![]() ![]() Un viaje atípico por la costa este de USA ✏️ Blogs de USA
Un relato de 15 días visitando Philadelphia, Washington, Lancaster, Nueva Orleans, Disneyworld, Miami y los cayos de FloridaAutor: Macg Fecha creación: ⭐ Puntos: 4.9 (16 Votos) Índice del Diario: Un viaje atípico por la costa este de USA
Total comentarios: 21 Visualizar todos los comentarios
Etapas 4 a 6, total 14
Lunes 18 de Junio:
De nuevo, hoy tocaba levantarnos pronto porque teníamos que devolver el coche antes de las 10 de la mañana. Y ¡sorpresa! Estaba lloviendo… bueno, en nuestras previsiones teníamos previstos días de lluvia así que tras el desayuno y debidamente equipadas, cogimos el coche dirección Union Station, la estación de tren de Washington que se encontraba a la otra punta de donde estábamos alojadas. Nunca daré las gracias suficientemente al inventor del GPS, en nuestro caso al señor TomTom, porque conducir por una ciudad que desconoces totalmente, con sus sentidos obligatorios, sus algunas que otras obras y el trafico de un lunes a primera hora si no tienes ese ángel guardián, puedes perecer en el intento….. No tuvimos ningún problema para devolver nuestro Dodge y quince minutos mas tarde de las diez, ya estamos curioseando la estación de tren. Es muy grande, como se merece la capital, dividida en dos plantas, con sus tiendas, restaurantes y numerosas taquillas. Todavía seguía lloviznando cuando salimos al exterior. A pesar de ello, decidimos ir andando hasta el Capitolio, ya que teníamos la visita programada para las 12. Y al salir de la estación, otra campana, simbolizando la independencia de EEUU nos estaba esperando, esta vez sin colas, ni cristales… *** Imagen borrada de Tinypic *** El paseo hasta el capitolio fue muy agradable, ya que se hizo por la avenida Delaware, bordeando el lower Senate Park que olía a hierba mojada. Además, dejo de llover. Al llegar al Capitolio, la presencia de ese imponente edificio nos hizo darnos cuenta que estábamos en presencia de unos de los sitios mas importantes de este mundo. *** Imagen borrada de Tinypic *** La cúpula por fuera era impresionante, sin saber que por dentro todavía lo era más. *** Imagen borrada de Tinypic *** Nos fuimos directamente al centro de visitantes ya que sabíamos que había controles de seguridad antes de entrar. Tras el consabido chequeo de bolsos y arcos detectores, entramos en el gran hall de entrada bastante concurrido ya a esas horas. A cada extremo del hall, había dos mostradores enormes con gente que atendía los visitantes para dar hora o para dar los pases a las citas concertadas. Hicimos fila y muy amablemente la persona que nos atendió, nos ofreció adelantar nuestra cita de las 12 al grupo que salía en esos momentos. No dudamos un instante ya que así podíamos liberar tiempo de la visita para dedicarlo al resto del día. *** Imagen borrada de Tinypic *** Nos formaron en un grupo de unas veinte personas por guía y nos dieron auriculares, no porque había traducción simultanea (que no la hay) si no para oír mejor al guía que tocaba, entre tantos grupos. De allí, nos fueron pasando por salas, escaleras y llegamos al rotonda, donde esta la famosa cúpula, para mi lo mejor de la visita. Como dije anteriormente, es preciosa, con el fresco de Brumidi que pinta a George Washington como héroe de la Independencia, subiendo al cielo con las diosas Libertad y Victoria. *** Imagen borrada de Tinypic *** La sala en sí también es digna de ver al detalle. Numerosos cuadros cuelgan de las paredes representando los episodios mas notables de la historia americana así como numerosas estatuas de gente importante ( Lincoln, Martín Luther King, el general Eisenhower, Reagan y un grupo de mujeres sufragistas que nos gustaron mucho). *** Imagen borrada de Tinypic *** Abraham Lincoln *** Imagen borrada de Tinypic *** general Eisenhower *** Imagen borrada de Tinypic *** Del resto de la vista, pues la verdad ya no prestamos mucho atención porque nuestro guía pasaba bastante de la gente y nosotras decidimos pasar de él también y acabar a nuestro aire. Cuando volvimos al hall de entrada, nos fuimos a visitar la biblioteca Jefferson que esta en otro edificio enfrente del capitolio, pero al que puedes acceder por enormes pasillos sin salir al exterior. Y nos sorprendió gratamente la visita. *** Imagen borrada de Tinypic *** El interior es grandioso, dividido en dos plantas, con unas escaleras impresionantes y una decoración digna de un palacio griego. *** Imagen borrada de Tinypic *** La pena era que la sala de lectura y donde estaban los libros almacenados, solamente se podía ver desde la segunda planta y detrás de un cristal. Una vez las visitas acabadas, nos fuimos a recorrer el famoso mall. ¡Que desilusión! Desde la parte posterior del Capitolio lo que debía ser la vista mas bonita hasta el monumento a Lincoln, en el otro extremo, estaba parcialmente obstruida por maquinas excavadoras, montones de tierra removida, obras para recomponer primero el monumento a Washington, el famoso obelisco que se erige en el centro del mall, que al parecer sufrió algún deterioro en el terremoto del año pasado y mas adelante, las obras inacabadas de la piscina reflectante frente al monumento de Lincoln. Vamos, un desastre para las fotografías. *** Imagen borrada de Tinypic *** Como ya se acercaba la hora de comer, y como muy bien señalaban algunos foreros, encontrar algún sitio para comer se antojaba muy difícil en la zona. Así que haciendo caso a los expertos, nos fuimos directamente al museo del aire y del espacio para comer en el McDonalds que tienen dentro. No es que fuera nuestro sitio favorito, pero donde mandaran las circunstancias, no podíamos discutir. Tras la comida, nos dedicamos a recorrer el museo con la idea primera, de que iba ser muy breve. Pero no…. Nos gusto mucho todo lo que había y disfrutamos entrando en todos los sitios que permitían visitar, viendo películas en 3D, mirar de cerca el modulo lunar del Apolo XI, grandes misiles o el famoso Spirit de Saint Louis con el que cruzo por primera vez el Atlántico Lindberg. *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** Después, nos fuimos hasta el museo de artes africanas pero estaba cerrado también por obras… Así que nos cruzamos al otro lado del mall para entrar en el museo de ciencias naturales; primeros dimos una rápida vuelta por la planta calle donde estaba una sala dedicada a los dinosaurios (algo pobre comparado con nuestro querido Dinópolis de Teruel, haciendo patria como debe ser) y otra con unos cuantos mamíferos disecados, pero nuestro objetivo era subir al segundo piso para ver diamante Hope, el diamante azul mas grande del mundo. Esta gema esta rodeada de mucho misterio y se la tiene como de “maldita” porque se le culpa de las desgracias de sus numerosos propietarios. *** Imagen borrada de Tinypic *** Diamante + maldición = mucho interés por nuestra parte para admirar la joya. Pero allí no solamente se encontraba el diamante sino que al ser exposición de minerales, también había otras joyas como una corona de turquesas preciosas, collares de esmeraldas, de rubíes… en fin para volvernos locas babeando delante de las vitrinas. *** Imagen borrada de Tinypic *** Tras ese momento “Desayuno con brillantes”, seguimos con nuestro afán de ilustrarnos y entramos en el museo de la historia americana para echar un vistazo (eso que todos los museos tenían entrada gratis, nos estimulaba a entrar aunque solamente fuese para ver la planta calle). Y otra vez, nos sorprendimos con una sala donde tenían expuestos varios vestidos de las primeras damas de la historia americana que ocuparon la casa blanca: desde un vestido de la esposa de Washington, otro de la mujer de Lincoln, de Rooselvet hasta un vestido de noche de Jacqueline Kennedy sin olvidar un vestido blanco, algo amarillento, de la última inquilina, Michelle Obama. También había objetos personales de estas damas así como vajilla empleada en la casa blanca a lo largo de los años. Todo muy curioso. *** Imagen borrada de Tinypic *** Nuestro lado mas cotilla y femenino estaba a estas alturas de la tarde ya muy satisfecho así que decidimos dar un merecido descanso a nuestros pies (¡lo que cansa la cultura!) y nos sentamos en la terraza de un quiosco cercano para reponer fuerzas. El día había mejorado mucho y aunque el sol volvía a aparecer tímidamente, la temperatura había subido considerablemente. Una vez reposadas, volvimos a emprender camino, esta vez dirección a la casa blanca. Todo parecía cercano en un mapa, pero la realidad nunca se ajustaba a las distancias. Tras caminar un buen rato, llegamos a la parte posterior de la casa blanca. Tuvimos suerte porque no había mucho personal y pudimos fotografiar a gusto, las rejas, los jardines, el huerto y el edifico principal por su parte trasera. *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** Como dato curioso, descubrí en un lateral de la verja, un botón que ponía “Welcome to the White House. Push on” y decidí averiguar que pasaría si lo pulsaba…. No pasó nada. O bien no funcionaba, o bien los tres o cuatros individuos armados que se adivinaban en el tejado de la casa ya me tenían muy controlada y decidieron no hacerme caso…. en fin, otra vez será. *** Imagen borrada de Tinypic *** Tengo que señalar que antes de nuestra salida, como unos dos meses antes, había estado escribiendo a nuestra embajada española de Washington para solicitar permiso de visita a la casa blanca, también a varios senadores, congresistas de allí, a la embajada americana de Madrid y todos me negaron el permiso, unos porque no gestionaban ese asunto (las dos embajadas) y otros porque era muy tarde para solicitarlo (los senadores y congresistas). Para futuros visitantes, hay que hacerlo con unos cinco o seis meses de adelanto. Como no solo queríamos ver el trasero a la casa, fuimos contorneando los jardines para llegar al parque Lafayette, parque que se encuentra delante la famosa casa, en el número 1000 de la avenida Pennsylvania. *** Imagen borrada de Tinypic *** Se ve una casita muy agradable pero francamente, tener todos los días un centenar de guiris haciéndose fotos delante de las verjas, quita mucho las ganas de vivir allí…. (jejeje). También vimos a la famosa Conchita, española de nacimiento que lleva años de acampada frente la verja, en constante protesta contra el gobierno americano. Estuvimos un rato charlando con ella y nos dio unas cuantas fotocopias de artículos sobre su vida y su lucha. Daba algo de pena verla en las circunstancias en las que vivía pero era su decisión y su lucha. Como la tarde avanzaba, nuevamente nos planteamos donde íbamos a repostar y en este caso era cenar. La decisión fue acercarnos a la zona de Georgetown, según los expertos del foro, zona mas animada que el centro de la capital que se quedaba mas desierta a partir de las seis de la tarde. Además, Georgetown quedaba más cerca de nuestro hotel. Con más cansancio acumulado, emprendimos el camino andando por toda la avenida Pennsylvania que era larguísima, y por fin llegamos a la famosa calle M, calle emblemática de la zona de Georgetown por sus tiendas y sus restaurantes. Si no os habéis percatado al leer, llevábamos todo el día desde que dejáramos el coche a las diez de la mañana, andando a todos los sitios, con visitas incluidas, y ya nuestros cuerpos no estaban para muchos trotes. Así que a los pocos metros de empezar la calle, vimos un restaurante italiano bastante simpático y nos metimos dentro. No recuerdo el nombre del restaurante pero cenamos muy bien y hasta nos atrevimos con un trozo de tiramisú casero para compartir que estaba ¡¡¡delicioso…!!! A esas alturas del día, ya empezada la noche, ya no nos quedaban mas ganas ni de pasear, ni de hacer fotos ni casi de hablar así que poquito a poquito, volvimos sobre nuestros pasos para llegar a nuestro hotel y dar por concluido nuestro primer día en Washington. Etapas 4 a 6, total 14
Martes 19 de Junio:
Por primera vez desde que llegáramos, pudimos levantarnos algo mas tarde. El día no contenía ninguna visita programada, ni teníamos límites de horario. Nos faltaba ver el resto de la visita del Mall además del cementerio de Arlington. El día estaba radiante, se preveía nuevamente calor y dimos buena cuenta del desayuno (incluido en el precio de la habitación y bastante surtido) para salir con las pilas cargadas. Nos fuimos andando desde el hotel hasta la estación de metro de Foggy Botom, que teníamos a unos diez minutos, por unas calles muy tranquilas con casitas con jardines, cosa que nos sorprendió estando como estaban dentro de la ciudad. Cogimos la línea azul y en dos paradas ya estábamos a las puertas del famoso cementerio de Arlington. *** Imagen borrada de Tinypic *** El calor ya empezaba a notarse mucho y provistas de nuestras botellitas de agua iniciamos el recorrido por el cementerio. Impresionaba ver todas esas hileras de cruces blancas, lo cuidado y limpio que lo tenían todo y sobretodo, a pesar de los innumerables visitantes que allí estábamos (seguíamos encontrándonos con colegios enteros que visitaban los mismos sitios que nosotras…) el silencio que reinaba (silencio que fue interrumpido por nuestros comentarios en voz algo mas alta que los demás y que nos valió una reprimenda por parte de un vigilante). *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** No nos dedicamos a recorrerlo enteramente sino que fuimos paseando hasta llegar al lugar de sepelio del presidente John Kennedy y de su esposa Jackie y luego subimos hasta llegar a la casa monumento Cutis Lee que se situaba a lo alto de la colina. Que decir sobre las tumbas de JFK y Jackie; sobrecoge ver la sencillez de sus lápidas cuando se recuerda la importancia que tuvieron en su día. También están dos de sus hijos no conocidos por el público, a ambos lados de sus padres. *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** Tras un buen paseo a pleno sol por el cementerio, dimos por concluida la visita y nos encaminamos hacia el otro lado del rio Potomac por el puente Arlington memorial para llegar directamente al monumento Lincoln. Justo a la derecha, había un quiosco de bebidas y comidas rápidas con mesas y sombrillas que nos vino de perlas para tomar algo fresco porque a esa hora del la mañana, ya calentaba el sol de lo lindo. A continuación, emprendimos el camino de “los memoriales” o monumentos: el primero, el que más cerca quedaba de nosotras era • el de los veteranos de la guerra de Corea. Impresionantes las figuras representando a los soldados americanos vestidos con uniforme de combate. Algunas tenían una mirada tan directa que parecían que iban a hablar de verdad. También impresionante la lista de fallecidos, capturados o desaparecidos que sobre un muro de granito negro estaba a un lado. *** Imagen borrada de Tinypic *** • Después nos pasamos a ver el grandioso monumento a Abraham Lincoln. Era el que tenía forma de templo con columnas y dentro se encontraba la estatua de Lincoln sentado, muy serio, enorme en proporciones y mirando al frente. *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** Me gusto mucho estar allí: estaba en el centro de la historia de este país tan fascinante y lleno de contrastes, con un hombre que lo había dado todo por crear un nuevo país, por abolir la esclavitud. También recordé la famosa frase del discurso de Martín Luther King , a favor de los derechos civiles “ I have a Dream” que tanto supuso para los afroamericanos del país y finalmente tambien recordé legendaria carrera de Tom Hanks a un lado de la piscina tras la famosa Jenny en “Forrest Gump”… ya veis, el cine presente en todos los escenarios. • El tercer memorial fue el de los veteranos de la guerra de Vietnam; en realidad, estaba compuesto por tres partes: primero vimos una escultura que representaba a tres soldados, de tres razas distintas, *** Imagen borrada de Tinypic *** luego fuimos hasta otra escultura que representaba a las mujeres que sirvieron durante la guerra tanto como soldados como enfermeras *** Imagen borrada de Tinypic *** y por último, una pared inmensa con los nombres grabados, algo mas de 58.000, que habían muerto o habían desaparecido. En ese lugar, no me acordé de ninguna película porque el sentimiento de tristeza o de congoja me bloqueó. *** Imagen borrada de Tinypic *** • Y por último, dejamos el memorial a los soldados americanos que sirvieron y murieron en la segunda guerra memorial para terminar esa mañana tan estremecedora, recordando los desastres de cualquier guerra que sea. El memorial terminaba en zona de la reflected pool, o piscina, a los pies casi del obelisco del monumento a Washington. Coincidimos allí con varios veteranos, la mayoría en silla de ruedas llevados por otros militares u oficiales, con su gorrita donde se podía leer “veteran” y familiares. *** Imagen borrada de Tinypic *** No sé si se celebraba algo especial pero llegamos justo a tiempo para ver una banda de música que se retiraba pero tuvimos suerte de hacernos una foto con dos de ellos. *** Imagen borrada de Tinypic *** Se trata de una fuente enorme rodeada de columnas con el nombre de cada uno de los estados americanos. Aprovechamos e hicimos fotos a los estados que íbamos a visitar en este viaje: Pensilvania, distrito de Columbia, Louisiana y Florida. *** Imagen borrada de Tinypic *** Con estas visitas, ya dábamos por concluida la visita del Mall. Otra vez, estábamos en hora de buscar algún sitio para comer y el sitio no era el adecuado. Así que emprendimos camino para ir hacia la avenida Pensilvania, pero en el sentido contrario de la tarde anterior. Y otra vez, el destino nos llevó a pasar nuevamente delante de la Casa Blanca; pero esta vez nos topamos con un cordón policial que bloqueaba la entrada de la residencia y toda la zona de la calle. Con esperanzas crecientes, preguntamos a unos periodistas (digo periodistas porque llevaban cámaras de TV, cámaras fotográficas con teleobjetivos imposibles de sostener, etc.) si tenia este corte de seguridad algo que ver con el presidente. Nos contestaron que se esperaba la salida de alguien de la casa, pero no sabían si era el presidente o la primera dama. Entusiasmadas, intentamos ponernos en primera fila, a la sombra del parque Lafayette para ver si teníamos la suerte de ver alguno de ellos aunque fuera a través del cristal tintado y blindado de su coche. Pero, después de quince minutos de espera, en un abrir y cerrar de ojos, todos los policías se montaron en su coche y los que estaban a pie, retiraron los cordones de seguridad para dejar a la gente que se acercara a las verjas o pasear por las aceras. ¡Nuevo intento fallido de ver a los Obama! Pues ya vendrán a España a vernos ellos…. Reanudamos nuestro camino y entramos en la tienda del White House visitors center en el 1450 Pennsylvania Avenue; nos habían dado en el hotel unos mapas de la ciudad a cada una de nosotras y en la contraportada del folleto había un anuncio que decía que te regalaban una fotografía realizada en un decorado del despacho oval si se visitaba la tienda. Y claro, como no habíamos podido entrar en el de verdad pues tendríamos por lo menos el de mentira… no había mucha gente a esa hora, casi las dos de la tarde, y aprovechamos para hacernos las fotografías. *** Imagen borrada de Tinypic *** No solamente con el decorado del despacho oval sino también con el púlpito de presidencia donde hacen sus comparecencias a la prensa. Una chica muy amable tomaba las fotografías y nos pasamos un rato muy divertido con ella. *** Imagen borrada de Tinypic *** Al salir, fuimos a comer al New York café, un restaurante dirigidos por personal asiático pero que tenía un buffet libre donde podías comer lo que eligieses por 7 $ 95 el peso de comida. Había un poco de todo: ingredientes varios para hacer un buena ensalada, pescados, carne, arroces, rollitos, gambas rebozadas, y una buena selección de fruta fresca partida a trocitos (¡ que bueno el melón, la piña y el mango!). Era una buena opción para una comida algo más mediterránea. Cuando salimos, el sol todavía era implacable y el calor sofocante. Decidimos nuevamente darnos un respiro y nos fuimos hasta la estación de metro más cercana, McPherson, hasta el hotel. *** Imagen borrada de Tinypic *** Tras un par de horas de relax, salimos de nuevo en dirección de Georgetown. La noche anterior nos había dejado con ganas de ver con más detenimiento esa parte de la ciudad. De nuestro hotel, era un corto paseo de 10 minutos y ya estábamos de nuevo en la calle M. No se parecía en nada al resto de Washington. Aquí no había edificio altos, ni monumentos. Se parecía a una calle animada de barrio o de pueblo. Todo eran tiendas de moda, zapaterías, restaurantes, bancos y mucha gente callejeando. ¡¡Nada que ver con la mañana!! *** Imagen borrada de Tinypic *** Estuvimos curioseando calle arriba y calle abajo para bajar por la calle Jefferson hasta la zona llamada Waterfront. Es una zona que han acondicionado frente al rio Potomac como zona de recreo, con una fuente, gente corriendo, y un paseo a lo largo del río como si fuese un paseo marítimo con sus mesitas y veladores para tomar algo o cenar. Nos sentamos en una de ellas y estuvimos un rato disfrutando al máximo del atardecer sobre Washington, viendo pasar la gente, las multitudes de aviones que cruzaban el cielo para aterrizar en el aeropuerto Ronald Reagan, muy cerca de Washington ( bajaban tan cerca que podíamos leer el logotipo de cada avión) *** Imagen borrada de Tinypic *** y los barquitos que surcaban el río. La temperatura a esas horas era muy agradable y la cerveza muy fresquita… ¡ pero que bien se esta de vacaciones! *** Imagen borrada de Tinypic *** Decidimos lo que podíamos hacer en las horas que nos quedaban al día siguiente ya que a las 12 del mediodía nos vendrían a recoger para trasladarnos al aeropuerto de Baltimore donde saldría nuestro avión, dirección Nueva Orleans. Volvimos hacia nuestro hotel y nuevamente compramos algo en el supermercado para cenar en nuestro apartamento porque teníamos que arreglar el equipaje para levantarnos a las 7 y media de la mañana. Otro día bien aprovechado y muy satisfechas con lo visto. Etapas 4 a 6, total 14
Miércoles 20 de Junio:
Otro madrugón mas a las 7’30 de la mañana (¿y esto son vacaciones?) para desayunar antes de dirigirnos al metro de Foggy Bottom. Nuestro plan era ver el teatro donde dispararon a Abraham Lincoln y la casa donde murió, el edificio del FBI y el edificio antiguo de correos. Para ello, nos bajamos en la parada de Metro Center y anduvimos callejeando por la calle F, calle con muchos comercios que a esas horas tan tempranas, algunos ni estaban abiertos… Acudimos al número 511 de la calle 10th St, NW, donde se ubicaba el teatro Ford, lugar donde dispararon al presidente cuando estaba viendo una obra de teatro. Al resultar herido gravemente, lo trasladaron a la casa de enfrente donde finalmente murió. *** Imagen borrada de Tinypic *** Los dos sitios, el teatro y la casa, eran sitios que se podían visitar, pero nuevamente los escolares habían tomado ya posesión de las filas. Digo escolares porque todos llevaban camisetas de un color: por ejemplo, si eran de tal colegio pues todos llevaban camisetas naranjas incluida monitoras o profesores. Si eran de tal u otro colegio, entonces llevaban camisetas verdes de camuflaje y así con todos. La verdad era que resultaba muy fácil identificar a los chicos si se retrasaban o se perdían. Como teníamos el horario muy limitado, decidimos seguir adelante y nos fuimos hasta el edificio del FBI. *** Imagen borrada de Tinypic *** Importante mole que ocupaba toda una manzana con sus paredes parecidas a los panales de abeja. Fuera, algunos coches patrulla estaban estacionados dando a todo el entorno un ambiente de serie policial de TV. *** Imagen borrada de Tinypic *** Poco a poco nos fuimos dirigiendo hasta el 1100 de Pensylvania Avenue para entrar en el antiguo edificio de correos. Era una visita que tenía recogida de los diarios de viajeros que no nos defraudó. El edificio en sí, por fuera, era muy bonito con unas torres que parecían sacadas de un cuento de hadas (dicen que es el tercer edificio mas alto de la capital). *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** El interior era un poco más oscuro, y estaba ocupado por tiendas de souvenir, bares con mesas en el centro del patio y una claraboya arriba. Fuimos directamente al ascensor de vidrio que nos subió al 10 piso, donde estaban unas campanas, similares a las de la abadía de Westminster en Londres, y subiendo un poco más, se salía a una terraza exterior acristalada donde se tenía una vista espectacular de Washington. *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** Además, en cada una de las partes donde se podía observar la vista, había un mapa con los monumentos más representativos de esa vista. Fue en ese momento que nos percatamos de lo lejos que se encontraban las catedrales de Washington: tanto la nacional o de San Pedro y San Pablo como la basílica católica de la Inmaculada Concepción estaban de punta en punta y lejísimos del centro. Una vez mas el tiempo apremiaba y tuvimos que regresar para coger el metro en Triangle Federal station para volver al hotel. Tengo que señalar que la gente de recepción del hotel se portó de maravilla con nosotras: nuestras entradas y salidas siempre eran recibidas con sonrisas, con algún comentario como “¡Adiós, señoritas!” “¿lo han pasado bien?” y ademas nos ayudaron a realizar el check in on line del siguiente vuelo. A las 12 en punto, ya teníamos a nuestra furgoneta de Supershuttle esperándonos para cargar nuestro equipaje. Con penita de ver concluida una nueva etapa del viaje, nos fuimos hasta el aeropuerto de Baltimore, casi una hora de coche, para coger el vuelo a Nueva Orleáns a las 15’35PM. Salir desde Baltimore era ineludible porque volábamos con la compañía Southwest , compañía de low cost que nos proporciono unos vuelos muy baratos, sin hacernos pagar por el equipaje. Una vez, hecho el check in y libres de maletas, nos fuimos a comer a uno de los numerosos puestos de comida que había en el Food court del aeropuerto. Nuestra salida estaba prevista para las 15’35 pero se fue retrasando el embarque y al final no fue hasta las 16’20 en que pudimos subir al avión y salir con más de una hora de retraso. El vuelo tenia una duración de unas dos horas y media que se pasaron rápido entre bebidas (¡gratis!), galletitas (¡gratis!) y unos cacahuetes (¡gratis ¡) ofrecidos por la compañía low cost. si teneis ocasión, no os perdais las vistas desde el avion al llegar a Nueva Orleans, se puede ver las grandes extensiones de agua que rodean la ciudad. *** Imagen borrada de Tinypic *** Al llegar al aeropuerto, una nueva furgoneta nos estaba esperando para llevarnos al hotel Dauphine Orleáns, en la calle Dauphine, a una calle de distancia de la famosa calle Bourbon. El hotel estaba muy bien: muy coqueto, pequeñito pero con su piscina (que no pudimos probar por falta de tiempo), un desayuno muy completo con su maquinita de hacer gofres, y muy bien situado, lejos del ruido pero cerca de todo. Al registrarnos, nos dieron una invitación a una bebida gratis en el bar que disponía el hotel pero que era también un bar de copas a la calle. También nos dimos cuenta al llegar que habíamos cambiado de franja horaria siendo una hora menos… ¡ que bien ¡ recuperábamos así la hora perdida en el aeropuerto de Baltimore. Tras instalarnos, nos fuimos rápidamente a la calle y casi sin buscarla nos topamos con la calle Bourbon que a esas horas, ya serían sobre las ocho y media de la tarde y vaya ambientazo que había: todas las tiendas de souvenirs las mayoría, abiertas con todas las luces del mundo, bares con ventanas y puertas de par en par para que se pudiesen ver y oír los grupos que tocaban en directo, locales de porno ( era lo que menos me esperaba de esa calle), gente calle arriba calle abajo, gente haciendo estatuas vivientes,!!! Un verdadero hervidero de humanidad!!! *** Imagen borrada de Tinypic *** Nos quedamos fascinadas por el espectáculo y también nos fuimos calle arriba y calle abajo como todos. Nos dedicamos al principio a entrar en las tiendas pero vista una ya se habían visto todas: muchos collares de cuentas de plásticos en todos los colores, boas de plumas sintéticas también en todos los colores, mascaras muy bonitas que rivalizaban en artísticas con las venecianas, muñequitos de vudú, muchas camisetas con todos los logos posibles de” New Orleáns”, etc. *** Imagen borrada de Tinypic *** *** Imagen borrada de Tinypic *** Al mismo tiempo, echábamos un vistazo a los locales donde sonaba la música y tengo que decir, aunque no tengo muy buena formación musical, que todos tocaban genial. Pero a nuestra sorpresa, no todo era Jazz o Blues, sino que en la mayoría de los sitios tocaban música moderna, con canciones que conocíamos y que invitaban a bailar. No podíamos tampoco dejar de mirar la arquitectura de las casas que era una pasada de bonitas, con sus balcones de hierro ensortijado y sus columnas que parecían puntillas de acero. Pero pudimos apreciarlas mucho mejor al día siguiente, con la claridad del sol. *** Imagen borrada de Tinypic *** En un momento dado de nuestro ir y venir, nos dimos cuenta de una imagen muy curiosa: estábamos pasando a unas dos calles por la parte posterior a la catedral de Saint Louis, la mas antigua de Estados Unidos, y vimos como la luz de unos focos muy bien puestos hacían reflejar sobre la pared de la catedral la silueta enorme de una estatua de Jesús con los brazos abiertos en alto, estatua que se encontraba en medio de un jardincito que veríamos con luz diurna al día siguiente. *** Imagen borrada de Tinypic *** Tras unos momentos de aturdimiento por ese ambiente, decidimos buscar un sitio para cenar. ¡Otra aventura! una de la especialidad de Nueva Orleáns son las ostras y si bien es un manjar, para algunos, exquisito, para nosotras no lo era y la mayoría de los restaurantes era “Ostyer bar” . Tras rebuscar un poco mas, encontramos uno que tenía pinta de bistro francés que se llamaba “Remoulade” en la misma calle Bourbon, cerca de Canal Street. *** Imagen borrada de Tinypic *** Fue un acierto (salvo el aire acondicionado que estaba fuertísimo). Cenamos muy bien, a base de sándwiches y nos fuimos otra vez a la calle. Esta vez, nos dimos cuenta de que desde los balcones de las casas, donde una multitud de hombres se apoyaban con el vaso de cerveza o alcohol correspondiente, tiraban los collares de cuenta de colores a las mujeres que pasaban en esos momentos por allí que les parecían bien o directamente se les pedían ellas. *** Imagen borrada de Tinypic *** ¡Era todo un espectáculo ¡ nos debieron de ver las caras de alucinadas porque empezaron a tirarnos a nosotras también …¡ y yo que creía que solamente hacían eso para carnaval! Con nuestra moral por las nubes y los collares alrededor de los cuellos, nos fuimos a tomar algo en un bar cerca de nuestro hotel y volvimos al hotel, que llevábamos desde las 7 de la mañana sin parar (añadiendo una hora mas de ajuste) y eran mas de la una de la madrugada. Otro día intenso….. Etapas 4 a 6, total 14
📊 Estadísticas de Diario ⭐ 4.9 (16 Votos)
![]() Total comentarios: 21 Visualizar todos los comentarios
CREAR COMENTARIO EN EL DIARIO
Diarios relacionados ![]() ![]() ![]() ![]()
![]() |