Los billetes los compramos unas 2 semanas antes y nos costó… 6€ ida y vuelta!!! Una ganga vaya.
Cogimos el vuelo desde Girona, salía a las 17h.
También destacar que fue.. un viaje locura! Llegábamos allí a las 19, pillábamos un bus desde el aeroperto (Ciampino) hasta Roma centro, 8€ ida y vuelta si lo comprabas con antelación en el aeropuerto. Total, que llegamos a Roma a las 8 de la noche, ponte a ver cosas, porque solo teníamos esa noche para visitar.. a las 11 teníamos que estar en la estación de buses!
Pero vimos todo lo principal, desde las 8 de la noche hasta las 2 de la mañana caminando. Una plaza, luego a la tienda de recuerdos, columna Trajana y los restos romanos, el Coliseo, la Islota, más plazas… Viendo que no podíamos más sin comer, fuimos a una de esas tiendas que venden porciones de pizzas y kebabs y cogimos una porción para cada uno. No fue muy caro, unos 2€ o así. Luego de una máquina expendedora sacamos dos botellitas de agua. A las 2 de la madrugada fuimos para nuestro Hostal-Habitación Two Ducks, que pese a las malas recomendaciones y todo, nos costaba 6€ y decidimos pasar la noche. Total, subimos mil escaleras porque el ascensor daba un poco de… grima. Llegamos y nos dicen que no podemos entrar hasta las 12 del mediodía, ya que yo había puesto en la web que llegaríamos a las 2 de la madrugada y allí contaba como al día siguiente… (Corroboro: No vayais nunca a este hostal...)
Desquiciados, yo ya pensaba pasar la noche en la estación de buses, ya que los hoteles eran super caros. Hasta que un latino nos vio desesperados y nos ofreció pasar la noche en su hotel por 20€ (que fueron 20€ por persona… pero dadas las circunstancias…) La habitación no estaba mal. Nos levantamos sobre las 8, fuimos a ver la Fontana de Trevi! Que yo tenía una obsesión con esa fuente y al final no fue tanto, alguna iglesia, y la plaza España. A las 11 al autocar que tardaba unos 40 minutos o así y a las 13 y algo salía nuestro vuelo.
Para el viaje hicimos un mapa un poco cutre, indicando lo que íbamos a ver 1º, 2º… pero resultó ser un desastre, preguntamos muchísimo… y luego nos dimos cuenta que en la estación de buses daban un mapa de la ciudad.
Viaje loco que no se volverá a repetir… (o puede que si…)