

Como media hora antes te van avisando que llega el tren a Hue, hemos dormido muy bien y eso de poder levantarte, pasear, ir al baño… creo que es mucho mejor que en el bus si tienes sueño ligero porque en el bus entre que van pitando todo el rato, frenotes, etc… pero bueno no lo sabemos (también el tren es más caro, a nosotros no nos ha supuesto pagar nada más evidentemente).
Llegamos como a las 9:30 y aquí están todos los taxistas a por todo el mundo que baja del tren, miramos el precio del Grab y se lo decimos a uno y nos lo acepta. Vamos con el captador de clientes y el jefe que nos va preguntando nuestro plan, si queremos excursiones, nos da su WhatsApp para que contactemos con él. Le preguntamos dónde cambiar dinero y nos aconseja una joyería.

Nuestro Hotel es el Saigon Morin (50€ noche), la habitación todavía no está disponible y nos ofrecen baño en la zona de piscina.
Hue fue la última capital Imperial de Vietnam hasta 1945, antiguamente conocida como Thah hoa que significa Paz. Bañada por el río Perfume, Hue cuenta con algunos de los templos, pagodas y tumbas reales más bellos del país. Su historia es trágica ya que fue la ciudad más castigada por la guerra, sólo un 10% de sus edificios quedaron en pie tras el asalto en 1968. Los recintos más dañados fueron la vieja Ciudadela y la Ciudad Púrpura que poco a poco está siendo restaurada.

Vamos andando hasta la ciudadela que la tenemos cruzando el puente, aquí el tiempo está completamente despejado y el calor es similar (mucho).
En la caseta de los tickets ya compramos la entrada combinada para mañana ir a las tumbas, la chica nos dice que las tumbas están lejos, que no están aquí. Le decimos que sí, que ya lo sabemos. Así que habrá gente que piensa que está todo ahí dentro o a saber (20€).

La ciudad imperial es muy grande y lo vas recorriendo un poco a tu gusto porque no hay como una ruta específica, nos gusta bastante, hemos estado casi 3 horas. La entrada a la Ciudadela te recibe con 9 cañones sagrados que protegen la Ciudad Vieja, 4 representan las estaciones del año y el resto representan los 5 elementos de la naturaleza.
Lo más destacado es la Puerta Chuong Duc por donde entraba el emperador, la sala de los mandarines, El Palacio del Trono Dein Tho, el palacio de la Reina Madre y el Templo de culto de los Emperadores.
Horario: 07:30 - 17:30
Entrada combinada: 20€

Al salir miramos qué hay cerca para comer y elegimos The Garden Café por una callejuela perdida y es todo un acierto, un oasis dentro del bullicio de Hue. También debe ser un alojamiento, es buen sitio.
Pedimos arroz frito con tofu (tofu de verdad) y verduritas, bocadillo vegetariano vietnamita, limonada con sal y agua (123 k – 4’60€), se está de maravilla.

Vamos hacia el río para ver si hay alguna barca para acercarnos a la pagoda Thien Mu pero no vemos embarcadero cerca y los barcos que pasan paran al otro lado. Así que miramos un Grab (51 K – 1’90€), la pagoda es gratuita.
Esta Pagoda se encuentra en la colina de Ha khe a 3 km de la ciudad de Hue, es un templo budista y el mejor momento para su visita es al atardecer. Está rodeada de jardines y pabellones con enormes guardianes de madera.
Este recinto es budista como la gran mayoría y tienen los jardines y todo muy bien cuidado, al rato empieza a caer un diluvio y nos resguardamos debajo de un tejado mientras escuchamos que dentro está un monje cantando y nos ameniza la espera. Aquí podrás disfrutar de una campana de 2 toneladas y de su torre espectacular de planta octogonal con 7 pisos que preside todo el recinto con una altura de 21 metros.

La idea era volver en barca por el río pero con la lluvia decidimos volver en Grab al hotel (52K – 1’90€)
Descansamos un rato.

Vamos a cenar al Nook que nos ha gustado muchísimo y recomendamos mucho, está en una callejuela del meollo, en silencio, gente súper amable, se nota que es familiar. Hay variedad para elegir y nosotros nos decantamos por unas hamburguesas, una de pollo, de queso, con patatas, coctel, agua, un pedazo gofre de nutella y churros con caramelo. Todo riquísimo ¡!! (515K – 19€).

Al volver al hotel vemos que en la plaza tienen montado un festival de la canciones, está todo la ciudad aquí, estamos un rato viendo el espectáculo y nos acercamos a ver el puente iluminado de colorinchis.
Agradecen mucho que les digan palabras en vietnamita, no cuesta nada aprender lo básico y verás que te atenderán aún mejor y les sacarás unas bonitas sonrisas.