Viaje al Norte de la India con conductor ✏️ Blogs de India

Nos levantamos, desayunamos, aunque está abierta la piscina y tenemos rato, la verdad es que el baño no apetece, así que desayunamos tranquilamente y salimos de viaje hacia Udaipur vía Ranakapur. En Ranakapur vemos unos templos impresionantes, espectaculares, para nuestro gusto hasta ahora de lo más bonito que hemos visto, los visitamos durante hora y media con una audioguía en castellano. Al salir mientras vamos a los aseos, veo algo que salta por encima de mí de edificio a edificio y cuando miro es un mono, menudo susto me ha pegado. Salimos hacia Udaipur y al poco rato Mahendra nos señala con sorna, el único restaurante al que desde el primer día le hemos dicho que no queremos ir CASA MANOLO, por sus malas referencias en el foro, nos dan ganas de entrar a regañar a los dueños, enseguida vemos también el restaurante HARMONY, otro de los que en el foro ponen muy mal, así que con el permiso del conductor volvemos a sacar nuestras viandas españolas en el asiento de atrás de nuestro Toyota Etios, ya familiarmente al asiento de atrás le llamamos el Mahendra’s Restaurant y seguimos sin parar hacia Udaipur, nada más llegar lo primero nos para en un jardín, el Jardín de las Amigas, allí como siempre hay que pagar para entrar y como en la mayoría de los sitios hay tarifa para Hindúes y para turistas, aprovechando que en algún sitio nos han pintado un punto rojo en la frente, intentamos hacernos pasar por Hindúes, pero entre las gafas de sol, las cámaras de fotos y los pantalones cortos, nos descubren y pagamos la tarifa de guiri, vemos el jardín muy cuidado y de ahí nos vamos directamente al Lago Pichola donde cogeremos un barco para dirigirnos hacia la isla de Jaghmandir y ver el atardecer, la isla de Jaghmandir es selecta con hoteles y restaurantes, muy limpia y pequeñita, así que tras unas fotografías decidimos coger el barco de nuevo y ver el atardecer desde el barco, también se ve el hotel Jackniwas Palace en la isla de Jackniwas, hotel de auténtico lujo de unos 500 € la noche, toda la isla es el hotel. Llegamos al embarcadero en la zona del city Palace, damos un paseo y nos recoge el conductor para llevarnos al hotel, hoy iremos a cenar con él a un sitio que nos recomienda el, aunque yo prefiero alguno de los recomendados en el foro, él nos convence de que es un sitio único de Fast food India, se come thali y además de la calidad dice que la cantidad muy abundante, ya que te van reponiendo cada uno de los 7 platos del thali tantas veces como quieras y dice que además no pica. Llegamos al restaurante Nantraj muy concurrido y enseguida nos ubicamos y nos sentamos a cenar, según probamos el primero de los platos de la bandeja, comprobamos que lo que decía Mahendra de que no pica no es del todo cierto, pero según vamos probando platos, menos el agua y el dulce pica todo, a mí se me van saltando las lágrimas y no de emoción, los lugareños de alrededor nos miran de reojo y se descojonan de nosotros. Nos lleva para el hotel Inder Residency, está muy bien, no es tan llamativo como los anteriores, pero está francamente bien con una piscina y un jardín con unos columpios para adultos muy bonito, tenemos sueño, no hay wifi gratis, así que nos acostamos pronto.

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Nos levantamos para desayunar muy bien, de los mejores restaurantes en el hotel y con nuestro guía Raví ir a vistar el City Palace, Raví es otro especialista en fotos curiosas, nos enseña el City Palace, palacio muy bonito con vistas preciosas, el guía nos va contando historias y costumbres, hoy es día de elecciones, Raví nos pide 5 minutos de permiso para votar, vemos puestos callejeros de los dos partidos que se presentan BJP y Congress, hacemos algunas fotos de los puestos callejeros de ayuda a los ciudadanos que no saben votar. Nos despedimos de Raví que nos dice que piensa venir a España al año que viene.
Compramos algo de fruta para volver a comer en el Mahendra’s Toyota Ethios Restaurant, donde nos hemos acostumbrado a comer a medio día, en el que se come muy bien comida española y muy ajustado de precio. Iniciamos nuestro Largo viaje hacia Pushkar. Está previsto un viaje largo y lento. Poco antes de llegar a Pushkar, paramos a visitar en Ajmer un templo curioso hecho en oro, para el que han utilizado 1000 kg de oro. Es una obra de arte como una ciudad hecha en honor a varios Dioses como Indra y su esposa Indrani, parece que de vez en cuando debe ponerse a funcionar y tener movimiento, buscaremos en Internet la historia y funcionamiento de éste templo porque es muy curioso, todo dorado, elefantes volando, pavos reales,… Nos cuenta nustro conductor que en ésta ciudad estudiaron él y su mujer. Nos dirigimos hacia Pushkar y con un control perfecto del tiempo, el conductor nos manda bajar al lado de nuestro hotel y que nos dirijamos a la vuelta para ver la puesta de sol desde uno de los Ghats, justo hemos llegado en el momento para ver el sunset, así que lo vemos con gente curiosa y sacerdotes alrededor y tras verlo y esquivar los sacerdotes que nos quieren vender flores, vamos al hotel, que está allí al lado, nos registramos en el hotel Pushkar Palace, aunque tiene su encanto y una ubicación perfecta con vistas a los Ghats y al lago sagrado, para mi gusto el hotel es viejo y aunque no está mal, hasta ahora es el que menos me ha gustado del viaje. Mahendra nos dice que lo mejor ahora es que nos lleve al templo de Brama, es uno de los pocos templos dedicados al dios Brama en India, allí nos dejará y en un plano nos ha marcado como volver por el bazar al hotel donde él nos recomienda que cenemos, nosotros queremos cenar en el restaurante Out of the Blue, muy recomendado en el foro. Vemos el templo de Brama, donde tenemos que entrar separados, ya que no dejan pasar las cámaras. Al acabar vamos paseando por el bazar, comprando algunas cosillas: sándalo, pantalón Alí Babá…
Caminando encontramos el restaurante Out of The Blue, con una terraza encantadora y unas vistas estupendas sobre el lago, la única pega es que hace fresco y vamos en manga corta, nos tomamos unos zumos naturales de primero y pedimos la cena y por supuesto cerveza después de los dos días de ley seca, pero Pushkar es ciudad sagrada donde el alcohol está prohibido, cenamos unos thali muy ricos que apenas pican, cuando nos vamos a ir, en la mesa de al lado vemos que se sientan tres chicas españolas a cenar, las saludamos y nos vamos, pasamos por una tienda donde antes preguntamos por unos Cuencos Tibetanos que a Loli le gustan, tras llevarnos por unos portales interiores pasamos a una vivienda donde un hombre que sabe muchísimo y es muy agradable nos enseña un montón de cuencos, pero la verdad los de mejor pinta, según Loli porque yo de esto no tengo ni idea, son muy caros. Nos vamos al hotel donde la habitación bastante antigua pero con encanto, hacemos unas cuantas fotos del lago y nos acostamos.

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Nos hemos despertado pronto y desde el hotel vemos la gente bañándose en el lago y en los Ghats, desde la habitación hacemos fotos y antes de desayunar decidimos ir a pasear por el pueblo y ver a la gente bañándose, allí esquivamos sacerdotes que venden flores, la gente nos habla, alguno nos preguntan de dónde somos, para no enrollarnos mucho y evitar que nos mareen, decimos que somos de Armuña de Tajuña, pequeño pueblo de la Alcarria, como les cuesta bastante reconocer incluso repetir el nombre, no insisten mucho y nos dejan tranquilos. Vemos mucha gente bañándose en los Ghats, las mujeres se bañan vestidas, lo que es curioso, porque luego casi se desnudan totalmente fuera para cambiarse y ponerse ropa seca, volvemos a desayunar al hotel, el desayuno es corriente.
Salimos hacia Jaipur y a petición nuestra paramos en un sitio donde comprar artículos de recuerdo y de regalo: Krisna Arte Center, la verdad es que poca cosa vemos y compramos algún regalillo de poco valor. Continuamos hacia Jaipur, donde creo que nos esperan dos largos días.
Llegamos a Jaipur, sobre la 1, el conductor nos ofrece dejarnos a descansar un rato en el hotel y venir a buscarnos luego, pero como dice Mahendra nosotros somos de la casta de los camellos, no necesitamos ni comer ni beber ni ir al servicio, así que queremos aprovechar el tiempo y le decimos que nos deje en los bazares y quedamos con él a las 3 en la New Gate para irnos hacia el templo de los monos. Paseamos por los bazares, donde nos atosigan un poco para que entremos en las tiendas, pero nos resistimos con soltura, excepto en algún sitio donde si queremos comprar algo. A las 3 salimos hacia el templo de los monos y como el viaje durará una media hora es el tiempo que aprovechamos para comer en el coche, hoy siento alguna molestia de estómago. Al llegar al Templo del Sol o de los Monos, vemos que apenas hay monos, hasta que llegamos a la parte de arriba, que está plagado y como a la entrada hemos comprado unos cacahuetes, aprovechamos para dárselos a los monos y hacernos fotos cerca de ellos, los pequeños son muy graciosos, los mayores se lían a guantazos por un cacahuete con cualquier congénere. De aquí nos vamos al templo de Birla Mandir, un templo todo de mármol blanco, muy grande y bonito. Aquí al acabar y a sugerencia del conductor vamos al cine ya que en todos sitios dicen que ver una película de acción con hindúes es muy curioso, pero no tenemos demasiada suerte y la película no es de acción es más bien de un Latin Lover y apenas tiene acción, así que después de verles emocionarse a los lugareños con una escena de besos en una playa, esperamos al descanso y nos marchamos, después de haber comprado unas entradas bastante caras. Al salir del cine y con mi estómago un poco más resentido aún, decidimos irnos al hotel a descansar ducharnos y hoy no salir y tomar algo en el restaurante del hotel Lemon Tree, un hotel moderno situado un poco fuera del centro, pero muy buen hotel y una buena habitación. El restaurante a la carta es un restaurante oriental, limpio, bien servido, muy tranquilo y con una comida aceptable, aunque yo a penas ceno, ya que no me encuentro muy bien, tomo solo un poco de arroz que no debería ni haberlo tomado, pagamos unos 15 € para los dos y hoy que si hay cerveza mi estómago no me lo permite.
Durante la noche mi estómago, ha requerido que me levantase en varias ocasiones para ir al baño, aunque creí que yo estaría exento, la diarrea hace su aparición en éste viaje.

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