A quien madruga Dios le ayuda - Decía el refrán -
Y como he madrugado, he podido aprovechar para dar un paseo por los alrededores del hotel. Respirar aire puro y cargarme las pilas de buena energía. Sentir la apacible mañana y lanzar mi mirada al lejano horizonte; sabiendo que, esta tierra esconde su furia no muy lejos de donde yo me encuentro.
Siguiendo la nacional 1, que es la arteria principal de Islandia, paso la zona de Hella, y observo a mi izquierda una construcción de madera muy bonita que cuenta con 2 jacuzzis en el exterior. ¡Me muero de curiosidad por ver qué es ese sitio!.
Se trata del Hotel Ranga. Está ubicado en un lugar aislado y muy bonito, a la orilla de un río de salmones. Desde aquí se pueden hacer viajes en helicóptero para ver los volcanes. Me parece un hotel ideal y romántico. Lastima no tener pareja para compartir...
Llegando a Hvolsvóllur veo una estación de servicio, en la que, además de repostar, compro un “Pilsur” (un perrito caliente). Enfrente de la gasolinera hay un supermercado donde puedo conseguir chocolatinas y refrescos para el viaje. Visto lo poco que hay de todo, me compro algo de embutido y pan de molde, seguro que hago mas de un pic nic....
Continuando por la nacional 1, llego a la cascada Seljalandsfoss, es bastante peculiar, porque puedes rodearla y observar el agua cayendo desde su interior.
Recomendación: Hay que tener cuidado de no resbalarse y no entrar cuando el viento sopla demasiado.
Retomo el viaje con intención de visitar Thormörk, pero el acceso está cortado por protección civil, puedo observar a lo lejos una pequeña columna de vapor de agua. El volcan esta dormido pero no apagado.
Siguiente parada : el pueblo de Skógar, donde visito la impresionante cascada Skógafoss. Es como una cortina de agua de más de 50 metros de altura. Aquí he conocido a un español que lleva 22 años en Islandia, y con el que he tenido una agradable conversación sobre la vida en Islandia y la erupción del volcán Eyjafallajofull.
También me acerco al museo etnológico y puedo entrar en las casitas que tienen turba en el tejado y las demás construcciones que también están expuestas para visita. Hay un hombre, anciano casi, que toca el organo de una iglesia minuscula, me resulta algo "Friki"
Ya es bastante tarde y creo que es hora de tomar algo. Decido comer en el Café Skogar. Disfruto de una deliciosa sopa y un sándwich.
Antes de llegar a Vik, me desvío de la carretera nacional y llego a la zona de Dyrhólaey. Es una zona de rocas con paredes verticales, donde viven una gran cantidad de frailecillos. Son muy graciosos, sobre todo cuando echan a volar.
Vuelvo a la carretera nacional con destino Vik, a unos pocos kilómetros hay una desviación que me lleva a Reynisfjara. Una impresionante playa de arena negra con unas grandes piedras que tienen huecos que provoca el agua cuando rompe contra ellas. Espectacular!!
Llego a Vik. Vaya día más intenso….
Y como he madrugado, he podido aprovechar para dar un paseo por los alrededores del hotel. Respirar aire puro y cargarme las pilas de buena energía. Sentir la apacible mañana y lanzar mi mirada al lejano horizonte; sabiendo que, esta tierra esconde su furia no muy lejos de donde yo me encuentro.

Se trata del Hotel Ranga. Está ubicado en un lugar aislado y muy bonito, a la orilla de un río de salmones. Desde aquí se pueden hacer viajes en helicóptero para ver los volcanes. Me parece un hotel ideal y romántico. Lastima no tener pareja para compartir...
Llegando a Hvolsvóllur veo una estación de servicio, en la que, además de repostar, compro un “Pilsur” (un perrito caliente). Enfrente de la gasolinera hay un supermercado donde puedo conseguir chocolatinas y refrescos para el viaje. Visto lo poco que hay de todo, me compro algo de embutido y pan de molde, seguro que hago mas de un pic nic....
Continuando por la nacional 1, llego a la cascada Seljalandsfoss, es bastante peculiar, porque puedes rodearla y observar el agua cayendo desde su interior.
Recomendación: Hay que tener cuidado de no resbalarse y no entrar cuando el viento sopla demasiado.
Retomo el viaje con intención de visitar Thormörk, pero el acceso está cortado por protección civil, puedo observar a lo lejos una pequeña columna de vapor de agua. El volcan esta dormido pero no apagado.
Siguiente parada : el pueblo de Skógar, donde visito la impresionante cascada Skógafoss. Es como una cortina de agua de más de 50 metros de altura. Aquí he conocido a un español que lleva 22 años en Islandia, y con el que he tenido una agradable conversación sobre la vida en Islandia y la erupción del volcán Eyjafallajofull.
También me acerco al museo etnológico y puedo entrar en las casitas que tienen turba en el tejado y las demás construcciones que también están expuestas para visita. Hay un hombre, anciano casi, que toca el organo de una iglesia minuscula, me resulta algo "Friki"
Ya es bastante tarde y creo que es hora de tomar algo. Decido comer en el Café Skogar. Disfruto de una deliciosa sopa y un sándwich.
Antes de llegar a Vik, me desvío de la carretera nacional y llego a la zona de Dyrhólaey. Es una zona de rocas con paredes verticales, donde viven una gran cantidad de frailecillos. Son muy graciosos, sobre todo cuando echan a volar.


Llego a Vik. Vaya día más intenso….