Crucero en Costa Diadema 09-16-Mayo-2016 ✏️ Blogs de Cruceros y Mares

Sigo con mi 4º día en el Diadema: Llegamos a Civittavechia y como ya os había comentado contratamos el traslado con la naviera a Roma, salimos a las 9 horas del puerto y llegamos a Roma a las 10:40, el autobús nos dejó en las proximidades del Colisseo, durante el recorrido la guía nos hizo una explicación de los sitios más importante que se podían visitar, lo peor para ella es que como íbamos españoles y franceses en nuestro autobús tuvo que repetir todas las explicaciones en los dos idiomas, pero todo fue muy bien y ella muy agradable y amable.
Una vez en Roma, pusimos en marcha lo que teníamos pensado, dando un paseo subir por la vía del Foro Imperiale dejando atrás el Colisseo, subimos por la parte izquierda recordando nuestra anterior visita al Foro Romano, pasamos junto a la Plaza de Venecia y tras echar unas fotitos, continuamos subiendo por la Vía de San Marcos para llegar a la Vía d’Aracoeli que nos lleva a la Plaza de Jesús donde se encuentra la Iglesia de Jesús que es el primer centro Jesuita del mundo.
Continuamos por la Vía del Corso Vittorio Enmanuele II, íbamos dirección a la Plaza Navona, nos desviamos en la Piazza de San Pantaleo y subimos por la Via de la Cuccagna para desembocar en Navona, allí estuvimos paseando y disfrutando de esta maravillosa plaza, como siempre muy ambientada.
Tras esta visita, continuamos paseando camino del Panteón, pasando por calles como Via di Agonali, Via di Santa Giovanna d’Arcco, Largo Giuseppe Teniolo y por Via del Pozzo delle Cornacchie llegando a la Plazza Della Maddalena y por último bajamos por la Via del Phantteon que nos dejaba directamente en la plaza, impresionante el ambiente en esta pequeña plaza, pero en esta visita al Panteón pudimos estar un rato sentados en los bancos interiores y disfrutando de esta maravilla.
Todo estaba transcurriendo con lo previsto, al salir del Panteón tocaba ir a ver la Fontana, dos años llevaba yendo a Roma y ésta sin agua y con andamios, pero esta vez sí que sí, la veríamos con todo su esplendor, subimos por la Via del Pastini y la Via di Pietra para salira a la Via del Corso, cruzamos y subimos por la Via delle Muratte y ahí estaba esa inmensa fuente en esa plaza tan pequeña, abarrotada de turistas pero muy vigilado el acceso a la parte baja de la fuente donde había guardias que controlaban el acceso a ella, bajamos nos pudimos sentar al borde de la fuente, nos echamos las fotos pertinentes y lógicamente tiramos las monedas por encima del hombro izquierdo con la mano derecha según manda la tradición.
Tras una buena comida y reposar durante una hora y media en el restaurante La Fontana di Venere en la calle Vicolo de Modelli 56, nos dispusimos a seguir paseando de vuelta al autobús que nos esperaba a las 16:15, esta vez bajando por la Via del Corso nos situamos a la izquierda según subíamos por la Via del Foro Romano para disfrutar de la Columna y el mercado de Trajano, vuelta al Colisseo y a tomar el autobús.
Llegamos al Diadema sobre las 18 horas, veníamos rendidos, así que decidimos tomarnos la tarde tranquila, nos fuimos directamente a los camarotes, y fuimos por unas copas a una cafetería y nos la llevamos a la habitación para tomárnosla en el balcón esperando la salida de Civittavechia.
Tras acicalarnos como todos los días nos preparamos para la noche italiana, no íbamos como se pedía, bueno algún color verde yo si llevaba y alguna chica también pero, no lo que se pedía. En el Florentina se palpaba un buen ambiente, mucho colorido italiano en los camareros y también entre los huéspedes, y llegado los postres saltó la sorpresa, camareros bailando, sacando a los pasajeros a bailar, entre ellas a nuestras chicas, después el trenecito. Todo muy bien y muy divertido, fue una noche muy agradable.
Esa noche, estábamos cansados y terminamos tomándonos la última copa en la Country Rock para recogernos sobre las 12:30, al día siguiente nos esperaba la Spezia, donde teníamos previsto visitar Portovenere.

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Toca contaros mi 5º día en el Costa Diadema: Este día teníamos pensado ir a Portovenere en barco y allí hacer una excursión alrededor de las tres islas, pero el tiempo estaba algo revuelto y hacía bastante aire, llegamos como siempre antes de la hora prevista, las 8:30, nosotros tranquilamente tras el desayuno en el camarote salimos sobre las 9:15 a coger el transfer que nos sacaría del puerto.
Al llegar al paseo junto al puerto pudimos observar que el servicio de barcos de Cinque Terre estaba suspendido, pero siempre llevábamos la alternativa, en esta ocasión coger el bus 11 que nos llevaría a Portovenere, nos costo preguntar unas cuantas veces a los residentes hasta que dimos con la parada, todo fue muy rápido compramos los billetes y a las 10:15 estábamos montados en el bus dirección a Portovenere.
Curioso lo de este transporte, en España no permiten que un autobús urbanos salga por carreteras interurbanas y con gente de pie, pues así íbamos nosotros, además a una velocidad y subiendo con muchas curvas que en algunos momentos creíamos que nos salíamos de la carretera.
Cuando llegamos a Portovenere, nos sorprendió gratamente, un pueblo pequeño, acogedor y muy bonito, a pesar de que soplaba mucho el viento y amenazaba con caer una tromba de agua no nos cayo nada, pudimos subir por su calle principal hasta la bella iglesia de San Pedro, impresionante el paisaje, como rugía el mar dando contra las rocas y que vista tan espectacular desde la parte más alta de la iglesia.
Tras disfrutar de esas vistas aunque un poco molesto por el viento y después de decidir no subir al castillo por el tiempo que hacía, decidimos irnos tranquilamente a coger el autobús dirección la Spezia para intentar llegar a la comida antes de que cerrasen a las 15 horas, todo salio a pedir de boca, nunca mejor dicho, a las 14:45 estábamos comiendo en el bufe.
Tras la comida, el capuchino y el limonchelo que no faltase, decidimos irnos a participar del concurso Cuestionario Musical, Cuestionario Cine y Juego Musical bajo la dirección de nuestra animadora del grupo de Factbook, Valeria Giglia, para terminar participando en la lección de baile de Vals Vienés con los Latins Dancers, como veis estuvimos toda la tarde en el Gran Bar Orlov cubierta 4.
Vuelta al camarote para acicalarnos y antes de la cena pasamos por la zona de fotos tocaba ver las que nos habían hecho los días anteriores y decidir si cogiamos alguna como recuerdo, alguna cayo nunca me vengo con las manos vacías.
Tras la cena, que como siempre fue estupenda, nos fuimos al Country Rock a tomarnos las ultimas copas, bailar un poco y a dormir que al día siguiente tocaba Savona.

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Nuestro 6º día en Costa Diadema: Como todos los días tomamos nuestro desayuno en el camarote, habíamos quedado en salir del barco a las 9 para visitar Savona por nuestra cuenta, el barco estaba prácticamente dentro de la ciudad, al bajar nos dirigimos a ver la Fotaleza de Priamar nos encanto el entorno y las vistas de la ciudad desde allí, nuestro Diadema parecía que se podía tocar con la mano.
Tras esta visita, nos dirigimos hacia la calle Corso Italia para desde allí visitar la parte más antigua de Savona, el Ayuntamiento, la Catedral, la Capilla Sixtina, y sobre todo pasear por las calles típicas de esta bonita ciudad.
Tras ver la parte histórica terminamos en la calle Paleocapa donde había unos soportales llenos de tiendas, de allí bajamos hacia la Torre León Pancaldo y de ahí pasando por el Ponte Capasso, que por cierto estaba abierto y tuvimos que esperar a poder pasar, todo una curiosidad lo de este puente.
Llegábamos al barco a las 13 horas y por fin podríamos comer en el Fliorentina, nos gusto también mucho la comida en el restaurante, con el inconveniente del idioma pero bueno nos entendimos.
Después del capuchino y el limonchelo decidimos este día irnos al camarote a descansar y también probar una buena siesta en ese camarote y esa cama tan amplia, aunque nos dieron la siesta con lo del simulacro para los pasajeros que subieron en Savona, disfrutamos desde nuestro balcón de la salida de Savona, espectacular la maniobra que hace el Diadema para salir de un puerto tan pequeño, esa tarde salimos tres barcos de Costa uno detrás de otro, ya os digo que fue muy interesante la salida.
Un día mas tocaba acicalarse, irnos a tomar una copa antes de cenar, esta vez nos fuimos al Atrio Eliodoro donde estuvimos bailando con el equipo de animación en ¡PARTY CON NO!, cuando acabamos nos fuimos a la cena que una noche más fue estupenda, para terminar esta noche en el Salón Teodora donde se celebraba la BIG REVIVAL PARTY (años 70/80) con el equipo de animación, allí bailamos lo que pudimos y nos dejó el cuerpo, nos tomamos nuestras copichuelas y nos acostábamos sobre la 1:00, al día siguiente llegábamos a Marsella.

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