28-JULIO: PHNOM PENH
Después de unas 10 horas de sueño reparador y un buen desayuno, salimos a la calle dispuestos a visitar los monumentos más emblemáticos de la capital camboyana.
En primer lugar nos dirigimos al Palacio Real, que nos queda muy cerca del hotel. El horario de visitas es de 8 a 11 h. y de 14 a 17 h. Como ya son las 9:45 h. decidimos dejarlo para la tarde y nos encaminamos hacia el Wat Phnom.
El Wat Phnom es un templo enclavado en la cima de una colina artificial de unos 30 m. de altura y rodeado por un parque. Desde la cima de la colina no se pueden apreciar buenas vistas de la ciudad, ya que lo impiden los árboles del parque que lo rodean. La ciudad toma su nombre en honor a este templo.
Los turistas deben pagar 1 $ para acceder a él.

A continuación, nos dirigimos al Mercado Central. El Mercado Central está ubicado en un edificio con forma de estrella en una zona muy bulliciosa de la ciudad, ya que junto a él se encuentra el punto desde donde parten los autobuses hacia Siem Reap y Ho Chi Minh City (en Phnom Penh no hay estaciones de autobuses).
En este mercado se pueden encontrar muchos puestos dedicados a la venta de souvenirs para los turistas, junto a otros dedicados a la venta de artículos para la vida cotidiana (desde comida hasta ropa, artículos de droguería, joyas, electrónica, etc.)

Después de recorrer los pasillos del Mercado Central toca visitar otro mercado, en esta ocasión se trata del Mercado Ruso. Este se encuentra demasiado alejado para ir caminando, así que toca negociar para coger un tuk-tuk.
Como siempre a la hora de negociar el precio de un servicio te planteas la pregunta ¿cuál es el precio justo que debo pagar? Seguro que cada uno tendrá su estrategia, la nuestra es la siguiente, nos acercamos al conductor y le decimos donde queremos ir, nos pide 5 $, pongo cara de asombro, le digo que se ha pasado y sin intentar negociar damos media vuelta y empezamos a alejarnos lentamente en dirección hacia otro tuk-tuk. El conductor se viene detrás de nosotros y baja a 4 $. Decimos que no con la cabeza y seguimos alejándonos lentamente. Él sigue detrás y baja a 3 $. Nuevamente le decimos que no y seguimos caminando. El conductor grita, 2 $. En ese momento desiste de seguir persiguiéndonos. Ya tenemos una idea de lo que puede ser un precio razonable, 2 $. Ahora solo queda acercarnos a otro tuk-tuk y negociar, pero sabiendo que el precio máximo que debemos pagar es 2 $.
El Mercado Ruso es un laberinto de estrechos pasillos, donde al igual que ocurre en el Mercado Central, conviven puestos orientados a los turistas con otros para los camboyanos. Lo que más nos llama la atención son los puestos dedicados a la venta de repuestos usados para ciclomotores.
Después del paseo por el Mercado Ruso decidimos volver al hotel para refrescarnos un poco en la piscina. No queremos que se nos haga muy tarde para comer porque después queremos visitar el Palacio Real, y el horario de tarde es de 14 a 17 h.
El Palacio Real es el principal monumento que ofrece la ciudad de Phnom Penh. La entrada cuesta 6 $ y hay que guardar ciertas normas en la indumentaria: pantalones por debajo de la rodilla y camisa o camiseta con mangas. Las chicas que van con los hombros al aire pueden cubrirse con un foulard. También pueden comprar una camiseta que venden junto a la taquilla.
El Palacio Real es un conjunto de edificios (similar al Palacio Real de Bangkok, aunque menos espectacular), los más destacados son: la residencia oficial del rey (esta zona no es accesible), la habitación del trono utilizada para las coronaciones y la Pagoda de Plata.


Una vez finalizada la visita del Palacio Real, nos acercamos al FCC (Foreign Correspondent Club) en Sisowath Quay a tomar algo y descansar mientras desde su terraza contemplamos el atardecer sobre el río. Además tienen "hora feliz" y las bebidas salen tiradas de precio (cerveza y refresco 2,5 $).

Para cenar vamos al restaurante Tamarind Cafe en el nº 31 Street 240. Lo hemos encontrado de casualidad al equivocarnos de calle cuando volvíamos caminando al hotel. Se trata de un local frecuentado por expatriados, con buena decoración y buen servicio. La cena con entrada, plato principal y bebida nos sale en total por 14 $.
Después de cenar nos vamos pronto a dormir porque mañana tenemos que madrugar para coger el vuelo a Siem Reap.