LUNA DE MIEL TAILANDIA JUNIO 2017 ✏️ Blogs de Tailandia

Aquí estamos en el décimo día, siendo jueves ya, que rápido nos pasaron los días allí, espero que a vosotros también os pase lo mismo, eso significa que lo estáis disfrutando. En este día ya os aviso que no hicimos nada destacado, por si queréis pasar a la siguiente etapa.
Nos levantamos con ganas de playa y relajarnos. El desayuno del hotel es muy completo, estilo buffet y lo puedes tomar con vistas a la playa, eso sí, el café le cargan que no veas, yo con uno después ando con las pilas cargadas todo el día.
Los días en Tailandia empiezan temprano, a las 6:00 ya sale el sol, y yo diría que sobre las 9 ya hace una temperatura para ir a la playa. Aquí es sol pega más duro que en España, así que usar una buena crema solar. También a parte os recomiendo que llevéis un pequeño botiquín por si os surge algo. Y sobre las 18 ya empieza hacer fresquito como para abandonar la playa.
Algo que me acuerdo es que ellos no tienen cambios horarios al estar más cerca del ecuador, y no entienden por que nosotros cambiamos la hora dos veces al año, creen que estamos locos.
En este día aprovechando la happy hour del hotel que es de 13-15 y ya que íbamos un poco contentillos, decidimos comer en el hotel. Ahora no sé si fue por el efecto del ron o del vodka, pero la comida buenísima, eso sí, precios de casa, igual era por si ya empezábamos a echar de menos nuestra patria.
Nos volvimos a tirar en la playa a la tarde y estando debajo de la sombrilla yo creo que hasta nos poníamos moreno, otra apreciación que no sé si venía desde la happy hour o es por que era verdad. También quería remarcar una cosa. Si andáis en esta playa veréis que a los pocos os intentan vender algo y claro, nosotros cuando íbamos a dar una vuelta por la playa dejábamos todo en la habitación, no vaya ser, después viendo que estas personas sólo andaban a la venta, dejábamos las cosas en un bolso y nunca nos robaran nada. Ahora no vaya ser que a vosotros os roben por este consejo, pero bueno, que es sólo para referirme que en este viaje no tuve ningún percance y normalmente ando con la defensa alta, pero aquí acabamos por relajarnos.
Aquí también hay varios puestos por la playa donde dan masaje, pero visto la limpieza en Chiang Mai y Bangkok, aquí no nos dio confianza. Después tenéis spas por la isla o por los hoteles, pero por el precio con que los ofrecen, prefiero ir a un spa urbano por casa.
A la noche dimos una vuelta y compramos un par de camisetas para regalar, aquí mas caro que en el resto de Tailandia, y cenamos unos sándwiches en la habitación.

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Pues aquí está nuestra esperada excursión a Ang Thong, teníamos muchas ganas de ir y no defraudó.
Nos recogieron en el Hotel sobre las 7:15, nos levantamos un poco antes para desayunar en el hotel, pero al final del trayecto cuando llegas al embarcadero te ofrecen café o té y pastas. Al llegar te cogen los datos y te dan una pulsera identificadora, la cual tienes que devolver al finalizar la excursión. Desde el mismo embarcadero salimos las lanchas y los barcos, estos últimos van más lento. Iríamos sobre 20 personas y tardamos unos 45 minutos en llegar a nuestra primera parada, y durante este tiempo nos ofrecieron agua. De nuestro hotel llevábamos nuestros bañadores, ropa para cambiarnos para no andar con el bañador mojado, nuestras toallas y algo de dinero por si queríamos comprar algo, dentro de nuestra mochila.
La primera parada era para realizar snorkel, te dan las gafas de bucear con su tubo, una lástima que no den también unas aletas, creo que se disfrutaría más de la experiencia. Tuvimos la suerte de llegar los primeros, por lo que disfrutas del snorkel entre varias islas en un mundo de coral con peces de todo tipo. Lo malo es cuando llegan el resto de lanchas y el barco, entonces se masifica, pero bueno, el tiempo que estuvimos solos fue una gozada y estuvimos un buen rato, hasta que nos cansamos.
De vuelta a la lancha nos ofrecieron sandía y piña, y unas galletitas, junto con el agua que siempre te ofrecen. Entonces nos dirigimos a la isla Ko Mae Ko, donde se encuentra el lago Thale Nai, un lago conectado al mar por un túnel submarino, la verdad es que tiene una tonalidad esmeralda espectacular, un buen sitio para hacerse unas fotos.
Al finalizar nos dirigimos a Koh Pee a hacer kayaking entre sus islas y cuevas. Te recomiendo que vayas a tu ritmo y disfrutes de la naturaleza de estas islas. Por que el kayaking puede ser divertido sobre todo en un entorno así, pero como subas demasiado de revoluciones igual se te hace un poco largo. Al terminar estuvimos un rato por la playa de esta isla dándonos un baño y haciéndonos fotos.
Volvimos a la lancha y nos dirigimos a comer. Te llevan a un pequeño puerto de una isla, por la entrada parece un refugio de piratas, ya que es una pequeña entrada por donde apenas cabe un embarcación donde las piedras te marcan el sendero. El puerto es pequeñito y algo viejo, y nos dieron de comer comida típica de Tailandia. Pad thai, aros de cebolla, ensalada y una sopa algo picante, junto algo de sandía de postre.
De vuelta al barco nos dirigimos a una isla desde la cual ves la Isla de James Bond, aquí atracamos nosotros sólos. Aquí el chico que lleva el barco te daba la opción de bajarte y disfrutar de la playa o ir con él a hacer snorkel alrededor de la playa entre varias calas. Yo y Pili lo acompañamos a hacer snorkel, lo que pasa que estaba el mar picado y poco se podía ver del fondo marino, y cuando llevábamos un rato, Pili se empezaba a cansar y dimos vuelta para dirigirnos a la playa.
Se estaba genial en la playa solos, y hay gran cantidad de cangrejitos por la arena, los cuales al acercarte rápidamente se esconden. También tienes un pequeño chiringuito por si quieres coger algo de beber.
Aquí estuvimos un buen rato, y finalmente terminamos la excursión.
De vuelta al barco que tardaría el mismo rato en volver que ir, y de vuelta al hotel.
Me gustaría explicar que durante todo el trayecto ves gran cantidad de islas, si mal no recuerdo el parque natural tiene 42. Al ir en lancha, buena parte del tiempo estábamos nosotros solos o como mucha otra embarcación. Lo digo por que yo leyera que esta excursión está muy masificada. A nosotros fue en momentos puntuales, y yo pienso que igual esto pasa si vas en el barco.
Este tipo de excursiones duran por las islas desde las 9 de la mañana hasta las 16, aproximadamente. Si de verdad queréis estar tranquilos en la isla tenéis la opción de dormir en bungalows o tiendas de campaña en la isla de Koh Wua Talap.
También llevar con vosotros un calzado cómodo, ya que ciertos miradores tienen su pequeña dificultad, aunque nada fuera de lo normal.
Pues nada más destacable de este parque natural, sólo que disfrutarlo y haceros unas bonitas fotos.
De vuelta al hotel estábamos bastante cansados y compramos algo en el seven eleven para comer en la habitación y a dormir como benditos.

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En el último día de Koh Samui queríamos disfrutar de la playa y relajarnos. Así que trazamos un plan bastante fácil, relajarnos en el hotel tomando combinados y disfrutar de la playa.
La verdad es que con el paso de los días nos fuimos acostumbrando al horario tailandés, es decir, estar despierto en las horas del día, así que ya con la luz del sol sobre las 6:30 de la mañana ya nos levantábamos, y sobre las 21:30 de la noche ya estábamos con ganas de ir para cama. Que conste que no tenemos 80 años, pero yo es que entro en horario guiri así como salgo de España.
Desayunamos con el desayuno buffet del hotel, que tiene de todo y muy variado, y nos fuimos para la playa.
Nosotros estamos acostumbrados al agua del Océano Atlántico al ser de Galicia, y la verdad es que para nosotros el agua en Koh Samui es como estar en un balneario. A mi me encantaba ponerme en la orilla, tumbarte y que el agua vaya pasando por tu espalda con las olas, que relax. También estar pendientes del sol, sobre todo si sois blanquitos como yo, que pega bastante duro.
Después nos dimos una duchita en la habitación y aprovechamos para comer en el hotel, y la verdad es que la comida buenísima, con unos combinados que hacían de maravilla.
Descansamos un poco y de vuelta a la playa, tirados en la hamaca y jugando a las palas, para no sentirnos tan mal del atracón de la comida.
A la noche a hacer la dichosa maleta, a mi por lo menos me pasan mil recuerdos mientras la vas haciendo, y separando las cosas y documentación necesaria para el vuelo, no os olvidéis del papelito que tuvisteis que rellenar en la ida para poder entrar, ya que os lo piden para poder salir.
Nos fuimos sobre las 4:45 ya que teníamos el vuelo a las 6:00, y tuvieron el detalle en el hotel de darnos un pequeño desayuno para el viaje. Aquí si que tuvimos que reservar ya el taxi con el hotel, ya que a esta hora casi no pasan taxis por la calle.
Al llegar a Koh Samui en la terminal por Bangkok Air, tienen comida y bebida gratuita, por si no te dan desayuno o de comer en el hotel, que sepas que al llegar al aeropuerto no tienes problema.
Llegamos a las 7:05 a Bangkok, y durante el vuelo nos dieron otra vez desayuno, es decir, que si te pones, ya comes por la mañana para todo el día.
Aquí tuvimos que sacar las maletas y volver a facturar con Emirates, llevar algo de tiempo para no andar apurados, para hacer todo tranquilamente yo creo que con unas dos horas debería llegarte.
Nuestro vuelo salió a las 09:55, y la verdad es que fuimos con tiempo de sobra. Yo creo que todo depende de la cola que haya para revisar el pasaporte. Por que en Tailandia van con una calma mucho más grande que en España.
El vuelo genial con Emirates, aunque de vez en cuando nos teníamos que levantar para estirar las piernas, en un viaje tan largo yo recomiendo moverse de vez en cuando, yo por lo menos si no lo hago acabo reventado de la espalda.
Llegamos a Dubai a la 13:00 y a las 14:35 nos salió el siguiente vuelo. Lo que si me llama la atención de este viaje, es que el embarque siempre lo hacen en tiempo récord, en 20-30 minutos desde que abres las puertas del embarque hasta que cierran las del avión. Además para un avión de dos plantas.
El viaje a Madrid era con un avión más pequeño, y en el avión muy bien. Sólo que aquí las azafatas españolas no paraban de hablar en voz alta, algo que veías que eran más respetuosas en el otro vuelo, aunque bueno, igual lo notamos más por que íbamos cansadísimos.
Llegamos a Madrid a las 20:20, lo malo de este viaje es como quien dice vas persiguiendo el sol con los cambios horarios, por lo que te es difícil dormir, o por lo menos para nosotros.
En Madrid cenamos en el aeropuerto con las fuerzas bastante justas. Ya que tienes que salir por aduanas, sacar las maletas, volver a facturar y pasar otra vez el filtro de embarque. Nos salió el vuelo a Galicia a las 22:30 por Iberia y llegamos a las 23:40.
Después de este palizón llegaríamos a casa sobre las 02:00 y la pobre Pili a dormir que tenía que levantarse a las 07:30. Puedo decir que debía tener el cerebro tan frito de tanto cambio horario que me levanté con ella y no pude dormir en todo el día. Eso sí, al día siguiente debí de dormir unas doce horas.

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