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Antes de seguir con el relato os dejo algo de información sobre la isla:
"Cozumel es una isla tranquila, encantadora, cuyo principal atractivo es el buceo. Conocida como Ah-Cuzamil-Peten (Isla de las Golondrinas) por sus primeros habitantes, es la isla más grande y más poblada de México.
Gracias a un documental de Jaques Cousteau acerca de sus arrecifes de primera clase ha sido un destino de buceo internacional favorito desde 1961. Es literalmente una alberca de sitios de buceo – cerca de 100 sitios de buceo han sido identificados alrededor de Cozumel, y al menos una docena de ellos son suficientemente bajos para practicar snorkel.
• Área: 301 kilómetros cuadrados
• Población: 67,000 habitantes
La isla mide alrededor de 48 km de norte a sur y 14,8 km de este a oeste, lo que la convierte en la tercera isla más grande de México después de la Isla del Tiburón en el estado de Sonora y la Isla Ángel de la Guarda en Baja California, y se encuentra 71 kilómetros al sur de Cancún.
El único poblado de la isla, San Miguel de Cozumel, es fácil de recorrer a pie. Su camino frente al mar es la Avenida Rafael Melgar, a lo largo de Melgar al sur del muelle del ferry principal (el "Muelle Fiscal") es una playa de arena estrecha. La plaza principal, Plaza del Sol, está justo enfrente del muelle.
Las antiguas ruinas mayas se encuentran en el norte y el sur de partes de la isla. Las mejores playas, Playas San Francisco y Palancar, empiezan a 14km al sur de San Miguel, mientras que los arrecifes de coral de fama mundial son frente a las costas del sur de la isla.
Se puede llegar en barco o en avión, ya que cuenta con un aeropuerto internacional. Para hospedarse hay hoteles de todas las categorías.
En todo el litoral de la isla se pueden encontrar playas de blanca arena y el mar color turquesa de gran belleza.
La vía más corta para llegar a Cozumel es por avión. Cozumel cuenta con en Aeropuerto Internacional de Cozumel, localizado en la zona norte de Cozumel a 10 minutos del centro de la ciudad. Hay vuelos desde la Ciudad de México aunque su frecuencia no es diaria. Es más fácil el arribo a la isla volando a Cancún para posteriormente utilizar el ferry a la isla.
El turismo predominante, como se puede visualizar en las banderas de los respectivos hoteles, proviene de EE.UU., Canadá, Brasil y España. La mayoría de los isleños venden sus productos en dólares debido a la gran influencia norteamericana a la isla."
Esta vez el barco atraco directamente en Cozumel, así que bajamos del barco y ya pisamos tierras mejicanas, y así nos esperaban en el puerto y nos dieron la bienvenida al
país.
Para salir del muelle, teníamos que pasar obligatoriamente por un pasillo donde vendían perfumes, joyas, y todo tipo de cosas típicas de Mejico, desde bebida hasta todo tipo de souvenirs. Vaya negocio que tienen montado, se nota en estas islas cuando llega un crucero y aprovechan bien el turismo.
Al llegar a la zona donde estaban los taxis, excursiones, y las empresas de alquiler de coche, de nuevo nos encontramos un poco perdidos.
La idea era visitar Chankanaab Park, hacer snorkel allí y despues recorrer el resto de la isla. Esta vez la escala era hasta las 12 de la noche, así que había tiempo para poder hacerlo.
Preguntamos a una especie de van que ofrecía transporte a los sitios mas emblemáticos de Cozumel, y para ir a Chankanaab nos pedían 12$, pero estaba tan cerca del muelle de cruceros que lo vimos muy caro, y además que hacíamos el resto del día? Gastanos un dineral en taxis? Ni hablar….
Así que fuimos hacia las dos empresas de alquiler de coches, una era Alamo, muy conocida en USA, y la otra se llamaba Target, que no nos sonaba para nada. Fuimos primero a Alamo, pero no queríamos dar la tarjeta de crédito, porque había leído una mala experiencia de algún forero, así que le dijimos que sólo teníamos una tarjeta de debito que realmente era de prepago y que debía tener un saldo de unos 30€. Y tal como esperábamos, nos dijeron que sin tarjeta no se podía alquilar ningún coche. En eso que los de la otra empresa, la target, que estaban a la expectativa, nos llamaron diciendo que alli no había ningún problema y que podíamos alquilar con la tarjeta de debito. Así que para alla que fuimos, aunque la verdad que no daba la impresión de ser una empresa muy seria, pero para alquilar un coche por unas horas, ya era mas que suficiente. Nos ofrecieron un coche normalito por 40$ mas 13$ del seguro y 5$ mas por la sillita de la cría se quedó en 60$ casi. La verdad es que la silla estaba que daba pena, estaba sucia y los cinturones para agarrar a la niña no iban muy bien, pero era lo que había, y gracias que había silla!
Nos dieron un mapa de la isla y nos dijeron que no había perdida, que únicamente había una carretera que recorría la isla y que la vuelta entera eran unos 70kms. Debíamos estar de vuelta a las 7pm para devolver el coche
El coche tampoco es que fuera una maravilla, yo lo único que pedía es que no nos dejara tirados en mitad de la isla. La verdad es que eran un poco desastre, nos dieron los preperaron los papeles de un coche y al final nos dieron otro sin cambiar la documentación, en fin…..
Y ya con nuestro carro, nos fuimos directos a Chankannab, que se encuentra a apenas 5kms de la terminal de cruceros “Puerta Maya”
Laguna de Chankanab es un cuerpo de agua comunicada por un túnel subterráneo con el mar en donde puede observarse, como en un acuario natural la fauna y flora marina.
Chankanaab, que en español significa “pequeño mar” se encuentra dentro del Parque Nacional Marino de Cozumel. Se puede hacer snorkel o buceo, bañarte en la playa , relajarte en sus hamacas, ver un show de los leones marinos, e incluso hacerte un masaje.
La entrada cuesta 21$ para los adultos, y 14$ para los niños de 3 a 11 años, aunque Raúl rápidamente dijo que la niña aún no había cumplido los 3 años, yo pense no hay quien se lo crea, porque encima es un poco más alta de lo normal y estaba a 4 meses de los 4 años, pero no se si el hombre se hizo el loco o realmente se lo creyo, el caso es que no pagamos nada por la entrada de la peque. Bueno quien no ha usado esa mentira piadosa nunca con los niños, sobretodo para las entradas de la piscina municipal jajajaja.
Aparte de actividades acuáticas, de aventura y relacionadas con la fauna y flora, también se puede hacer una degustación de tequilas.
Caminando llegamos a la zona de snorkel, donde tienes una hamacas con sombra y algunas de esas moviles amarradas a las palmeras, un pequeño paraíso para relajarte. Descansamos unos minutos en las hamacas pero decidimos ir a ver el espectáculo de lobos marinos que empezaba en unos 20 minutos, en la zona de Dolphin Discovery
Despues nos fuimos a ver el espectáculo de lobos marinos, y mientras esperábamos a que comenzara, nos bañamos en la piscina que había fuera, e incluía un bar al que podías llegar nadando para tomarte algo.
El espectáculo estuvo muy bien, fueron saliendo diferentes lobos marinos, los iban presentando y hacían demostraciones de lo que eran capaces de hacer, a la vez que nos explicaban y concienciaban sobre el cuidado de estos animales.
Se notaba que los leones adoraba a su entrenadora y cuidadora.
Alli enfrente estaba el delfinario, pregunte cuanto costaba y me dijeron que 67$ un adulto e incluía un niño, lo encontré bastante bien de precio, y le dije a Lucía si querí hacerlo conmigo, pero dijo que no y yo no le insistí más, supongo que le daba respeto y todavía es muy pequeña, y además cuento con tener muchas mas oportunidades de hacerlo.
Despues nos fuimos a comer al restaurante del Dolphin Discovery, donde nos atendio muy bien un chico mejicano. Podiamos comer un menú o bufe por 17$ o bien pedir platos sueltos. Decidimos pedir platos sueltos, los precios estaban en pesos, y el chico nos hacía las conversiones de todo lo que le preguntábamos.
Yo pedí unos nachos con guacamole que estaban buenísimos, Lucía un hot dog y Raul unos burritos de camarones y compartimos los platos. Todo estaba buenísimo.
Raul me dijo que con mi permiso se iba a beber una cerveza. Curiosamente no tenían Corona, l que aquí conocemos por Coronita, y le ofrecieron la Sol, que es del estilo.
Hay varios restaurantes de comida típica en el parque
Despues de comer nos dimos cuenta que nos habíamos dejado el tubo y las gafas de snorkel en el barco, que habían venido expresamente desde España. Que desastre….pues nada teníamos dos opciones: alquilar el equipo por 5$ o comprar unos gafas y tubo nuevos por 17$, y por la diferencia de precio optamos por comprarlo nuevo.
Nos turnamos para entrar y lo que vimos fue una auténtica maravilla! Peces de colores, corales, había una especie de cueva en las rocas a la que no nos atrevimos a entrar ninguno de los dos jajaja. Los peces estaban ahí mismo casi rozándonos, algunos bastante grandes.
Lastima que no tuviéramos cámara de fotos acuática, por lo que no pudimos sacar fotos, pero bueno ahí lo llevamos en nuestra retina y en nuestros recuerdos del viaje.
Había la posibilidad de alquilar una Go-Pro con tarjeta de memoria por 40$, y la tarjeta te la quedabas para ti con las fotos que hubieras hecho, ahora me arrepiento de no haberlo cogido.
Nos relajamos unos minutos en las hamacas antes de irnos mientras admirábamos el paisaje paradisiaco
Y despues el ultimo paseo por el parque, estuvimos viendo el cocodrilario, nos cruzamos con alguna iguana, pasamos por el jardín botánico y la tirolesa.
Y ahora empezaba nuestra rutilla por Cozumel!
Por la carretera habían chiringuitos donde podías comprar un recuerdo o tomar una cerveza
Como íbamos despacito podía ir haciendo fotos del paisaje y de los chiringuitos
Aunque alguno se me escapó, como una maravilla de hamacas donde te hacían un masaje enfrente del mar.
La carretera va bordeando la costa, nos cruzábamos con poca gente la verdad, se respiraba un ambiente de lo mas tranquilo, de desconexión total……….
Cuando veíamos un sitio que nos gustaba, nos parabamos para mirar recuerdos o hacer algunas fotos
Paramos en el famoso parque de Punta Sur, pero había que pagar 14$ de entrada y tampoco teníamos mucho tiempo. Aparte Lucía se había quedado dormida, y lo que hacíamos cuando parabamos era turnarnos para bajar del coche y ver lo que había por la zona y hacer fotos
Tambien nos encontramos con algún que otro resort de lujo, como el Iberostar Cozumel, que tenía una pinta de ser una pasada.
En uno de los chiringuitos que paramos, que era bar, tienda de recuerdos y todo lo que necesitaras, me llamaron la atención unos colgantes hechos con dientes de tiburón y piedras de colores. Pregunte al chico mejicano y me dijo que costaban 15$ pero que me lo dejaba por 10$. Había pensado llevárselo de recuerdo a mis 4 amigas y mis 2 hermanas, así que era mucho dinero y le dije que era demasiado porque necesitaba 6 y él insistió y me dijo:
-Pero cuanto te quieres gastar?
-Pues no lo sé, pero 60$ es mucho, tengo que hacer mas regalos aparte de estos. No te preocupes, buscare otra cosa.
Y el hombre me dice que me los deja por 30$ los seis, y yo que no, no te preocupes buscare otra cosa y ya está. Pero el hombre debio pensar: a ver cuando vuelvo a vender 6 collares así de golpe. Me insistió tanto que vi que no me iba a dejar escapar, y yo no iba a encontrar un regalo más chulo y autentico que ese.
Seguimos unos kilómetros mas pero ya teníamos ganas de pegarnos un chapuzon en aguas mejicanas, así que paramos en una playa y sacamos a Lucia de la silla y la tumbamos en la arena sobre la toalla, pero enseguida se despertó
La playa era muy bonita, con aguas cristalinas y prácticamente desierta, tan solo habían una familia de mejicanos y un par de turistas.
Lo único malo es que habían bastantes algas, pero bueno no fue impedimento para disfrutar del baño.
Se nota que la prioridad de la isla es mantenerla limpia y protegida
Se pueden ver mensajes como estos por toda la isla.
Despues del baño, ya seguimos con nuestro recorrido y nos fuimos acercando poco a poco a la civilización, se notaba que estábamos llegando a San Miguel
De repente nos encontramos con cruces, motos, rotondas…mucha gente por la calle, con lo bien que habíamos ido hasta el momento. Raúl se empezó a poner nervioso, porque al ir a parar en una rotonda, dos mejicanos que iban detrás nuestro en moto casi nos dan, y encima nos dijeron algo como que por que habíamos parado o algo así. Se ve que alli no hay que parar para entrar en una rotonda o que? No sé, el caso es que incluso dudamos de estar por el camino correcto, pues aunque en la agencia de alquiler nos habían dicho que había que seguir la carretera, en este punto ya no se veía tan claro….
Para colmo nos paramos a peguntarles a unos mejicanos que habían trabajando en la carretera. Error…..el señor mayor que se apoya en la ventanilla con los brazos cruzados, y a la pregunta de si vamos bien para ir a la terminal de cruceros, dudas dudas y más dudas. No sé, no entiendo, que se yo….Raul se empezó a poner nervioso, yo que ya lo conozco sabía que estaba deseando seguir, porque la conversación no llegaba a ningún sitio, pero el señor no levantaba los brazos de la ventanilla, y yo y Lucía viendo la situación desde la parte de atrás del coche. Por fin nos fuimos y seguimos un poco adelante, esta vez preguntamos a un chico joven que estaba en la puerta de una tienda y nos dijo sí sí vais bien por aquí, todo recto y llegais. La verdad es que yo tambien estaba un poco inquieta, teníamos que poner gasolina aun y no quedaba mucho para las 7pm, si nos perdíamos no nos daría tiempo.
Pero por fin llegamos a la avenida Rafael Melgar, esa zona ya se veía bastante turística, por allí estaba el Hard Rock café que vimos desde el coche y bastantes bares, restaurantes y centros comerciales, hoteles, y se veían bastantes turistas.
Encontramos una gasolinera y despues de llenar el deposito directos a devolver el coche. Justo a tiempo!
Aprovechando que el barco estaba allí mismo y como estábamos un poco incomodos por la sal, la arena, el sudor, decidimos ir a l barco para darnos una ducha rápida y volver a la zona de la Puerta Maya, mucho más bonita que la de Gran Cayman.
Mientras nosotros entrabamos en el barco a ducharnos, la gente joven del servicio salía en grupo imagino que aprovecharían para pegarse una juerguecilla.
Volvimos a salir rápido, justo cuando se estaba poniendo el sol y el cielo tenía un tono anaranjado muy bonito
Estuvimos dando un paseo por la zona, mirando recuerdos, comprando el iman para ampliar la colección de nuestra nevera….
Habían 3 o 4 terrazas por la zona para cenar y para tomar algo. Nosotros decidimos esperar y pedir unas porciones de pizza cuando subiéramos al barco y así nos ahorrábamos unos dólares, pues los sándwiches y las pizzas se servían las 24 horas del día. Así que nos sentamos a tomar una cerveza en “Three Amigos”, una taberna mejicana que tiene sitios divertidos y curiosos como por ejemplo una mesa y sillas altísimas o unos burros para montarte encima.
Esa cerveza, la primera en todo el viaje, me supo a gloria
Al subir de nuevo al barco, nos dimos cuenta de que no habíamos sido los únicos en querer ahorrar unos dolarcillos jejeje, menuda cola había! Pero ya no habían más posibilidades, así que tocaba esperar. Bueno sí que la había, ya que, cuando acabamos de comérnoslas, empezaba una fiesta mejicana en cubierta, con comida incluida, aunque ya eran más de las 12. Nosotros en nuestra línea, para que íbamos a leer la programación del barco, vaya felicidad que llevábamos encima.
La fiesta estaba a reventar y muy animada, ya que al día siguiente no había nada pero nada que hacer, solo disfrutar del barco.
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