Ocho días en familia entre el PAIS VASCO y NAVARRA ✏️ Blogs de España

Hola de nuevo! esta vez voy hacia el norte de España, nunca antes había estado en el País Vasco ni en Navarra y tenía muchas ganas de ver esos paisajes en otoño, cuando el bosque se llena de colores. Yo vuelo desde Londres y mis padres lo hacen desde Sevilla, tenemos prevista la llegada con apenas una hora de diferencia, así que no tuvimos que esperar mucho a encontrarnos después de 4 meses sin vernos. Sobre las 10 de la mañana ya estábamos todos juntos, desayunamos algo rápido en el mismo aeropuerto y nos fuimos a recoger el coche de alquiler que habíamos pagado con GOLDCAR. La sucursal no está dentro del aeropuerto como la de las otras compañías, ellos tienen una furgoneta de cortesía que te recoge en el aeropuerto y en 3 minutos te llevan a la oficina. Hasta aquí todo perfecto, sin embargo dentro de la oficina nos atendió la tía más antipática de todo euskadi, pues todo el mundo durante el viaje nos ha tratado muy amablemente y de manera muy simpática, sin duda alguna ella fue la excepción. Nada más decirle que no queríamos ningún tipo de seguro extra la señorita cambió por completo, al final hasta su compañero se dió cuenta y siguió tratándonos él. En definitiva, haciendo un balance creo que no volveré a contratar con Goldcar nunca más porque tienen mil trucos y a priori son los más baratos pero después te empiezan a meter que si una tasa logística de qué se yo, te cobran el depósito de gasolina de un ford fiesta por 90 euros.... en fin lo de siempre. Sigamos con el viaje que acabámos de aterrizar y no nos vamos a amargar por esta señorita, vámonos a Bilbao!


Nos vamos a quedar una noche en [url=http://www.booking.com/hotel/es/hostal-gurea.en-gb.html?aid=7994077&aid=;label=hostal-gurea-biwQ%2ATvMygmbKla8QZ3nEAS74658731940%3Apl%3Ata%3Ap1%3Ap2%3Aac%3Aap1t1%3Aneg%3Afi%3Atiaud-146342137510%3Akwd-95141334789%3Alp1006886%3Ali%3Adec%3Adm;sid=1a0133f9cce8be42322eb76c495667da;dcid=4;dist=0;room1=A%2CA;sb_price_type=total;srfid=830bff8554de9c7b02d028fbddd30e15a7f2159bX1;type=total;ucfs=1&]CASUAL GUREA[/url] un hotel de habitaciones sencillas, muy funcionales y con un trato de 10 por parte de todo el personal, fue perfecto para nosotros. Una vez soltamos las maletas comenzamos nuestra ruta por la ciudad, nuestra primera parada fue el Mercado de la Ribera que nos gustó mucho y flipamos con los bonitos que se veían por los puestos.


Dimos un paseito y seguimos nuestro paseo por la zona de las 7 calles todas llenas de bares de pintxos con banderas del athletic en la entrada.


Por esta zona se encuentra la Catedral de Santiago que sólo la vimos por fuera, un poco más adelante llegamos a la plaza de Miguel de Unamuno, un rincón con mucho encanto.


Pero sin duda alguna la plaza más bonita de la ciudad es la Plaza Nueva, aquí fue dónde tuvimos nuestro primer encuentro con los pintxos, hicimos una paradita en el bar La Olla y nos trataron muy bien además los pintxos nos los encontramos a muy buen precio, el que más me gustó fue el de bacalao al pil pil, me imagino que será todo un clásico.



Ya después de comer comenzamos el paseo junto al río que te lleva hasta el guggenheim, nada más comenzar nos encontramos con el ayuntamiento tras pasar la zona del arenal, un poco más adelante llegamos al puente Zubizuri, obra de Calatrava con un original diseño.


En unos 20 minutos hemos llegado al Museo Guggenheim, construído por el arquitecto Frank Gehry tengo que reconocer que es espectacular desde todos sus ángulos.



Vamos rodeando el museo y llegamos hasta el perro Puppy una obra muy simpática pero que no estaba en su mejor momento jeje, lo digo por que estaba un poco falto de flores, me imagino que si lo ves en primavera estará mucho más bonito.


Comenzamos nuestro camino de regreso al casco viejo para cambiarnos de ropa y dirigirnos hacia San Juan de Gaztelugatxe para ver el atardecer, sé que le hemos dedicado muy poquito tiempo a una ciudad como Bilbao pero es que a mí me tira más el monte y la naturaleza y no podía perder la oportunidad de dejar de visitar un sitio con tanto encanto. En coche se tarda unos 35 o 40 minutos creo recordar, lo más importante es saber dónde está el aparcamiento y para que no os volváis locos con el gps lo más sencillo es buscar el Restaurante Eneperi, justo ahí comienza la senda que baja hasta la ermita.



El sendero es muy cómodo y cualquier persona puede hacerlo aunque la pendiente en algunos tramos si ha llovido puede ser un poco resbaladiza, a los pocos metros de comenzar la bajada nos encontramos con un mirador y aprovechamos para hacernos una foto.


Seguimos hacia llegar al comienzo de las escaleras que van hacia la ermita, aquí fue dónde mis padres se fueron escaleras arriba y yo me calcé mis botas de agua y me fuí hacia abajo con mi trípode y todo el equipo a ver si salía alguna foto decente. El sitio es precioso.


Cuando mis padres volvían de regreso echamos unas buenas risas, pues venían chorreando sudor de todo el caminito en especial mi padre y los dos no paraban de reirse.



Ya con los últimos rayos de sol cogemos de nuevo el coche hasta Bilbao y cenamos en Sorginzulo en la plaza nueva de Bilbao, el sito me gustó incluso más que el del almuerzo, los calamares fritos muy ricos. Ya después de esto tocaba descansar un poco, así que a dormir al hotel que estamos muy cansados.

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Que bien habríamos dormido si no fuera por los ronquidos de mi padre ajajaja, estamos más descansados y ahora toca comenzar nuestra segunda etapa, bajamos a desayunar en uno de los bares cercanos al hotel y después recogemos las maletas para ponernos rumbo a San Sebastián.

Aparcamos en un parking que hay junto a plaza cataluña y que nos salió por unos 8 euros, nos ahorramos tener que dar vueltas. Desde allí comenzamos a caminar por el paseo que va junto a la playa de Zurriola que tenía pinta de ser un paraíso para los surfistas, que pedazo de olas...


Cruzamos el puente del Kursaal en busca de una oficina de turismo en la que obtener un mapa para orientarnos un poco. Por el camino nos encontramos con la plaza Okendo que nos pareció muy bonita.



La oficina de turismo se encuentra a pocos metros en el Boulevard Zumardia, tenían disponibles rutas guiadas que pueden ser muy interesantes, nosotros pillamos nuestro mapa y seguimos por nuestra cuenta ya que teníamos pensado más o menos lo que queríamos visitar. Justo a la vuelta de la esquina alrededor de la plaza Bretxa nos encontramos un mercado de verduras muy chulo, menuda pinta tenía todo ...



Una vez aquí lo mejor es callejear por toda esta zona, son calles con mucho encanto y llenas de bares de pintxos me recuerda bastante a la zona de las 7 calles de Bilbao, una de las que más me gustó fue la calle de San Lorenzo. También se encuentra en esta zona la plaza de la Constitución, preciosa con todos sus balcones numerados.




De repente en una de estas calles aparece la majestuosa fachada de la Iglesia de Santa María del Coro, su portada barroca es impresionante con una estatua de San Sebastián dominando todo el pórtico.


Aprovechamos uno de estos bares cercanos para comer unos pintxos y seguir con la visita, comimos en el bar Baztan, todo rico y a muy buen precio. Hacía un pedazo de día y decidimos continuar hasta la zona del puerto con un buen helado como postre. Toda esta zona del puerto viejo con el comienzo de la bahía de la Concha es de los sitios más pintorescos de la ciudad, no os lo perdáis.



Comenzamos desde esta zona todo el paseo que va rodeando la playa de la Concha y así vamos bajando la comida y disfrutamos del sol, parece un día de verano.



Seguimos por la playa de Ondarreta, nuestro objetivo es el funicular que sube hasta el monte Igueldo donde se obtienen las mejores vista de toda la ciudad. El funicular nos costó unos 3 euros por persona ida y vuelta, por este precio te ahorras una buena caminata hasta la cima y además es algo que nunca había hecho, montarme en un funicular de más de 100 años.



Decidimos tomarnos un café en la terraza que hay en la cima del monte Igueldo, las vistas son de diez. Tras las merecidas fotos volvimos a bajar en el funicular y nos pillamos un taxi de regreso al parking, pues había una buena caminata y queríamos acercarnos a Zumaia a ver el atardecer. El taxi nos costó unos 7 euros hasta plaza cataluña, el único problema fue que nos tocó un taxista bético y nosotros somos del sevilla ajaja, nos echamos unas risas con él.

Tiramos por la carretera nacional un poco más lenta pero mucho más bonita, el tramo que va de Zarautz a Zumaia bordeando la costa es la zona más interesante. Una vez llegamos a Zumaia nos dirigimos concretamente a la Ermita de San Telmo


Desde aquí sale un sendero que llega hasta la localidad de Deba a unos pocos kilómetros. Este sendero tiene que ser chulísimo pues desde él puedes ver unas formaciones geológicas increíbles como la rasa mareal, el flysch, restos fósiles de dinosaurios... Es para quedarse por la zona varios días, además desde la web del parque, Geoparkea, organizan muchísimas visitas guíadas por tierra y por mar que tienen que ser muy recomendables. Yo iba con la idea de hacer una foto que ya tenía pensanda, creía que habría marea baja, pero al llegar allí ni la marea estaba tan baja como yo pensaba ni las condiciones de luz eran las que yo quería, con mucha calima y poca visibilidad, en fin decidimos hacer la primera parte de la ruta y la disfrutamos un montón.





Con la caída del sol nos pusimos en camino hacia Orio, un pequeño pueblo en el que tenemos reservada una noche en la [url=http://www.booking.com/hotel/es/mailan.en-gb.html?aid=7994077&aid=;label=mailan-BLtys6S6qUsg3stVPcZXgQS10755792420%3Apl%3Ata%3Ap1%3Ap2%3Aac%3Aap1t1%3Aneg%3Afi%3Atiaud-146342137510%3Akwd-29604728283%3Alp9045944%3Ali%3Adec%3Adm;sid=1a0133f9cce8be42322eb76c495667da;dcid=4;dist=0;room1=A%2CA;sb_price_type=total;srfid=7c671a628f0e9dba7458fa4e6130c659da1edcccX1;type=total;ucfs=1&]Casa Rural Mailan[/url], sin duda alguna este fue el mejor alojamiento en el que estuvimos. La dueña nos hizo sentir como en casa y nos recomendó el Asador Katxiña para cenar, menudo homenaje nos metimos, la comida era de alta calidad y nos pusimos hasta las orejas, todo estaba riquísimo. Después de esto nos fuimos a descansar.

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Hoy es uno de los días que más kilómetros haremos, nuestro destino final del día es Ochagavía donde hemos reservado para dos noches, tenemos pensado parar por el camino y visitar algunos sitios que nos interesan. Nuestra primera parada Hondarribia, después de que el gps nos la volviera a hacer y acabásemos en un carril de tierra junto a unos cazadores finalmente conseguimos llegar a la zona del puerto con la suerte que allí mismo se encontraba la oficina de turismo donde nos atendieron de maravilla y nos dieron un par de mapas.

No teníamos nada visto con anterioridad a salvo de una foto que vimos por internet de unos balcones que nos gustó mucho y por eso decidimos venir, pero qué sorpresa nos llevamos!, quizás sea uno de los pueblos que más me ha gustado de todo el viaje, pues yo diría que es un dos en uno. Me explico, tiene dos zonas muy diferentes la primera que visitamos es la parte de la Marina, donde se encuentran las casas antiguas de los pescadores hoy en día convertidas en su mayoría en bares y restaurantes. Son casas bajas, blancas y con unos balcones preciosos. Las calles San Pedro, Santiago y Zuloaga son obligatorias.





Estuvimos un buen rato andando por aquí y al haber madrugado estábamos prácticamente solos por el pueblo. Ahora nos dirigimos a la segunda zona, la ciudad amurallada. Dada la situación estratégica en la que se encuentra la ciudad, con Francia a unos pocos metros cruzando el río, la ciudad estuvo fuertemente fortificada y hoy en día se conservan numerosas casas nobles y edificios militares como el polvorín o la plaza de armas junto a lo que es hoy un parador nacional. Os dejo aquí algunos rincones de esta bonita ciudad amurallada.






Una estatua que nos llamó la atención fue la que os muestro en la siguiente foto. Hachero


Me recordaba a los guardias de Londres con esos gorros tan altos, pero no me cuadraba nada, ¿qué hace con un serrucho en la mano? le pregunté a un hombre que pasaba por allí y resultó que era uno de los que todos los 8 de septiembre forma parte del Alarde de armas con el que se conmemora que la ciudad salió airosa del asedio de 1638, todo esto me lo explicó este señor incluso me enseñó varios videos desde su móvil dónde se veían los diferentes trajes y compañías, una tradición de la que no sabía nada y que descubrimos por casualidad.

Ya de vuelta hacia el coche compramos pan, vino, fruta y un poco de embutido de la zona, de camino a Zugarramurdi nos encontramos un merendero perfecto para comer.


Continuamos hasta Zugarramurdi, me hacía ilusión visitar este pueblo porque había leído algo sobre el auto de fe de Logroño en el que se recoge todo el proceso inquisitorial sobre el caso de brujería más importante de toda España. Cuadros como El Aquelarre de Francisco de Goya describen supuestamente parte de los hechos por los que las brujas de Zugarramurdi fueron condenadas. La cueva en mi opinión no es la más bonita ni la más espectacular pero la historia que rodea al pueblo es fascinante, y es eso lo que te hace verla de otra manera.




La entrada a la cueva cuesta 4 euros me parece, pero nosotros pagamos 2 euros por persona porque estaban montando un escenario para un concierto en su interior y como compensación pagabas la mitad. Una vez entras comienzas por un sendero que se adentra en el bosque y discurre junto a un río que te acaba llevando a la cueva, el entorno también tiene su encanto.




Nuestro siguiente destino del día no estaba a priori en nuestros planes, pues teníamos pensado ir a Saint jean de pied de port, pero descubrimos que Espelette estaba en fiestas, celebraban la fiesta del pimiento y finalmente nos decidimos por ir a ver esta fiesta, el ambiente nos encantó.


Para los que lleváis coche de alquiler informaros de si podéis pasar a Francia porque Goldcar nos cobraba 25 euros aunque sólo estuvieramos unas horas por allí, os lo digo para que no os llevéis sorpresas. Las casas son todas prácticamente iguales, blancas con ventanas rojas en su mayoría, aquí se habla francés, es lo que tiene estar en Francia pero en español más o menos nos entendían.


En el pueblo no se cabía y nos costó un poco aparcar, aunque al ir después de comer tuvimos un poco de suerte y no tuvimos que andar demasiado hasta el pueblo. Nos divertimos un rato con las charangas y nos hinchamos a hacer fotos de ventanas y balcones adornados con los típicos pimientos de la zona, también nos encontramos con un pimiento que nos resultó algo familiar.





Paseamos durante un buen rato, nos tomamos un café en una terracita y seguimos nuestro camino hacia Ochagavía. Antes de llegar a Ochagavía descubrí que booking me había mandado un email informándome que el alojamiento en el que nos íbamos a quedar dos noches estaba intentando contactar conmigo, mi fallo fue que puse el teléfono español como contacto y sólo me traje mi móvil inglés con lo cual ni me había enterado. Llamamos al Apartamento Pistolo y Yolanda, la dueña, nos informó de que se le había estropeado la caldera que da agua caliente y que no nos podíamos quedar allí, claro a estas alturas un pueblo de este tamaño, en fin de semana y junto a la selva de irati está con todo lleno. Así que la noche la pasamos en la única habitación que encontró, una pensión que eran 3 camas y poco más ni televisión, ni wifi ni nada de nada... Al día siguiente hablamos con ella y nos cambió a otro hostal que estaba algo mejor pero seguía sin ser lo que nosotros habíamos reservado, que era un apartamento con todas las comodidades de una casa, en fin como compensación ella nos incluyó los desayunos y nos hizo una pequeña rebaja en el precio final. Nunca me había pasado nada de esto y alguna vez me tenía que tocar, intentamos no darle muchas vueltas y seguir disfrutando, mañana nos vamos a Irati.

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