Día 21 de septiembre: el día que vimos auroras
Viva San Mateo!!! Hoy es el día de fiesta grande en Logroño! Asi que habrá que celebrarlo, jejeje.
Nos levantamos con un día poco apacible, pero el baño con calefacción y agua calentita nos alegra el despertar!
Salimos de la furgo y vemos que habíamos parado al lado de una iglesia pequeñita de las que tienen césped en el tejado. Muy cuca.
Ponemos rumbo hacia Blönduos y Hvammstangi por la 1. Antes de esta cogemos un desvío por la 745 hacia “
Hvitserkur” y nos adentramos en la
península de Vatnsnes. Llegamos a Hvitserkur después de una carretera no muy allá pero nos va gustando mucho el paisaje. La roca en si es bonita, porque parece un animal bebiendo pero nos esperábamos algo más después de las fotos que habíamos visto. Nos pareció pequeña.
Seguimos por esa carretera llena de baches llegando a
Illugastadir (cuidado que el desvío no está muy bien indicado). Tras pasar una valla y adentrarnos en una finca particular, aparcamos y dando un paseo corto a través de restos de algas y cacas de ovejas, llegamos al mirador desde donde se ve la colonia de focas. Que graciosas y que ruidosas!!!
Algunas se acercan hacia la zona donde estamos nosotros, otras hacen saltos y piruetas y la mayoría están tomando el sol!. Escribimos en el libro y volvemos.
Entramos en los baños que hay y leemos que lo ha construido el dueño de la granja y lo mantiene él (y esta impoluto), para las visitas a la colonia de focas. Definitivamente son otro tipo de gente!
A medida que avanza el día se va despejando, esto promete!!!
Después de Hvammstangi seguimos por la 586 (el principio es bastante malo) cogiendo después la 54 hacia
Stykkishólmur adentrándonos en la
península de Snaefellsnes, y subimos al pequeño faro que hay para ver el comienzo del atardecer. El camino hasta la bahía de este pueblo nos ha gustado mucho. Seguimos hacia
Grundarfjördur emocionados porque sigue despejado por el norte. Tras parada técnica para comprar algunas cosas buscamos un sitio para aparcar la furgo y que tenga despejado el norte, y encontramos pasado el pueblo una pequeña zona como de entrada a algún sitio, ya que hay una verja, que da al mar y está mirando al norte y no hay más luz que la de la luna (sería mejor sin ella, pero bueno). Que más se puede pedir!!!
Hoy, aunque la intensidad de auroras que dan es muy baja, nos vamos a quedar a ver si cazamos alguna. Así que preparamos la cena y para celebrar San Mateo nos ponemos un “destornillador” (vodka con zumo de naranja). A eso de las 22:30 pasamos a la parte de adelante de la furgo para ver si las vemos, y si!!! Ahí las tenemos, encima nuestro, tres gusanos de luz verde!
Salimos de la furgo y se nos pone la piel de gallina y empezamos a saltar. Las hemos visto. Decidimos sacar la cámara, y las sillas pero en ese tiempo desaparecen. Al final nos forramos de ropa, colocamos las sillas y la cámara, y tapados con el saco de dormir nos colocamos hacia el norte. Vamos viendo destellos verdes al frente. Al cabo de un rato, vemos que la intensidad va bajando y que con la luz de la luna no se ven muy brillante y recogemos el chiringuito.
Ha sido poco rato, pero no se borraran de mi cabeza. Conseguido!
Nos vamos a dormir con una sonrisa.
Impresiones del día:
La iglesia del tejado preciosa, pero no sabemos el nombre.
Hvitserkur, curioso pero nos esperábamos mas.
Illugistadir y sus focas que decir, nunca había visto focas en libertad, me encantaron.
Stykkisholmur con una vista muy bonita de la bahía y el fiordo. Otro pueblito de casas de colores.
Grundarfjördur un pueblo muy pequeño pero que no se nos olvidará por la visión de las auroras.
Día 22 de septiembre: Por la península de Snaefellnes
Nos levantamos a la 08:00 con mejor tiempo que otros días y nos ponemos camino de
Olafsvik. Por el camino paramos en el museo Fisherman que al ser domingo y fuera de horas de visitas es gratis y puedes entrar tranquilamente, otra cosa curiosa de los Islandeses. Seguimos hacia Rif y paramos en unas playas pedregosas en las que vemos colonias de aves. En la playa nos encontramos una beluga muerta pero curiosamente no huele nada ni esta llena de bichos.
Seguimos por la carretera que rodea la península parando en la ruinas de
Gufuskálar (donde no vemos nada, ni pone nada) y acercándonos a pie desde estas anteriores a las ruinas de
Irskibrunnur, en las que se ve un pozo de almacenamiento de agua con un cráneo de ballena como techo. El paseo por unas lenguas de lava negra ha sido bonito y tranquilo.
Seguimos y nos desviamos por una carretera de grava hacia
Skardsvik, que es la única playa de arena dorada que vemos durante el viaje. Las olas al llegar a la orillas hacen un azul muy bonito y brillante. Sensación de serenidad. Por lo que poneen un panel informativo, ahí se encontró una tumba vikinga, pero no se ve nada de nada.
Salimos de nuevo a la 574 y continuamos hacia Djúpalón. Cogemos el desvío por la 572 llegando a un parking donde dejamos la furgo. De ahí salen varias rutas, pero nosotros vamos hacia
Djúpalónssandur, una playa pedregosa con restos de un barco ingles naufragado, Cogemos un camino pedregoso que hay a la derecha y nos dirigimos a la playa de
Dritvík. Nos sorprende, ya que es una playa de piedras negras, pero hay unas formaciones rocosas pulidas preciosas que parecen un gran lagarto tumbado. Me encanta esta playa! Además estamos completamente solos rodeados de piedras y algas.
Volvemos a la furgo y nos ponemos en ruta en busca de un sitio para parar a comer. Se ha levantado mucho viento y es tardísimo (aunque somos españoles y las 15:45 tampoco es tan tarde, jejej), así que cuando por fin encontramos un sitio, comemos dentro de la furgo.
Seguimos rodeando la península por la 54, sin para en más sitios, ya que Hellnar y Arnarstapi no nos parecen demasiado interesantes. Nos dirigimos hacia
Borgarnes llegando a las 17:00, con tiempo para ir a las piscinas a nadar un poco y desestresar. Unos jacuzzis y unos baños de vapor y como nuevos.
Ahora si que nos vamos a la N1 a por el swissmocca y navegar por internet un rato.
Queríamos ver una zona que hay cerca de Borgarnes, pero dado el estado de las carreteras desistimos, así que seguimos por la 1 y cogemos el desvió de la 36 rumbo a Thingvellir poco antes de llegar Reikjavik.
Encontramos un paradero al lado de la carretea con buena vista al norte, aunque se esta cubriendo el cielo, y paramos a pasar la noche. Para que no nos pase lo de ayer decidimos dejat preparadas las sillas y la cámara por si acaso.
Nos preparamos una cena calentita e intentamos ver auroras, pero como vemos que no despeja lo dejamos y a dormir.
Impresiones del día:
Gufuskalar, si había ruinas no las encontramos. Eso si, el paseo hasta
Irskibrunnur nos gusto y el pozo de almacenamiento con la ballena resulta bonito.
Skadrsvik es una playa que me gusto mucho, con las colonias de aves a lo lejos.
Djúpalonssandur esta bien con los restos del barco y
Dritvík nos encanto con esas formaciones rocosas.
Borgarnes pues un pueblo. Solo visitamos las piscinas y la cafetería de la N1.
Día 23 de septiembre: Por el Golden Circle
Nos levantamos sobre las 8 y desayunamos. Rodri se va corriendo al campo con su apretón matutino, cuando de repente aparece un autobús lleno de japonés!!! Jajaja, le están viendo el culo!
Tras el espectáculo ofrecido nos ponemos en camino por la 36 a
Thingvellir y su centro de visitantes. Hay un montón de autobuses y turistas, lo que nos agobia un poco, por lo que tras echar un vistazo al entorno 5 minutos decidimos seguir hacia
Geysir por la 37 a ver si hay suerte y no hay tanto turista.
Nos acercamos a la zona de geyseres a ver el Strokkur, y la verdad que impresiona ver esa columna de agua a presión saliendo del agujero. Tras unas fotos y dar una vuelta por el recinto, decidimos seguir hacia
Gullfoss.
Llegamos al parking y nos acercamos andando hacia la cascada y la verdad que es impresionante. Eso sí, hay un viento terrible y la sensación térmica es heladora.
Decidimos visitar un tubo subterráneo de lava, el
Raufarhólshellir al que llegamos cogiendo el desvió por la 38 desde Hveragerdi y después el desvío hacia la 39. Cogemos las linternas y nos forramos de ropa. Es muy chulo, pero hay muchos pedruscos por los que hay que subir y bajar, y a mi que llevo una linterna de mano normalita, lo que no me permite agarrarme bien a las rocas y me parece un poco peligroso. Rodri lleva una linterna de las de cabeza que alumbra bien y va más seguro que yo. Así que tras andar un rato yo me pongo nerviosa porque no voy segura y decidimos dar la vuelta tras andar un tramo.
Nos quedamos a comer en ese parking y vemos que entran al túnel 4 chicos. Una de ellos se vuelve a los 10 minutos y los demás están más o menos una hora. No sabemos si lo han hecho entero o no.
Como hace un día de perros y ya lleva un par de horas lloviendo, y no podemos ver nada, decidimos irnos a
Hveragerdi a las piscinas municipales, a hacer unos largos y darnos unos baños en las piscinitas de agua caliente y en los baños de vapor. Nos acercamos a una cafeteria y nos pedimos un cafe y una tarta que estaban espectaculares! Nos ponemos en marcha a buscar un sitio para dormir.
Llegamos al parking de Seltún, que está bastante bien, y vemos que los baños están abiertos. Ya tenemos sitio para dormir. Preparamos la cena y nos vamos a dormir, a la espera de que llegue nuestro último día en Islandia.
Impresiones del día:
Thingvellir nos agobia un poco con tanto turista, y no nos parece demasiado interesante.
Geysir no tiene más que la zona de geyseres, que es pequeñita, pero ver al Strokkur escupir agua 20 metros merece la pena.
Gullfoss nos ha encantado.
Raufarhólshellir nos ha gustado a pesar de que yo soy a veces un poco agonías y no lo vemos. Recomendación, lleva buena linterna de cabeza, buenos guantes, buenas botas y ropa de abrigo.