Nos levantamos sobre las 9H por error, pues habíamos cambiado mal la hora y la alarma estaba puesta una hora mas tarde, así que sin perder mucho tiempo nos dímos una ducha rápida y nos fuimos a desayunar a un Mister Donut que teníamos cerca del hotel, por uno 800 Yens 4 donuts y dos cafés. Empezamos yendo a pasear por las calles que rodean el Senso-ji, puesto que hoy era día 18 de marzo y se celebraba la fiesta de la Aparición del Kannon de Asakusa. Había muchisima gente y unos cuantos hombres paseaban un dragón dorado a modo de danza, fue bonito de ver y el ambiente que se respiraba era genial!
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cerca del hotel
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calle de tiendas cerca del templo
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dragón dorado
Despues de un paseo, nos acercamos a las oficinas Bandai, que están tambien cerca de Asakusa. Nos hicimos unas fotos con algunas figuras que tienen en el exterior y cogimos el metro hacia Shinjuku.
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Figuras de las oficinas Bandai
Nuestra primera parada era Artnia, el café/tienda de Final Fantasy. La tienda es una especie de huevo y está muy cerca de la estación. Nosotros ibamos con un mapa y lo encontramos facilmente. Al entrar nos pedímos un par de postres personalizados de Final Fantasy y dos cafés.
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imagen exterior de Artnia
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Postre con pancakes
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café con dibujo de un Cactillio
La música de fondo era agradable, en tono de jazz, y el lugar acogedor. Despues de hacer fotos y comernos los postres tranquilamente, visitamos la parte de tienda, tenían de todo; figuras, camisetas, colgantes, peluches, en fin, merchandising varios.
Una vez finalizada la visita, nos decidimos a ir a nuestra próxima parada a pie: Kabuchiko.
Mirando el mapa parecía facil, pero nos llevó un buen rato. Allí queríamos visitar otro Bar temático, esta vez el de Capcom, otra empresa de videojuegos. Ibamos un poco con incertidumbre porque habíamos leído que sin reserva a veces no se podía entrar, ya que realizaban diferentes pases durante el día, y hasta que no terminaba un pase no se podía entrar en el bar. De todo modos decidímos probar suerte, y si no podíamos pues pasearíamos por Kabuchiko.
Despues de dar bastantes vueltas por el barrio rojo (debo decir que cada vez que mi pareja se separaba de mi, se le acercaban hombres entrajados que parecían querer ofrecerle servicios de jovencitas, a mi parecer, así que tuve que marcar terreno
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Carta de bebidas basadas en personajes
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Postre de Resident Evil simulando un cerebro
Despues de hora y media, salímos a coger la Ginza line hacia Asakusa, paramos en un Seven Eleven a comprar algo ligero de cena y nos fuimos al hotel, el día había pasado volando pero fue un día para recordar!