7 de agosto 2015
Llegamos a Bergen, nuestra primera escala, antes de las 8,00 h como hora prevista.
El día como podéis ver en la siguiente foto desde la ventana cristalera del camarote, amanecía nublado y lluvioso.

Teníamos que subir al Monte Floyen y la mejor forma era con el famoso funicular de la ciudad. Temíamos colas y previamente habíamos comprado los tickets por internet. Sobre las 8,25 h ya estábamos allí. Este sería el recorrido del barco al funicular:

Y antes una vez que salimos del funicular en lugar de bajar subimos 10 minutos más arriba. Y la naturaleza nos regaló estas instantaneas, mezcladas de niebla y chirimiri.



Escogimos el descenso a pie para visitar la ciudad.


Nuestro recorrido fue por sus calles, Catedral y la Iglesia de La Cruz





Las Casas Rojas y el Mercado del Pescado.


Me sorprendió este anciano dando de comer a las palomas y alguna gaviota que se entrometía, mientras arrastraba su bicicleta.

Estuvimos charlando con una dependienta, paisana nuestra, hacia las temporadas trabajando en Bergen, en el Mercado del Pescado.


Sobre las 13,30 h ya estábamos a bordo de nuevo para comer en el barco.


A las 17,00 h el Costa Fortuna zarpaba rumbo a Hellesylt.