El viernes nos lo tomamos con un poco más de calma (quizá eran los cócteles los que hablaban) y nos levantamos a las 8:00 para ducharnos, bajar a desayunar, coger nuestras manzanitas y emprender camino hacia la Abadía de Westminster. Llegamos allí y lo primero que vimos al salir del tube fue el Big Ben

Fuimos hacia la puerta de la Abadía (la entrada por St.Margaret's Church) y pagamos unas dolorosas 12 libras por cabeza (menos mal que incluía una audioguía que te iba contando la peli). La abadía está muy bien, nos pasamos allí una gran parte de la mañana. Es donde coronan a los reyes ingleses y contiene las tumbas de muchos monarcas y personajes famosos como Isaac Newton, Charles Darwin, Geoffrey Chaucer y monumentos a Shakespeare, Hendel y numerosos escritores famosos. El patio de la Abadía parece salido de la peli de Harry Potter. Cuando salimos de la iglesia nos acercamos a ver Dean's Yard y el colegio de Westminster. Fotos, fotos, fotos con el Big Ben de fondo y autobus a Abbey Road. (nuestros planes de entrar en el Parlamento cambiaron al ver la cola que había). Por cierto que en el bus pasamos por delante del museo de cera Madame Tussaud y la cola daba la vuelta a la manzana!!!

Cambiamos de línea en Baker Street (la calle de Sherlock Holmes

Junto a la casa museo del detective hay dos tiendas: una de los Beatles y otra de Rock and Roll con souvenirs y camisetas pero es mejor comprarlas en Candem. Las tiendas nos decepcionaron un poquito y como teníamos hambre nos metimos en el Pizza Hut para comer el buffet por el que pagamos 15 libras los 2.
Bajamos andando por Baker Street hasta llegar a Oxford (un buen pateillo) y cogimos un bus de camino al British museum, que los viernes abre hasta tarde. Allí sí se pueden hacer fotos dentro. La zona de Egipto es un poco agobiante porque está siempre llena de gente, y los grupos de japoneses se acumulan en las puertas. Aún así es lo que más impresiona con la Piedra Rosetta junto a la sala del Partenón griego que es la caña con todos sus frisos y esculturas.
Tras permanecer allí un poco más de una hora, salimos hacia Leicester Square donde compramos entradas para ver Los Miserables el sábado por la tarde (24 libras por cabeza en el segundo anfiteatro). Después caminamos en dirección Covent Garden donde pasamos por el antiguo Marquee Club y paramos en un par de tiendas antes de meternos en la zona con los artistas callejeros y el mercado. Allí había muchísima gente y muy buen ambiente. Nos sentamos en una esquina de la plaza a descansar y tras 5 minutos nos fuimos andando hasta el Pub Lamb and Flag, uno de los más famosos de Londres, que estaba plagado de gente. Al ser verano, los ingleses beben en la puerta de los pubs.
En estos momentos se nos caían los pies, pero nos armamos de valor y decidimos ir a la Tate Modern para ver el "Whaam!" de Roy Lichtenstein y los nenúfares de Monet. Cuando salimos de allí ya era de noche, estabamos al otro lado del río y decidimos explorar. Nos fuimos a comer a un pub ingles escondido debajo del puente del tren que dicen que es uno de los mejores de londres porque tienen una gran variedad de cervezas de barril: el King's Arms. La comida era tailandesa casera (porque ya no se lleva eso de los pasteles de carne) pero el bar era super típico, lleno de ingleses de barrio. A nuestro lado había un grupo de hombres de alrededor de 60 años que hablaban el típico ingles cerrado que no se entiende ni papa y que utilizan la palabra fuck 3 veces en cada frase. Cuidado, hay que pagar con metálico porque no cogen tarjeta, pero te avisan antes de pedir.
Tras nuestra aventura con las pintas de cerveza tostada y blanca nos fuimos en metro al hotel.