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DÉCIMO DÍA.- KASANE-ELEPHANT SANDS.
Tenemos hasta las 13.30 h que vayamos al aeropuerto la mañana libre. Nos vamos a The Old House a desayunar a las 7.30 h. Hay muchos pájaros en el bebedero del jardín. A las 8.30 h. queremos ir a misa pues es domingo y hay una iglesia católica muy cerca. Me quedó haciendo fotos en the Old House hasta que comience la misa. En el camino de la terraza restaurante al embarcadero, veo antílopes de agua por allí merodeando, mangostas nada asustadizas, facocheros y babuinos. La vida salvaje en Botsuana es otro nivel.
La misa es magnífica, y la comunidad de Kasane canta estupendamente. Es una misa africana africana. Vale la pena asistir. Eso sí, dura hora y media, aviso. Pongo una foto a la salida del oficio, donde toda la comunidad se queda a desayunar junta.
A las diez decidimos ir de nuevo a Chobe, ya por nuestra cuenta y en nuestro 4x4 (imprescindible). Hacemos los caminos del día anterior. Vemos hipopótamos a escasos tres metros y una manada de elefantes nos aparece a igual distancia. Que imponentes son estos bichos. Vemos impalas, kudus y la fauna típica y nos vamos al aeropuerto.
Cuando vamos al aeropuerto, como era de suponer no ha llegado nuestro equipaje. Llaman a TAAG y damos instrucciones de que nos lo manden a Maun donde llegaremos en tres días. Ya nos da igual el equipaje, preferimos que nos lo pierdan y nos indemnicen.
Salimos para Elephant Sands con la prisa propia, porque anochece a las 18 horas. La carretera es una recta hacia el sur sin apenas población y con elefantes por allí merodeando.
Alojamiento.- Llegamos a ELEPHANT SANDS. Un sitio muy muy recomendable para la gente que no haga el viaje con prisas. El alojamiento gira en torno a waterhole. El edificio principal tiene la recepción, restaurante/terraza y piscina. Al lado tiene la zona de acampada y alrededor del waterhole tiene bungalows dispersos. En ese momento hay un elefante bebiendo y la gente de la piscina esta sentada al borde de la terraza observándolo. Nos dan un bungalow genial, diría que el mejor situado. Amplio y en primera fila. Muy confortable la verdad. La reserva la hice por mail directamente con ellos, y me pidieron una transferencia que al ser en pulas no compensa si tu banco te clava una comisión de 28 euros. Tienen que manear otras formas de pago.
Mientras nos instalamos, me fumo un cigarro en el porche del bungalow y los otros se acomodan dentro, y estoy sentado con las piernas estiradas, el elefante abandona la charca y casualidades de la vida, escoge caminar hacia nosotros. Brutal. Pasa a escasos metros y de nuevo casualidad, por detrás viene otro aun mas grande al que el otro tras un bufido tiene que dejarle paso. Este también pasa por el lado nuestro. Durante toda la noche se escucha a los elefantes beber en la charca. Os dejo una foto que hice del momento en la terraza. Del paso de los elefantes hice video. La verdad que en este viaje hice muchísimos videos porque es la forma mas real de enseñarle a familia y amigos como es África.
Nos pegamos una ducha y nos fuimos a cenar. Fuimos caminando con la prudencia de no cruzarnos con ningún elefante. La cena es bufet y esta muy bien. Como no tenemos el equipo de acampada para dormir al día siguiente en Kubu Island, hablamos con el dueño, ya que este alojamiento ofrece excursiones a este singular sitio. Al día siguiente tienen una luxury trip precisamente. Nos alquilarán dos tiendas y las colchonetas camas, con sus sábanas y almohadas por un precio en nada ajustado. Pero que remedio, pensamos. Luego se lo daremos a los de la luxury trip para que lo traigan de regreso y nosotros continuemos nuestro camino.
UNDÉCIMO DÍA.- ELEPHANT SANDS-KUBU ISLAND
No son muchos kilómetros de recorrido, pero al ser los últimos por pistas de tierra se tardarán unas 3 horas y media en llegar.
Desayunamos en Elephant Sands. La terraza es muy agradable y el desayuno bufe abundante. Los mirlos metalizados invaden las mesas buscando comer alguna sobra. Qué colores tiene este pájaro. Hay perdices, amarillos de Mozambique, tórtolas… Nos dan el equipo de acampada y salimos para Kubu.
Paramos en Nata a llenar depósito y comprar dos bidones adicionales porque el dueño de Elephant Sands nos indica que debemos llevar al menos 40 litros de combustible, ya que entre Nata y Maún no hay gasolineras. Tras la parada y un cafelito salimos hacia Maún y ponemos al navegador, porque indicación hacia Kubu no hay ninguna. El navegador nos desvía por un carril y hay empezamos a rodar por zonas de pasto, de mopane, algún baobab, zonas mas cómodas y otras con baches. Son dos horas y media de trayecto en el que no tenemos ningún percance.
Kubu Island: Tenía muchas ganas de pernoctar aquí. Es una isla, aunque mas bien podría ser un cabo, situada en Sua Pan. Los Pan, son lagunas saladas que en la estación seca no tienen agua y se forma ese horizonte blanco similar aunque supongo que no tan espectacular al del Salar de Uyuni. A ellos sumamos la propia “isla”, un promontorio rocoso donde crecen multitud de baobabs, que otorgan a este singular paisaje unos de los amaneceres y atardeceres mas bonitos del viaje.
Alojamiento.- Kubu Island.- Compuesto de varios campsites situados a la entrada del parque y a los pies del cerro. Tiene un retrete muy básico situado en una cabina de madera, y no hay agua potable ni luz eléctrica. No hay bungalows ni nada que se le parezca. No hay que reservar y si se quiere hacer tienes que hacer una transferencia al organismo botsuano que se encarga de la gestión de parques, por lo que tras la comisión que cobró el banco tras la transferencia a Elephant Sands, decido no hacer reserva y pagar allí al llegar. Nos indica al pasar la barrera el encargado el número de campsite y donde esta situado. Soplaba mucho el aire con el polvo consiguiente. Montamos las tiendas a duras penas, almorzamos de la comida que llevábamos comprada desde Kasane y me voy a dar un paseo. En Kubu Island alquilan equipos de acampada por lo que creo que nos habríamos ahorrado un dinero si lo hubiésemos alquilado aquí en vez de a los de Elephant Sands.
El sitio es muy peculiar y no digamos lo fotogénico que es. Me harto de hacer fotos, sobretodo cuando está cayendo el sol. Ya de noche poco mas hay que hacer, así que planteo hacer una hoguera para pasar el rato. Tras cenar el encargado se pasa por el camp site a cobrarnos, y le compramos leña. También pedimos consejo sobre el camino a seguir al día siguiente. Si volver a la carretera Nata-Maun o ir hacia el sur Orapa y de ahí hacia Khumaga, que es donde dormíamos al día siguiente. Ya os lo contaré.
La hoguera y ese cielo tan estrellado es un espectáculo en si mismo. Con los chacales aullando nos acostamos. No os asustéis porque apenas hay vida salvaje en este entorno. Al menos en la estación seca.
DUODÉCIMO DÍA.- KUBU ISLAND-KHUMAGA O XHUMAGA.
Me levanto temprano, me echó un poco de agua en la cara y me voy a ver amanecer desde la punta de la isla. Hace bastante fresco. Puedo asegurar que es una de las salidas del sol mas bonitas que he visto en mi vida. Encima de un promontorio rocoso con baobabs delante y el sol saliendo sobre un mar blanco de sal. Y todo ello con el aliciente de los colores del orto y ocaso que ofrece este continente. Brutal.
Tres fotos de uno de los amaneceres mas bonitos de mi vida:
Desayunamos, entregamos el equipo de acampada a los de la luxury trip y nos vamos de Kubu island. Decidimos ir hacia el sur, dirección Orapa. El camino es mucho mas cómodo, corto y bonito que el del día anterior.
En un principio la intención era ir hacía la misma carretera Nata-Maun y entrar en el Makgadikgadi N. P. En Gweta, pero los de Elephant Sands nos dijeron que era absurdo hacer eso, porque de Gweta a Khumaga por dentro del Parque hay mucho kilómetros y la vida salvaje sólo se concentra en su mayor parte en el río Boteti, que es donde está Khumaga. Este es el motivo por el que decidimos tirar por el sur de kubu island. Quitarnos caminos de cabras.
Cuando el carril de arena va terminando empieza a verse fauna salvaje. Al llegar a la carretera, magníficas carreteras estas del sur de kubu Island y con poco tráfico, vamos a cruzar Orapa, que está a la vera de una inmensa mina. La meseta que forma la mina se ve a kilómetros de distancia. Es enorme. No nos dejan cruzar Orapa y tenemos que hacer una circunvalación. Esta zona es la principal productora de diamantes de Botsuana, y sólo se puede acceder a la ciudad con permiso especial. Flipa!! Los diamantes constituyen mas del 50% del PIB del país.
Hacemos la circunvalación y continuamos hacía Khumaga. Llegando se nos cruza una manada de por lo menos 30 elefantes en la carretera. Este avistamiento queda para los anales del viaje.
Llegamos a Khumaga y nos dirigimos al alojamiento.
Alojamiento.- TIAANS CAMP.- Es un camping agradabilísimo. Como tenemos el problema de no tener equipo de acampada nos ofrecen una tent brutal. Está elevada y tiene una terraza enorme que da al río botevi. Por dentro es amplísima y tiene 4 camas. La ducha está abajo y el retrete en la terraza de arriba con vistas al río Botevi. Por el río que en esta estación lleva escasa agua, merodean elefantes e hipopótamos aparte de vacas. Se ven muchas aves y es muy muy agradable. Ofrecen Wifi de 5 de la tarde a 8 de la tarde. Precio 10 pulas la hora. Aunque al final uno puede estar conectado lo que quiera porque te dan la clave y nadie controla el uso ni el horario. Eso si, hasta las 5 nada de nada. Llevaba desde Kasane sin conexión y quería dar señales de vida a la familia.
Como llevamos varios días sin descansar decidimos tomar la tarde libre, ya que el alojamiento se ofrece a ello y también tiene una piscina magnífica donde pienso echar la tarde. Acabamos los víveres que traíamos desde Kasane y mientras uno se echa la siesta vaciamos los bidones de gasolina en el depósito. Al final no nos hubiera hecho falta los dos bidones pues desde Orapa hasta Khumaga vimos varias gasolineras. El coche se traga bidón y tres cuartos del otro. Uno se lo regalamos al del alojamiento.
Tarde de piscineo mientras hago fotos a unos azulitos del congo que se acercan a beber agua a una boca de riego.
El que quiso se echó una siesta y después me voy a dar un paseo por el río Botevi. Las aves aquí son bastante asustadizas. Nos vamos metiendo cerca de lo que queda de río y veo caca fresca de elefante y lo que mas me preocupa, de hipopótamo, por lo que decido volver, no vaya a ser que me encuentre con uno. Os pongo alguna foto de los bulbul.
Me conecto a internet mientras me bebo una Savahna Dry, que es una sidra que me ha encantado y hacemos tiempo para la cena que es correcta sin más. A dormir sea dicho. Mi cama no tiene mosquitera pero tampoco hace falta porque no hay mosquitos dentro de la tienda.
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