Bueno he decidido llamar a este dia, el "día 0". Empezamos el camino el día 3 de Septiembre, sábado, a las 7:27 de la mañana debemos coger el tren en la estación de Oviedo dirección Madrid. Llegamos a Madrid a la estación de Chamartín hacia las 11:30. Y aquí nos encontramos con el problema que ya os mencioné de los vuelos... nuestro vuelo sale a las 21:00 por lo que tenemos que pasar el día en Madrid haciendo tiempo. No hay nada importante que reseñar en el día por Madrid, dimos unas vueltas por Sol, fuimos a dormir una siestecilla al retiro y de vuelta a la estación de Chamartín para coger un tren que nos llevara a Barajas.

Y antes de abandonar la parte Madrid, os recomiendo si tenéis que estar de paso por Madrid como nosotros, vayáis al "museo del jamón", se encuentra cerca de sol y hay buenas tapas con la consumición y a buen precio, nosotros prácticamente comimos con sus tapas...

Una vez en Chamartín nos empezamos a estresar un poco porque no vemos en las pantallas ningun tren que vaya dirección Barajas y decidimos preguntar a una chica que de renfe que estaba por allí. Nos dice que no nos preocupemos que suelen poner el tren en la pantallita cuando faltan unos 5 minutos o menos así que ya sabéis no esperéis mucha anticipación... Nos sentamos a esperar por ahi ya con nuestro billetito en mano ( 2,60 euros aprox. por cabeza) hasta que se anuncia el andén y vamos a cogerlo sin problema.
Ya en Barajas, el tren te deja en la T4 y nuestro avión sale de la T1 por lo que cogemos el bus que hay entre terminales y llegamos perfectamente. Todo transcurre sin incidentes, como ya dije en la etapa anterior respecto a Wizz Air no tuvimos ningún inconveniente llevando pagado un equipaje de cabina grande y uno pequeño. El vuelo estuvo bien, sin contratiempos y llegamos a Budapest al aeropuerto a la hora prevista.
En el aeropuerto, ya os comente también que habíamos contratado un transporte hasta el alojamiento, dimos la dirección por Internet pero aun así por asegurar la llevamos impresa también. Justo delante de la puerta de llegadas del aeropuerto te espera un responsable de la agencia con un cartel con varios nombres y va apuntando quien va llegando y en el mismo orden que llega la gente llama a sus taxis para que los recojan. Tardamos apenas 10 minutos en montarnos en el taxi. Un señor muy agradable, nos entendimos perfectamente en inglés y tardamos aproximadamente unos 20 minutos en llegar a la misma puerta del apartamento. El precio fue el acordado previamente 22 euros.
Ahora... el alojamiento... Como llegábamos a esas horas tuvimos que avisar a nuestra "casera" porque su horario normal para entrega de llaves es al mediodía, sin embargo no nos puso ningun impedimento por las horas y nos dijo que estaría allí esperándonos. Y así fue, nada mas llegar nosotros apareció ella con un amigo a abrirnos la puerta y entregarnos las llaves. Nos dejaron las llaves de la habitación, de la puerta del piso y del portón de la calle. Era un edificio muy peculiar y me llamo mucho la atención, parecía muy dejado y no daba muy buena impresión, pero el piso del hotel Linden era como si hubiera salido enterito de Ikea, todo estaba nuevo y estaba en perfectas condiciones así que no me quejo en absoluto.

Bueno pues ya con las llaves e instalados en nuestra adorable habitación, nos tiramos en plancha prácticamente a la cama por el cansancio y el ajetreo del día 0...
A cargar las pilas para el día 1...
