*** Imagen borrada de Tinypic ***]
Lo que a continuación narraré e ilustraré con fotografías para amenizarlo un poco es nuestro periplo por tierras portorriqueñas que tuvimos ocasión de visitar desde el 11 al 14 de agosto de 2011, fecha prevista para iniciar un crucero por aguas de las Antillas menores.
El vuelo que cogimos desde Miami tenía hora prevista de salida desde Miami a las 13,05 horas pero hasta dos días antes había habido cancelaciones de vuelos a causa de la tormenta tropical Emily, motivo por el cual, despegamos definitivamente a eso de las 15,00 horas lo cual hizo que nuestros planes para ese primer día en la isla se nos trastocaran un poco. Al llegar al aeropuerto internacional de San Juan y tras los preceptivos controles pasamos a esperar el shuttle del coche de alquiler que teníamos contratado de antemano con Alamo para proceder a su recogida. Como solamente se trataba de conocer la isla sin hacer muchos km ni cambios de hotel optamos en esta ocasión por un coche económico y de menos capacidad que el que alquilamos en Miami días atrás al llegar a Estados Unidos. Ya teníamos suficiente con éste. Más barato, menos consumo y casi igual de confortable. La única diferencia a parte del tamaño (que como bien sabéis siempre importa) fue la capacidad del maletero y potencia del motor. Lo tuvimos desde que aterrizamos hasta momentos antes de embarcar definitivamente en el Serenade of the Seas. Cumplió nuestras expectativas totalmente.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El aeropuerto de San Juan está relativamente cerca y bien comunicado respecto a la ciudad. Se puede decir que en 20 minutos te pones en San Juan de Puerto Rico. Nuestro hotel, no obstante, lo teníamos reservado en la localidad turística de El Condado. Tras leer a vari@s forer@s, así como las críticas en TripAdvisor nos decantamos por el Hotel Miramar y os he de decir que para nada estamos arrepentidos, excepción hecha del paupérrimo desayuno que entraba en el precio de la habitación, el cual y según la encargada del hotel han dejado de ofrecerlo. Por cierto y hablando de la recepción del hotel hay una chica rubia que es más que encantadora. Nos ayudó en todo lo que pudo en el sentido de que nos recomendó restaurantes, zonas para ver e incluso zonas para no visitar a según qué horas. Lástima no recordar su nombre para citarlo
Como llegamos al hotel sobre las 19 horas tuvimos el tiempo justo de dejar las maletas y acomodarnos en la habitación (bien de tamaño aunque quizá las 2 camas eran algo justas de anchas para dos adultos). Cuando nos dimos cuenta eran las 19h30m. y ya había oscurecido con lo que bajamos a recepción y la misma chica nos aconsejó el restaurante portorriqueño “Casita Miramar” a tan sólo dos minutos andando de nuestro hotel.
Nuestra primera experiencia culinaria en la isla no pudo ser mejor. Cenamos como reyes y nos dieron a probar distintos platos y bebidas de la gastronomía local. Todo muy bueno y copioso. Por suerte de casa cogí algunos sobres de Almax que en esta ocasión hicieron el avío… La cena consistió en platos típicos locales que aunque el nombre de los mismos sea idéntico a algunos de los de aquí en nada tenían que ver. Así pudimos desgustar Buñuelos, Salmorejo, Mero blancoen escabeche, Masitas, Verde, Flanes y bebidas locales. El total incluída la propina sugerida fuer de alrededor 110$.
El vuelo que cogimos desde Miami tenía hora prevista de salida desde Miami a las 13,05 horas pero hasta dos días antes había habido cancelaciones de vuelos a causa de la tormenta tropical Emily, motivo por el cual, despegamos definitivamente a eso de las 15,00 horas lo cual hizo que nuestros planes para ese primer día en la isla se nos trastocaran un poco. Al llegar al aeropuerto internacional de San Juan y tras los preceptivos controles pasamos a esperar el shuttle del coche de alquiler que teníamos contratado de antemano con Alamo para proceder a su recogida. Como solamente se trataba de conocer la isla sin hacer muchos km ni cambios de hotel optamos en esta ocasión por un coche económico y de menos capacidad que el que alquilamos en Miami días atrás al llegar a Estados Unidos. Ya teníamos suficiente con éste. Más barato, menos consumo y casi igual de confortable. La única diferencia a parte del tamaño (que como bien sabéis siempre importa) fue la capacidad del maletero y potencia del motor. Lo tuvimos desde que aterrizamos hasta momentos antes de embarcar definitivamente en el Serenade of the Seas. Cumplió nuestras expectativas totalmente.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
El aeropuerto de San Juan está relativamente cerca y bien comunicado respecto a la ciudad. Se puede decir que en 20 minutos te pones en San Juan de Puerto Rico. Nuestro hotel, no obstante, lo teníamos reservado en la localidad turística de El Condado. Tras leer a vari@s forer@s, así como las críticas en TripAdvisor nos decantamos por el Hotel Miramar y os he de decir que para nada estamos arrepentidos, excepción hecha del paupérrimo desayuno que entraba en el precio de la habitación, el cual y según la encargada del hotel han dejado de ofrecerlo. Por cierto y hablando de la recepción del hotel hay una chica rubia que es más que encantadora. Nos ayudó en todo lo que pudo en el sentido de que nos recomendó restaurantes, zonas para ver e incluso zonas para no visitar a según qué horas. Lástima no recordar su nombre para citarlo
Como llegamos al hotel sobre las 19 horas tuvimos el tiempo justo de dejar las maletas y acomodarnos en la habitación (bien de tamaño aunque quizá las 2 camas eran algo justas de anchas para dos adultos). Cuando nos dimos cuenta eran las 19h30m. y ya había oscurecido con lo que bajamos a recepción y la misma chica nos aconsejó el restaurante portorriqueño “Casita Miramar” a tan sólo dos minutos andando de nuestro hotel.
Nuestra primera experiencia culinaria en la isla no pudo ser mejor. Cenamos como reyes y nos dieron a probar distintos platos y bebidas de la gastronomía local. Todo muy bueno y copioso. Por suerte de casa cogí algunos sobres de Almax que en esta ocasión hicieron el avío… La cena consistió en platos típicos locales que aunque el nombre de los mismos sea idéntico a algunos de los de aquí en nada tenían que ver. Así pudimos desgustar Buñuelos, Salmorejo, Mero blancoen escabeche, Masitas, Verde, Flanes y bebidas locales. El total incluída la propina sugerida fuer de alrededor 110$.