrada está el famoso cartel de Estrasburgo, capital de Noel.


Nosotros seguimos hacia la izquierda buscando llegar hasta la zona mas conocida de Estrasburgo, la petite france. Andamos hasta el mercado de place saint thomas, con mas puestos pero algo menos de gente.
Y como ya va siendo hora de comer, hacemos una parada en un sitio que había leído que hablaba la gente muy bien, en estas fechas no se puede reservar, pero como no es tarde , pasamos y nos sientan sin problemas, un restaurante pequeño y muy bonito por dentro, también como no adornado de navidad, y como es normal en Francia con las mesas muy pegadas entre si. Pero bueno, tras quitarnos las capas de ropa, nos sentamos, que se agradece estar un rato al calentito mientras hojeamos la carta. El restaurante es Le Thomasien. Pedimos para comer un codillo asado con salsa munster que estaba escandalosamente bueno, y un rosti alsaciano, también muy rico pero es que el codillo estaba para chuparse los dedos. También una cerveza que es típica aquí para estas fechas, cerveza navideña, que según mi marido tampoco era una cosa del otro mundo, y agua. Que si como nosotros no eres de beber nada mas que agua como las ranas, en Francia si no quieres que te sangren por una botella de agua mineral, tienes que especificar que quieres una carafe d´eau, se dice algo asi como cagaf do, mas o menos como se pronuncia, que no es otra cosa que una jarra de agua del grifo, pero que aquí esta buena, y sobre todo, es gratis en todos los restaurantes. La comida nos costó 47,50€.



Asi que con la tripa llena, nos volvemos a poner todas las capas, y a la calle a seguir andando. Desde aquí nos vamos adentrando en la petite france por la rue des dentelles.







y andamos para encontrarnos en la place de benjamín zix donde hay otro mercadillo justo ya en la imagen mas tomada de Estrasburgo, la esquina de la petite france donde se puede ver el rio.




y donde también hay otro mercadillo en la plaza louise weiss, junto al rio.


Y volvemos callejeando hacia el centro para buscar un sitio donde tomar algo de postre, en la rue des orfebres nos metemos en una boulangerie que tiene una pinta espectacular, para probar alguna de sus delicias, intentamos entrar a la pastelería del chez Christian pero había que hacer cola para entrar a sentarte asi que como que no. También compramos unos macarons en otra tienda, también muy buenos, aunque nada a comparación de laduree de parís…y poco a poco, paso a paso se nos va echando la tarde, no sin antes darnos un pequeño susto, ya que volviendo hacia arriba, al final de la rue des orfebres, de repente no nos dejan pasar los policías y militares ya que hay una bolsa en el suelo, que al final resulto ser de unos que se la habían dejado olvidada, pero ya lo tenían todo cortado. Eso me llamo mucho la atención en todos los pueblos, todos con militares patrullando, y con rifle en mano! Bueno, ya anocheciendo nos vamos a la plaza kleber ya que cada hora desde las 17 hasta las 23 hay un espectáculo de luz y sonido en el gran abeto muy bonito…

y ya nos dedicamos a ir volviendo por nuestros pasos de la mañana para ir contemplando Estrasburgo bajo las luces de navidad que ya lucen por todos lados…y que magia envuelve a estos sitios con esos alumbrados!!












Y acabamos el dia donde lo empezamos, en la plaza Broglie, y ahora ya paseamos por sus cientos de puestos llenos del bullicio de la gente

