No nos levantamos no muy temprano, sobre las 7h y fuimos a buscar un sitio para desayunar en la calle freemont.
Entramos en un casino donde el día anterior queríamos haber cenado, pero entonces no había sitio.
Desayunamos al más puro estilo americano: 2 huevos fritos, 2 bacon, patatas y salchicha y un zumo. Nos sentó de maravilla!
Recogimos nuestros bártulos y nos pusimos rumbo a la presa Hoover.

Viniendo de Las Vegas, el primer parking que nos encontramos costaba 7$. Pero al tirar más adelante, voalà, una vez pasada la presa, hay pk gratis. Aparcamos y fuimos andando a la presa (5min).
Estuvimos por la presa 1h, es muy impresionante y además famosa porque se han filmado allí varias películas.

De aquí fuimos tirando hacia Williams, que era donde íbamos a hacer noche. Fuimos a ratos por la ruta 66, donde los pocos pueblos que quedan en pie viven de los souvenirs. Paramos en Kingman porque en la guía ponía que había un museo de la ruta 66, pero no valía la pena.



Además, me empecé a encontrar mal, mareada, y nos fuimos a comer al McDonalds una ensalada cesar buenísima.
Proseguimos hacia Williams y llegamos sobre las 18h. Hacia fresquito porque el pueblo está en medio de un valle de pinos.
Dejamos los trastos y nos fuimos a un súper que había delante del Motel 6 a comprar desayuno, agua y algo para hacer bocatas para el día siguiente.
Empezábamos a estar cansadísimos y nos fuimos a un restaurante del palo Grease a cenar una súper hamburguesa a la parrilla.
Volvimos al motel. Ya no podíamos más. Sobre las 21h ya estábamos durmiendo.
P.D: desde que hemos llegado a USA noto el bebé como me da golpes, sobretodo por la noche. Bueno, supongo que será el bebé, no creo que sean gases,jajajaja.