EL SUEÑO SE HIZO REALIDAD ✏️ Blogs of USA

En Yosemite estuvimos dos días.

El primer día fuimos a visitar Mariposa Grove, bien temprano, como recomendáis por aquí, porque es cierto que el parking es pequeño y enseguida se llena, así que a las 8 de la mañana ya estábamos allí. Fue una delicia hacer el recorrido sin aglomeraciones de gente, que ya empezaba a estar a tope cuando nos marchamos.

Nos gustó Mariposa Grove, ver esos árboles tan enormes, ya que no íbamos a ver sequoias en ningún sitio más.

Luego nos fuimos a Yosemite. La verdad es que cansa un poco la carretera con tanta curva, pero no queda otro remedio.

Ese día vimos osos. Es muy curioso, vas por la carretera y de repente te encuentras los coches parados en el medio del asfalto, y es porque están mirando los animales. Ya os digo que nosotros pudimos ver osos dos veces.

Fuimos a los miradores que señalaban en el mapa, como Glacier Point. Nos encantó ver las cascadas, que pensábamos que en verano no tendrían agua, pero nos equivocamos. Aún había nieve en los picos de las montañas.

Después buscamos un restaurante para comer, y eso sí que nos pareció horroroso. Comimos en uno que no recuerdo el nombre, pero parecía comida en plan industrial. Nos conformamos, no había más remedio.

Luego cogimos el autobús para hacer más visitas y no tener que andar pendientes de dónde dejamos el coche, que estaba Yosemite como una gran ciudad en hora punta.

Al día siguiente volvimos, y más de lo mismo, aunque aprovechamos para hacer la excursión a Bridalveil Falls.

Por la tarde volvimos temprano al hotel para poder poner la lavadora y disfrutar de un poco de descanso.

Yosemite es uno de los parques que no me perdería si volviera por allí.

---

Salimos a las 9 de la mañana para ir rumbo a San Francisco. Creíamos que, como era domingo por la mañana no habría demasiado tráfico, ¡gran error!, la carretera estaba a tope de coches, y conforme nos acercábamos a San Francisco, peor.

Para poder cruzar el puente tardamos un buen rato, ya que hay que pagar el peaje. Mientras esperábamos ya íbamos pensando en que por fin estábamos allí.

El día estaba nublado, cosa que luego comprobamos nos pasó todos los días, o a la mañana o a la tarde.

Habíamos cogido el Hotel Abri, casi al lado de donde da la vuelta el tranvía, así que mi santo varón nos dejó allí y se fue a devolver el coche unas calles más arriba.

Devolvió el coche sin ningún problema.

Las habitaciones del Abri han sido las más pequeñas de todo el viaje, a pesar de que han sido las más caras. La nuestra tenía dos camas grandes y un baño un tanto pequeño, pero la otra era con una gran cama y un baño enorme. Habitaciones muy limpias, con los jabones de L'Occitane, y muy tranquilas.

Esa tarde la dedicamos entera a ver tiendas, y a pasear por los alrededores del hotel.

---

Nos levantamos dispuestos a explorar la ciudad, pero con un cansancio ya acumulado de tantos días de viaje que empezaba a hacer mella, sobre todo en nuestros pies que no paraban de quejarse.

Primero fuimos al Visitor Center, que el día anterior estaba cerrado, y allí compramos el Muni para 3 días.

Fuimos a visitar Castro en el metro. Un metro muy limpio y tranquilo comparado con los de otras grandes ciudades. Creo que no acertamos con el día de la visita: lunes por la mañana. Apenas había gente por la calle y nos pareció un barrio muy normalito. Nos hizo mucha gracia una tienda que había con unos muñecos de hombres desnudos y preparados para la acción.

Luego fuimos a Misión, pasamos por Misión Dolores y toda esa zona.

De allí nos fuimos a ver Chinatown, con sus balcones y sus farolillos. Nos alucinó la gran colonia china que hay en San Francisco, aunque creo que habíamos leído que es la ciudad que tiene más población china fuera de China.

Por la tarde teníamos la visita a Alcatraz a las seis y para allí que nos fuimos. Menos mal que la habíamos reservado hacía 3 meses, porque había un rótulo que ponía que hasta el 21 de agosto ya no había entradas, y eso era el 8 de agosto.

Nos gustó muchísimo la visita, hasta a mi hija que iba preparada con su ipod para no ponerse la audioguía, pero no, se la puso y la escuchó muy interesada.

Eso sí, un frío que pelaba. Supongo que al venir del intenso calor de Las Vegas y alrededores, aún notábamos más el frío de San Francisco, que creo que no pasábamos de los 14º.

Al día siguiente fuimos al Pier 39, y allí nos encontramos con Tom, que estaba esperando al grupo que tenía ahora de viaje que tenían que hacer la visita a Alcatraz. Nos dio mucha alegría verlo, y es que el chico es absolutamente encantador.

Pasamos toda la mañana allí, y comimos también en uno de los restaurantes que hay en esa zona.

Por la tarde fuimos al Golden Gate, tras toda una odisea para poder llegar en el autobús hasta allí, y es que nos ha parecido que el transporte de San Francisco no es muy eficiente, o será que nosotros no lo hemos sabido utilizar.

Llegamos al Golden Gate, y aunque en la zona del Pier hacía sol, allí no se veía más que la mitad del puente, un aire que te llevaba, y un frío terrible.

Subimos al puente con la intención de caminar un buen trozo, pero nos rendimos rápidamente al ver cómo se ponía el tiempo y que parecía que iba a llover, aunque al final no llovió.

Después de más de media hora esperando el dichoso autobús pudimos volver e ir a la calle Lombard, aunque subimos unas cuestas empinadísimas hasta llegar allí, y luego la bajamos caminando, como supongo que hacemos todos los turistas que no bajamos en coche.

---