Nuestro último día, madre que penaaaaaaaaaaaa.
Nos levantamos y recogimos toda la habitación, para llevar ya las maletas a recepción a la vez que íbamos a desayunar. Hicimos el check-out (conservando las tarjetas de las toallas) y fuimos los primeros en dejar las maletas, nos las aparcaron en una esquina junto al escenario y nos fuimos a desayunar.
Esa última mañana hicimos un poco de todo, un poco de playa, piscina, spa… comimos y ya fuimos a ducharnos a los baños que están enfrente del Hemingway (previamente cambiamos las toallas por unas limpias en la piscina). Ojo que las toallas azules sueltan partículas, yo después de secarme intenté echarme crema y la lié parda, parecía un pitufo…
Una vez perfectamente aseados nos dirigimos al lobby al rescate de nuestras maletas, pues teníamos que hacer trasvase de unas cuantas cosas. Enseguida llegaron los de Madrid y juntos esperamos la llegada del autobús tomando los últimos cócteles. Se formó una cola tremenda a la llegada del primer bus, así que esperamos tranquilamente sentaditos a que avanzase un poco el tema y al final fuimos en el tercero.

En el aeropuerto otra vez una cola tremenda hasta que conseguimos facturar, pagar las tasas de salida (20$ por persona) y pasar el control. Una vez en la zona de embarque comimos algo en una hamburguesería que había allí, previendo que la comida del avión llegaría tarde y no sería muy allá. Embarcamos y rumbo a Madrid.


Conseguimos dormir algo durante el viaje y así se hizo más llevadero porque intentar ver una película en un avión de Pullmantur es misión imposible. Una vez en Madrid, la otra pareja y nosotros cogimos el metro y en un punto determinado nos despedimos, con la promesa de que nos veríamos pronto, ya que vivimos en la misma ciudad. Así será.
Por lo demás nos despedimos de las vacaciones, de las que conservamos muy buenos recuerdos, un montón de fotos y vídeos y, sobre todo, un montón de caras que no olvidaremos por habernos hecho pasar tan buenos ratos ¡gracias a todos! Claro que también nos trajimos un regalo no deseado: yo dos kilos más y mi chico cuatro... pero bueno... disfrutado está!!
Hasta la próxima…