Islandia 2020: En autocaravana y sin coronavirus ✏️ Blogs de IslandiaViaje de desconexión muy necesario después de estar cerca del Covid-19Autor: Carlossvcfate Fecha creación: ⭐ Puntos: 5 (9 Votos) Índice del Diario: Islandia 2020: En autocaravana y sin coronavirus
01: Introducción
02: --Dia 1 (22 julio): Llegada a Keflavik
03: --Día 2 (23 julio): Ballenas y Blue Lagoon
04: --Día 3 (24 julio): Krýsuvík - Þingvellir - Strokkur - Gulfoss - Kerið
05: --Día 4 (25 julio): Keldur - Trío de cascadas - Seljavallalaug - Solheimajokull
06: --Día 5 (26 julio): Vik -Laufskálavarda - Eldhraun - Fjadrárgljúfur - Kirkjugólf
Total comentarios: 9 Visualizar todos los comentarios
Etapas 4 a 6, total 12
Mi mujer y yo nos despertamos a las 08:00 y nos pusimos a desayunar mientras las niñas seguían durmiendo. Habíamos decidido dormir nosotros en la cama que se bajaba del techo precisamente para no despertarlas mientras hacíamos el desayuno. Fue una buena idea en cuanto a eso se refiere, mala con respecto a cada uno de los huesos de nuestra espalda . Al poco se despertaron y después de desayunar y recoger la caravana, rellenamos el depósito de agua y vacíamos (o mejor dicho vacié) las aguas grises y negras por primera, pero no última vez durante el viaje Mientras, las niñas jugaron un rato en el parque del camping. Para este día habíamos decidido visitar el círculo dorado pasando por el área geotermal de Krýsuvík. Llegamos a Krýsuvík a las 10:40 y estuvimos paseando por la zona un buen rato. Luego fuimos en dirección a Þingvellir. Muy bonito la verdad. Hacía mucho aire y en consecuencia algo de frío, pero soportable. Salió un día soleado y las fotos quedaban geniales. Fuimos andando un rato y viendo que la pequeña estaba bastante cansada, decidimos cruzar al otro lado para ver la iglesia y continuar, pensando que regresábamos al parking donde habíamos aparcado. Error. Estuvimos andando más de media hora hasta que nos dimos cuenta que no era el camino de vuelta correcto, así que no nos quedó más remedio que volver por donde habíamos venido. Todo esto con mis hijas en brazos, un rato una, un rato la otra. Resultado: dolor de rodilla para todo el viaje . Cuando finalmente llegamos al parking decidimos comer allí mismo. Albóndigas con tomate preparadas para la niñas y vasos preparados de ensalada y alubias con chía para mí y mi mujer. Lo traíamos de casa a conciencia de comidas rápidas. Después de comer nos dirigimos hacia Strokkur. De camino nos encontramos con esto: Nada más llegar vimos como explosionaba arrojando un chorro algo pequeño. Ver cómo salía disparado el agua de un geyser me dejó impactado, pero la verdad que me lo esperaba algo más espectacular, como más alto. Y.... efectivamente, era más espectacular que eso. Mientras estábamos sentados en un banco hablando, de repente salió disparado un chorro más del doble de alto que el anterior. Increíble. Había podido grabar el primero (el pequeño), así que me fui al otro lado para captar mejor la imagen y conseguir grabar está vez uno como el último (el grande) Solo tardó cuatro minutos de uno al otro. Mucho menos de lo que había leído suelen tardar. Nos gustó mucho. Después de verlo un par de veces más, nos fuimos hacia Gulfoss para ver la expectacular cascada. Llegamos al parking y estaba medio vacío. Mis hijas estaban cansadas y no querían bajar, así que lo hicimos por turnos. Primero fui yo y después mi mujer. Qué espectáculo de la naturaleza. Creo sinceramente que es lo más bonito que he visto en toda mi vida. Llegó incluso a emocionarme. Tal cantidad de agua cayendo, ese sonido del agua al caer, el arcoiris en todo su esplendor.... increíble. Después de estar un rato contemplando esa maravilla, regresé a la caravana para que pudiera disfrutarlo mi mujer. Le conté mi sensación y creo que de escuchar tan bonita descripción (o de oír que se veía el arcoiris ) mi hija mayor quiso acompañar a mi mujer. Yo mientras me quedé con la pequeña. Al cabo de un rato regresaron las dos y animé a mi hija de salir al menos al lado de la caravana para poder hacernos una foto los cuatro juntos, con la cascada y el arcoiris de fondo. Y así lo hicimos Última parada del día: Kerið Las niñas se habían quedado dormidas, así que de nuevo hicimos turnos. Primero fui yo. Pagué la entrada y recorrí el cráter bordeándolo por arriba, para después bajar hasta el agua. Precioso, tal cual se aprecia en las fotos. Después volví y fue a verlo mi mujer con mi hija pequeña que se había despertado. Cuando se cansaron volvieron y nos fuimos a intentar llegar a Reykjadalur hot spring thermal river . Llegamos hasta el parking y aparcamos la caravana. Veíamos a gente caminar a lo lejos por la montaña, con lo cual ya intuíamos que muy cerca no estaría. Pregunté a una familia que regresaba y me indicaron que estaba aproximadamente a una hora de camino andando. Así que muy a nuestro pesar desistimos, ya que las niñas estaban muy cansadas y 2 horas caminando para ellas sería eterno y agotador. Nos quedamos con esa espinita. Cenamos allí mismo unos sándwiches de fiambre y buscamos un camping cercano. Decidimos ir hasta Hella, concretamente al camping Árhús Cabins & Camping. Nos tomamos un vasito de leche y a dormir. Etapas 4 a 6, total 12
A las 05:00 ya estaba despierto. Había pasado mucho calor. No dábamos con la tecla con la calefacción de la caravana. Conseguí dormirme otra vez hasta las 07:40. Desayunamos y después apañamos la caravana: camas, cambio de aguas... Cuando ya estábamos listos fuimos dirección a las cascadas pasando por Keldur, para ver las curiosas casas con hierba en los tejados. De camino, caballos islandeses: Para llegar había un tramo de tierra y piedra que se nos hizo muy largo ya que dentro de la caravana se movía todo. Llegamos, hicimos unas fotos y luego nos fuimos a ver las tres cascadas del día. Llegamos a la primera de las cascadas, Seljalandsfoss. Hacía muy buen día y nada de frío, pero nos pusimos ropa impermeable ya que habíamos leído que se pasaba por detrás de la misma y te mojabas. Así que una vez cambiados, nos acercamos y nos hicimos unas fotos desde abajo. Luego subimos a la cascada para pasar por detrás de ella. El camino es pedregoso y resbaladizo. Es fácil y accesible, pero hay que ir con cuidado con los niños. Una vez arriba hicimos las fotos de rigor y bajamos para ver la segunda de las cascadas, Gljufrafoss, que está a unos cinco minutos andando. Mi hija pequeña no quería entrar, así que entró mi mujer con mi hija mayor, mientras nosotros esperábamos fuera. Al rato mi hija pequeña se animó y por sorpresa aparecimos en los pies de la cascada sobre la piedra. Nos hicimos todas las fotos que pudimos y salimos. Nos compramos unos perritos calientes para comer (mis hijas y yo) y comimos allí mismo, con las vistas de la cascada de fondo. Después fuimos hacia Seljavallalaug. Teníamos dudas sobre esta piscina. Mi mujer había leído que el agua no era caliente, yo lo contrario. Fuimos a comprobarlo. Aparcamos y comenzamos a andar por la montaña. El paisaje es precioso. Es una caminata de unos 15 -20 minutos, dependiendo del ritmo. Nosotros con dos niñas (3 y 6 años) unos 20 minutos. Es un camino fácil donde sorteas un río pasando por encima de las piedras. Lo cierto es que las niñas se comportaron como unas campeonas, aquí y en todo el viaje. Llegamos y habían unas 10 personas máximo. Nos metimos las niñas y yo. Mi mujer no se animó. Ese verde le dio un poco (o mejor dicho bastante) reparo. Se quedó fuera haciéndonos fotos desde todos los ángulos. Comprobamos que el agua es caliente. Se estaba de lujo dentro. El paisaje de alrededor la hace especial. Al cabo de un buen rato, deshicimos el camino y pusimos rumbo a la última parada prevista del día, Skogafoss. Llegamos al parking y vimos que estábamos prácticamente solos. No tengo con qué comparar el país antes del problema que actualmente nos acontece, pero desde luego creo que no sería así. Es alucinante contemplar estos paisajes sin tanta aglomeración de gente, con el atractivo de sentirte parte de esa naturaleza, escuchando los murmullos del agua al caer o sentándote sin nadie alrededor frente a una laguna glaciar como más adelante escribiré. En fin...que me desvío. Está cascada es preciosa. Aunque no es la que más me gustó (Gulfoss me hizo sentir lo que ningún otro paisaje me habia hecho sentir con anterioridad), sí que era la que más ganas tenía de ver. Fue muy especial contemplarla de la manera que lo hicimos. Una nube de agua pulverizada mojándome mientras miraba tan alto como podía. En esta, como en muchas de las cosas que vimos en Islandia, las niñas no salieron de la caravana por cansancio. Primero salí yo un muy buen rato y luego mi mujer. Cuando íbamos a iniciar la marcha, decidimos acercarnos al Glaciar Solheimajokull que teníamos previsto hacer a la vuelta. Con el buen tiempo que hacía, no queríamos arriesgar a que a la vuelta no pudiéramos contemplarlo con ese buen clima. Así que dirección al glaciar que estaba a unos 15 minutos de allí. Aparcamos, pregunté a un vendedor de un puesto de sopa y fish and chips, sobre el tiempo que se tardaba en llegar andando y allí que fuimos. Tardamos unos 15 minutos más o menos y llegamos hasta el final del camino autorizado. Abajo, prácticamente en el glaciar, había gente que había hecho caso omiso de las señales y se habían acercado pese a las indicaciones de que el terreno era inestable. Lo cierto es que yo no bajé porque iba con las niñas, porque a simple vista, el camino hasta llegar, no parecía muy peligroso la verdad. El caso es que nos contentamos con apreciarlo desde esa distancia y alucinar con el primer glaciar que habíamos visto en nuestras vidas. Poco después volvimos a la caravana y fuimos en dirección a Vik i Myrdal. Buscamos un camping en el pueblo (Campingsite Vik) y allí que fuimos. Cuando entré en recepción para pagar por la noche que íbamos a estar, me encontré con que la chica que me atendió era catalana. Bien que me vino, ya que en mi inglés hubiera tardado como diez veces más. Nos dimos unas duchas por 300 coronas cada uno y volvimos para hacernos la cena. Está vez patatas y pollo rebozado. De postre unas tortitas de avena sin gluten ni azúcar con sabor a kit kat. A dormir. El día había sido intenso. Etapas 4 a 6, total 12
Habíamos ido planificando la ruta en función del clima que íbamos viendo haría al día siguiente. Está información la consultábamos a traves de la página oficial islandesa Verdu.is. Lo cierto es que no nos llovió prácticamente nada, con lo que realmente no tuvimos que variar mucho. Ese día sí llovió durante toda la noche. Cuando nos despertamos a eso de las 07:30, había dejado de llover y hacía un día más que aceptable. Eso sí, hacía bastante aire. Desayunamos unas tortitas, mientras las niñas dormían. Ese día se despertaron algo más tarde. El cansancio del viaje ya se les notaba. Mientras arreglaba la caravana las niñas jugaban con mi mujer en el parque. Cuando terminé fuimos a hacer unas compras en el centro comercial que hay en Vik. Les había prometido a las niñas que les iba a comprar unos peluches: Aproveché también para comprarme un parche de Islandia para mí colección: Cuando terminamos Nos fuimos a ver los acantilados. Tenía muchas ganas de ver Pufins, ya que en Escocia no pude verlos. De camino: Aparcamos en el parking y fuimos andando hasta lo alto. Me parece ver sobrevolando uno, no, no es...hay muchos pájaros volando, me habré equivocado Sigo andando y.... Muuuuchos Pufins volando y posados sobre el acantilado. Qué espectáculo. Estaban a centímetros de nosotros. Estuvimos bastante rato viéndolos volar, posados.... Cuando les hicimos todas las fotos que nos vino bien, nos fuimos a la playa de arena negra Reynisfjara. Llegamos a la paya y disfrutamos del paisaje que nos ofrecía. Arena negra, cueva con columnas de basalto, Trolls petrificados saliendo del agua a un lado, Arco de Dyrhólaey al otro lado... Disfrutamos mucho de ese lugar. Las niñas jugaron durante bastante rato con la arena negra, mientras nosotros no nos cansamos de sacar fotos desde todos los ángulos. Llenaron una bolsita con arena negra para después en España llenar botellitas y tener un recuerdo Islandés. Después fuimos haciendo camino hacia Skaftafell, donde se encontraba el camping más cercano a nuestro destino más alejado, Jokulsarlon. De camino paramos en Laufskálavarda. Hicimos una montañita propia y comimos en el parking: macarrones con pollo, crepe de choco y café. Luego pasamos por los campos de lava de Eldhraun. Un paisaje muy curioso. Después seguimos hasta el cañón Fjadrárgljúfur. Dimos una pequeña caminata hasta llegar al mirador. Allí disfrutamos de las vistas y volvimos para seguir nuestro camino. La siguiente parada fue el suelo de iglesia Kirkjugolf. Aquí ya el cansancio hizo mella en el resto de familia y solo yo fui a verlo. Regresé y seguimos en dirección a Skaftafell Camping. Ya al llegar a Skaftafell pudimos contemplar desde la carretera, las lenguas glaciares del parque nacional de Skaftafell, pertenecientes al glaciar Vatnojökull. Estábamos algo cansados de preparar comidas, así que decidimos parar en un restaurante de carretera "Veitingasala Restaurant, Shop, And Gas". Allí cenamos estofado de cordero en salsa con patatas y ensalada de remolacha, col, maíz y lechuga. De postre coca con dulce por encima. Luego un café con leche calentito que venía muy bien. Llegamos a un camping de la zona, pero no nos quedamos ya que no tenía electricidad. Así que volvimos atrás 10 minutos a Skaftafell Camping. Allí pasamos la noche. Aunque me costó bastante encontrar un enchufe libre, al final encontramos uno al que engancharnos. Mientras mi mujer y yo nos relajábamos sentados, las niñas jugaban a peleas con unos palos, con resultado lesivo Palazo contra el ojo de mi hija mayor. Nada, golpe sin importancia. Cenamos, miro la ruta del día siguiente y a dormir. Etapas 4 a 6, total 12
📊 Estadísticas de Diario ⭐ 5 (9 Votos)
Últimos comentarios al diario Islandia 2020: En autocaravana y sin coronavirus
Total comentarios: 9 Visualizar todos los comentarios
CREAR COMENTARIO EN EL DIARIO
Diarios relacionados ISLANDIA, NATURALEZA EN TODO SU ESPLENDOR
Trekking de Landmannalaugar a Skogar y posterior vuelta a la isla en un coche turismo...
⭐ Puntos 4.98 (62 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 341
Islandia en autocaravana en familia, un pequeño bocado en 11 días
Nuestra aventura islandesa en 11 días con nuestro hijo de...
⭐ Puntos 4.89 (45 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 315
Islandia, paisajes que parecen de otro planeta
Viaje de 10 días en septiembre de 2022. Vuelta a la isla en sentido horario en un...
⭐ Puntos 5.00 (24 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 306
ISLANDIA: EL PAÍS DE LOS NOMBRES IMPOSIBLES
Recorrido de 12 días completos, en 4x4 por toda la isla, en agosto de 2017, por la...
⭐ Puntos 5.00 (14 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 284
ISLANDIA en los tiempos del Coronavirus
Viaje de 16 días en coche 4x4 de alquiler recorriendo fiordos, glaciares, volcanes...
⭐ Puntos 5.00 (34 Votos) 👁️ Visitas mes actual: 250
Galería de Fotos
|