Amanece en Höfn y nos ponemos rumbo a nuestro destino de hoy: Egilsstadir, uno de los pueblos de los fiordos del Este de Islandia.
La ruta que hacemos hoy nos deja boquiabiertos, yo tenía a Islandia por un país bastante plano, pues bien, hoy me da la sensación de estar en Suiza!!
La carretera sigue algo helada, sobre todo por los bordes, el viento no sopla tan fuerte como ayer, pero aún de vez en cuando hay rachas que hacen moverse el coche.
La primera parada que hacemos por el camino es en Djúpivogur, un pueblo de pescadores bastante pequeño, con vistas preciosas:

Lo que más me llamó la atención, es que bordeando el puerto, tiene unas curiosas esculturas de unos huevos (Eggin í Gleðivík), se trata de una representación de los huevos de las aves que hay por esa zona:

Proseguimos nuestro camino bordeando los fiordos, nos bajamos en un apartadero para sacar alguna foto, el mar y las montañas nevadas es una estampa que nos parece una pasada.

No me voy a extender, así se suceden varios fiordos (bordeamos Berufjördur , Stödvarfjordur, Fáskrúdsfjördur, y paramos en Reydarfjördur a echar gasolina), ya estamos muy cerca de Egilsstadir.
Atravesamos un puente de 5 km, y nada más salir, la nevada padre nos da la bienvenida

Nuevamente como hicimos bordeando el Vatnajökull, pusimos la camper a 40-50 km/h y a seguir, lo bueno es que no resbalaba y el viento había cesado bastante, así que sólo era nieve:

Llegamos a Egilsstadir sin incidencias, el camping: Camping Egilsstadir, abierto todo el año, con una zona común en la que hay duchas, baños, un fregadero, lavadoras y secadora, lo malo, no hay cocina, nosotros nos dedicamos a hacernos unas salchichas y huevos fritos en el camping gas bajo la nieve

El precio es de 1400 coronas cada uno.
Aparcamos la camper y ya no la tocamos más hasta el día siguiente, esa tarde, como nevaba bastante y ya no podríamos salir de allí, y además con el cielo cubierto (cero posibilidad de auroras), nos decidimos por ir a disfrutar de las famosas piscinas al aire libre, nos costó 500 coronas (en el Google maps pusimos: Egilsstadir swimming pool y nos llevó directamente).
La piscina súper calentita, pero el cambio de temperatura con el exterior (estábamos a 0ºC) es brutal!.
Fuimos a hacer unas cervezas con un español que conocimos en la piscina y a cenar en el camping.
La verdad es que poca cosa hemos hecho en Egilsstadir con la que está cayendo, al poco de llegar ya era de noche, las carreteras completamente tapadas por la nieve, lo mejor ha sido el camino donde sí hemos disfrutado de los paisajes.
Al día siguiente toca dar media vuelta y visitar las cosas que nos hemos dejado por ver por el camino.
Aparte queremos estar en Reykjavik pasado mañana porque hay una buena predicción de auroras boreales
