Continuamos con nuestra visita a Angkor.
El primer templo que visitamos se encuentra a unos veinticinco kilòmetros del Bayon.El Banteay Srei es tambièn llamado la Ciudadela de las Mujeres ya que el rey Jayavarman hacia el 967,confiò dicha construcciòn a las mujeres.Debido a la naturaleza femenina sustituyeron la fuerza fìsica por un minucioso trabajo en los relieves y en la decoraciòn de las estructuras por lo que le ha valido el sobrenombre de la Joya del arte Jemer.Comparandolo con el resto de los templos de Angkor es etiquetado como templo miniatura,aunque no exento,por ello,de una gran belleza.




El calor empezaba a ser sofocante.La visita que realizamos fuè relativamente ràpida,ya que como he comentado,este templo es de reducidas dimensiones.
De nuevo acomodados en los tuks,tuks nos dirijimos al Kbal Spean,el rio de los mil lingams.
Se encuentra a unos dieciocho,veinte kilometros del Banteay Srei.A lo largo del rio pueden apreciarse una serie de relieves tallados en las rocas y piedras que bordean al mismo y hacen referencia al dios Shiva.Para llegar a este lugar es preciso caminar mas o menos unos veinte minutos,pero la caminata es de lo màs agradable ya que transcurre entre àrboles y bastante vegetaciòn asì que el fresquito està màs o menos garantizado.Al llegar al destino una pequeña cascada invita a refrescarte.
Este lugar fuè descubierto en 1969 por Jean Boulbet pero no fuè hasta 1998 que pudo volver a visitarse ya que esta zona estaba controlada por los ùltimos jemeres rojos.




Despuès del remojòn y un tranquilo descanso volvimos sobre nuestros pasos.
Hacemos un alto para comer.El restaurante Borey Sovann Kbalspean ofrece cocina variada.El lugar es còmodo y como siempre,hasta hoy,el trato muy bueno.
Siguiente destino : Beng Mealea.
Tenia un interès especial por conocer este templo.En las informaciones recogidas en distintas publicaciones Beng Mealea todavìa se encontraba casi tal cual a còmo descubrieron Angkor.
La falta de recursos econòmicos unido a la lejania del mismo,se encuentra a unos 65 kilòmetros de Siemp Reap,hicieron y me imagino que seguirà igual,que estè practicamente en el olvido.
Pagamos por entrar al recinto 5 $ por persona.No existia ninguna taquilla si no un grupo de hombres y mujeres hablando entre ellos en cuclillas.Sin apenas mirarnos nos entregaron los tickets y nos dejaron a nuestra suerte,para que recorrieramos el lugar a nuestro antojo.No habìa nadie màs.
Los sonidos de la jungla y las paredes derrotadas por la fuerza de la naturaleza fueron los ùnicos testigos de nuestra visita.
Este templo fuè construido en el siglo XII por el rey Suryavarman II y se encuentra en un antiguo camino que unia la ciudad de Angkor Thom con el templo de Preah Khan.
La vegetaciòn en este lugar ha hecho de ella misma una fantàstica obra arquitectònica,utilizando còmo material las piedras que en otro tiempo conformaban un esplèndido edificio.Sòlo unas pasarelas de madera son el vestigio que ha dejado el hombre y que permiten poder adentrarse,màs o menos,en el entramado de piedras,àrboles y vegetaciòn.
Pienso que recuperar esta joya arquitectònica es un derecho para la humanidad aunque,la verdad,el abandono proporciona a este lugar una aureola mìstica,dificil de definir,que irremediablemente se perderia.




Abandonamos Beng Mealea,lugar excepcional en donde uno puede dejar volar su imaginaciòn y sentirse un "Indiana Jones",un "soldado americano en la jungla asiàtica inmerso en plena segunda guerra mundial" ò por què no, un "vampiro",tan de moda ultimamente.De hecho,el entorno,es como un gran platò cinematogràfico.
Hoy ha sido un dia intenso.Hemos recorrido lugares preciosos,llenos de misterio e historia.
Volvemos a Siem Reap.Decidimos rematar el dia recorriendo la zona màs popular y cenando en la Khmer Famili una pizzeria situada en Pub street una calle llena de tiendas,bares y restaurantes.
No podemos resistirnos y realizamos algunas compras y despuès de un breve paseo nos vamos a dormir.