New York en 2 semanas ✏️ Blogs de USA

Hoy es mi cumpleaños, cumplo 30 y se ha cumplido mi deseo: celebrarlo con Dani en Nueva York. Nos despertamos temprano. Dani me dice: "es tu día, hoy decides que quieres hacer". Sugiero que ya que estamos despiertos tan pronto, son las 6 de la mañana, podemos ir a buscar los stand-by tickets para ir al Show de Conan O'Brian. Los stand-by tickets son entradas gratuitas que reparten el mismo día de grabación del show a primera hora de la mañana en la marquesina de entrada de la NBC, en el Rockefeller Center.

Llegamos allí a las 08.30. Empiezan a repartir entradas a las 09:00 por orden de llegada. No te aseguran que después tengas entrada para el show, es en función de si les quedan asientos libres de gente que no se ha presentado con sus entradas resevadas meses antes por teléfono. Las recogemos y nos vamos a iniciar nuestro día de visitas, no tenemos que volver allí hasta las 4 de la tarde.

Nos acercamos al NYC visit a buscar mapas y algún ticket de descuento (creo que al final sólo utilizaríamos los de subir al Top of the Rock y al Empire State). Caminando por la sexta avenida vemos muchísimas cámaras y reporteros. Dani pregunta y le explican estan quebrando los Leman Brothers y en ese momento lo estan anunciando. De allí nos vamos a un sitio mucho más dulce, la tienda M&M's de Times Square. Pasamos por delante del Bryant Park, mi parque favorito de la ciudad, para dirigirnos a la New York Public Library pero esta cerrada. Continuamos hacia adelante y pasamos por el Chrysler Building (me decepciona bastante el interior, me encanta el exterior), el Daily News (y en su hall nos encontramos la bola del mundo que aparece en Superman). De allí bajamos paseando hasta los alrededores del Empire State. Y nos vamos el que nos pareció el mejor buffet asiático de Nueva York: el Todai (ahora se llama IchiUmi). Variedad interminable de sushi y de otros platos asiáticos. Salimos de allí que casi no podemos ni caminar pero hacemos un esfuerzo y nos acercamos hasta el Madison Square y el Post Office donde nos sentamos en sus escaleras un rato a ver pasar a la gente, los taxis, la policía con sus sirenas a todo volumen. Parece que la policía está de persecución por la ciudad constantemente.

Nos presentamos de nuevo a las 16:00 en el Rockefeller Center, ya ha llegado la hora de la grabación. Esperamos un poco y nos hacen entrar a las oficinas. Nos explican tienen 23 asientos libres para los stand-by tickets. Dani y yo nos miramos alucinando, tenemos los números 23 y 24. Le digo entre él ya que es mucho mas fan que yo del show de Conan O’Brian. Nos despedimos y le digo le espero mirando tiendas. Cuando ya casi me iba a mirar tiendas me dicen hay 3 asientos mas disponibles. Tambien puedo entrar yo a ver la grabación del show. Tengo unos chicos americanos sentados a mi lado que flipan que una chica de Barcelona conozca a Conan O'Brian y decida ir a la grabación de un programa durantes sus vacaciones. Y la grabación fue genial, con mucho ritmo, risas sin parar. En 2 horas ya ha terminado. Salimos extasiados, estos americanos si que saben darle ritmo a la grabación de un programa.

Cogemos el bus y nos vamos hasta Chinatown y Little Italy. Las tiendas de comida en Chinatown están cerrando pero hay mucho ambiente por las calles para ser un lunes. Me apetece cenar en Lombardi's, la pizzería más antigua de Manhattan, que esta en Spring Street. El local está bastante lleno pero no tenemos que esperar apenas para que nos den mesa. La pizza esta buena pero no espectacular, me pareció un sitio un poco sobrevalorado. Además, tenemos la mala suerte de tener una camarera muy poco amable.

Salimos del restaurante y nos vamos paseando por Mulberry's street, son las fiestas de Little Italy y está muy animado, toda la gente por la calle. Como sorpresa nos encontramos con la atracción de tirar al payaso al agua. Hay un payaso que se dedica a ir provocando a los transeúntes para que le tiren bolas y consigan tirarlo a la balsa de agua. Me sorprendió ver esta atracción que tantas veces había visto por las pelis de instituto americanas. Y allí estaba, en vivo y en directo.

Continuamos paseando por el barrio y disfrutando de la agradable noche y en nada nos damos cuenta que hemos llegado al Katz’s Deli en Houston Street (famoso por sus sándwiches de pastrami y la escena del orgasmo de la película Cuando Harry encontró a Sally). Desde el Katz’s hasta nuestro alojamiento hay unos 15 minutos paseando así que continuamos el paseo hasta llegar al hostal. Y ahora si, ya toca descansar, tenemos los pies destrozados.

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Hoy se ha levantado un día soleado. Hemos hecho el desayuno en el hostal y el plan para el día es hacer una de las rutas que teníamos impresas del foro Los Viajeros: la ruta por el Village iniciándola en Union Square. Cogemos el bus y en nada ya estamos en Union Square, la plaza del cubo.

A dos pasos ya estamos parados en una tienda tras otra, comics en Forbidden Planet, libros en Strand y chocolate en Max Brenner. Nos cuesta avanzar porque vamos entrando en todas partes pero hacemos un esfuerzo por salir de las tiendas y continuamos caminando hacia Washington Square y la New York University pasando bajo el Washington Arch. Esta es una zona muy tranquila y una mezcla entre familiar y estudiantil, me gusta.

Cruzamos hacia la calle Bleecker Street, preciosa calle para dar un paseo donde hacemos un millón de fotos como a la pizzería favorita de Woody Allen (John’s pizzeria). De allí llegamos a la casa de la serie Friends, está en Bedfort & Grove. Y poco más adelante el Village Cigars, también muy conocido para los fans de Friends (entre las que me encuentro). Es una mañana tranquila y el paseo está siendo muy entretenido. Como parece esta siendo una mañana de localizaciones de series continuamos hasta Magnolia Bakery[email]www.magnoliabakery.com/[/email] (famosa por sus tartas, cupcakes y por salir en Sexo en Nueva York) donde por suerte no hay nada de gente y me compro tranquilamente un cupcake de color verde.

Miramos en nuestra guía donde podemos ir a comer por el barrio y yo sugiero ir a comer una de las famosas hamburguesas de New York, las del restaurante Corner Bistro. Nos cuesta un poco encontrarlo ya que teníamos la dirección equivocada y cuando estamos a punto de darnos por vencidos, allí aparece. El Corner Bistro es un pub/restaurante dónde se juntan los clientes habituales tomando una cerveza y comida en la barra y turistas, sentados cómodamente en las mesas, que venimos atraídos por sus famosas hamburguesas. La hamburguesa de queso está muy buena y enorme, no la podía empezar a comer. Fue la única hamburguesa que comí en todo el viaje a New York. Y tengo un grandioso recuerdo de ella.

De allí nos dirigimos al Meatpacking, que no sabemos si fue por la hora en que lo visitamos o el día pero estaba un poco muerto. Tanta gente que habla maravillas del ambiente del Meatpacking y nosotros no encontramos nada. No llegamos a ir por la noche a cenar o tomar algo, supongo mucho más animado.

Continuamos con nuestra ruta saltando de barrio en barrio y ya estamos en Chelsea donde nos metimos de cabeza al mercado. Cupcakes de personajes infantiles, mini-brownies preciosos, comida para llevar en preciosos paquetes Era el mercado de las delicatessen. Y además por dentro es precioso, ¡quiero que el mercado de mi barrio en Barcelona sea así!

Saliendo del mercado de Chelsea nos dirigimos hacia el puerto para ir a ver el Chelsea Pier. No és muy turístico ni bonito, es más, me pareció un poco abandonado pero tiene unas buenas vistas a New Jersey y es ideal para desconectar del ruido de la ciudad.

En este punto nuestros pies ya están un poco destrozados y decidimos coger un bus que nos deja en Flatiron Building. Y todo lo que pueda decir sobre este edificio me quedo corta. Sin ser el más alto para mi es de los más espectaculares de la ciudad, su fachada es sencillamente impresionante.

Y de aquí volvemos al bus y nos vamos al hostal a descansar. Directamente no sentimos los pies. Y aunque queríamos hacer un pequeño descanso caemos rendidos en la cama y hacemos una siesta de 3 horas. Nos despertamos que tenemos hambre así que buscamos algún sitio por el barrio donde la oferta gastronómica es interminable. Elegimos algo ligero, una cena en Minca Ramen Factory, un pequeño y tranquilo restaurante de noodles. Además de noodles tambien probamos las gyozas de gambas.

Y para terminar la noche, nos vamos a la lavandería. La dueña del hostal nos recomienda el mejor sitio para ir a lavar la ropa de los varios que tenemos cerca. Y como no, la experiencia hacer la colada en lavandería pública es como habíamos visto siempre en las pelis: las amigas hablando de chicos mientras hacen la colada, la madre agarrando a los niños que no paran de correr, el hombre que se duerme esperando la secadora, las teles con la telenovela… Es impresionante como algo tan aburrido como hacer la colada nos hace gracia si lo hacemos en New York. Cuando salimos de allí con toda nuestra ropa limpia y seca ya son más de la 12 y nos vamos al hostal a dormir.

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Ayer acabamos muy cansados y se nota en nuestros horarios ya que hoy nos hemos despertado algo más tarde, a las 7:30 hrs. Hace un día soleado, estamos teniendo mucha suerte con el clima, no hace ni frío ni calor, está siendo perfecto. Mientras desayunamos en el hostal miro el correo y veo nos han cancelado el tour que teníamos reservado para hoy en la Federal Reserve. No pasa nada ya que era algo que nos hacía gracia (era una visita guiada gratuita) pero no es grave como no poder subir al Empire State Building en tu primer viaje a New York.

Decidimos por la mañana bajar hasta el Downtowm, cogemos el bus número 15 desde donde nos alojamos hasta la Ferry Terminal y a las 10.30 nos estamos subiendo en los ferrys de color naranja (que son gratuitos) y que nos llevan hasta Staten Island. Durante el viaje desde la cubierta tenemos unas vistas impresionantes tanto del distrito financiero como de la Estatua de la Libertad, el barrio de Brooklyn y incluso New Jersey. Al llegar a Staten Island damos la vuelta y nos subimos al siguiente ferry dirección Manhattan. Es un viaje por 0 € que merece mucho la pena. Cada trayecto son unos 30 minutos.

Una vez estamos de nuevo en suelo firme de Manhattan nos vamos a ver Battery Park donde hay un monumento que antes estaba en el World Trade Center, The Bull (el símbolo del toro del distrito financiero), la New York Stock Exchange (NYSE), paseo por Wall Street y la Zona 0.

Se está acercando la hora de ir a comer. Nos habían recomendado un restaurante de comida malasia en Chinatown y hacia allí vamos en metro. Es complicado de encontrar ya que está dentro de una arcada pero como ya nos habían avisado lo encontramos relativamente rápido. Se llama New Malaysian Restaurant y es muy abundante, muy bueno, muy barato. Lo tiene todo.

Ya que estamos por Chinatown decidimos hacer una visita un poco mas extensa por el barrio, el otro día solo vimos una calle y poco más. Entramos en un templo budista y después vamos hasta la zona del mercado. Es una zona con un olor muy intenso y poco agradable. Continuamos hasta la casa de los protagonistas de Flight of the Conchords (ha vuelto a salir nuestro yo cinéfilo). Y de allí nos vamos a comer un helado en Ice Cream Factory, sitio muy conocido de la zona. Nos lo pedimos de Mango y Pecan. Llegamos hasta Mulberry’s donde ya habíamos estado dos días antes y volvemos a pasear por Little Italy, las fiestas de San Genaro están en su máximo apogeo y todos los restaurantes están en la calle y hay muchos puestos de comida para comprar. Lástima que estemos llenos y no podamos con nada, ni con una de esas galletas Oreo fritas que anuncian por todas partes.

Cogemos un bus que nos lleva hasta la calle 42 con la 3ra avenida. Nos bajamos y vamos a ver Tudor City, una tranquila zona residencial de principios del siglo XX que contrasta con el resto de arquitectura de la zona. Está justo delante de la sede de las Naciones Unidas, a donde nos dirigimos justo después. Ya están cerrando y no podemos entrar a la zona de los jardines pero vemos desde fuera la escultura del revólver con el caño hecho un nudo. Es un recinto enorme y con bastante movimiento de gente.

Como hace un día despejado nos vamos desde la ONU al Top of the Rock para subir por la tarde y ver anochecer desde las alturas. Compramos las entradas en las marquesinas que hay en la entrada (presentando el descuento de 2 $ que teníamos) y entramos al edificio. Va todo muy rápido, pensábamos que tendríamos que hacer cola pero en menos de 30 minutos ya estamos arriba del todo, flipando con las vistas por todos los lados donde lo que mas nos impresionan son las de Central Park por un lado y el Empire State Building por el otro. El Top of the Rock está genial porque no está muy saturado de turistas y además tienes bancos para sentarte tranquilamente. Y allí nos quedamos, Dani haciendo mil fotos y yo sentada viendo el atardecer con vistas a Central Park. Para mi fue un rato muy especial estar allí.

Por la zona está el Ellen Stardust Diner, donde decidimos ir a cenar. Es la reproducción de un restaurante típico americano de los años 50 con el aliciente que los camareros van cantando. Es un local muy turístico dónde nos lo pasamos bien y la comida es aceptable (hamburguesas, wraps, fritos, etc) y los platos son enormes. Desde el restaurante bajamos paseando hasta Times Square para verlo todo iluminado por la noche, y está genial con todos los neones publicitarios iluminados. Después ya cogemos el metro y nos vamos a dormir. Otro día intenso que llega a su fin.

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