INTRODUCCIÓN
Esta vez nos apetecía conocer medianamente bien alguna ciudad europea y nos decantamos por Ámsterdam. Como ya sabéis, Ámsterdam es la capital oficial y la ciudad más grande de los Países Bajos, aunque el Parlamento y la sede del gobierno y de la justicia se encuentran en La Haya (“Den Haag” en neerlandés), que está a unos 70km de Ámsterdam.
La ciudad destaca por los canales que se construyeron en el siglo XVII y por su patrimonio histórico y artístico, que se ve reflejado en sus calles, especialmente en el centro, así como en los múltiples museos.
De hecho, lo que más nos llamaba la atención de la ciudad era el poder pasear por sus canales, ver muchos de sus museos y combinar así el callejear, ya que se presta mucho a ello, con aprender y sobre todo poder hacerlo con relativa calma. Y esto lo digo, porque en alguna ocasión hemos hecho la típica escapada a alguna ciudad europea, y al final los museos los hemos visto a trompicones y a toda prisa y teníamos ganas de quitarnos esa espinita.
No hace falta decir que por supuestísimo Ámsterdam ha cumplido con nuestras expectativas y las ha superado. Además de eso, cerca de Ámsterdam hay muchos pueblos bonitos que ver y se puede llegar muy fácilmente a otras ciudades del país para hacer excursiones de medio o de un día. Nosotras sólo hicimos algunas opciones que detallaré en las diferentes jornadas del diario, pero en el foro y en los diarios de Holanda veréis que hay más pueblos y ciudades muy chulas que nosotras no fuimos a ver e incluso apurando un poco más los días, se pueden poner dos ciudades en el mismo día.
En cuanto al Barrio Rojo, la prostitución, su tolerancia a las drogas blandas... no os voy a decir que no me llamara la atención saber cómo integran todo esto en el centro de la ciudad, pero tampoco conformaba un motivo de peso como para ir hasta allí expresamente. Ahora he de decir que no me extraña que sea una seña de identidad de la ciudad y que me lo pasé muy bien. Para nada es un lugar desagradable ni de absoluta perversión. Es un lugar para un tipo de ocio en particular y se vive con naturalidad. Con muchísimo turismo, obviamente, pero variado. Muchas parejas, gente mayor, grupos de amigos...con lo que no representa un lugar peligroso. Así que sí, a mí me sorprendió gratamente.
Lo único que no me imaginaba es que iba a ser una ciudad TAN turística. A ver, tenía una idea, pero no me lo esperaba a ese nivel. Aún así, lo vimos todo sin demasiado agobio, sólo en algunos momentos puntuales. También íbamos con tiempo y cuando tienes tiempo no te estresas tanto, porque piensas que si hay mucha gente, puedes volver en otro momento. Pero vaya, que fue bastante llevadero. Lo mejor, como siempre, estar en los sitios durante las primeras horas...a eso de las 9 e incluso las 10 de la mañana había muy poca gente. A partir de las 11 las colas empiezan a llenarse considerablemente.
UN POCO DE HISTORIA...
La historia de esta ciudad y de todo el país siempre ha estado ligada al agua y esto es debido a que se encuentra por debajo del nivel del mar. Ámsterdam se encuentra concretamente a dos metros por debajo del nivel del mar. Por lo tanto, siempre han convivido con este handicap y han buscado formas de subsanarlo y de hacer frente a las habituales inundaciones (por ejemplo, mediante la construcción de diques, la utilización de los pólders, técnica que se empezó a usar en el siglo XII para ganarle terreno al mar).
Se encontraron en la ciudad de Ámsterdam vestigios de época romana pero no grandes construcciones, que son más habituales en el sur de Europa.
La ciudad de Ámsterdam se fundó en torno al siglo XIII como un pueblo de pescadores. El río Amstel atraviesa la ciudad y la palabra 'dam' significa 'presa', con lo cual, literalmente, la ciudad se llama 'Presa del Amstel'.
Durante el siglo XIV empezaron a despuntar a través de las rutas de comercio marítimo que establecieron con otras ciudades neerlandeses y del norte de Europa. La población de la ciudad empieza a aumentar y después del Milagro de Amsterdam (lo explico más adelante en el diario) la ciudad también se convierte en un centro de peregrinación. Marineros, comerciantes, artesanos...la ciudad tenía cabida para todos ellos y se ganaban bien la vida, ya que el feudalismo arraigado en otras sociedades europeas aquí no era tal y a penas tenían que pagar impuestos. Se excavan los canales del centro medieval.
En el siglo XV ocurrieron graves incendios en la ciudad. En 1452 se prohibió construir en madera. En toda la ciudad solamente queden hoy en dia dos casas de madera como testigos de la época.
En el siglo XVI los Países Bajos pasaron a formar parte del territorio del imperio -católico- español. Más tarde se disputó la Guerra de los Ochenta Años, donde también tuvo un papel importante la Reforma Protestante y que enfrentó a los Países Bajos, liderados por Guillermo de Orange, con las tropas del rey Felipe II. Los Países Bajos ganaron su independencia en forma de República y la ciudad de Ámsterdam continuó abriéndose al mundo. Llegaron allí buscando refugio muchas personas de religiones diversas, entre ellos judios -muchos de España y Portugal- y protestantes, ya que la ciudad se conocía por ser un lugar "tolerante" con la diversidad religiosa.
El siglo XVII es el que se conoce como la Edad de Oro neerlandesa y la ciudad se convirtió en una de las más ricas del planeta especialmente gracias a sus relaciones comerciales con todo el mundo y a la implantación de colonias. Se creó el Banco de Ámsterdam y la bolsa fue la primera en funcionar todos los días. Forecieron la ciencia, el arte y la cultura. En esta época se desarrolló el elaborado sistema del cinturón de canales y se construyeron muchas casas y edificios representativos como los que rodean la Plaza Dam: el ayuntamiento (actualmente Palacio Real).
Imagen sacada de Wikipedia.
La plaza Dam a finales del siglo XVII, pintada por el artista Gerrit Adriaensz Berckheyde.
La plaza Dam a finales del siglo XVII, pintada por el artista Gerrit Adriaensz Berckheyde.
Durante los siglos XVIII y principios del XIX la ciudad dejó de prosperar y sufrió una etapa de retroceso, especialmente después de las Guerras Napoleónicas. Entre otras cosas porque les salieron fuertes competidores en las rutas marítimas (Inglaterra) y empezaron a perder colonias. En 1794 las tropas francesas invaden los Países Bajos. En 1806 la república pasa a ser una monarquía, en la cual Napoleón pone a cargo a su hermano Luís Bonaparte.
Tras la derrota de Napoleón, en el año 1815, se estableció oficialmente el Reino de los Paises Bajos y la ciudad empieza a remontar de nuevo.
A partir de la segunda mitad del siglo XIX Ámsterdam volvió a vivir una etapa pletórica, que se conoce como 'segundo siglo de oro'. En esta etapa se construyeron edificios tan emblemáticos como la estación central de Amsterdam o el Rijksmuseum, así como nuevas casas en el cinturón de canales. Con la Revolución Industrial se construyeron nuevos canales y vías marítimas para mejorar la comunicación de la ciudad. Su población volvió a experimentar una importante crecida.
Durante la Primera Guerra Mundial, los Países Bajos mantuvieron una posición neutral. Después de la Primera Guerra Mundial, Ámsterdam seguía siendo el centro industrial del país. Durante la década de 1920 el país siguió prosperando: industria del acero, motores diésel, industria textil, importación de cacao, fábricas de cerveza,...también surgió la compañía aérea KLM. La depresión de los años 30 también afectó profundamente a Ámsterdam.
Durante la Segunda Guerra Mundial, en el año 1940 Alemania invadió el país y empezaron las persecuciones a judíos. El país quedó sumido en la miseria hasta que en el año 1945 los canadienses liberaron la ciudad. De los más de 100.000 que fueron enviados a campos de concentración sólo sobrevivieron 5.000. Recomiendo visitar el barrio judío y visitar algunos de sus museos.
Después de la guerra y con el plan Marshall en marcha la ciudad fue retomando la prosperidad.
En las décadas 60 y 70 Ámsterdam se configuró como la ciudad más abierta de Europa. Un gran número de hippies se instalaron en Vondelpark, también se ocuparon muchas casas -algunas de las cuales, con valor histórico, fueron salvadas gracias a eso-, se abrió el primer coffeeshop (1972) y en el 76 se despenalizó la marihuana. A partir de los 80 se trabajó mucho por mejorar la calidad de vida de los habitantes integrando mejor la vida laboral y la conciliación familiar, reduciendo el tráfico y promocionando el transporte en bicicleta, etc.
Actualmente la ciudad tiene unos 810000 habitantes y una gran área metropolitana donde viven cerca de 1.5 millones de personas, pero en general en los últimos veinte años se endurecieron las leyes de inmigración del país. También se cerraron multitud de coffeeshops y de escaparates rojos y se subió la edad legal para ejercer la prostitución.
(La información ha sido extraída pricipalmente de Wikipedia y Lonely Planet).
¿QUÉ VER EN AMSTERDAM?
Os pongo a continuación una recopilación de los barrios más visitados y los lugares más típicos para ver, a la par que interesantes, aunque eso depende mucho del gusto de cada uno. Pero así a 'grosso modo' para tener una idea general...
Centro Medieval y Barrio Rojo. El centro de la ciudad tiene muchos sitios interesantes para ver y cosas para hacer. Yo creo que este barrio se puede dividir en tres pequeñas zonas.
Plaza Dam: en la plaza Dam se encuentran el Palacio Real y la Nieuwe Kerk o la Iglesia Nueva. Son ambos edificios los que destacan en la plaza, además del Monumento Nacional. También se encuentra en esta plaza el Museo Madame Tussauds, es decir, el museo de cera, aunque en un segundo plano. La fachada es bastante reconocible porque tiene dos grandes figuras de cera.
Plaza Spui En la zona de la Plaza Spui también tenéis varias cosas para ver. Por ejemplo, el Begijnhof, un patio de origen medieval, el Museo de Amsterdam y la Galería de la Guardia Cívica.
Estación central de Amsterdam y Nieuwmarkt En la zona que comprende entre la estación central y el Nieuwmarkt, tenéis el Barrio Chino y el Barrio Rojo, donde se encuentra la Oude kerk o Iglesia Vieja y también el Museo Ons'Lieve Heer op Solder (la iglesia en el ático).
Estas serían las 'atracciones' principales para ver en el centro, pero además hay miles de bares y bruin cafés para pasarse horas. Por supuesto también coffee shops, especialmente por la zona del Nieuwemarkt. Mis preferidos fueron los bruin cafés o cafés marrones, es donde se respira más el ambiente tradicional, con aspecto rústico de madera, buena música y buena bebida, especialmente cervezas y ginebras (jenever).
Barrio de Joordan: barrio con mucho encanto para perderse entre canales y casas barco.
Museo casa Ana Frank: uno de los top's de Amsterdam aunque después de la visita haya opiniones para todos los gustos.
Westerkerk: Iglesia, justo al lado del museo de Ana Frank. Pasaréis sí o sí si vais a ver la casa de Ana Frank. Al lado de la iglesia está la estatua en homenaje a la pequeña. Justo al lado de la iglesia tocando al canal Keizersgracht podremos ver el Homomonument.
Museo casa flotante: pues como su nombre indica, un museo que muestra cómo sería el interior de una casa-barco.
Lo mejor de este barrio es pasear y pasear. De los canales más chulos que vimos, el Brouwersgracht o el canal de las cerveceras -en los siglos XVI y XVII había varias cerveceras en este canal y de ahí el nombre-.
El sur: Vondelpark y Museumplein: Overtoom, que es la zona donde nos alojamos, queda muy cerca. Totalmente recomendable. El barrio queda un pelín apartada del centro (nada exagerado, a diez minutos en tranvía y a 30 minutos a pie). El ideal para los 'culturetas' por su cantidad de museos.
Museumplein: En esta gran plaza encontraréis los principales museos de Amsterdam. Destaca el imponente Rijksmuseum: Increíble y enorme pinacoteca que guarda grandes obras de los maestros flamencos y del barroco como Rembrandt, Rubens, Vermeer. Compitiendo en fama con este primero y a escasos metros está el Museo Van Gogh, el cual no puedo dejar de recomendar. Un museo muy bien montado y un artista imperdible. Para los que tengáis unos gustos más contemporáneos hay dos opciones (nosotras no los dejamos pendientes). El Museo Stedelijk: cuentra en su exposición con obras de Picasso, Matisse, Mondrian, Warhol... no pinta nada mal. Y por último el Moco Museum que también ofrece arte moderno y de estilo callejero.
Vondelpark: es el parque más grande de la ciudad con 47 hectáreas y en el que disfrutar de caminos, estanques, praderas de césped... Por cierto, en la entrada a Vondelpark se encuentra la plaza Max Euweplein -el nombre se lo da un famoso ajedrecista neerlandés-, que es conocida por tener pintado en el suelo un tablero de ajedrez de un tamaño considerable, al que juega la gente con unas fichas gigantes. También está interesante si estáis por la zona pasaros por Leidseplein especialmente si vais por la tarde, porque está lleno de terrazas y cafés interesantes.
Entre Nieuwmarkt y Plantage: esta zona que se encuentra entre estos dos barrios o distritos de Amsterdam es bastante grande... pero podemos encontrar cosas interesantes y variopintas.
Barrio judío: podéis empezar por Waterlooplein a ver el mercado de 'trastos' de segunda mano y de allí acercaros a la Sinagoga portuguesa, que está al lado. Aquí hay más museos: museo de la Historia Judía, museo del Holocausto...pero si no tenéis mucho tiempo, imprescindible a mí gusto la Sinagoga. Entre Nieuwmarkt y el barrio Judío se encuentra la Casa Museo Rembrandt, al lado del canal Zwanenburgwal. A ver, la remarco porque es muy famosa, pero tampoco creo que sea un imprescindible. (¿véis? es que todo es tan relativo...).
Plantage: al otro lado del canal Nieuwe Herengracht está este tranquilo barrio de zonas verdes. Destaca el Hortus Botanicus, así como el Zoo y Micropia, un original museo de microbios. Si os interesa visitar un museo diferente, detrás del Zoo está el Tropenmuseum, el museo antropológico de Amsterdam.
En esta zona también es muy recomendable que paseéis por los canales: desde la zona de Nieuwmarkt los canales de Groenburgwal, Zwanenburgwal y siguiendo el río Amstel, dejando a la izquierda el Stopera y viendo los puentes Blaubrug, Magere Brug...es un paseo muy chulo para el atardecer y si os gusta hacer fotos lo disfrutaréis mucho viendo los colores reflejados en los canales.
Otras visitas: aquí os pongo otras visitas que pueden resultaros interesantes y que no podemos englobar en los barrios anteriores:
Sur del cinturón de canales: no os olvidéis visitar el Bloemenmarkt o el Mercado de las Flores. De aquí os aconsejo que lleguéis andando hasta la Rembrandtplein (5 minutos a pie), para que podáis ver el conjunto escultórico del cuadro del pintor de 'la Ronda de noche'.
De Pijp: este barrio se puede aprovechar para visitar el día que vayáis a estar en Museumplein, porque está muy cerca de los museos. Es un corto paseo a pie de a penas 15 minutos. Podéis ver aquí el mercado de Albert Cruyp y la Heineken Experience -a nosotras no nos interesaba pero la resalto porque es una atracción bastante reconocida por su popularidad-.
Amsterdam Noord: nosotras no nos acercamos...y no será porque no tuvimos días, pero nos gusta recrearnos y al final ni teniendo tiempo se llega a ver bien todo. Este barrio queda un poco a desmano, detrás de la estación del centro de Amsterdam, pero cruzando el río IJ. Aquí se puede subir a la A'Dam Tower, justo en la bahía del río, que ofrece vistas espectaculares a juzgar por las fotos. Además tiene un columpio en la azotea que te balancea justo encima del vacío (son 22 pisos)....ufff. Se puede cruzar el río en ferry o se pueda llegar en metro.
MUSEO CASA DE ANA FRANK
Le pongo un apartado a parte por la relevancia que tiene este museo en la ciudad.
Abrían las reservas tres meses antes desde la web. Se reserva una fecha y un horario concreto y el día de la visita te presentas directamente en la cola. Entraréis con el grupo que tiene la misma franja horaria que vosotros. En la cola ya hay personal que va organizando un poco a la gente que va llegando para que cada uno entre con el grupo que toca. A mí me pareció una visita muy interesante pero para gustos colores... hay gente a la que no le gusta nada. Yo creo que con una hora y media hay tiempo para verlo sin prisas aunque el recorrido estará muy condicionado al grupo (hay que ir en fila y es un poco agobiante...).
Con el precio de la entrada hay una audioguía gratuita en muchos idiomas y hay que dejar los bolsos, maletas, etc. en taquillas en el mostrador, también gratuitas, ya que son ellos quienes te hacen dejarlo.