![]() ![]() Ruta en autocaravana por Nueva Zelanda (16 días) + Extensión en Hong Kong ✏️ Blogs de Nueva Zelanda
En este diario se describe nuestra experiencia en Nueva Zelanda (16 días) recorriendo la Isla Norte y la Isla Sur en autocaravana.
Este y otros foros me fueron de gran ayuda a la hora de planificar mi viaje, pero todos los diarios eran de gente que había tenido la suerte de estar más días en ese fabuloso país, es por eso que me decidí a escribir este diario. Y seis meses después, por fin lo tengo listo.
Espero que os sea de ayuda.Autor: Fata Fecha creación: ⭐ Puntos: 4.8 (6 Votos) Índice del Diario: Ruta en autocaravana por Nueva Zelanda (16 días) + Extensión en Hong Kong
03: Isla Sur
04: Extensión a Hong Kong
Etapas 1 a 3, total 4
Introducción
Nueva Zelanda (Aotearoa en maorí - 'tierra de la larga nube blanca') se encuentra situada en las antípodas de España, al suroeste del Océano Pacífico. Está formada por dos grandes islas, la Isla Norte y la Isla Sur , junto a otras islas menores, de entre las que destacan, la Isla Stewart o las Islas Chatham, cubriendo una superficie total de 270.530 km ² (8,5 veces la de Cataluña). Su capital es Wellington, pero la ciudad más importante es Auckland. La población del país es de unos 4,2 millones de habitantes (un 66% en la Isla Norte). Ofrece opciones para todos los gustos. Puedes admirar el impresionante paisaje mientras practicas esquí, haces surf, montañismo, senderismo o piragüismo. Y si estas opciones no te parecen atrevidas, puedes probar algunas de las aventuras que los kiwis han inventado: hacer bunging en acantilados y puentes, deslizarse a través de los rápidos de agua blanca, hacer rafting por aguas negras, o ponerte dentro de una bola gigante de plástico y rodar por la ladera de una montaña. Para los menos atrevidos, se puede disfrutar de un paseo por playas vírgenes, recorrer su pintoresca costa en velero, pescar truchas y salmones en ríos y lagos, caminar sobre una poderoso glaciar, admirar la hermosa flora y fauna nativa, nadar con delfines, o cenar en una de las aclamadas bodegas del país. Es un refugio para aquellos que buscan reencontrarse con la naturaleza, la tranquilidad o el descanso, pero a la vez garantiza aventura y diversión para todos. Su clima templado, con variaciones estacionales relativamente pequeñas, hacen que sea un destino de vacaciones ideal durante todo el año. Las dos islas tienen sorprendentes y diferentes características. La Isla Norte, dramáticos paisajes volcánicos y zonas de gran actividad térmica, largos tramos de bellas playas, antiguos bosques indígenas y una fuerte influencia cultural. La Isla Sur, con un ritmo de vida más lento, está dominada por la magnífica columna vertebral montañosa de los nevados Alpes del Sur, y un espectacular paisaje con glaciares, lagos profundos y extensos bosques. El país puede ser pequeño, pero en variedad, es prácticamente inigualable. Sin duda, cuando vuelves a casa, la mayoría de tus recuerdos vienen del esplendor natural de Nueva Zelanda. Hay pocos países en este planeta tan diversos, solitarios, vírgenes y absolutamente fotogénicos. Ficha técnica del viaje Itinerario Día 1: Vuelo Día 2: Vuelo Día 3: Llegada a Auckland Día 4: Auckland - Waitomo - Rotorua Día 5: Rotorua (Wai-O-Tapu-Waimangu) - Tongariro NP Día 6: Tongariro NP - Wellington Día 7: Wellington - Picton - Kaikoura Día 8: Kaikoura - Arthur's Pass NP - Greymouth Día 9: Greymouth - Paparoa NP - Franz Josef Glacier - Fox Glacier Día 10: Fox Glacier - Haast Pass - Wanaka Día 11: Wanaka - Arrowtown - Queenstown - Te Anau Día 12: Te Anau - Milford Sound - Te Anau Día 13: Te Anau - Dunedin Día 14: Dunedin - Oamaru Día 15: Oamaru - Christchurch Día 16: Christchurch - Hong Kong Día 17: Hong Kong Día 18: Hong Kong Día 19: Hong Kong - Londres - Barcelona Estilo del viaje - Autocaravana Para viajar por este país hay varias maneras, pero nosotros nos decidimos por alquilar una autocaravana y recorrerlo a nuestro aire. Lo reservamos todo (avión + autocaravana) a través de la agencia NZ Viajes. Ninguna queja al respecto. Compartíamos nuestro viaje, experiencias y gastos con un par de buenos amigos, Jordi y Ana. * Ventajas e inconvenientes Aparte de la absoluta sensación de libertad que otorga, las ventajas se resumen en el gran ahorro económico y, sobre todo, de tiempo. Permite acumular comida para varios días y olvidarse de restaurantes, así como parar donde quieras para comer, cenar o, incluso, dormir, pues se puede acampar allí donde no esté expresamente prohibido. No obstante, cabe decir que los campings, perfectamente acondicionados donde vayas, son muy baratos y te dan mayor comodidad en cuanto a cocinar y al uso de servicios y duchas. Por este motivo, y dado que fuimos en invierno, fuimos cada noche, salvo una. En verano, la cosa seguramente habría sido diferente. En cuanto a las comidas en los restaurantes, las limitábamos la hora de comer, y siempre para ganar tiempo, para no perder tiempo cocinando si no teníamos nada medio preparado. Queríamos ver muchas cosas en muy pocos días, y teníamos que sacar el tiempo de donde fuera. Si no se quiere ir de restaurante ningún día, lo más recomendable es dejar la comida medio preparada la noche anterior o tirar de bocadillos. No obstante, para romper la monotonía, de vez en cuando va bien ir al restaurante, y tampoco son muy caros. La mayoría ofrecen lo que denominan brunch. ¿Qué es el brunch? El brunch consiste en una comida realizada por la mañana entre el desayuno y el almuerzo. Por el contenido, es una combinación entre estos dos comidas (breakfast) y (lunch) y que suele servirse entre las 11 a las 15 horas. Es típico de los países anglosajones. La relación cantidad-calidad-precio de estos es muy buena. Son un solo plato, pero muy completo. Si sufren por el precio del carburante, tranquilos, el combustible es bastante más económico que aquí. Nosotros hicimos 3.500 km que nos costaron 535 NZ $ (unos 267,50 €). En cuanto a los inconvenientes, cabe señalar que conducir un coche no es lo mismo que conducir una autocaravana. El estado de las carreteras es bueno, pero con autocaravana no se puede ir a la misma velocidad que un coche, lo que hace que las distancias sean o se hagan más largas. La estabilidad, tampoco es, ni mucho menos, la misma. Analizando, la experiencia en su conjunto, esta ha sido de lo más positiva y de volver, no dudaríamos de volver a recorrer el país con autocaravana. Lo único que quizás cambiaríamos sería la marca de la autocaravana, en vez de una Mitsubishi, optaríamos por un Mercedes o un Fiat, a criterio de Jordi, que es quien a conducido durante todo el viaje, y de motor entiende bastante, deben ser más fáciles de conducir y más estables. Vale decir, pero que si contratais el viaje a través de NZ Viajes, esta agencia sólo trabaja con United Campervans y los vehículos de esta compañía son de la marca Mitsubishi. Fechas del viaje Relacionado con el punto anterior hemos de mencionar que es muy diferente la temporada alta de la baja. Por suerte para nosotros la temporada baja coincide con su invierno, es decir, nuestro verano. Así en agosto es la época más económica por el alquiler de vehículos y los alojamientos (algunos precios casi se triplican en enero ya que hay mucha demanda de los propios kiwis o australianos). Nosotros hicimos el viaje entre el 04/08/2009 y el 22/08/2009 con 14 días en destino y 2 días de extensión en Hong Kong. A pesar de ir en invierno, el tiempo nos acompañó bastante. En la isla norte, tuvimos un tiempo fantástico todos los días, con sol y temperaturas suaves durante el día, y algo más frescas durante la noche. En la isla sur nos encontramos con temperaturas algo más bajas y nos llovió algún día, pero nada nos impidió disfrutar de la experiencia. Moneda La moneda oficial es el dólar neozelandés (NZ $), que valía aproximadamente medio euro (agosto 2009). Esta divisa cotiza en nuestro país y se puede adquirir en cualquier banco. También se puede ir con euros para cambiar en cualquier banco de allí o sacar moneda local en cualquier cajero que hay en todas las poblaciones. En todas partes se aceptan las tarjetas de crédito. El nivel de vida es similar al de aquí. Presupuesto El principal coste es el de los vuelos. NZ Viajes, para el mes de agosto, ofrecían un pack (vuelo, alquiler de la autocaravana - 14 días y excursión a Mildford Sound) por 1.560 € cada uno. A esta cantidad hay que sumar: Ferry Interislander 61,50 € Tasas 375,00 € Seguro vehículo todo riesgo 63,00 € Seguro viaje 100,00 € Así el coste total coste del viaje por persona fue de 2.159,50 € y el total de gastos en destino de unos 750,00 € aprox. Requisitos de entrada Para entrar en el país no se necesita visado y es suficiente con el pasaporte con 90 días de vigencia. Sin embargo hay que tener en cuenta una serie de consideraciones debido a las particularidades del país. El cuestionario de inmigración es extenso y detallado, haciendo referencia por ejemplo a los lugares donde hemos estado y si hemos estado en contacto con animales. Este también detalla las importantes sanciones que te esperan si te quieres pasar de listo y las revisiones son extremadamente exhaustivas ya que existe la figura del detector dog (son perros vestidos con un chaleco y al que no se le escapa nada). La letra pequeña advierte de la multitud de cosas que no se pueden entrar en el país: entre otros no se puede entrar comida de ningún tipo, el material de acampada que lleveis será revisado y limpiado de restos de tierra y semillas, así como las suelas de los zapatos y sobre todo si lleváis botas de caminar. Es recomendable leerse la web del New Zealand Immigration Service. Recuerde que necesita carné de conducir internacional si quiere alquilar algún vehículo (se consigue en las Delegaciones de Tráfico de cada provincia). Salud No es necesaria ninguna vacuna para acceder al país y el nivel de higiene es envidiable. Si ha estado anteriormente en países de riesgo hay que justificar que se està vacunado. El sistema sanitario es muy bueno. Seguridad Probablemente es uno de los países más seguros del mundo. Esto permite acampar en casi cualquier lugar. Sin embargo siempre se deben respetar las normas básicas de sentido común. Alojamiento En función del medio de transporte que se utilice, se puede elegir entre hoteles, hostales, albergues, bed & breakfast, granjas, casas de campo o campings. En temporada alta es aconsejable informarse de los precios previamente y reservar con antelación. Nosotros, obviamente, optamos por campings. Hay dos grandes cadenas, Top 10 y Kiwi. En general, todos están muy bien equipados, pero son mejores los de la cadena Top 10. Todos disponen de espacios comunes con salas de encuentro con chimenea, televisión e Internet, cocinas y comedores comunitarios, duchas y servicios, así como lavanderías con lavadoras y secadoras. Además, las recepciones son improvisados puntos de información con trípticos informativos de todas las actividades posibles de la zona y su personal, siempre está dispuesto a hacerle cualquier recomendación o aclaración. Existen también lugares de acampada con servicios mínimos, que suelen estar cercanos a puntos destacados con un entorno único (por ejemplo el Parque Nacional Tongariro). Y recordad que se puede acampar libremente allí donde no esté expresamente prohibido. Gastronomía Por nuestro sistema de viaje sólo fuimos de restaurante en contadas ocasiones. Absolutamente recomendable probar los mejillones de labios verdes y comer langosta en Kaikoura, en la Isla Sur. Encontrará gran cantidad de supermercados con todo lo que necesite y a buenos precios. Nos gustaría destacar la buena calidad de la carne, especialmente la de ternera y la de cordero. Diferencia horaria Durante nuestro verano, Nueva Zelanda se encuentra 10 horas por delante de nuestra hora mientras que durante el invierno la diferencia es de 12 horas. Guías y bibliografía Nosotros usamos la Guía Visual de El País Aguilar y la Lonely Planet. Ambas muy completas, la primera más concisa y con muchas fotografías, y la segunda más extensa y detallada. Una buena combinación. En la web www.newzealand.com, aparte de encontrar toda la información necesaria, encontrareis un calculador de distancias, que la verdad nos fue muy bien para planificar nuestra ruta. Finalmente cabe destacar que en cualquier punto de información encontrareis mapas de carreteras, información sobre alojamientos, sobre atractivos turísticos, y sobre todo lo que podais precisar, además de poder gestionar todas las reservas. Etapas 1 a 3, total 4
04/8/2009 a 6/8/2009: Barcelona - Londres - Hong Kong - Auckland
Empezamos el viaje en Barcelona cogiendo un vuelo de enlace hacia London-Heathrow. Una vez allí, conectamos con Air New Zealand hasta Hong Kong. Volamos toda la noche, durante unas 11 horas y 45 minutos, pasan más rápido de lo que inicialmente pensábamos. El entretenimiento del avión está bastante bien. En Hong Kong tenemos un par de horas más o menos antes de coger el vuelo que nos tiene que llevar a Auckland. Las aprovechamos para estirar las piernas, y yo para disfrutar de un masaje en los pies. Y, por fin, embarcamos en el último vuelo hasta nuestro destino, 10 horas y 55 minutos aproximadamente. Llegamos a Auckland la mañana del día 6 de agosto después de volar 24 horas y 45 minutos y más de 30 horas de viaje. No hay demasiada gente al aeropuerto. Resolvemos con rapidez los trámites de inmigración. Recogiendo el equipaje vemos los directory dogs. A nosotros, pero no nos rastrean el equipaje. Nos dirigimos a la línea verde con los papeles de la aduana. Nos hacen abrir una de las maletas por unas botas, pero cuando ven lo limpias que están (están por estrenar) nos dejan pasar sin más incidencias. En el punto de información del aeropuerto hay trípticos de todo el país. Estamos cogiendo de todas partes, cuando de repente suenan unas alarmas de evacuación, nos obligan a salir del mismo a toda prisa. Cuando parece que ha pasado todo (no pudimos averiguar, que pasaba) volvemos al hall del aeropuerto para llamar a la compañía de las autocaravanas para confirmar nuestra llegada y solicitar que nos vengan a buscar. Una vez en la oficina de United Campervans nos atienden con mucha amabilidad y en español! Llenamos todos los formularios, cogemos las cadenas (te obligan a llevarlas ya que en caso de que nieve la policía te las hace poner), mapas de carreteras, más trípticos, etc. Nos explican detalladamente el funcionamiento de la caravana (calefacción, termo, vaciado de las aguas, gas ...) Parece sencillo! Está muy bien equipada (sábanas, mantas, toallas, etc). Cargamos todas las maletas y comenzamos la aventura. Nuestra primera parada es en un supermercado de la cadena Woolworths (están muy bien surtidos y bien de precio). Antes de irse de la compañía de alquiler de las autocaravanas pedimos que nos recomienden un camping cerca de Auckland. Nos recomiendan el Top 10 Manukau (15 NZ $ por persona). El chico que nos ha atendido, nos comenta que está un poco lejos del centro de Auckland, pero que está muy bien comunicado. Una vez en el camping, nos instalamos, deshacemos el equipaje y guardamos todo lo que hemos comprado en el supermercado. Decidimos ir en Auckland, pues mañana nos ponemos en ruta, y ya no tendremos más posibilidades de hacerlo. Efectivamente, el camping estaba bien comunicado, justo delante de la entrada había una parada de autobús y uno de ellos te dejaba en la zona del barrio marítimo, pero lo de un poco lejos, yo diría que no estaba un poco lejos, sino que estaba muy lejos, pues nos costó más de una hora llegar! (Precio billete 22 NZ $ - Precio especial 4 personas). El camping estaba muy bien equipado y acondicionado, como casi todos los de la cadena Top 10, pero no lo recomiendo a aquellos que, como nosotros, tengan muy poco tiempo para visitar Auckland, pues como ya he dicho, está muy lejos del centro . Al bajar del autobús, damos una vuelta por el barrio marítimo, destacan los edificios del siglo XIX que contrastan con las construcciones que se llevaron a cabo con motivo de la celebración de la Copa América el año 2000. A continuación, nos adentramos por la ciudad hasta llegar a la Skytower (visible desde cualquier punto). Tiene 328 metros de altura (se considera la más alta del hemisferio sur) y ofrece unas vistas espectaculares de toda la ciudad. Es la mejor forma de tomar contacto con la ciudad, pues desde arriba se tienen unas vistas de 360 º que permiten ver la ciudad y las islas del golfo de Hauraki. Para aquellos que no puedan dedicar demasiado tiempo a visitar la ciudad, es sin duda la mejor opción. Está abierta desde las 8:30 am hasta última hora de la tarde y vale 28 NZ $ por persona. Los más atrevidos pueden optar por el Sky Jump o el Sky Walk, saltar desde 192 m o caminar por el exterior de la torre a una altura de unos 190 m aprox. (www.skycityauckland.co.nz) Si se dispone de poco tiempo, es aconsejable subir al atardecer, ya que si las vistas de día son fantásticas, pero las de noche aún lo son más. Nuestra intención inicial era quedarnos a cenar a alguno de los restaurantes de la torre, en concreto al Orbit, pero las fuerzas empiezan a fallar y recordemos que el camping está a más de una hora de camino. Así es que al bajar de la torre decidimos ir a buscar el autobús para volver al camping, cenar en la autocaravana y a dormir! 5/8/2009: Auckland - Waitomo – Rotorua (366 km) Nos levantamos temprano y emprendemos el camino hasta las Waitomo Caves (www.waitomocaves.co.nz), nuestra primera visita. Por el camino nos llaman la atención dos kiwis enormes, como si de un toro de Osborne se tratara. Uno de ellos, pintado con la bandera neozelandesa, el otro con colores muy vivos. Que pena que no pudimos parar para hacer fotos! Una vez llegamos a las cuevas, optamos por el combinado Ruakuri Cave / Glowworm Cave (78 NZ $). Las cuevas de Waitomo deben su nombre a la existencia de glowworm o luciérnagas. Las luciérnagas pueden verse en ambas cuevas, pero el combinado es muy recomendable, puesto que mientras en la Ruakuri Cave, se pueden observar más de cerca y de pie, en la Glowworm Cave, se pueden observar más cantidad y en barca. Dos formas de verlas, dos experiencias diferentes. Las formaciones calizas de ambas cuevas son bastante espectaculares. Tras la visita emprendemos el camino hacia Rotorua. El paisaje resulta encantador, sobre todo cuando empieza a caer el sol. Cuando llegamos es de noche y lo hacemos con el tiempo justo para asistir a la cena - espectáculo maorí que previamente habíamos reservado por teléfono. La oferta de este tipo de espectáculos es amplia, nosotros optamos por el que ofrecen a la Tamaki Maori Village (100 NZ $ por persona) (www.maoriculture.co.nz). Es sin duda una turistada, pero es de esas cosas que hay que hacer. En primer lugar, te reciben los guerreros con sus rituales, a continuación, te guían hasta el poblado donde te hacen demostraciones de las costumbres del día a día en un poblado maorí (la verdad es que no parece demasiado real, sino al contrario parece todo muy preparado para los turistas). Tras dar una vuelta por el poblado te llevan a una especie de teatro donde representan una selección de danzas y bailes tradicionales. Finalmente, después de la exhibición, te llevan al comedor, donde te sirven comida supuestamente cocinada de forma tradicional, al estilo hangi. Lo que te encuentras, sin embargo, es con un buffet con varios platos típicos. Al final de la cena te hacen una demostración rápida de cómo ha sido cocinada toda la comida. Una vez más, parece un montaje que quita realismo a la velada. Quizá si te lo enseñaran antes ganaría en credibilidad. Dormimos en Rotorua Thermal Holiday Park de la cadena Kiwi (16 NZ $ por persona). 8/8/2009: Rotorua - Wai-o-tapu - Waimangu - Tongariro NP (260 km) Dedicamos el día a explorar algunos de los centros termales cercanos a la ciudad. La oferta es muy amplia. Nuestra primera visita se Wai-o-tapu (30 NZ $ por persona) (www.waiotapu.co.nz). Se trata de un área termal muy colorista y con fenómenos muy diversos (cráteres, piscinas de agua y barro, fumarolas de vapor ... y el Lady Knox Geyser de 20 metros de altura que se activa a las 10:15 puntualmente (lo estimulan con jabón). Muy preparado, pero hay que verlo. Para visitar el Geyser es necesario disponer de la entrada que debe comprarse en las taquillas del parque situadas a cinco minutos en coche de aquél. Cuando adquirimos el ticket, nos informan que hay tres posibles recorridos, de 30 ', 45' y 75 '. Por la hora que es, nos aconsejan hacer los dos primeros y dejar el tercero para después de la visita del geyser. Sin embargo, sólo el primero ya nos cuesta más de una hora de recorrer, cada vez quedamos más boquiabiertos por los diferentes fenómenos termales que vamos viendo. Algunos ejemplos son la Champagne pool (piscina de 60 m. de diámetro a 70 º, llena de burbujas y de color verde y naranja), Artist's Palette (terraza silícica que cambia de color según el nivel del agua), Devil's Bath (cráter lleno de agua de color verde muy intenso debido al arsénico que contiene). Dado que antes de la erupción del geyser no da tiempo de disfrutar debidamente de los tres recorridos (el tiempo que estiman es realmente escaso), y que para llegar al tercero tienes que pasar antes por el primero y el segundo (aunque pasar por alguno de estos fenómenos dos veces, la verdad es que tampoco nos importó demasiado, es más, volvimos a quedar boquiabiertos de nuevo) lo más recomendable es llegar al parque sobre las 10, adquirir el ticket, e ir a ver la erupción del geyser y luego hacer el recorrido del tirón dedicando el tiempo que se quiera. Es una visita indispensable para hacerse una idea de la zona volcánica de Taupo. Comemos unos bocadillos en el self-service del centro termal (12,5 NZ $ por persona) y nos dirigimos a Waimangu. Waimangu (32,5 NZ $ por persona) (www.waimangu.com), creada como consecuencia de la acción del volcán Tarawera, es más abrupta y salvaje que Wai-o-tapu, el paseo, que dura aproximadamente una hora y media, sigue el curso de un río y todos los fenómenos cercanos al mismo: terrazas silíceas, pequeños surtidores, el lago frying Pan, el cráter del Infierno (que forma un lago con temperaturas de 80 º C y que sube y baja de nivel cíclicamente). Un autobús gratuito pasa por los diferentes puntos del recorrido y te vuelve al punto de origen. Una vez terminada la visita, iniciamos el camino hacia el Parque Nacional de Tongariro. Nuevamente se nos hace de noche por el camino. Hacemos noche en el Discovery Lodge (16 NZ $ por persona). 9/8/2009: Tongariro NP – Wellintong (344 km) El Parque Nacional de Tongariro es un lugar fantástico para admirar paisajes volcánicos y hacer actividades al aire libre. Desde cualquier punto la visión de los tres volcanes principales nevados, el Ruapehu de 2.797 m., el Ngauruhoe de 2.291 m. y el Tongariro de 1.968 m., te transportan. Hay infinidad de rutas, pero si sólo se dispone de un día se recomienda hacer el Tongariro Crossing (llamado por los neozelandeses la mejor caminata de un día del país). Nos levantamos muy temprano y descubrimos las siluetas de los tres volcanes nevados ante nosotros. Nos dirigimos al centro de información. El día se presenta frío, pero claro, así es que creemos que podremos seguir con nuestros planes de hacer, al menos en parte, el Tongariro Alpine Crossing. Sin embargo, al llegar al centro de información, nos desaconsejan totalmente hacerlo por nuestra cuenta, pues hay mucha nieve y hielo en el camino. No queremos, pero salir de la zona sin hacer algún trekking por el parque. Por el tiempo de que disponemos nos aconsejan hacer lo que discurre por las Taranaki Falls y que llega hasta los Tama Lakes. Es una caminata de dificultad baja. Antes de adentrarse en un hayedo, el camino discurre por una zona de típico paisaje alpino con gran número de matorrales y arbustos. El trekking ofrece unas bonitas vistas del simétrico cono del Ngauruhoe y de las erosionadas montañas del Tongariro y del Pukekaikiore. Dentro del bosque, el camino sigue el curso del arroyo Wairere hasta las Cascade Falls, primero y Taranaki Falls después. Estas son un salto de 20 metros desde un precipicio de lava que formó el Ruapehu tras una erupción hace 15.000 años. No nos da tiempo de llegar a los lagos. Después del trekking nos esperan más de cinco horas de coche hasta Wellington, y el tiempo se nos está echando encima, así que decidimos dar la vuelta sin llegar a los lagos. Está muy bien señalizado. Nos gustó mucho, incluso a mí que no soy nada amante de caminar por la montaña. Debo reconocer, pero que al final se me hizo un poco pesado. A aquel a quien le gusten los trekkings y caminar por la montaña, seguro que les gustará, de hecho, a mis compañeros de viaje les gustó mucho. Tenemos reservado el ferry para el día siguiente a las 6 de la mañana. Nuestra intención es dormir lo más cerca posible de la estación marítima, a poder ser en la misma estación. (www.interislander.co.nz). Llegamos a Wellington sobre las 20.00 horas. Nos acercamos a la estación del ferry para ver si podemos hacer noche allí, pues estamos agotados de la caminata y de la paliza de coche y no nos apetece buscar un camping en las afueras de Wellington. Tras dar unas cuantas vueltas aparcamos en un lugar donde no parece estar prohibido. Sin embargo, a las cuatro de la madrugada unos golpes en la puerta nos despiertan. Era un trabajador que nos advierte que estamos en el parking de los empleados y que no podemos estar allí. Nos movemos y nos situamos ya en la cola del ferry. Total, nos ha despertado media hora antes de lo previsto. Podía haber sido peor! Etapas 1 a 3, total 4
10/8/2009: Picton - Kaikoura (163 km)
A las 6 de la mañana puntualmente sale el ferry hacia la Isla Sur. A medida que va haciéndose de día se empiezan a vislumbrar los Marlborough Sounds. Es una zona llena de islas, fiordos y calas que se pueden recorrer en bicicleta, kayak ... pero nosotros nos limitamos a las vistas que nos ofrece la cubierta del barco. Al llegar a Picton damos una vuelta por la ciudad y nos acercamos al punto de información para hacer una reserva para el día siguiente para ir a avistar ballenas en Kaikoura. De Picton decidimos ir directamente a Kaikoura, sin pasar por Havelock ni recorriendo la Queen's Charlotte Drive, pues se nos está haciendo un poco pesado conducir la autocaravana y con la travesía del ferry ya nos hemos hecho una idea de la zona. Por el camino encontramos grandes extensiones de viñedos y de repente nos sorprenden una colonia de leones marinos. Al pasar por Ohau Point a unos 23 km. de Kaikoura, hay que estar muy atentos y fijarse bien con las piedras de la playa entre las que se esconden decenas de leones marinos! Llegamos a Kaikoura a la hora de comer. Kaikoura es famosa por su marisco y sobre todo por las langostas. Echemos un vistazo a la guía para encontrar un buen restaurante donde degustar marisco, y por supuesto langosta, a buen precio. Escogemos el Restaurante Craypot (muy recomendable) (www.craypot.co.nz). Elegimos tres entrantes para compartir (dos de ellos a base de mejillones de labios verdes - buenísimos, por cierto) y media langosta de segundo. Todo regado con un Sauvignon blanc neozelandés. Precio por persona 71,5 NZ $. Después de comer, damos una vuelta por el pueblo, compramos algún souvenir, y vamos a la autocaravana a descansar. Hacemos noche en el Kaikoura Top 10 (17,5 NZ $ por persona). 11/8/2009: Kaikoura - Greymouth (400 km) Antes de las 7 de la mañana ya estamos en la caseta de la empresa Whale Watch (140 NZ $ por persona) (www.whalewatch.co.nz) donde nos confirman que el barco saldrá a pesar de que hay un poco de mala mar. La población de Kaikoura está situada en una península muy cercana a una llanura abisal donde la elevada profundidad y las aguas frías hacen que haya mucho alimento cerca de la costa. Es por ello que se pueden observar con facilidad ballenas de diferentes especies y delfines durante todo el año. Emprendemos la aventura en un catamarán modernísimo con alta tecnología incorporada. El barco se mueve bastante, suerte de las pulseras anti-mareo! En el interior, cómodamente sentados, a través de unas pantallas vamos haciendo el seguimiento de la zona que recorremos y la profundidad que hay. Nos hacen explicaciones de las características de la zona y las diferentes especies de animales que podemos encontrar. A través de un sistema de radar podemos saber dónde se encuentran las ballenas y de esta forma localizamos tres ballenas sperm. Desde una distancia prudencial, podemos observar cómo respiran y se hunden de nuevo levantando la cola elegantemente. Todo este espectáculo está acompañado por un trasfondo de montañas nevadas. De regreso, decenas de delfines Dusky nos acompañan prácticamente durante todo el recorrido. Aparte de ballenas y delfines podemos ver algún albatros y algún león marino. Compramos pescado fresco para cenar a muy buen precio (16 NZ $) en una pequeña tienda situada cerca de la compañía de las ballenas, Cods & Crayfish, y emprendemos el camino hacia Greymouth, situado en la costa oeste. Para ello necesitamos cruzar la isla hacia el este y elegimos la opción de cruzarla por el parque nacional Arthur Pass. De Rangiroa hasta Springsfield circulamos por una scenic route donde podemos ver muchas granjas de ovejas, de ciervos ... y algunas llamas! Aprovechamos este paisaje de fondo para comer. Desde Springfield la carretera 73 nos permite cruzar el Arthur Pass. Pensábamos que sería un puerto de montaña ya que es la más alta y espectacular que cruza horizontalmente la isla y nos sorprende una carretera bien asfaltada y con relativas pocas curvas. Se pueden ver fantásticos paisajes y montañas en todo el recorrido. Dormimos en Greymouth Seaside Top 10 (18 NZ $ por persona). 12/8/2009: Greymouth – Franz Joseph - Fox Glacier (257 km) Esta mañana, nuestra primera visita es la zona de las Pancakes. En Punakaiki todo está indicado para poder visitar esas formaciones rocosas tan singulares y espectaculares integradas dentro del Parque Nacional de Paparoa. Las Pancakes rocks están situadas cerca del mar y son unas formaciones rocosas producidas por una sedimentación de material calcáreo y erosionadas por los elementos. El aspecto actual es como de torres de altura considerable con capas muy estrechas y muy bien diferenciadas. La parte de los sopladores se puede observar con la marea alta. La caminata con explicaciones dura aproximadamente 20 minutos. Tras la visita llamamos a una de las muchas compañías que ofrecen vuelos escénicos por los glaciares, pero el tiempo que nos había estado acompañando hasta entonces, hoy, había dejado de hacerlo. La lluvia y la niebla, sobre todo, desaconsejaban totalmente cualquier vuelo. Así es que un poco tristes por este contratiempo, nos dirigimos al Westland National Park, en los Alpes meridionales. Antes, pero reservamos un trekking de ½ día por el Fox Glacier para el día siguiente. Llegamos al pueblo de Franz Josef a mediodía y efectivamente, el tiempo desaconseja totalmente volar. Llueve con bastante intensidad. Vamos al punto de información para informarnos de las actividades que podemos hacer a pesar de la lluvia. Una de las opciones es hacer una caminata que te lleva hasta un mirador que permite contemplar el frontal del glaciar. A pesar de la lluvia nos decantamos por esta opción. No nos podemos acercar demasiado, debido al mal tiempo, pero ha valido la pena mojarse un poco, pues se trata de glaciares únicos ya que se encuentran a tan sólo 300 metros sobre el nivel del mar. Para comer decidimos probar uno de los famosos brunch (16 NZ $ por persona). Pida un solo plato! Nosotros pensábamos que las cantidades serían como las de aquí y elegimos un primer y un segundo y tuvimos que pedir que nos lo envuelvieran para llevar. Con un solo plato, basta! Después de la caminata decidimos ir a unas piscinas termales para relajarnos y entrar un poco en calor. (22,5 NZ $ por persona) (www.glacierhotpools.co.nz). Después de unos días de viaje nos sienta de maravilla. Conducimos hasta el Fox Glacier y hacemos noche en Fox Glacier Lodge (15 NZ $ por persona). 13/8/2009: Fox Glacier - Wanaka (320 km) A las 8:15 ya estamos en la agencia que organiza las excursiones por el glaciar, confirmamos la reserva. Al cabo de un rato nos reúnen a todos y nos dan ropa y botas impermeables. Ataviados debidamente nos hacen ir hacia un autobús donde antes de subir nos dan los crampones. Al acercarnos al glaciar Fox (www.foxguides.co.nz), por la carretera, se ven señales que indican hasta dónde había llegado su frente. Bajamos del autocar y comenzamos a caminar. Hay un buen trecho hasta llegar al hielo. Y qué montón de escaleras! Sí, sí de escaleras! Las paredes son agrestas y la vegetación, por increíble que parezca, es tropical con helechos incluidas. Por fin llegamos al hielo. Nos ponemos los crampones y nos adentramos por el glaciar. Quedamos boquiabiertos con las azules paredes de hielo de esta maravilla natural. Resulta increíble encontrar glaciares a tan poca altura respecto al nivel del mar y rodeadas de esta vegetación tan imponente. Son las únicas en el mundo con estas características. La excursión por el hielo resulta fantástica, la lluvia, pero nos obliga a volvernos antes de lo previsto. Antes de emprender el camino hacia Wanaka, compramos unas hamburguesas completísimas (18,5 NZ $ por persona) y nos vamos del Fox Glacier sin hacer una parada en el lago Matheson. El día está bastante nublado, y probablemente, no se refleje nada, está lloviendo bastante y tenemos una buena tirada de coche hasta Wanaka. Para llegar a Wanaka, decidimos cruzar por Haast Pass. A pesar de ser de noche, hay mucho ambiente por las calles. Los locales nocturnos están llenos de esquiadores y las tiendas presentan las últimas novedades. Hacemos noche en Wanaka Top 10 Holiday Park (18 NZ $ por persona). 14/8/2009: Wanaka - Te Anau (400 km) Hacemos cuatro fotos en el lago Wanaka y emprendemos el camino hacia Queenstown. Decidimos parar en Arrowtown, un pequeño pueblo minero de la época de la fiebre del oro. Lo único que conserva, pero de aquellos tiempos, es alguno de los edificios de la época, hoy reconvertidos en tiendas de souvenirs. Damos una vuelta por la calle principal, compramos algunos regalos y nos acercamos hasta el asentamiento chino. Son cuatro casas mal contadas con paneles explicativos de cómo era la vida de la época en aquel lugar. Prescindible la visita en general. Conforme nos acercamos a Queenstown la cordillera de los Remarkables va presidiendo el camino. Una vez allí nos dirigimos al punto de información donde se ofrecen infinidad de actividades y deportes de aventura. Queenstown es conocida como la capital de la aventura de Nueva Zelanda. Nos decidimos por la compañía Shotover Jet (www.shotoverjet.com) que ofrece bajar por el río Shotover atravesando sus cañones en lancha rápida. Está bastante bien, pero por lo que realmente es, resulta caro. Al atardecer llegamos a Te Anau, pueblo desde el que pensamos visitar la zona del Fiordland National Park. Dormimos en Te Anau Top 10 Holiday Park (40 NZ $ por persona / dos noches). Al día siguiente tenemos previsto ir al Milford Sound, llamamos a la compañía para reservar plaza. 15/8/2009: Te Anau - Milford Sound - Te Anau (235 km) El Fiorldland National Park es el parque nacional más grande del país. Ha sido declarado patrimonio de la humanidad por sus características geológicas. Desde Te Anau se pueden hacer varias excursiones para explorar esta gran zona ya que ofrece todos los servicios necesarios. El Milford Sound es el único fiordo que se puede visitar con el propio vehículo, aunque hay que llevar cadenas por si acaso. Esta excursión la teníamos incluida dentro del precio del viaje, al llamar para confirmar el día optamos por contratar el autocar para llegar. No nos arrepentimos de la decisión, pues el autocar para en todos los lugares de interés y nos sirve para descansar un poco de la autocaravana. Hay saltos de agua por todas partes: todo es un mundo de cascadas y riachuelos entre la densa vegetación. Sólo el propio recorrido por sí solo ya merece la pena, es muy espectacular. La primera parada en el camino es en Mirror Lakes. Quedamos boquiabiertos, el reflejo de las Earl Mountains es perfecto. Llegamos al fiordo y el ferry nos está esperando. Al subir nos damos cuenta que el Mitre Peak se refleja en las cristalinas aguas del fiordo. El recorrido por el fiordo te permite ver las Bowen Falls, de cerca, de muy cerca, y unas simpáticas focas tomando el sol sobre una roca, entre otros atractivos, pero merece más la pena las paradas previas y posteriores del camino que el recorrido en barco por el fiordo en sí. Por el camino de vuelta, hacemos un par o tres paradas más. Una de ellas en una zona donde hay aproximadamente un metro de nieve. Disfrutamos de lo lindo tirándonos bolas de nieve como crios. Durante esta parada, vemos un par de keas que se pasean por la zona. Al llegar de nuevo a Te Anau, desde el centro de información, hacemos una reserva para el día siguiente para ir a la reserva Yellow Eyed Penguin en la Península de Otago. Aprovechamos también para reservar una visita a la Oamaru Blue Penguin Colony para el día 17 de agosto poder ver más pingüinos. A continuación, damos una vuelta por la ciudad y nos recomiendan ir al cine donde proyectan un documental sobre la zona de fiordos (10 NZ $ por persona). No hay demasiado ambiente por las calles, pero aún es demasiado temprano para retirarnos al camping, así que decidimos ir. Estamos prácticamente solos, y el documental resulta estar bastante bien. Algunas de las fotografías son espectaculares. Volvemos a hacer noche en Te Anau Top 10 Holiday Park. 16/8/2009: Te Anau – Dunedin (290 km) Esta mañana, al levantarse emprendemos el camino hacia Dunedin. El centro de la ciudad se estructura en el llamado Octagon y hay relativamente poca distancia entre los edificios a visitar. Nosotros nos centramos en la antigua estación de ferrocarril y los jardines chinos (8,25 NZ $ por persona) (www.dunedinchinesegarden.com). Estos últimos, no vale la pena visitarlos, la entrada resulta cara por lo que ves. Se nos hace la hora de comer y volvemos a optar por el brunch (16,40 NZ $ por persona). Por la tarde nos dirigimos a la Yellow Eyed Penguin (55 NZ $ por persona) (www.penguinpalace.co.nz) en la península de Otago por la Portobello Road, el recorrido es lento y con bastantes curvas pero permite disfrutar de un encantador paisaje costero. En esta reserva se pueden observar los pingüinos de ojos amarillos de muy cerca sin estorbar su ritmo de vida ni estresarlos a través de un sistema de trincheras. Al llegar confirmamos la reserva y hacemos tiempo en la caravana hasta la hora de la visita. Al hacerse la hora de la visita en autocar nos llevan hasta donde están dispuestas las trincheras. Qué emoción! Por el entramado de trincheras, nos dirigimos hasta la playa. Al poco de estar allí, observando por las pequeñas grietas de las casetas de observación, un par de pingüinos salen del agua y se adentran en la reserva. A medida que van subiendo cada vez los ves de más cerca hasta que casi los puedes tocar! Seguimos un rato más allí y al poco dos siluetas más salen del agua. Esta vez, no suben enseguida hacia la reserva. Los dos pingüinos, un poco separados el uno del otro, intercambian sonidos, intentan ir el uno hacia el otro, pero no avanzan, paran, chillan de nuevo, y vuelven a sumergirse bajo el agua, al cabo de pocos segundos, salen los dos juntos fuera del agua y se adentran a la reserva. Estamos en la época de apareamiento y escenas como estas son bastante habituales. También es bastante frecuente oír los chillidos de aquellos que están solos y que buscan pareja. Despliegan sus alas, estiran el cuello tanto como pueden y emiten un ruido bastante estridente para llamar la atención de otros pingüinos, que como ellos estén solos, y los quieran localizar. Todo ello resulta curioso y emocionante. Decidimos quedarnos a dormir en Portobello Village Tourist Park de la cadena Kiwi (15 NZ $ por persona) en la Península de Otago, para ver al día siguiente el único castillo que hay en Nueva Zelanda, el Larnach Castle. 17/8/2009: Dunedin – Oamaru (115 km) Al levantarnos el día está gris y brumoso. Somos los primeros en llegar al Larnach Castle (www.larnachcastle.co.nz). Adquirimos la entrada que permite visitar los jardines y el interior del castillo (25 NZ $ por persona). El castillo situado a 14 km. del centro de Dunedin, es el único castillo del país. Fue construido entre 1871-1885 por el político y financiero William J. M Larnach para su mujer siguiendo la estructura de los castillos de la nobleza escocesa. Desde la torre más alta, si el día es claro, se tienen unas fantásticas vistas de la Península de Otago. Hoy, la niebla nos impide disfrutar de estas vistas. Visitado el castillo, hacemos un té en la cafetería (está incluido en el precio de la entrada) y luego damos un paseo por los jardines. Cabe decir que no vale la pena ir expresamente, pero si os viene de paso, es una atracción más a tener en cuenta y más si el día es claro. Antes de emprender el camino hacia Oamaru nos hace gracia subir por la calle más empinada del mundo según el libro Guiness de los récords, el Baldwin Street. Ya lo creo que es empinado! Hay momentos en que tienes sensación de vértigo y todo! Subimos hasta lo alto de todo, el esfuerzo vale la pena. Para quien lo quiera, se puede obtener un certificado de la hazaña. El oficial, es el que dan por 2 NZ $ en una casa de fotos en la parte baja de la calle. Hay una tienda de recuerdos que por el mismo precio ofrece otro más cutre aún que el de la casa de fotos. De camino hacia Oamaru hacemos una parada en la Moeraki Boulders Scenic Reserve. En esta reserva se visita una playa llena de unas formaciones rocosas generadas en el fondo marino a partir de un núcleo calcáreo. Las rocas, esféricas y finas, son mayores de lo que pensábamos (llegan a los 4 metros de perímetro) Algunas están rotas por la acción del mar y la erosión y se puede ver su interior cristalizado. Parecen puestas estratégicamente y las hay pequeñas e inmensas. Nos encanta la visita! Podemos subir encima de ellas o incluso meternos dentro. Tenemos que jugar con el agua para no mojarnos! Cuidado, no todo son rocas también podeis encontraros con leones marinos! Comemos en el restaurante de la reserva un insuperable plato de pescado y marisco por sólo 24,5 NZ $ por persona. Al llegar a Oamaru (denominada the penguin capital of New Zealand) reducimos su visita a una calle con edificios de estilo colonial inglés y buscamos el centro de información para confirmar la reserva para ver los pingüinos. Nos informan que parte de la Oamaru Blue Penguin Colony (www.penguins.co.nz), a partir de las tres de la tarde en la Bushey Beach, desde un punto de observación, se puede ver pingüinos de ojos amarillos. Como todavía queda tiempo para ir a visitar la especie de pingüinos más pequeña del mundo, los Blue Penguins, decidimos ir al mirador de la Bushey Beach, pues el día anterior, disfrutamos mucho observando estos curiosos animales. El mirador está situado sobre de un acantilado sobre una larga playa de arena anaranjada. Nuevamente, disfrutamos de la experiencia. Si teneis intención de hacer noche en Oamaru, no vale la pena ir a la Yellow Eyed Penguin Reserve, pues en la Bushey Beach pueden verse de tanto o más cerca y de forma gratuita! Por la noche tenemos contratada la visita para ver los pequeños pingüinos azules que llegan a la playa partir de las 6 o 7 de la tarde. La reserva está situada a cinco minutos en coche desde el pueblo y por el camino se pueden ver divertidos carteles advirtiendo del peligro de los pingüinos. Nos sentamos en una grada de madera frente a la costa escarpada. Poco a poco van apareciendo estos pequeños pingüinos, cuesta verlos, son realmente pequeños! No se les puede hacer fotos ni filmar y se esconden en los nidos que tienen que tocar del agua. Son muy curiosos. Es tarde cuando salimos emocionados de la visita y decidimos hacer noche en el Oamaru Top 10 Holiday Park (18 NZ $ por persona). 18/8/2009: Oamaru – Christchurch (247 km) Llegamos a Christchurch a media mañana. Aparcamos la autocaravana no demasiado lejos del centro y vamos a dar una vuelta por la ciudad siguiendo un itinerario que nos propone la Lonely Planet. Paseando, paseando se nos ha hecho la hora de comer, volvemos a la autocaravana para comer y descansar un poco. Por la tarde, llueve y hace mucho frío, pero hemos visto que en la Plaza de la Catedral hay una Kiwi House, y decidimos acercarnos a ella, no podemos marcharnos sin ver estos animalitos! Una vez allí, nos cuesta encontrarla, pues está dentro de una tienda de souvenirs. Nos aconsejan hacer la visita en otro momento, ya que a esa hora los dos kiwis que hay están durmiendo, recuerde que son animales nocturnos y, tenga en cuenta que quizás a las horas en que deben estar más activos, la tienda está cerrada. Para ver kiwis recomendamos la reserva Willowbank. Nos dirigimos al punto de información para ver que se puede hacer en un día lluvioso y para informarnos de algún otro lugar donde se puedan visitar kiwis. En cuanto a las opciones de visita en un día lluvioso nos aconsejan subir a la torre de la catedral o hacer el recorrido turístico con el tranvía (www.tram.co.nz). Para visitar kiwis nos recomiendan ir a la Willowbank Reserve. Comenzamos por la visita y subida a la torre de la catedral (5 NZ $), y a continuación cogemos el tranvía para recorrer la ciudad (20 NZ $). Las dos visitas, nos ocupan menos tiempo del previsto y decidimos ir a ver los kiwis hoy en lugar de mañana, no podemos marcharnos de Nueva Zelanda sin ver el símbolo del país! Willowbank (www.willowbank.co.nz) es una reserva donde aparte de kiwis se puede ver gran diversidad de fauna autóctona. Cuando llegamos acaba de salir el último tour (17.30 horas), pero nos permiten adherirse a el mismo (25 NZ $). La reserva está muy bien organizada, es una especie de zoo donde los animales tienen mucho espacio y corren libres. Vemos cerdos, patos, diferentes tipos de aves, Wallabies, keas, tuatores ... y kiwis! Para ver los kiwis, se entra en un recinto a oscuras donde después de habituar la vista pueden verse estos animales. Nos los imaginábamos más pequeños, pero son de dimensiones considerables. El tamaño de esta especie es comparable a la de una gallina. No tienen cola ni alas y el pico y las patas son muy largos. Tienen plumas de emú y unos ojitos pequeños. Es muy emocionante porque los tenemos muy cerca y sin apenas barrera. Nos los miramos en silencio durante mucho rato. Cada vez vemos más. Los tenemos a menos de medio metro y nos emociona estar al lado de este animal prehistórico. Saliendo de la visita buscamos un camping para pasar la última noche en Nueva Zelanda. El elegido es el Christchurch Top 10 Holiday Park (20 NZ $). 19 / 8 / 2009: Christchurch - Auckland - Hong Kong Al día siguiente nos levantamos sin prisa, desayunamos, hacemos las maletas y limpiamos un poco la autocaravana. No tenemos que volver la autocaravana hasta las 4.30 pm y como hoy hace un día espléndido, decidimos subir a la Christchurch Gondola (22 NZ $) (www.gondola.co.nz). Es un teleférico de 945 m. que ofrece unas fantásticas vistas de la ciudad, de Banks Península, de la región de Canterbury y de los Alpes Meridionales. Existen billetes combinados para las diferentes atracciones de Christchurch (Tram, Góndola y Punting the Avon - Paseo en barca). Puedes comprar tickets individuales para cada atracción, para sólo dos o para las tres. Nosotros no cogimos el combinado porque el día no hacía pensar que al día siguiente haría un día radiante como fue. El tiempo en Nueva Zelanda es muy cambiante, arriesgarse con el ticket combinado ya es opción de cada uno. Si el día es claro, no dude en subir a la Góndola, el resto de actividades se pueden hacer incluso lloviendo, especialmente el recorrido en tranvía. Sobre el paseo en barca no puedo opinar, porque no lo hicimos. Nuevamente en Christchurch, buscamos un lugar para comer, en la zona de Oxford Terrace, el elegido fue el restaurante Liquidity una recomendación de la LP y nuestra (27 NZ $ por persona). Como hace un día espléndido decidimos comer en la terraza. Se estaba de primera yaciendo en aquellos sofás sin hacer nada. Qué lástima que nos quedaban pocas horas para irse, esto hace que el momento tenga un regusto amargo. A las 7 de la tarde tomamos un vuelo interno de la compañía Air New Zealand que nos lleva de nuevo en Auckland, donde tenemos que enlazar con el vuelo internacional que nos tiene que llevar a casa. Después de 12h 50 'horas de vuelo, de las que nos pasamos durmiendo casi once, llegamos a Hong Kong. Aquí nuestros compañeros de viaje continúan hasta Barcelona, nosotros hacemos una breve parada de dos días en Hong Kong. Etapas 1 a 3, total 4
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