Otro día de madrugón, vamos directos a la estación de Ueno, antes de nada a pillar un desayuno que nos lo pimplaríamos directamente en el tren, paramos en el Andersen, cafetería danesa con bollos muy ricos aunque algo caretes, pero a según que horas puedes ver japoneses haciendo cola o sea que ya os podéis imaginar que merece la pena

Hoy estrenamos nuestro jrpass y pillamos el primer shinkansen, que pasada! Jaja pero lo que no sabía es que empezábamos por el mejor que veríamos jaja, era nuevecito e híper cómodo asientos deslizantes, respaldo reclinable, barra reposapiés que salía del asiento de delante, bandeja para comer… flipante! Os podéis imaginar que desayunamos estupendamente! Jaja

En Utsunomiya cambiamos al JR Nikko Line, trenecito muy curioso nada que ver con el anterior jaja, mientras disfrutábamos de las vistas se nos acercó un simpático señor japonés y nos preguntó si íbamos a Nikko, se nos sentó al lado y nos sacó un plano del pueblo y nos empezó a explicar que no nos podíamos perder de Nikko, como llegar a la zona de templos, donde comprar el pase combinado etc… bueno yo ya lo tenía todo apuntadito en mis chuletas, pero bueno no le iba a quitar el trabajo al señor, que al decirle que veníamos de España estaba entusiasmado, para variar había estado en Barcelona viendo la Sagrada Familia jaja
Antes de las 10 ya estábamos en Nikko, la verdad me pareció más bonito Kita-Kamakura, pero este pueblo también es curioso




El camino a la estación la verdad se hace un poco largo, si no tenéis muchas ganas de caminar os aconsejo pillar el bus, y bueno aunque tengáis ganas también lo aconsejo por el tiempo que se ahorra, pero a nosotros nos mereció la pena el paseo porque encontramos un anticuario que tenía cosillas de oferta y encontramos unas muñecas japonesas antiguas talladas en madera y pintadas a mano muy cucas que nos vinieron genial para hacer regalitos

Y nada andando andando llegamos al puente Shinkyo, fotito por aquí fotito por allí…


Tanto nos despistamos mirando el puente que no vimos la subida hacía la zona de santuarios y nos la pasamos de largo jaja, es que la verdad ahí empieza el Nikko de verdad y las vistas del rio y el paisaje verde de fondo despista a cualquiera, la cuestión que seguimos por la carretera un buen rato hasta que nos dimos cuenta que algo no iba bien, y dimos medio vuelta al llegar al puente de nuevo vimos el camino aixx que despiste! Y nada después de la cuestecilla llegamos a la zona de Rinnoji, pero andábamos ya super perdidos, ya cansados de tanto patear, y además muertos de calor, que nos había dicho que desde que llegamos a Japon era el primer día que de verdad había salido un radiante sol!!! encima el Rinnoji todo tapado nos lo saltamos y ni nos dimos cuenta...
Y llegamos al Santuario Toshogu, y yo cansada y mosca porque no sabía donde nos habíamos dejado el Rinnoji, mogollón de gente, era la primera aglomeración de turismo que vivía en Japón, pues me agobie un poco la verdad y creo que no lo disfruté como se merece porque ahora veo las fotos y alucino y no fue esa la sensación que tuve allí…
















Y hasta nos encontramos con una boda japonesa



Pasamos de pagar para ver el gato durmiente y la tumba Leyasu y tomamos rumbo hacia el Santuario Futarasan, y vaya caminito la verdad que Nikko en gran parte es impresionante por su naturaleza



El Santuario Futurasan, es bonito pero después de haber visto el lujo de los edificios del santuario Toshogu pues ya no impresiona tanto la verdad jeje, pero aún así merece la pena






Y llegamos al Taiyuinbyo, mausoleo consagrado a Lemitsu, nieto de Leyasu que por el gran respeto que tenía a su abuelo construyó su mausoleo cerca del suyo rindiéndole homenaje y para mi gusto casi que lo supero! aquí si se respiraba calma, se ve que las hordas de estudiantes que habíamos visto por todo Nikko no llegaban tan lejos, aquí las vistas se funde con la naturaleza y crea una atmosfera increíble y realmente cautivadora... sniff que recuerdos!








Altamente recomendable!














Como os podéis imaginar de aquí la cámara salió echando humo



y nada la verdad encontré la visita un poco decepcionante, encuentro un poco timo pagar el pase combinado y que el templo esté todo tapado por una estructura… pero bueno al menos dentro tenía un replica a escala jaja

Ahora ya si que se nos había hecho tarde para comer, bajamos directamente en busca del Hippari Dako, llegamos sobre las 14:15 h. y estaba cerrado! vaya chasco! pero bueno al final encontramos un sitio más que recomendable para comer

Es un sitio es muy acogedor típico japonés, pero amplio con mesas normales y tipo japonesas para comer en el suelo, ahí que nos pusimos, para algo estamos en Japón no! yo me senté con las patas estiradas claro jaja y mi marido muy valiente él se pone de rodillas y las señoras japonesas que llevaban el local que eran muy simpáticas y amables no se pudieron contener una risita al verlo jaja, y no me extraña no duró ni 5 minutos, luego más adelante a lo largo del viaje pudimos ver que hoy en día ni los japoneses aguantan esa tortura jajajajaa y bueno por unos 1000 yenes cada uno comí las gambas en tempura más ricas de todo mi vida sin duda alguna y hasta el arroz me supo diferente, estuvo todo riquísimo!

El restaurante creo que compartía local con una tienda, y tenías que atravesar medía tienda para ir al baño, pero esto es lo que os podías encontrar de camino


Por si os interesa está casi en la esquina al girar desde el puente shinkyo hacía la avenida que lleva a la estación, una foto de la entrada:

Con la tripa bien llena, decidimos ir de paseo por el rio hacía el Abismo de Kanmangafuchi, y vaya paseo! vaya vistas!




Y tras unos 20 minutillos de agradable paseo llegamos al abismo, que son unas formaciones en el lecho del rio que quedaron tras la erupción del cercano monte Nantai, y dejan unas estampas muy bonitas en el rio


Por si fuera poco lo bonito del paisaje además hay una hilera de unas 70 estatuas jizo con su gorrito y baberito que hacían el lugar más mágico aún, sin duda un conjunto ultrarecomendable!






Más felices que una perdiz, con la cámara agotada, ponemos rumbo final hacía la estación, aquí se acababa una excursión maravillosa, a medio camino del abismo me da por mirar mis apuntes con los horarios de los trenes, ostras! o llegamos a la estación en 35 minutos o tendremos que esperar hora y media más para pillar otro tren! ya nos veis corriendo el camino que habíamos hecho por la mañana, pero si al final llegamos, con algo de tiempo de sobra, o sea que a buen ritmo tampoco está tan lejos jeje
Ese día acabamos prontito, ya que al día siguiente nos tocaba cambio de base, KYOTO!!! y bueno queríamos aprovechar para poner una lavadora, y justo cuando mi marido estaba en la planta sótano con la lavadora, y yo estaba sola en la habitación sentada en el futón, precisamente escribiendo en el foro como había ido el día
