MÚNICH Y BAVIERA A TU AIRE ✏️ Blogs de Alemania

Hoy se levanta el día un poco fastidiado, la noche pasada han caído varias tormentas y mientras desayunamos vuelve a caer otro chaparrón. Hoy en uno de los días grandes del viaje, nos vamos al famoso Neuschwanstein. Cogemos el coche y a la altura de Murnau nos topamos de golpe, corriendo al lado de la carretera, con unos 100 soldados del ejercito alemán con su equipo de combate al completo. En Murnau hay un gran acuertalamiento. A medida que nos acercamos a Neuschwanstein el día se va aclarando, menos mal!!

Llegamos y aparcamos en el primer párking que hay, 4,50€. Un pequeño consejo que os doy es que dejéis el coche aquí, ya que tan sólo está a 5min andando de las taquillas y en los parkings que estan más arriba a la hora de salir se montan unos cacaos bastante grandes de coches, y en este 1º estais ya en la salida hacia Fussen. Estamos haciendo cola en las taquillas a las 8:25 y en tan sólo 15min tenemos nuestras entradas, vale la pena madrugar para estar temprano ya que 1:30h más tarde se monta una cola impresionante que te quitan las ganas de hacer la visita. No las teníamos reservadas. El bono de 14 días incluye Neuschwanstein pero no Hohenschwangau. Decidimos no hacer la visita a Hohenschwangau, ya hemos visitado bastantes palacios estos últimos días. A la hora de coger los tickets te dan la opción de escoger idioma (no hay en español) o audioguia. Recomiendo la visita con audioguía, ya que esta sí que está disponible en español.

Nos han dado hora para las 10:15, tiempo de sobra para subir tranquilamente caminando, son unos 20 min de subida. Tambien teneís la opción de subir en bus (6€ i/v creo recordar) o en carruaje (6€ sólo ida). Llegamos a Neuschwanstein y seguimos camino hacia el Marienbrucke que está a otros 10-15min. De camino hay unas vistas muy hermosas del Alpsee y Hohenschwangau. Nos vamos acercando al Marienbrucke y yo a voy preparando la cámara para sacar la que creo que será la foto del viaje. Entramos en el Marienbrucke, que es un puente colgado de un acantilado muy espectacular sobre el río Pollat y que tiene fama por tener una de las mejores vistas de Neuschwanstein con el lago detrás, y nos llevamos la decepción del viaje; toda la fachada que mira al puente está cubierta de andamios, cagoen!!!!

Bajamos de nuevo al castillo para hacer la visita guiada. Dura unos 25min y para mi sí que vale la pena hacerla, lo digo por que leí en muchos foros que no valía la pena por dentro y a nosotros sí que nos gusto. No es el más bonito, Herrenchiemsee o la Residenz son más bonitas, pero está bien. Me asomo a alguna de sus ventanas y me imagino a Luis II mirando el mismo paisaje que yo contemplo,esto tiene que estar precioso nevado. De todas formas, sí no queréis pagar los 9€ de la entrada, podéis entrar hasta el patio del castillo donde se pueden hacer unas fotos preciosas de los patios interiores del castillo.

Neuschwanstein:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Bajamos hacia el párking y comemos un bratswurt con papas fritas y cocacola cada uno por 10.50€ en un puesto que hay al lado del 1º parking. Como ha cambiado esto comparado con la mañana. La cola de las taquillas es de espanto y hay un gran follón de coches y autocares para entrar y salir. Subimos dando un paseo a Hohenschwangau, otros 15min, y vemos el palacio por fuera.

Hohenschwangau y el Alpsee:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Volvemos al párking y cogemos el coche dirección Fussen que está muy cerca. Fussen es un pueblo turístico encantador rodeado de unas montañas preciosas. En su centro peatonal hay un gran ambiente con unas terrazas muy agradables donde tomar algo o comer. Nosotros, como no, nos vamos a una Backerei-Konditorei donde nos zampamos unos bocadillos vegatales brutales y un par de porciones de tarta, acompañado de una coca cola, 11,70€. Da gusto estar sentados en esta terraza disfrutando del esplendido día que hace.

De vuelta a Benediktbeuern pasamos por algunos lagos con playas preciosas habilitadas para el baño abarrotadas de gente, como me molan estas playascon cesped y abetos hasta el agua. Lástima que no llevamos el bañador por que si no parabamos a darnos un chapuzón.

Esta noche para cenar nos hacemos unos raviolis enormes (5 pesaban 525gr) acompañado de un vino riesling. El riesling es una típica uva de aquí que da unos vinos blancos buenísimos que entran muy bien fresquitos.

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Nos levantamos muy temprano y me voy a la backerei para comprar panecillos y pastas del día para desayunar, las dependientas ya me saludan como si me conocieran de tiempo, ya llevamos 10 días por aquí.

Hoy toca recorrer la "Deutsches Alpen Strasse", una carretera que se proyectó construir en 1927 y que recorre los parajes más hermosos de los Alpes Bávaros. Va desde el Bodensee (lago Constanza) hasta Berchtesgaden. Nosotros no pensamos hacerla toda ya que es bastante larga, la iniciaremos desde nuestra casa, en Benediktbeuern, ya que por aquí pasa la Alpenstrasse.

Al lado de Benediktbeuern se encuentra el turístico pueblo de Kochel am See, a orillas del lago del mismo nombre. Es todavía muy temprano con el sol levantándose lentamente y una niebla que está dentro del lago a ran de agua le da un aspecto muy fantasmagórico. Desde aquí la carretera se empina mucho en dirección Walchensee, desde los miradores hay una gran vista del Kochelsee. El Walchensee es otro hermoso lago rodeado de montañas y bosques, como ya dije el otro día, da gusto conducir por estas hermosas y tranquilas carreteras, te paras continuamente para admirar el paisaje y hacer fotos. A la entrada al pueblo de Walchensee ir al tanto, porque a mano izquierda sale una carretera muy estrecha dirección Vorrediss que pasa desapercibida. Esta carretera es privada y es de peaje (3€), pero hay que hacerla si o si porque es una de las carreteras más hermosas que hemos recorrido en Alemania. Se mete en el valle del río Isar y toda la zona es un parque natural. Te das cuenta al advertir que no te encuentras ni con pueblos ni con casas y sólo estas rodeados de naturaleza. Aquí en Alemania te das cuenta de que es un país muy poblado al no pasar por carreteras deshabitadas y solitarias, siempre pasas por pueblos o casas y en las carreteras siempre hay bastante circulación, por eso nos sorprende esta carretera de 30km tan solitaria y con estos imponentes y solitarios paisajes.

Un tramo de esta carretera:

*** Imagen borrada de Tinypic ***


Pasado Vorrediss la carretera va ascendiendo lentamente hacia el Achenpass a 941mtrs de altitud pasando por dos bonitos lagos, la carretera entra un momento de nada en Austria para volver inmediatamente a Alemania en dirección al Tegernsee. El Tegernsee es un hermoso lago muy turístico frecuentado por la gente de Múnich que está a unos 60km, aquí pillamos un atasco por culpa de unas obras. El atasco nos agobia y no paramos en Tegernsee para pasear como teniamos pensado y seguimos hacia Schliersee. Aquí si que paramos y salimos a pasear por este bonito pueblo a orillas del Schliersee. Lo que más nos gusta..¡¡LA PLAYA!! es muy tranquila y con el cesped llegando hasta el agua. No nos lo pensamos 2 veces, nos vamos al coche a buscar los bañadores y las toallas que ahora sí que llevamos siempre en el coche por si acaso y nos vamos a relajar a la playa, el agua está buenísima. Nos pasamos un buen rato en esta hermosa playa contemplando las montañas que nos rodean, los abetos casi a ran de agua, los veleros surcando las aguas.... ¡CARAJO! esto es vida.

La playa de Schliersee:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Relajados después de este baño, seguimos ruta por la Alpenstrasse ahora dirección Bayrisschzell, vamos lentamente conduciendo para poder empaparnos del paisaje que nos rodea. En Bayrisschzell, un pueblo al final de un gran valle alpino, comemos un menú en el restaurante de la plaza principal. El día es muy agradable y comemos en la terraza, el menú consiste en unos raviolis flotando en un caldo (esto se ve mucho aquí en Alemana) y unos cordon blue con papas y ensalada, acompañado por 2 radler de 0,5l. 23,70€. Bien pero sin matar.

Después de comer retomamos la Alpenstrasse subiendo un puerto y llegando a Tatzelwurm, un centro turístico, donde vale la pena parar un momento para admirar una gran cascada que hay al lado. En esta cascada se quedó nuestro reloj de los viajes. Se debió caer y lo perdimos. Algún alemán se habrá llevado una buena sorpresa. Seguimos ruta hacia Neubeuern, un pueblo medieval que la guía deja por las nubes pero que a nosotros nos gustó sin más. Dicen que aquí se han grabado diversas películas ambientadas en épocas medievales por lo bien conservado que está el pueblo, y hombre, la zona del centro es muy bonita pero pequeña, no son más que una plaza y unas pocas calles. Eso sí, vale la pena parar. La culpa es de la guía que te pone unas expectativas muy altas y luego no es tan espectacular como dice. Aprovechamos la parada para ir, como no, a una backerei a comprar pan y un par de porciones de tarta para el postre de la noche. Que buenos que estan estos panecillos que hacen con pipas, queso, orégano,etc. Aquí en Neubeuern damos por finalizada nuestra ruta por la Alpenstrasse, es imposible hacerla en un sólo día, al menos sí la quieres hacer tranquilamente como es nuestro caso. Nosotros preferimos ir tranquilamente por los sitios parando donde nos da la gana, como la playa de Schliersee, y perdernos algún lugar, a ir corriendo y verlo todo. Nos gusta empaparnos tranquilamente de lo que nos rodea. Desde Neubeuern cogemos la autobahn que está cerca y ponemos rumbo a Benediktbeuern.

Neubeuern:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Ya en Benediktbeuern, me voy a un sitio donde alquilan bicicletas (fahrrad en alemán) para apalabrar 2 para el día siguiente. El hombre que lleva el negocio es mayor y no tiene ni papa de inglés. Nos cuesta un montón entendernos, y al final llama a su vecino que chapurrea el inglés como yo. Con la ayuda del vecino logramos arreglar el tema para el día siguiente. Consigo hacerme entender para que me pongan cesta en las bicicletas, ya que pensamos llevar bañador y toallas. Las 2 bicicletas nos saldran todo el día por 10€. Luego Herr Bacher, el dueño de nuestra casa rural, me recomienda la ruta del día siguiente pasando por varias playas habilitadas en lagos. Tiene buena pinta, ahora sólo falta que el día acompañe.

Despedimos el día dando buena cuenta de unos espectaculares frankfurts acompañado por un buen riesling.

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Nos levantamos muy temprano y mientras Mari va preparando el café yo me voy a la backerei de los Luganer para comprar el desayuno, panecillos y unas minipizzetas que hacen de queso y bacon buenísimas para la ruta en bicicleta que haremos hoy, por 4 pastas, 4 panecillos y 2 minipizzetas me cobran 6,85€.

A las 8 vamos a por las bicicletas, el hombre insiste en su cerrado alemán en darnos unas bicicletas que para mí son demasiado grandes, con mi escaso vocabulario en alemán logro que nos de unas más pequeñas con sus cestas y todo para poder poner nuestras bolsas.

Y empezamos la ruta que me recomendó el día anterior Herr Bacher y bajamos hasta la Abadía de Benediktbeuern de donde sale un camino rural que nos llevará hasta Silensdorf, a 10km, nuestro primer objetivo del día. El camino es muy agradable a través de campos y bosques y sin apenas desnivel. Cruzamos el río Loisach y cogemos una pista asfaltada sólo para ciclistas que nos lleva hasta Silensdorf. Alemania es una gozada para los amantes del ciclismo, todo está plagado de rutas para ciclistas muy bien acondicionadas y lejos de los coches, y si en algún momento os tenéis que meter en una carretera aquí los coches respetan mucho a los ciclistas. Ya en Silensdorf buscamos la pista que nos ha de llevar a Habach, nuestra siguiente parada a 5km. En este tramo pasamos por debajo de la autopista Múnich-Garmisch y seguimos atravesando tranquilamente campos y granjas que jalonan nuestro camino. Este detalle me ha sorprendido aquí en Alemania, hay mucha gente dedicada a trabajar el campo. Yo me imaginaba este país muy industrial, que lo es y mucho por supuesto, pero a la vez ves que todos los pequeños pueblos por los que pasas estan llenos de vida con mucha gente que vive del campo y la ganaderia, no como los nuestros que sólo se llenan de vida en verano con los turistas de ciudad, supongo que deben tener unas buenas subvenciones del estado. Llegamos al pueblo de Habach y buscamos la carreterita que nos lleva a través de un pequeño puerto que atraviesa unas colinas pobladas de abetos y vacas pastando en sus praderas hasta el lago de Riegsee a otros 10km. Esta carretera si que es compartida con los coches, pero es muy local y nos cruzamos con muy pocos coches. Nos topamos con una fuente y aprovechamos para llenar nuestras cantimploras, hoy a vuelto a salirnos un día completamente azul y con calor. Hay que aprovechar cualquier fuente que os encontreis ya que es increible la falta de fuentes que tiene este país tan rico en agua. Este tramo del recorrido es especialmente hermoso, el puerto no es muy largo y lo subimos sin complicaciones, y luego una larga bajada nos lleva hasta el Froschhausersee, al lado del más grande Riegsee.

Aquí nos encontramos con una playa bastante concurrida por la gente de los pueblos de alrededor pero con el ambiente tan sosegado y tranquilo tan característico de los alemanes. Decidimos hacer nuestra 1ª gran parada del día. Ya llevamos 25km y nos merecemos un descanso. Aparcamos las bicicletas y sacamos las toallas y los libros para leer. Pasamos 1 1/2h tranquilamente bañándonos y leyendo, la playa es como todas aquí, con cesped hasta el agua y árboles que dan abundante sombra, nos zampamos también las minipizzetas (que bien entran las condenadas). Los locales nos observan curiosos, no estan muy acostumbrados a ver turistas extranjeros (y menos españoles) en estas pequeñas playas locales. Es de resaltar la paz que se respira en estos sitios, pese a que la playa está muy concurrida no hay gente con música alta, los crios juegan y se lo pasan bien pero respetando a los demás... Muy diferente a España.

En ruta:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Un poco a regañadientes pero volvemos a coger las bicicletas, hay que seguir ruta hacia Murnau. Para orientarnos llevamos el mapa que compramos en Benediktbeuern donde salen todas las rutas de treking y bicicleta de la comarca, pero la zona de Murnau no está y hay que orientarse por sus calles para encontrar la pista que nos llevará a Kochel am See. Encontramos un mapa en una calle de Murnau y le hacemos una foto, esto nos servirá para encontrar la pista. A la salida de Murnau sí que hay que coger una carretera muy transitada que durante unos 4 o 5km la compartes con los coches, pero luego aparece rápidamente una pista sólo para ciclistas y ya podemos ir más tranquilos. Nos quedamos sin agua y no vemos ninguna fuente como es costumbre en este país, finalmente llegamos a Grossweil y compro 3l de agua, no quiero que nos vuelva a faltar el agua ya que lo hemos pasado un poco mal. También compro unas coca colas bien frías y nos comemos los bocadillos en una plaza del pueblo.

Con las fuerzas ya recuperadas y la sed aplacada, nos dirigimos al pequeño lago de Eichsee que está cerca de Grossweil. Este lago nos lo ha recomendado Herr Bacher, nos dijo que tiene una playa preciosa y que es muy tranquilo. Y tenía toda la razón, el lugar es paradisíaco. La poca gente que hay ha llegado sólo en bicicleta dándole un halo más de paz al lugar. Nos pasamos otra 1 1/2h descansando, el agua esta buenísima y me hago todo el lago nadando (no es muy grande), desde el centro del lago es muy bonita la vista de las montañas que nos rodean en la lejanía y los campos de los alrededores. Esto es vida, aquí tomando el sol tranquilamente mientras leemos (Millenium de Stieg Larsson me tiene muy enganchado).

La playa del Eichsee:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

De aquí ya sólo nos faltan 10km hasta Benediktbeuern en esta preciosa ruta que nos marco Herr Bacher. En estos últimos km nuestros culos ya se quejan a voz en grito los pobres, los tenemos desollados. Han sido unos 50km. Llegamos a Benediktbeuern y vamos a devolver las bicis, el hombre me cobra los 10€ del alquiler (sólo) y nos quiere invitar a una "bier". Pero tenemos prisa ya que nos cierra la metzgerei (carniceria) del pueblo y nos queremos hacer algo de carne para cenar. En la metzgerei nos compramos unos filetes de cerdo adobados no sabemos con que pero que tienen muy buena pinta. A los alemanes les encanta adobar lar carnes con diferentes salsas y en las metzgerei ya te las venden adobadas.

Llegando a Benedicktbeuern:

*** Imagen borrada de Tinypic ***

Hoy es nuestra última cena en Benediktbeuern después de 2 semanas y lo hacemos a lo grande con estos filetes adobados que estan buenísimos acompañados por una cerveza "Paulaner". Hoy la cerveza, después de la bicicleta, ha entrado mejor que nunca. De postre, como no, unas porciones de tarta que hemos comprado en la backerei de los Luganer. Echaremos de menos este pequeño y encantador pueblo.

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