La visita a Skye nos había dejado un sabor agridulce por los lugares que el huracán Bertha no nos había permitido visitar. Sin duda volveremos a la Isla de Skye algún día! Tras la mala experiencia del día anterior volvíamos a estar ilusionados por empezar un nuevo día de ruta por Escocia. Era un día importante para los Janonautas ya que íbamos a realizar el viaje en el Jacobite Steam Train, el tren de Harry Potter, una experiencia que esperábamos con mucha ilusión.
El viaje en este tren fue primero que reservamos del viaje por tierras escocesas y a partir de ahí fuimos organizando la ruta. Nuestra hija siempre ha sido una gran seguidora de Harry Potter, como habréis podido comprobar, y este es el tren Hogwarts Express que llevaba a los alumnos hasta Hogwarts, la escuela de magia. Además pasa por el famoso viaducto de Glenfinnan, en una imagen que se repite en todas las películas de la saga.
Además visitaríamos uno de los castillos más emblemáticos de Escocia: el Eilean Donan Castle. Este castillo es conocido mundialmente gracias a la película "Los Inmortales", protagonizada por Christopher Lambert y Sean Connery, además de aparecer en otros films como "El mundo nunca es suficiente" de James Bond. Es posiblemente uno de los lugares más reconocibles y fotografiados de las Highlands. Nuestro final de ruta era Fort William.
El viaje en este tren fue primero que reservamos del viaje por tierras escocesas y a partir de ahí fuimos organizando la ruta. Nuestra hija siempre ha sido una gran seguidora de Harry Potter, como habréis podido comprobar, y este es el tren Hogwarts Express que llevaba a los alumnos hasta Hogwarts, la escuela de magia. Además pasa por el famoso viaducto de Glenfinnan, en una imagen que se repite en todas las películas de la saga.
Además visitaríamos uno de los castillos más emblemáticos de Escocia: el Eilean Donan Castle. Este castillo es conocido mundialmente gracias a la película "Los Inmortales", protagonizada por Christopher Lambert y Sean Connery, además de aparecer en otros films como "El mundo nunca es suficiente" de James Bond. Es posiblemente uno de los lugares más reconocibles y fotografiados de las Highlands. Nuestro final de ruta era Fort William.

Había llovido durante toda la noche y había soplado un fuerte viento. El debilitado huracán Bertha se había convertido en una permanente lluvia. Como es habitual en los Janonautas nos levantamos pronto y tras tomar un copioso Scotland Breakfast nos pusimos en marcha. Al salir notamos que hacía más frio que en días anteriores. El coche marcaba 13 grados y en algunos momentos del trayecto bajaba hasta los 11 grados. Hicimos una parada técnica en Portree para repostar y comprar algún recuerdo. De vuelta al coche tomamos la dirección que nos llevaba a abandonar la isla.
De camino paramos junto a la carretera para hacer unas fotos a las famosas y lanudas vacas de las Highlands.

Nuestra primera parada era el Eilean Donan Castle. Cuando estuvimos lo suficientemente cerca paramos junto a la carretera para hacerle unas fotos. Desde donde estábamos parecía el decorado de una película.

Eilean Donan significa Isla de Donan en gaélico. Donan fue un obispo y santo irlandés que viajó a Escocia hacia el año 580 para predicar la fe católica. El castillo representa un símbolo de los levantamientos Jacobitas. Éstos consistieron en varias revueltas de los habitantes de las Highlands, en su mayoria de religión católica, contra los reyes protestantes de Inglaterra. Tenían como finalidad devolver el trono de Escocia a los descendientes de los Estuardos.
Los levantamientos jacobitas más importantes se produjeron en los años 1715 y 1745. En el primero de ellos el deseo de los rebeldes era instaurar en el trono a Jacobo VIII. Su padre había sido depuesto en 1688. Este levantamiento fue sofocado en la batalla de Sheriffmuir. El segundo se produjo en 1745 y pretendía poner en el trono a Carlos Eduardo de Estuardo (conocido por sus seguidores como Bonnie Prince Charlie). Sin la prometida ayuda de los franceses la rebelión acabó con la matanza de Culloden. Además del fin de las aspiraciones jacobitas, acabó con el sistema de clanes y suposo la supresión de la cultura de las Highlands durante más de un siglo.

Seguimos un poco más y aparcamos en el parking gratuito del castillo. Desde esta zona hay una buena vista del edificio, lástima que seguía lloviendo y se nos hacía incómodo tomar fotos.

Nos dirigimos hacia las taquillas y compramos las entradas para la visita del interior. Las entradas para este castillo no están incluidas en la Scotland Explorer Pass.
El castillo fue construido en el siglo XIII en la confluencia de tres rías, sobre una pequeña isla. A orillas del lago Duich y accesible tan sólo por un puente de piedra, este hecho lo convirtió en una inexpugnable fortaleza en su época.

El castillo fue destruido en diversas ocasiones y totalmente arrasado por el ejército inglés en el siglo XVIII. Actualmente está reconstruido. Trabajo que realizó el que es su dueño desde 1911, John MacRae, del clan del mismo nombre, que compró la isla en la que está situado el castillo. La reconstrucción del castillo finalizó en 1932.

A pesar del mal día que hacía había muchos turistas y sobre todo muchos grupos de viajes organizados. Lo primero que hicimos fue visitar el exterior y el patio del castillo ya que vimos como un numeroso grupo de turistas rusos accedía al interior y quisimos esquivarlos.

Para visitar el interior accedimos por una bonita puerta de piedra. Todas las estancias fueron restauradas manteniendo el aspecto que tenían en el siglo XVIII. La visita nos resultó agobiante debido a la gran cantidad de turistas. Nos pareció mucho más interesante el exterior y las vistas. No está permitido realizar fotos del interior del castillo.

En los jardines había una gran placa conmemorativa dedicada a los miembros del clan MacRae muertos durante la Primera Guerra Mundial.En los jardines había una gran placa conmemorativa dedicada a los miembros del clan MacRae muertos durante la Primera Guerra Mundial.

Nos despedimos del bonito Eilean Donan Castle desde las terrazas sobre el tranquilo lago Duich.

Seguimos nuestro camino dirección Fort William. Esta ciudad es la más importante de la costa oeste y es donde íbamos a pasar la noche. Está situada a los pies del pico más alto del Reino Unido, el Ben Nevis, de 1.343 metros de altura.
La ciudad también era conocida por la fortaleza que llevaba su nombre y que fue construida por orden de Oliver Cromwell durante la invasión inglesa de Escocia. De esta fortaleza no queda ni rastro.
Al llegar nos fuimos directamente al B&B que teníamos reservado para pasar la noche. Se trata del Myrtle Bank Guest House.
La ciudad también era conocida por la fortaleza que llevaba su nombre y que fue construida por orden de Oliver Cromwell durante la invasión inglesa de Escocia. De esta fortaleza no queda ni rastro.
Al llegar nos fuimos directamente al B&B que teníamos reservado para pasar la noche. Se trata del Myrtle Bank Guest House.

El B&B constaba de dos edificios contíguos. En uno de ellos estaba la recepción junto con algunas habitaciones y en el otro, el que nosotros ocupamos, había sólo habitaciones y el salón del desayuno.

La habitación era muy amplía así como el baño. Nuestra hija durmió en un plegatín delante de la cama principal. Fue uno de los alojamientos más cómodos y amplios en los que estuvimos.

Desde la habitación teníamos unas bonitas vistas del Loch Linnhe.

Tras dejar el equipaje en la habitación nos dirigimos a la estación de trenes de Fort William. A las 14:30 horas teníamos reservada la experiencia en el Jacobite Steam Train. Pasamos por High Street, la calle más comercial de la ciudad que es peatonal. En ella nos encontramos con un grupo de gaiteros.


Justo antes de llegar a la estación nos encontramos con la St. Andrew's Church y su pequeño cementerio.

Llegamos a la estación y nuestro tren ya nos estaba esperando.

El Jacobite Steam Train es un tren con una locomotora de vapor que actualmente funciona como tren turístico y que cubre la ruta Fort William-Mallaig. Esta ruta fue inaugurada en 1901 y pretendía comunicar la zona montañosa de Fort William con el océano Atlántico. En 1967 todas las locomotoras de vapor fueron sustituidas por locomotoras diesel.
A partir de 1984 esta ruta volvió a funcionar de forma continuada, como reclamo turístico, y se recuperó la locomotora de vapor original. Actualmente el servicio cuenta con dos locomotoras de vapor. En la que nosotros hicimos el viaje se había construido en 1940.
El tren funciona de mayo a octubre y realiza dos viajes diarios entre Fort William y Mallaig. El recorrido es de 84 millas (unos 135 kilómetros aproximadamente) y la duración es de dos horas. Los billetes están muy buscados y nosotros en febrero ya realizamos la reserva para el mes de agosto.

La caldera de la locomotora se alimenta con carbón. Además del maquinista, en el tren iban dos operarios más para ir reponiendo el combustible.

El tren estaba allí rodeado de turistas, sobre todo familias con niños, haciéndole fotos. Esta situación se repitió durante todo el trayecto ya que, tanto en las estaciones en las que paramos como al pasar por el viaducto, había mucha gente con las cámaras a punto.

Nuestro vagón era el primero. Hicimos la reserva para viajar en primera clase ya que son los vagones que están decorados como en la época en que se construyó el tren. La parte que se corresponde con segunda clase son vagones actuales y sin ningún tipo de encanto.
Subimos al vagón y buscamos nuestros asientos: cuatro sillones tapizados alrededor de una mesa con una lámpara. En la mesa estaban colocadas las tazas para servirnos el té una vez que el tren partiera.
Subimos al vagón y buscamos nuestros asientos: cuatro sillones tapizados alrededor de una mesa con una lámpara. En la mesa estaban colocadas las tazas para servirnos el té una vez que el tren partiera.

Con un poco de retraso nos pusimos en marcha. Fue en ese momento en el que nos sirvieron el té con pastas. El té puede ser sustituido por café o zumos según el gusto de cada uno.

Íbamos viendo el paisaje a través de la ventana, aunque la bruma nos acompañaba. La zona por la que pasamos es la que rodea al Ben Nevis, la montaña más alta de Reino Unido.

El plato fuerte del viaje era cuando el tren pasaba por el viaducto de Glenfinnan, construido sobre 21 arcos. Como hemos comentado anteriormente se hizo famoso gracias a las películas de Harry Potter. En este trayecto nos resultó imposible realizar una buena foto ya que íbamos en el primer vagón y no se apreciaba la curva del tren. Lo intentaríamos a la vuelta.

Cuando se cruza el viaducto se tienen unas buenas vistas del monumento jacobita de Glenfinnan y del Loch Shiel. Al día siguiente visitaríamos con más detalle el lugar. El tren atraviesa una zona histórica vinculada a las revueltas jacobitas del siglo XVIII.

Tras el paso por el viaducto el tren hizo su primera parada. Se trata de la estación de Glenfinnan en la que se podía visitar un pequeño museo sobre la historia de los trenes en las Highlands. En la estación hay varios objetos relacionados con Harry Potter.

Seguimos disfrutando de las vistas hasta que la lluvia hizo acto de presencia y nos empañó los cristales. Por lo menos pudimos ver el Loch Morar, el lago de agua dulce más profundo de Escocia.

La siguiente parada fue Arisaig, un pequeño pueblo, que según se indicaba en el apeadero, es la estación en tierra firme más occidental de Reino Unido.

Antes de llegar a Mallaig pasamos por la playa donde se rodaron algunas escenas de las películas "Los Inmortales" y "Local Hero".

Al llegar a la estación de Mallaig bajamos del tren. La parada era de dos horas. Seguía lloviendo y hacía bastante frío.

Mallaig es un pueblo pequeño, a orillas del océano Atlántico, con un puerto que cuenta con una activa flota pesquera. Además de aquí salen ferrys que llevan a la Isla de Skye y a las pequeñas islas cercanas. Pero no tiene nada de interés y el tiempo hizo que no pudiéramos pasear por el puerto.

Después de caminar un rato bajo la lluvia decidimos buscar un lugar donde cenar. La oferta de restaurantes de pescado alrededor del puerto era amplia y variada. Nosotros nos decidimos por el restaurante The Cabin Restaurant.
Cenamos a base de pescado fresco de las capturas del día y todo estaba muy bueno. Además estuvimos muy calentitos en el local.
Cenamos a base de pescado fresco de las capturas del día y todo estaba muy bueno. Además estuvimos muy calentitos en el local.

A la hora prevista volvimos a subir al tren que nos devolvería a Fort William. Nos ofrecieron otro té con pastas que con el frío que habíamos pasado en Mallaig agradecimos. El tren realizó las mismas paradas que a la ida y en uno de los vagones se habilitó una pequeña tienda con recuerdos del ferrocarril y de las películas de Harry Potter.
Cuando nos íbamos acercando al viaducto, nos fuimos hacia la zona que separa los compartimentos para poder hacer la foto del tren mientras lo cruzaba. En este trayecto nuestro vagón era el último y se podía tomar una buena imagen pero había otro viajero grabando en video y no nos dejó tomar ni una sola foto. Un señor que estaba sentado cerca de nosotros se ofreció a enviarnos la que había hecho él, a través de correo electrónico, aunque a día de hoy la foto no nos ha llegado.
A la hora prevista llegamos a Fort William, el viaje había acabado. Para los Janonautas había sido una gran experiencia y la recomendamos sin duda.
A la hora prevista llegamos a Fort William, el viaje había acabado. Para los Janonautas había sido una gran experiencia y la recomendamos sin duda.
Gastos del día:
• Combustible: 52 libras
• Entrada Eilean Donan Castle: 16 libras
• Meal deal: 9 libras
• Myrtle Bank Guest House: 120 libras habitación triple con desayuno
• Souvenirs: 14,14 libras
• Jacobite Steam Train 151 libras.
• Cena en The Cabin Restaurant 48,5 libras.