Maldivas! al fin aguas turquesas, cálidas, transparentes, realmente un paraíso que soñábamos conocer!


En el aeropuerto cambiamos algo de dinero, tomamos el ferry público (USD 1) que lleva a Male y allí preguntamos por la que va a Rasdhoo. Para aprovechar el tiempo fuimos en la rápida aunque es más cara(USD 40). Me decidí por ésta isla estando en India y reservé alojamiento por precaución. Finalmente resultó acertado ya que al ingresar a Maldivas te preguntan dónde te alojarás. No sé qué sucede si no lo tienes reservado, quizás nada.

Nos estaban esperando del Banana Residence (USD 60) para trasladar nuestro equipaje en carretillas. Sobraba espacio para nuestras 2 pequeñas maletas de mano. Nos alojamos en la habitación 206, sin ventana



Como no tenían libre habitación con ventana




Al día siguiente nos llevaron en un bote al “sand bank”, espectacular!!! Lo mejor de Maldivas. Nos dejaron un rato, había un matrimonio con niño italianos pasando el día.



Mas tarde regresaron para acompañarnos en el snorkel ya que Itxi no se animaba


Fue un día maravilloso. Maldivas es un paraíso que se debe conocer


Al día siguiente hicimos mas inmersiones en diferentes puntos, disfrutamos el snorkel en esa isla.

Fuimos a cenar a otro restoran que estaba muy bien ambientado y la comida muy rica. Toda una sorpresa esta isla

Nos insistían en quedarnos un día más allí, pero decidimos seguir a Diffushi.


Regresamos a Male con lancha rápida y allí tomaríamos el ferry público a Diffushi. Estos traslados insumen un día entero.

Nuevamente en Male. Comenzamos a caminar atravesando la isla para llegar a la terminal del ferry público. El trayecto se hace caminando en unos 30 minutos, no valía la pena tomar taxi ya que nuestro equipaje era liviano. Con MapsMe en mano se llega muy bien. En el camino miramos vidrieras, compramos unas zapatillas y una SIM Card para tener wifi sin problemas en todo momento. Al llegar a la terminal de Ferries Itxi se dio cuenta que le faltaba el pasaporte




La lancha pública no tiene la comodidad de las privadas....también el precio es muy diferente. Pero como el día ya estaba perdido no merecía la pena gastar para llegar más temprano.

Llegamos a Diffushi y resultó otra grata sorpresa:bkt( . Es difícil sacar una foto destacada de estas islas donde lo maravilloso es el color de las aguas, su transparencia y las playas de arena finísima y blanca.

Nos alojamos en el Hotel Rayu Hiya (U$S 143 con desayuno). Muy buen hotel, desayuno, amplia y confortable habitación con ventanal



En Diffushi nos dedicamos a disfrutar de sus playas. Aunque un muchacho ofrecía inmersiones en lancha, no hicimos ninguna. Por lo que había leído no se destacaba por corales llamativos. Caminamos la pequeña isla descubriendo otra playa y caminos con tupida vegetación. La zona céntrica tenía una hermosa arboleda a la orilla de la costa, un barcito donde servían un riquísimo sandwich de tuna





El día que nos íbamos de Diffushi llovía, por eso no nos costó dejarla. Habíamos disfrutado mucho sus hermosas playas y como población también fue muy agradable. Aguas transparente, mucha vegetación, lindo pueblito para caminar y tomar o comer algo. Muy recomendable!

Inicialmente la idea era ir a Gulli un día, pero como el tiempo estaba lluvioso y nosotras cansadas de traslados decidimos ir directo a Maafushi.
Esta decisión no fue acertada ya que Gulli tiene buenos comentarios y Maafushi nos decepcionó.
Ambos tramos los hicimos en lancha pública



Había leído muchos elogios de la comida y desayuno del Hotel Arena Beach (U$D 85), reconozco que era verdad. Quizás porque era fin de semana la isla estaba llena y tuvimos algun inconveniente.


La reserva era con cama matrimonial, inicialmente nos dieron con dos camas y nos comunicaron que el precio era U$s 125. Dije que nos dieran con cama matrimonial en ese caso. Resultó una habitación muy nueva pero sin ventana






El tiempo en Maafushi no fue tan bueno como en las otras islas. El mar estaba agitado y no era el ideal para las excursiones. Fuimos a un sand bank que no era ni la sombra del de Diffushi, además el oleaje hacía casi imposible subir y bajar de la lancha. El almuerzo estuvo condimentado por arena pues volaba mucha debido al viento. En una inmersión vimos tortugas, fuimos pocos los que bajamos de la lancha ya, insisto, el oleaje era muy fuerte.
Maafushi no nos gustó, mucha edificación, poca vegetación, nada de encanto. La playa es pequeña y ni comparación con Rasdhoo o Diffushi. Al estar cerca de Male y mejor comunicada que otras islas atrae mas locales. Pasamos allí 4 noches .
Volvimos a Male en lancha rápida


