Día 20 (Jueves 19/07)
Nos levantamos prontito, desayunamos unos bocatas en el hotel, y hacemos el check out de este fantástico resort. A las 8.30h nos recoge el taxi al pier (otro 4x4). El viaje de vuelta es como el de ida, una montaña rusa. Van en nuestra ranchera un par de chicas que en un salto casi se estampan. Hacemos algunas fotos y un vídeo, pero es difícil captar este caminito hasta Sairee Beach.
Llegamos al pier, y hay un lío tremendo con los ferries, ya que el de las 9.30h que va a Koh Samui va con mucho retraso, y se ha acumulado una cantidad importante de gente en el puerto esperando a su barco. Dentro de este caos, resulta que nuestro ferry llega primero, por lo que nos metemos entre la gente, como si estuviéramos jugando a tubo, y a las 10.30h embarcamos. Entonces llega la situación más increíble del viaje.
Cuando estamos sentados en el ferry, dispuestos a zarpar, vienen varios miembros de la tripulación y nos solicitan amablemente que nos levantemos y vayamos caminando hacia la parte delantera del barco (que es la que está pegada al muelle). Parece ser que la marea está tan baja que el barco tiene peligro de encallarse en la arena al salir, por lo que con el peso de todos nosotros intentan que la popa (adonde están las hélices) suba, y así pasemos sin problemas. Parecemos ‘El Camarote de los Hermanos Marx’. Lo más bueno es que nos cruzamos con un ferry que justo llega al muelle, y la gente también está toda abarrotada en la proa.

Ferry hacia Bangkok
Una vez ya en el mar, pasado el peligro, volvemos todos a nuestro asiento. El viaje es cortito (unas 2 horas), y me lo paso todo entre escribiendo en el diario y viendo en una tele capítulos de Mr. Bean que son del año de la Polka (casi todos los he visto ya), pero siguen siendo la mar de divertidos.
A las 12.30h llegamos a Chumporn (sí, se llama así, o Chumpon también), y observamos que aparte del mini muelle, no hay absolutamente nada más, solo selva. El paisaje es precioso. Bueno, sí que hay un chiringuito de comida¸ como no. Esperamos poco rato, y a las 13h cogemos ya el autobús, un trasto de dos pisos de cuando Franco era cabo, aunque tenemos la gran suerte de que nos asignan los asientos 1 y 2 del piso de arriba (parte derecha), por lo que podemos poner las mochilas y estirar las piernas totalmente. Además, vemos todo el paisaje con el pedazo de parabrisas que hay. Como hemos visto al llegar allí, todo es una selva impresionante a ambos lados de la carretera. Vamos haciendo fotillos, hasta que nos dormimos. Tenemos 8 horas de viaje por delante.

Carretera, selva y nada más

El autobús, como he comentado, es de antes de Cristo, por lo que en las subidas, o cuando arranca después de parar por semáforos o por lo que sea, va a 10kms/hora, ya que no tiene más fuerza, y en subidas ya no os digo nada. Aparte, el conductor se pasa todo el viaje frenando y haciendo sonar el cláxon sin parar; y tanto toca la bocina que a mitad de recorrido se lo carga, y a partir de entonces sólo suena un sonidillo agudo y más molesto que antes.
En fin, tras una única parada a las 3 horas, y después de 8 horas desde que salimos de Chumporn, llegamos a Rambuttri, y nos vamos caminando a nuestro hotel, el ‘Fortville Guesthouse’, que está en Phra Sumen Road, 9 al lado del Fort Phra Sumen. Nos sale la noche muy baratita, a unos 17€ (lo pillamos en Agoda). El sitio es muy sencillo, pero es tranquilo, la habitación es pequeña, aunque la cama es muy grande. Parece que estamos en la zona china de Bangkok, ya que varios inquilinos y gente de alreredor es de origen chino. Incluso los chiringuitos de comida de la calle hacen comida china. En la planta de arriba del hotel hay una terraza superchula con un bar y música; cuando subimos vemos que está todo lleno de chavales lugareños bebiendo sus cervezas.
Después de hacer el check in, dejar las mochilas, revisar el hotel y terraza, y darnos un duchazo, nos vamos a Rambuttri Road a cenar. Nos cenamos el típico Pad Thai y el Roti Banana Chocolate de los puestecitos de la calle, y nos hacemos un Thai Massage en el Shewa. Excelente.
Relajados a tope, nos volvemos al hotel y a dormir, sobre las 1h de la madrugada. Ha sido un día largo y pesado.