Los “largos”, con Turkish Airlines. Servicio impecable, asientos muy cómodos, y un detalle que a mi me gustó mucho: llevan un pequeño reposapiés (como los de los trenes) en el asiento que está delante de ti, lo cual permite hacer más combinaciones imposibles a la hora de acomodarse y dormir.
A la ida nos dieron un estuche metálico con calcetines, antifaz, tapones, cepillo de dientes y pasta, y cacao para los labios. A la vuelta lo mismo, pero esta vez en un estuche de tela con cremallera.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
Tuve la suerte de, a la vuelta, volar en Bussiness (mi asiento estaba estropeado y no se reclinaba). No eché para nada en falta el reposapiés :D.
*** Imagen borrada de Tinypic ***
A la ida tuvimos un retraso de 6 horas (el avión debía salir a la 1:15 AM y salió a las 7:30 AM). Reclamamos en información y nos dieron acceso a la sala Millenium, para al menos dormir un poco.
Los “cortos”: todos con AirAsia. Puntual y más que suficiente.