Después de desayunar, nos despedimos de la señora y vamos a entregar nuestro Mahindra a la oficina de Hitch Car Rental, que está muy cerquita del aeropuerto. Fue llegar, entregar las llaves a un chico que estaba en la calle, echó una mirada despreocupadamente al coche por fuera, preguntó si había daños y nos dio el okey, después nos llevaron al aeropuerto. Nuestra experiencia con ellos ha sido perfecta, coche en buen estado, no nos ha dado ni un solo problema, un precio más económico que otros y encima lo dicho, nos dieron un diesel. Muy recomendables.
Abandonamos la isla sur. Llegamos a Auckland con puntualidad y llegamos justo a tiempo de comprar los tickets de Skybus para desplazarnos al centro de Auckland y para volver mañana. Es una forma de transporte muy rápida, cómoda y económica.
Nos bajamos a tres minutos andando de nuestro hotel, hicimos el check-in, como ya he mencionado, este fue el único alojamiento de todo el viaje por Nueva Zelanda en el que nos pidieron el pasaporte.
Dimos un paseo y vimos la skytower de Auckland.
El puerto.
Auckland, pues en la línea de las ciudades en Nueva Zelanda, apenas tienen atractivos, son un poco insulsas.
Esto se acaba, compramos algún recuerdo más de última hora, cenamos algo y nos fuimos al hotel, al día siguiente cogíamos el skybus a las seis de la mañana para ir al aeropuerto. Allí tomamos un vuelo hasta Seul, donde la compañía Korean Air, nos proporcionó de manera gratuita, transporte, alojamiento y cena y desayuno, en un hotelazo de cuatro estrellas.
Al día siguiente Seul-Madrid que se nos hizo mucho más pesado que a la ida y vuelta a la dura realidad………………